Escuche pasos detrás mío, así que corrí más rápido. Cuando creí haberla perdido, pare en una columna, pero algo me sacó de ahí jalandome de la capa haciendo que la capucha cayera sobre mi espalda dejando ver mi rostro.

—Tú niña, ¡Irás con el rey!—dijo el mago Merlín.

–Esto no está bien, para nada bien.

Me llevo a rastras hasta la sala del trono y después me tiró frente al Rey Arturo.

—Encontré a esta niña haciendo magia en la cocina—contó el viejo cascarrabias.

Miré a mi alrededor. Su aprendíz también estaba aquí.

—¿Es eso cierto?—preguntó y yo asentí con la cabeza tímidamente.

—¡Lo siento, señor!—exclamé de rodillas, porqué, aunque no lo parezca, yo le muestro mucho respeto al Rey—No era mí intención. Yo solo-

—¡Basta!—gritó—¡El castigo por usar magia, es la muerte inmediata!

—¿De verdad?—se escuchó decir a una voz, la cual reconocí como la voz de Lady Morgana—Tú traicionas a estas criaturas indefensas, las sacas de sus hogares y los reclamas como tuyos—habló—Aunque no lo creas, esta chica es más humana que tu.

—¡Silencio!—dijo el Rey

—Te pido que no la mates, ten piedad por esta pobre chica inofensiva—suplico ella.

—E-Esta bien, Lady Morgana—le dije parandome con un poco de dificultad—N-No hay alguien q-que se preocupe por mi, d-despues de t-todo—hable con la voz entrecortada—No me importa si m--

—¡¿Quién dijo eso?!—volvieron a interrumpir, pero esta vez, no era un ciudadano de Camelot—¡Yo me preocupo por tí!

—S-Skra...—susurré por lo bajo

El corrió, me abrazó, tomó mi cara entre sus manos—¿Te hicieron algo? ¿Quieres que los mate en este momento? Agh, no se ni para que pregunto. Claro que lo haré.

Yo nege con la cabeza y le pedí que se fuera

—¡Espera, ¿Qué?!—preguntó totalmente desconcertado—¿Como podría dejarte morir en manos de simples mortales?

—A ellos—exclamó Arturo, pero antes de atacarnos, los soldados fueron congelados por mi hermano.

—¡No les hagas daño!—pedí.

—¿¡Ah!? ¿¡Por qué no!? ¡No seas tan débil, hermana!

En ese momento, sentí como un flechazo directo en el pecho

Débil

Débil

Débil

Sus palabras no dejaban de repetirse en mi cabeza.

¿Él me llamó débil?

Siempre dijo que yo era la persona más fuerte que había conocido, ahora resulta... ¿Qué no fue así?

—¿Lin? ¡¿Lin?!—fué lo último que escuché antes de desmayarme y caer en una profunda oscuridad

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GOMEN!

LAMENTO NO HABER ACTUALIZADO, PERO HACE ALGUNAS HORAS ME LLEGO LA INSPIRACIÓN PARA ESTE LIBRO, Y DECIDÍ SEGUIRLO, AL MENOS UN CAPITULO

Bueno, considérenlo como un regalo de Fin de Año

¿Vieron eso? Hice un verso sin esfuerzo =D

Bueno, espero que tengan un Feliz Fin y  Comienzo de Año
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Palabras: 478