Maratón 5/6

Ajax Fellner.

Una de las cosas que más me gustan en la vida es follar, otra son las mujeres hermosas y una que también disfruto mucho es joderle la existencia a mi mejor amigo. Kai se acerca a la mesa con expresión arrogante, claramente ha tenido una buena noche, esa cara de recién follado esta dibujada en las mascara que cubre su rostro, así de evidente es.

— ¿Quién era la chica? — pregunto cuando toma asiento a mi lado con un trago en la mano.

— La chica de la otra noche — su respuesta tranquila me sorprende.

— ¿La del vestido negro?

— Sí, ella

— Joder colega pero menuda suerte tienes — bromeo mientras el da un sorbo a su bebida.

— ¿Qué tal tu noche y Gin? — pregunta mirando alrededor

— Mi noche de puta madre, Gin fue a divertirse con una morena hace un rato — sus ojos me buscan.

— ¿Qué haces aquí si ella está divirtiéndose con una morena? — pregunta con curiosidad y rio

— Tu y yo tenemos una conversación pendiente Kai — murmuro inclinándome hacia el frente.

— ¿Sobre qué? — indaga mirándome con curiosidad

— No te hagas, te llevaste a Elizabeth al restaurante y eso no fue idea mia ¿Qué tal ha estado? — mi pregunta lo hace tensar y asumo que como siempre no ha estado bien y suspiro.

— Esa mujer es un misterio y un puto reto — responde pensativo haciendo que lo mire sorprendido

— ¿Qué quieres decir? — el suspira y niega con la cabeza

— Que tenías razón Ajax — responde mirándome — su jodida actitud es una tentación — comienzo a reír a carcajadas y me encojo de hombros

— Soy bueno con eso de los perfiles femeninos — Kai ríe a mi lado y da otro trago a su vaso — ¿entonces que paso?

— Digamos que fue un almuerzo excitante — concluye haciendo que mis cejas se eleven

— ¿Volviste a besarla? — pregunto divertido y el niega riendo

— No solo digamos que ambos somos muy buenos jugadores — esta vez comprendo que ambos estuvieron molestándose y que para mi sorpresa eso ha dejado a mi amigo con curiosidad.

— Joder Kai haces que todo esto sea jodidamente fácil — me quejo porque el que se lleven bien le quita lo divertido a mi plan

— Créeme esto no será para nada sencillo — termina el contenido de su vaso de un solo trago y se pone en pie — no creo que ella se una a nosotros así que mejor me voy, no llegues tarde mañana al aeropuerto Ajax — me advierte y sonrío de lado elevando mi vaso

— ¿Creíste que después de follarla como estoy seguro que lo hiciste vendría aquí adular tu polla? — bromeo mientras el ríe negando con la cabeza

— Nos vemos colega — se despide tomando su saco y encaminándose a la puerta de camino se topa con Volker que camina hacia la mesa abrochando su camisa, intercambian algunas palabras y luego se despiden.

Lo veo salir del área VIP y Volker se sienta en la silla que ocupaba antes Kai, después que termina de arreglar su camisa me observa con seriedad.

— ¿Y?

— Se pondrá bueno — respondo encogiéndome de hombros confirmándole nuestras sospechas sobre Kai y Elizabeth — nos divertiremos — Volker sonríe de lado satisfecho y asiente.

Kai Metzler.

Lujuria.

Deseo.

Lascivia.

Son las definiciones perfectas para mi noche, respiro profundo y veo por la ventanilla del avión, estoy cansado, fue una noche interesante en realidad el día de ayer fue intenso, desde el almuerzo con la periodista hasta la interesante noche con la chica del antifaz negro. Lo pase increíble con ella, me fascino lo receptiva que era y como su cuerpo reacciono a los estímulos que le brinde.

Una de las aeromozas se detiene a mi lado y me regala una amplia sonrisa.

— ¿Desea algo? — sonrío en su dirección y asiento

— Agua por favor — ella asiente y se gira para traerme lo que le he pedido.

En ese instante Ajax entra al área privada del jet, con una amplia sonrisa, lleva un vaso de whisky en la mano, suspira y toma asiento junto a mí.

— ¿en serio no vas a salir de aquí? — pregunta mirándome divertido

— No — respondo con simpleza

— A ver, no entiendo si según tu ha sido interesante y toda esa mierda, ¿Por qué demonios la estas evitando ahora? — respiro profundo y lo veo con seriedad.

— No la evito, solo no quiero verla ahora — el ríe divertido y suspira.

— Bueno, te informo que tendrás que compartir la suite con ella — en cuanto suelta eso lo veo mal

— ¿Qué?

— Vamos esa jodida suite tiene tres habitaciones, no pretendías que la alojara a ella sola en una habitación simple, pudiendo alojarla en la suite del rey — pongo mis ojos en blanco y suspiro, no tiene caso Ajax es así.

— La otra la ocupara Volker, yo estaré con Gin en otra y el resto del equipo estará en las suites de siempre — asiento comprendiendo el plan de mejor amigo — ellos llegan el sábado y mañana tenemos un almuerzo con el organizador — me explica dando un sorbo a su bebida — Ginger quiere saber si la necesitaras hoy y mañana — lo veo un instante y suspiro

— ¿Por qué? — su sonrisa se ensancha

— Porque quiere divertirse — suspiro poniendo los ojos en blanco y me encojo de hombros

— Mientras tenga el teléfono a la mano por cualquier inconveniente del que tenga que hacerse cargo puede hacer lo que guste hasta el viernes — Ajax asiente y luego de unos segundos se pone en pie.

Justo en ese instante la aeromoza llega con mi agua, el ve la botellita y ríe divertido, niega con la cabeza y luego fija su atención en la mujer que le sonríe con picardía.

— Me gusta tu pañuelo — le comenta con picardía y ella sonríe ampliamente

— gracias

— Se me ocurren muchas cosas interesantes que hacer con el — la chica muerde su labio ante el comentario de mi colega y rio divertido.

— Me imagino — responde con picardía mientras pasa a su lado contoneando las piernas.

— Voy a follarla — asegura con voz divertida y niego con la cabeza

— Mantén tus manos y tu polla fuera de la tripulación del jet por favor — le pido y el ríe

— Vamos Kai esa mujer está deseando que la folle hace siglos — sonrío de lado porque es cierto, siempre que volamos se la pasan todo el jodido viaje coqueteándose con descaro.

— Y pasaran más siglos porque no lo vas hacer — el suspira y ríe negando con la cabeza

— Una vez aterricemos no será una tripulante y podre meter mi polla donde lo desee — suelta una carcajada antes de salir del área privada y rio con él.

Ajax no tiene caso, es un mujeriego por naturaleza, nunca lo he visto enamorado y no sé si exista una mujer que lo enamore, su naturaleza es demasiado liberal y aunque Ginger y él tienen una relación sé muy bien que no es la mujer que lo ataría a algo más serio y estable.

El resto del vuelo me dedico a meditar en estos días y a esa absurda idea de compartir la suite con Elizabeth, aunque al menos Volker estará allí para acompañarme sé que será una jodida tentación, más después de lo que paso en el baño del restaurante.

Y es algo que sencillamente no puedo dejar que se repita, al menos no por ahora, respiro profundo y vuelvo mi atención a los gráficos que revisaba hace un rato y continúo con mi trabajo. Para cuando aterrizamos ya tengo listo el trabajo que había dejado sin terminar la noche anterior.

Recojo mis cosas con calma y sin prisas, Ajax, Volker, Ginger y Elizabeth se irán primero al hotel, yo me iré por mi cuenta ya que quiero reunirme con un científico del que he escuchado hablar mucho últimamente. Desciendo del jet y una sonrisa se dibuja en mi rostro al ver el auto que espera por mí.

Un Bugatti La Voiture Noire  negro, justo como me gustan los autos, junto a él un hombre vestido con el típico atuendo del país en el que estamos me aguarda, al acercarme a él me saluda con una ligera inclinación y me tiende las llaves del auto, mientras otro hombre se encarga de meter mi equipaje dentro de auto.

— Gracias — sonrió al hombre que simplemente asiente y se gira para retirarse.

Una vez dentro del auto lo enciendo y salgo de la pista próvida donde hemos aterrizado hace 45 minutos, entro en las calles de Dubái con el claro objetivo de ir al pequeño laboratorio donde el científico trabaja actualmente. Puede que sea un genio tecnológico, pero me apoyo mucho en otros científicos e ingenieros, si, gran parte de la fortuna que he hecho se debe a mi ingenio pero no debo negar que muchos de los que inventos que están en el stand del Lux provienen de otros.

Una vez estoy frente al laboratorio de inmediato me doy cuenta que no es un lugar muy grande y que tampoco luce como un lugar que podría albergar una gran mente. Entro al pequeño edificio de dos pisos y en la entrada un hombre de seguridad se pone alerta al verme.

— Buenas tardes, ¿busca a alguien? — su pregunta y la forma en la que sostiene el arma en su cinturilla me hace fruncir el ceño.

— Sí, busco al doctor Alabi — el hombre me observa unos instantes y asiente lentamente, sin soltar el arma camina a un teléfono y marca un número.

Luego de unos instantes comienza una rápida conversación en su idioma, lo noto agitado y algo estresado por lo que suspiro, saco mi cartera del bolsillo trasero de mi pantalón y saco una de mis tarjetas de presentación. La coloco sobre el mostrador y el hombre de inmediato la toma, lee la información y su expresión cambia de inmediato. Ladra algunas palabras más al teléfono y cuelga.

— Pase por aquí, lo guiare hasta el laboratorio — sin decir nada más me conduce por una puerta que esta al costado izquierdo de la recepción.

Mientras andamos por el pasillo noto que realmente el lugar no es tan opulento, ni sofisticado como pensé, solo es un laboratorio experimental de poca monta, suspiro porque quizás haya perdido mi tiempo al venir aquí y el tal doctor Alabi sea un completo inútil.

Al llegar a una puerta donde pone el apellido del científico, el hombre de seguridad da un par de golpes en la puerta y una voz femenina responde del otro lado en el mismo idioma en que el hombre converso por teléfono.

— Pase, está esperándolo — el hombre abre la puerta y me deja entrar.

A diferencia del resto del laboratorio lo que tengo ante mí, mejora considerablemente mi pensamiento respecto al Dr. Alabi, este espacio es mucho más moderno con equipos de hace algunos años pero que son bastante funcionales si estás haciendo estudios básicos. Recorro la estancia en busca del Dr. pero tropiezo con una chica que esta frente a un microscopio.

— Espere un momento — me indica y suspiro.

— Tengo algo de prisa y me gustaría hablar con el Dr. Alabi — le explico a la mujer, que levanta su dedo índice y continua mirando por el microscopio.

Después de unos segundos se separa y hace algunas anotaciones en una libreta que tiene a su lado, aun no soy capaz de mirar por completo su rostro ya que parte de los equipos la tapan lo que delata su poca estatura. Se gira y coloca la muestra que estaba observando en un mini refrigerador, se quita una máscara de seguridad y la deja sobre la mesa.

Luego la veo soltar su cabello, una cascada de cabello negro cae y vuelve a ser recogido en un moño desenfadado sobre la cabeza de la chica, que comienza andar entre los equipos.

— Bien antes que nada debo aclararle que no existe ningún Dr. Alabi — explica con voz divertida — la verdad es más Dra. Alabi — mi ceño se frunce porque no estoy comprendiendo nada — pero suele suceder en este bendito país así que dígame ¿en qué puedo ayudarle? — cuando termina la frase ya está en el pasillo donde estoy de pie.

Cuando eleva su rostro para enfrentarme, ambos quedamos algo sorprendidos con lo que vemos, yo porque es una joven de quizás 22 años, con unas gafas negras enormes que cubren unos bonitos y expresivos ojos azules.

— ¡Joder! — suelta en un hilo de voz.

Sus ojos se pasean por mi cuerpo con descaro, mientras acomoda las gafas sobre el puente de su nariz, regresando a mis ojos una vez más.

— ¿Eres el Dr. Alabi? — pregunto aún bastante incrédulo

— En realidad como ya te explique es la Dra. Alabi — da un paso en mi dirección y tropieza con sus pies, ríe divertida y niega con su cabeza antes de tenderme una pequeña y fina mano — mucho gusto Azhar Alabi — extiendo mi mano la tomo

— Kai Metzler — sus ojos se abren de inmediato al igual que su boca

— ¿Es una puta broma verdad? — pregunta incrédula esta vez ella y sonrió

— No, para nada

— ¡Mierda! — suelta dando un paso atrás y mirando a su alrededor — mierda — repite algo más agitada haciéndome reír de inmediato — ay joder así es peor — comenta mirándome haciendo que mi risa se convierta en una carcajada — puta madre no estaba preparada para eso, pareces un jodido dios del olimpo — no puedo dejar de reír mientras ella luce nerviosa y aterrada a partes iguales — ay mierda, mierda, mierda ¿qué estoy diciendo? — Me mira sin saber que decir mientras yo solo sigo riendo porque su reacción me parece de lo más divertida — ¿me darías un momento? — y sin esperar a que responda se gira sobre sí misma y sale corriendo.

Dejándome en el pasillo de lo más confundido y divertido, en serio esa chica alocada y grosera es ese tal Dr. Alabi, por lo que había escuchado y por la información que me dio Volker es una pequeña genio en el área de la bioquímica, pero me parece que es muy niña y además algo, por no decir demasiado inmadura para ser un genio.

En ese instante un grito me sobresalta y camino en dirección a donde ha corrido la chica, cuando llego a la puerta por la que se ha escabullido esta se abre de golpe mostrándome nuevamente a la pequeña científica, que se sobresalta al verme.

— Mierda en serio no hagas eso, acabo de intentar controlarme y te apareces así nada más, ¿estás loco? — pregunta pasando por mi lado haciendo del momento aún más divertido.

— Ok, lo siento te escuche gritar y creí que te había pasado algo — ella se detiene en seco y se gira para verme

— Claro que me paso algo — se detiene una vez más y me observa de pies a cabeza con descaro — ¿Qué acaso nunca te has visto en un espejo? — su pregunta vuelve hacerme reír, ella parece notar que vuelve a divagar y respira profundo cierra sus ojos y vuelve abrirlo.

— Joder, sigo diciendo mierdas, en fin empecemos de nuevo ¿sí? — Sonríe ampliamente, vuelve acomodar sus gafas y me tiende nuevamente su mano — soy la Dra. Azhar Alabi, mucho gusto — dudo un instante y sonrió acercándome a ella para volver a estrechar su mano

— Kai Metzler

— El magnate, el genio tecnológico, filántropo y uno delos empresarios más importantes del mundo científico y tecnológico — agrega sacando mi currículo y rio divertido — además los jodidos rumores son más que ciertos es un jodido adonis — vuelvo a estallar en una carcajada haciendo que ella ría conmigo — lo siento, verdad no me preste atención es que tengo un problema — me explica con rapidez — cuando estoy nerviosa soy un puto desastre — vuelve a reír

— Puedo notarlo, pero tranquila solo he venido a conversar contigo — ella asiente y respira profundo un par de veces

— Bien, por aquí podemos sentarnos, ¿quieres café, un refresco, te? — me ofrece y sonrió

— Eres muy amable pero como dije tengo algo de prisa y solo he venido a hacerte una invitación — su boca se abre y lleva una de sus manos a su pecho

— ¿Una invitación, algo así como una cena? — vuelvo a reír y niego con la cabeza, esta chica es de lo más increíble

— Pues, si habrá una cena pero en realidad quería invitarte al evento que tendremos el sábado en el Burj Al Arab — sus ojos vuelven abrirse como platos y comienza a negar con la cabeza

— No, esto tiene que ser un jodido sueño — y sonrió de lado

— Pues no, es una realidad, me gustaría que llevaras el proyecto que te parece que es el más importante para ti — hago una pausa y la veo aún más nerviosa — ¿tienes algún proyecto que valga la pena mostrarme no? — ella pellizca sus mejillas con sus manos y ríe un poco histérica

— ¿Uno, es una broma verdad? Tengo miles — hace una pausa y se levanta del banco, camina rápidamente hacia un archivero que tiene cerca y abre la primera gaveta — mierda hay demasiados —murmura más para sí misma.

— Oye tranquila, si quieres te pongo en contacto con alguien que pueda guiarte para que selecciones el mejor proyecto para la exhibición — le explico porque siento un poco de pena y admiración por esta chica.

— Si, bien, perfecto — responde sin mirarme muy concentrada en lo que hace — ¿el sábado no? — pregunta con voz seria

— Si, el sábado, alguien vendrá a entregarte la invitación y los protocolos que tendrás que cumplir para que puedas ingresar — ella asiente y saca al mismo tiempo un folio y comienza a leerlo

— Está bien, gracias podrías cerrar la puerta al salir y decirle al idiota de Mohamed que no me moleste y que no estoy para nadie — frunzo el ceño porque esta chiquilla impertinente y divertida está echándome de su laboratorio y además me acaba de convertir en su asistente.

— Nos vemos — me despido divertido pero la chica ya se ha sumergido en su propio mundo.

Ese aspecto me gusta, por más distraída y nerviosa que estaba al saber lo del evento se ha centrado tanto que se olvidó por completo de mi presencia. Personas como ella son las que necesito en mi equipo, pero no solo busco eso, esperemos que realmente tenga un muy buen proyecto que podamos financiar.

Cuando salgo el sujeto de la puerta me ve mal y comprendo pronto que estamos en una cultura donde las mujeres son menospreciadas y que Azhar sea una científica y el tipo de la puerta solo sea un vigilante debe tenerlo de los nervios. Camino hasta el auto y entro terminada mi pequeña investigación personal, decido ir al hotel.

Cada vez que hacemos estos eventos, le pido a Volker o Ajax que investiguen sobre algún científico que no sea reconocido y que se rumoree que es un genio, este año le ha tocado a la pequeña Azhar y creo que he encontrado un pequeño diamante en bruto.

De camino al hotel, pienso en la información que me dio Ajax, eso de tener que compartir con la suite con la periodista, de inmediato al pensar en ella mi polla reacciona, no sé qué demonios tiene esa mujer que me pone como un puto tren en cuestión de segundos.

Respiro profundo porque detesto no poder controlarme y con ella me cuesta y mucho. El teléfono enlazado al auto suena anunciándome una llamada entrante de Ajax.

— Ajax...

— ¿Colega donde coño estas? Hace hora y media debías estar aquí — me reprocha y suspiro

— Estaba revisando al Dr. Alabi

— ¿Y qué tal?

— Ya lo veras — comento divertido haciendo que el respire profundo

— Bien, entonces ¿Dónde estás?

— De camino Ajax, ¿Qué pasa? — pregunto al notar su ansiedad

— Tenemos un pequeño problema — respiro profundo

— ¿Qué pasa?

— Elizabeth se niega a compartir la suite contigo — respiro profundo y niego con la cabeza

— Yo tampoco estoy muy a gusto con eso Ajax

— No me jodas, es la mejor manera de saber qué hace y que no — suspiro y niego con la cabeza

— Este fue tu plan y tu idea resuélvelo Ajax — le digo con tranquilidad lavándome las manos

— Lo harías si estuvieras aquí — me espeta algo exasperado y no puedo evitar sonreír

— ¿Qué pasa Ajax, la periodista en un hueso duro de roer? — pregunto con sorna haciendo que este bufe del otro lado

— Estaría disfrutando un montón de esto si Ginger no estuviera como una puta fiera — frunzo el ceño sin comprender

— ¿Ginger? — pregunto sin comprender

— Vamos Kai eres un tipo listo y conoces a Gin tanto como yo, ¿crees que le iba a gustar la idea que Elizabeth se quedara en la suite contigo y con Volker mientras ella y yo vamos a ocupar otra? — se queja y de pronto comprendo todo.

En todos y cada uno de los viajes que tenemos Ginger, Volker, Ajax y yo compartimos la misma suite, por aquello de montar fiestas privadas y divertirnos juntos, respiro profundo y suspiro.

— Contigo aquí Ginger no se habría puesto como una loca — me explica — jura que quiero meterme en su cama mientras estamos aquí — se queja y comienzo a reír

— Es lo que quieres hacer Ajax — el vuelve a bufar

— Venga si, obvio que quiero follarla pero si ya está medio enredada contigo no voy a cagarla metiéndome yo, eso arruinaría bastante los planes — suspiro

— Estaré en el hotel en 20 minutos Ajax, ya lo resolveremos.

— Está bien — sin más finaliza la llamada y rio divertido.

Esos dos son tal para cual.

Veinticinco minutos después estoy dejando el auto aparcado frente a la entrada del hotel más costoso del mundo. El vicepresidente de Jumeirah Group1 está en el vestibulo aguardando por mí.

— Anthony — lo saludo al encontrarlo

— Kai, ¿Cómo te va? Bienvenido — estrecha con fuerza mi mano y sonríe ampliamente.

Anthony Costa2 es el vicepresidente de Jumeirah Group una cadena de hoteles sumamente lujosa y con un éxito increíble. Desde los inicios de la construcción del Burj Al Arab en 1994 y su inauguración en el 99 estuve detrás de este grupo, sabiendo a la perfección que realizar los futuros eventos en sus distintivos y majestuosos hoteles me daría un puesto asegurado en la sima. Ninguno de nosotros se equivocó con esa idea, desde el primer evento que se realizó en el Jumeirah Al Qasr –es uno de los hoteles más hermosos de los Emiratos Árabes al menos para mí, está inspirado en las mil y una noches— tuvimos un éxito rotundo y con ellos no fue tan difícil meternos al grupo completo en el bolsillo.

— Muy bien ¿y tú?

— Excelente, me alegra que hayas decidió realizar el evento este año en el Burj Al Arab, estoy supervisando todo personalmente para que quede a la perfección — me comenta caminando a mi lado

— Es un gran placer en realidad, este hotel es increíble así como el resto de la línea, pero me pareció adecuado hacerlo este año aquí — explico y él sonríe ampliamente.

— Tu equipo ya está aquí — me comenta y asiento

— sí, lo sé, Ajax me llamo hace un rato, necesito resolver algunas cosas, ¿te parece si nos vemos en la cena? — lo invito y el asiente encantado mientras atravieso el increíble vestíbulo.

Que cuenta con una maravillosa y espectacular estructura y arquitectura, la diseñadora de interiores china khuan Chew3 fue la encargada de hacer este excelente trabajo, que consta de brillantes colores en el techo, de aguas danzantes, un espectáculo de luces multicolores y acuarios gigantes repletos de hermosos y coloridos peces.

Este lugar es increíble, me gusta muchísimo el diseño y lo llamativo que es, además las suites son otra cosa también, mientras camino hacia los elevadores que me conducirán hacia la Royal Suite que es la que ocupare junto con la periodista y Volker, me distraigo con un grupo de mujeres que pasa junto a mí, todas lucen encantadoras con sus ropas de diseñadores y sus gafas de sol.

Me gusta mucho admirar la belleza femenina, las mujeres son algo hermoso que Dios creo para convertirse en nuestra mas grande perdición o en nuestro mas gran regalo, por suerte para mi todas las que han estado en mi vida —o en mi cama— han sido muy buenos regalos. Involuntariamente sonrio al pensar en Leyna.

Mientras asciendo en el elevador recuerdo todas esas tardes increíbles que pasamos juntos, las veces que insistió pintarme o fotografiarme y me negué porque de no aparecer ella la imagen no tendría sentido. Las puertas del elevador se abren directamente en la suite y mi sonrisa se borra de inmediato.

La tensión que percibo en el ambiente es increíble, justo frente a mi están Volker, Elizabeth, Ginger y Ajax en medio de una acalorada discusión, que no logro comprender. La primera en notar mi presencia es la periodista.

— Vaya hasta que por fin se digna a aparecer — suelta con sarcasmo haciendo que mi día que pintaba de maravillas se vaya a la mierda.

— ¿Disculpa? —suelto totalmente exasperado.

No tengo ni dos segundos que llegue y ya quiero asesinarla.

— Este es otro de sus jodidos planes para controlar lo que hago y volverme loca ¿no es así? No le basta con traerme aquí sin siquiera preguntarme si tengo tiempo o puedo hacer un viaje como este...

— ay querida pero que malagradecida eres, ni un millón de años podrías pagarte un viaje como este y estas quejándote por estar aquí — la corta Ginger de malas haciendo que Ajax bufe cabreado y Volker ponga los ojos en blanco

— Tú no te metas peli teñida — le ladra Elizabeth haciendo que la boca de Ginger se abra por la sorpresa y de inmediato se vaya sobre ella.

Ajax se interpone entre ambas que se gritan cosas incomprensibles para mí.

— MALDITA SEA SACA A GINGER DE AQUÍ — le grito a Ajax que simplemente toma a la rubia por la cintura y la levanta sobre su hombro, esta grita y continua insultando no sé muy bien si a Ajax o a Elizabeth, pero lo hace.

Cuando pongo mis ojos en la periodista su respiración es un completo desastre y sus ojos destellan furia.

— Me puedes explicar ¿Qué mierda significa todo este espectáculo? — ella mantiene su mirada firme con la mía desafiándome — Volker déjanos solos — le pido a mi colega que no ha abierto la boca desde que llegue.

— No te excedas — murmura pasando junto a mí.

Una vez estamos solos la periodista y yo, permanecemos en silencio mirándonos con intensidad, ella esta cabreada y yo quiero asesinarla por hacer un puto espectáculo como este con Ginger. Respiro profundo y paso mis manos por mi rostro tratando de controlarme.

— ¿Este es el nivel de profesionalismo que tiene? — susurro sin mirarla

— Ay no me jodas — suelta comenzando andar de un lado al otro — no tienes mucha moral para hablarme de profesionalismos cuando has hecho todas esas cosas... — se detiene y nuestra miradas se encuentran, no entiendo de lo que está hablando.

— ¿De qué coño estás hablando? Estoy llegando por si no lo notaste — suelto con sarcasmo y ella ríe irónica

— Oh ahora resulta que no solo cree que soy una zorra, también se hace el idiota — esas palabras hacen que el nivel de cabreo aumente, doy un par de pasos en su dirección acortando la distancia

— ¿Qué dijiste?

— Dudo mucho que seas tan viejo como para tener problemas auditivos, me escuchaste muy bien — me responde altanera

— ¿Por qué demonios piensas que creo que eres una zorra? — pregunto sin entender absolutamente nada.

— Vaya para ser un genio es bastante lento en entender el idioma — suelta exasperada sin apartar su mirada.

— Elizabeth no me provoques — ella eleva una de sus cejas y se cruza de brazos

— ¿O qué? — me reta y esas dos simples palabras hacen que mi puta polla este por reventar el jodido pantalón que traigo.

¿Pero qué maldita necesidad tiene esta mujer para actuar así, para retarme de esta jodida manera y complicarme todo, porque demonios se le hace tan fácil ponerme como un maldito tren y comportarme como un energúmeno con ella? Porque justo en este instante tengo unas putas ganas de tomarla por ese jodido hermoso cabello que cae sobre sus hombros desnudos arrodillarla frente a mí y meter mi puta polla en su boca y hacerle tragar todas sus irritantes palabras.

— Elizabeth — digo entre dientes

— ¿Qué señor Metzler volverá a preguntarme si follamos o lo dejamos así? Esa es su maravillosa manera de resolver las cosas ¿no? — entonces esas palabras me hacen comprender todo repentinamente.

Sin poder evitarlo suelto una risa floja, que la toma completamente por sorpresa, me mira sin comprender y niego con la cabeza

— Todo este show y este numerito que acabas de montar ¿es por lo que dije en el restaurante? — ella parece sorprendida por mis palabras y mi sonrisa se ensancha.

Sus ojos se abren como platos, su mano se eleva en el aire, pero puedo leer muy bien sus intenciones, tomo su muñeca mucho antes que pueda estrellarla en mi mejilla y tiro de su cuerpo con cierta brusquedad. Este choca contra el mío y de inmediato de sus labios se escapa un puto gemido al sentir la puta erección que me ha causado el verla tan cabreada y retándome como lo está haciendo.

— Si quiere conservar su puto empleo y el mediano estilo de vida que lleva cuide sus reacciones y sus malditas palabras señorita White — le advierto a escasos centímetros de su boca

— Puede meterse sus amenazas por el culo — escupe furiosa, tratando de liberarse pero no la suelto.

En cambio rodeo su cintura con mi brazo y afianzo el agarre y la pego más a mí.

— En serio porque demonios tienes que ser tan malditamente irritante — cuestiono sin comprender como puede ser así.

— ¿Y cómo usted puede ser tan idiota? — se mueve con brusquedad intentando liberarse de mi logrando que mi polla rose más su cuerpo.

De sus labios se escapan un par de jadeos al sentirla y no puedo evitar reír, sus mejillas están sonrosadas y aunque hay una ira palpable en su rostro sus ojos brillan llenos de deseo.

— ¿Quiere soltarme de una puta vez? — insiste removiéndose una vez más, pero no le vale de nada soy mucho más fuerte y alto que ella.

— Le voy a decir que vamos hacer, va a tomar su puto equipaje ira a su jodida habitación, se dará una maldita ducha de agua fría para enfriar esa cabecita necia que tiene y va a relajarse, cuando este más tranquila conversaremos sobre esto — hago una pausa y veo sus labios, demasiado tentado por volver a besarlos

— Va.ya.se a. la. mi.er.da — susurra con voz ronca y desafiante — no voy a quedarme en esta jodida suite con usted — la comisura de mis labios tira hacia un lado

— ¿nerviosa? — la puyo sin poder evitarlo

— ¿Por qué habría de estarlo? — sisea sin dejar de verme

— No sé, quizás no confié lo suficiente en su cuerpo — respondo encogiéndome de hombros

Ella se tensa ligeramente y sus ojos se desvían a mis labios, los cuales aprovecho de humedecer solo por tentarla mucho más, sus manos se posan sobre mi pecho y se inclina ligeramente hacia mí, sus ojos regresan a los míos entrelazando nuestras miradas, muerde su labio inferior y estoy tan tentado de enviar todo a la mierda y besarla que acorto un poco más la distancia entre ambos.

Nuestras respiraciones se entremezclan, sus ojos brillan de deseo y lujuria, mi corazón late deprisa y mi jodida polla esta que revienta la cremallera del pantalón y sale en busca de la puta entrepierna de la periodista calentona de mierda que está volviéndome loco. Sus dientes barren su labio inferior y muero por ser yo quien lo hace.

— Ni en tus mejores sueños Kai — murmura a escasos centímetros de mi boca, luego volviéndome a sorprender, separa su rostro de mí y sonríe con arrogancia.

La libero de inmediato y ella da un paso atrás con rapidez, toma su equipaje y echa andar hacia las escalares que están frente a nosotros, hacia el siguiente nivel donde encuentran las habitaciones.

Respiro profundo frustrado y con ganas de seguirla y enseñarle quien coño soy yo y que no puede estar jugando conmigo. Pero me contengo, camino esta vez hacia el bar privado de la suite y me sirvo un trago de whisky.

— Maldita sea — murmuro acomodando una vez más la puta erección que la periodista ha dejado en mi entrepierna.

1.-  Jumeirah Group: grupo Real, dueño de la cadena hotelera a la que pertenece el Burj Al Arab.

2.- Antony Costa: vicepresidente en la vida real del grupo Jumeirah.

3.- Khuan Chew: diseñadora china encargada en la vida real para el diseño del vestibulo del hotel, en primer momento parte del diseño fue aceptado, en especifico el de las habitaciones, pero el vestibulo fue reprobado por el Jeque y este se rediseño teniendo el aspecto actual.

Nota del autor: hola mis gamers, otro capitulo este me divirtió muchísimo escribirlo, porque bueno tiene un par de personajes que son muy divertidos de distintas formas, Ajax y Azhar son como los responsables de ponerle jocosidad a la historia, esta ultima es un desastre como ella lo advirtió pero les va a encantar. (Aun no estoy muy segura de quien la representara pero tengo en mente a alguien, cuando me decida del todo se las presentare).

Por otro lado, dios que encontronazo entre Ginger y Lizzy no? estas dos no se llevan para nada bien, y las dos son mas que capaces y cuaimas como decimos aquí. en fin, Kai y Lizzy, que discusión tan rica, si... rica me encanto escribirla porque en serio sentí esa adrenalina que te da la ira y como te pone el deseo carnal al mismo tiempo, esos dos harán caboom en algún momento. me despido, espero hayan disfrutando del capitulo.