El día apenas había empezado, un pequeño niño pelirrojos claro estaba tocando puertas de casa en casa, tenía un favor que pedirle a cualquiera que lo aceptará, quería entrar en una primaria, apenas tenía 5 años, recién cumplidos hace  a unos días y el chico actuaba por si mismo, queriendo ir a inscribirse fue a hablar directamente con los supervisores, todos le conocían en el pueblo, técnicamente era un hijo de todos, aveces comía en casa de la señorita Estella bella,una mujer muy amable que solía darle galletas, otras veces iba a escuchar y hacerle favores a mandrake, alguien que daba miedo pero era bastante amablen con el chico viendo que a este no le importaba hacer favores de todo tipo, más importante que estos últimos estaba Ms. Myrtle, una viejecita que recibía completamente al de ojos azules en su casa, incluso le había regalado una habitación en desuso, podría decirse que ella era algún tipo de tutora, no legal pero se encargaba de cuidarlo y enseñarle valores, cosa que le ayudo mucho, pues incluso a estas alturas el seguía manteniendo todas sus enseñanzas, además debido a la edad tan mayor de esta el se ocupaba de gran parte de las labores domésticas, cosa que le había servido muchisimo, lo habían convertido en un chico doméstico perfecto.

-¡Porfavor!
-Ho pequeño, en verdad quiero hacerlo pero eso es mucha responsabilidad para mí ¿Por qué no le dices a la señorita myrtle?
-Ya le dije...pero...ella dice que si firma no podrá hacerlo por mucho tiempo y...si le pasa algo...los de el estado me llevará.
-Tiene...razón... En verdad lo siento pero yo no podría lidiar con algo así.
-Entiendo, no se preocupe señorita Stella, ya conseguiré quien lo haga.

El niño tan determinado ya estaba perdiendo la esperanza, no tenía ni un solo documento, literalmente era un habitante fantasma, no estaba registrado en el gobierno, nisiquiera un nombre oficial tenía, bien el pueblo no estaba muy regido por el gobierno pues las casillas de eeleccion no pasaban por ahi, no era considerado, había a lo máximo 5 casas, una escuela y una iglesia, la escuela estaba casi vacía, el único niño cercano a la edad de wander era un chico que se hacía llamar jonhes, pero este no tenía interés en la escuela, los únicos que quedaban en esta eran chicos bastante mayores que el, en cuanto estos pasarán la primaria seguramente no quedaría nadie y cerrarían esa escuela, a todo eso, incluso si el entraba existía la posibilidad de que tampoco logrará mucho, tomaría clases junto a todos, pese a que no todos tenían la misma edad solo había un salón, casi cada quien iba de manera individual, él que no sabía siquiera leer tal vez sería un estorbo, pensando en eso algo triste fue a refugiarse del sol, al lado de una casa abandonada había un árbol enorme, a este le gustaba mucho ir ahí, tanto como por el hecho de que casi todos pasaban y le saludaban como por lo confortable que era una llanta que estaba tirada, le encantaba usar eso de sillón.

El chico se estaba quedando sin ideas, nadie en su comunidad quería tomar responsabilidad de ser un tutor legal y registrarlo, tan pequeño y teniendo que preocuparse por eso, otros niños a esa edad estarían pensando en que juguete les gustaría pedir para su cumpleaños, en cambio el, ya tenía responsabilidades y era más sensato que la mayoría a esa edad.
Algo saco totalmente de su conflicto mental al chico, en la casa abandonada había otra persona tocando la puertaza, este era muy alto, intimidante y tenía una barba bastante larga, llevaba con el muchísimas maletas.

-No hay nadie ahí.
-¿He?...¿Sabes a dónde fueron niño?
-No lo sé, que yo sepa nunca ha vivido alguien ahí.
-¿Qué?
-Lo que dije, nunca he visto a nadie ahí, pero bueno, tengo solo dos años aquí, puede que se fueran.
-Era de suponerse...ya eran muy viejos...
-tu no eres joven.
-...Nunca te había visto ¿Quien es tu padre o madre?
-ho...no tengo...
-¿Abuelos?
-Nop.
-¿Tíos?
-Nope.
-...¿Alguien?
-Vivo con la señorita myrtle.
-¿Esa bruja? Recuerdo que cuando era niño me regañaba por jugar en su Gardin....
-Ella es muy amable, aveces algo estricta pero es buena persona.

La persona misteriosa se lanzó contra la puerta abriéndola de un impacto, eso asusto completamente al niño, un extraño llegando e invadiendo una casa abandonada, sin embargo parecía ya haber venido antes.
Ignoro completamente la existencia dl niño, se dedicó a meter su maletas, wander por su lado estaba intrigado, la curiosidad le ganó y termino acercándose a el.

-...¿Qué quieres?
-¿Quien eres?
-...puedes decirme gran amenaza.
-!eso no es un nombre!
-Lo es si eres un famoso, es mi nombre de estrella.
-¡¿Un famoso?! ¡Eso es genial!
-¿Nunca has escuchado de mi? Era parte de la banda más destructiva y ruidosa del mundo.
-¿destructiva?...
-Es metáfora...
-¿Metáfora?
-...¿Qué no vas a la escuela?

Apenas se había olvidado del asunto que lo estaba molestando, ahora le hacía sentir más triste, se olvidó de algo tan importante por una distracción simple, bien podía ser un niño pero este estaba conciente de que no podía serlo si quería seguir adelante.

-No tienes que responder, ni siquiera un cuarto de las personas de aquí han terminado la primaria, está bien si no quieres hacerlo.

Otra vez iba a meter las pocas maletas que le quedaban cuando vio que el niño estaba dando pequeños sollozos, aguantando las lágrimas y viéndole de manera acusatoria, esto le causo mucha molestia, había hecho llorar a un niño, odiaba a los niños, no podía siquiera lidiar con otras personas y los infantes eran un caos total.

-Yo...quiero...yo quiero ir...
-...¿Qué te detiene? ¿Acaso tan pequeño ya te pusieron a trabajar? Son unos aprovechados...
-No es eso...solo que  no tengo ningún papel, no puedo inscribirme.
-¿De que estás hablando?
-Nadie quiere ser mi tutor legal.
-que desfortuna, lamento no poder hacer nada, esfuérzate niño.

Quería librarse rápido de esa situación, le estaba incomodando, el niño le daba demasiada pena, no podía hacer nada, no es como si fuera a adoptarlo o algo asi.
Volvió a tomar unas maletas y las metió, cuando volteo afuera, el pelirrojo estaba empujando hacia adentro una maleta enorme.

-¿Qué haces?
-Ayudando, nunca lastima ayudar.
-esta vez si, es muy grande para ti, ve por las más pequeñas.

Obedeció sus órdenes de manera casi inmediata, en ese lugar donde la mayoría de las personas eran de la mayor edad, y los que no, eran trabajadores de campo siempre tenía que estar prestando sus servicios, desde un día ayudar con los plantíos, otras veces traer agua, siempre tenía que hacer algo, de poco en poco fue creando una costumbre de ayudar a quien fuera con cualquier situación, gran amenaza estaba bastante conciente de que en ese pueblo hasta los niños eran tratados como adultos, a los 12 ya eran miembros activos entrando en el comercio, y cultivo, cosa que eso le disgusto tanto que terminó por irse de ahí a muy corta edad, logrando sobrevivir por su medio, realmente el había perdido gran parte del camino por ser tratado como un adulto desde niño, sabía que algo similar le estaba pasando, se estaba viendo reflejado, le apenas tanto el niño, lastimosamente no podía hacer nada, tenía que madurar a la fuerza si quería ser alguien, y el, por su lado no había podido superar la adolescencia, ya estaba cercas de los 30 y todavía se comportaba como un adolescente con problemas de irá, no era el más adecuado mentor para guiar al niño.

-¿Qué es esto?
-Una guitarra.
-¿Guitarra?
-uff pero parece que nunca has visto nada... Mira sacala de su estuche.

Así comenzó, con un sentimiento de lástima y una guitarra, gran amenaza había sido el culpable de haber echo todo un músico a el pelirrojo, diario iba a escuchar sus canciones, con el tiempo empezó a aprenderlas, siguio paso a paso todo lo que gran amenaza le enseñaba, tenía que admitir que no era el más paaciente, aveces explotaba, lo perseguía por distintos lados cuando éste le molestaba, wander sabía bien que aveces podía ser molesto con su enorme cantidad de preguntas, además apenas comenzaba a hablar era difícil pararlo, sin duda su instinto de relacionarse con otras personas era excesivo, ya había pasado casi  un año  y este todavía llegaba diario con gran amenaza a contarle una historia diferente, leer todos los libros que este tenia, diario llegaba a practicar instrumentos, sin duda el peequeño era el impulso que gran amenaza necesitaba para madurar, en menos de un año sus arranques de ira habían disminuido, su paciencia había aumentado, también tuvo que lidiar con otras cosas como era la responsabilidad, ya no tenía a alguien que hiciera las cosas por el, e incluso el tenía que hacer otras cosas por otras personas, en ese caso wander, oji azul.
Otro día, el pequeño venía corriendo, gran amenaza lo esperaba afuera una guitarra y un pandero, sin embargo al verlo bien este no venía con su típica sonrisa, en su lugar estaba casi llorando, le preocupo mucho esta situación, se paro y camino también a dónde estaban.

-¡Gran amenaza! ¡La- la señorita myrtle! !no despierta!

Rápidamente supuso lo peor, está ya estaba en sus últimos días desde hacía meses, era tan aferrada que se negó a ir a un hospital de ciudad, un verdadero problema, sin pensarlo mucho este salió corriendo dejando atrás al niño que poseía piernas cortas, por más que lo intentará le era imposible igualar su velocidad, algunos vecinos vieron como gran ameza entraba a la fuerza, muchos de ellos suposieron lo peor, ya era desconocimiento público el mal estado de la señorita myrtle, a poco más del minuto llegó wander, iba a entrar pero Stella bella, la heroína de la ciudad pues su oficio era policía, y era la única, tomo al niño antes de que siquiera pudiera abrir la puerta.

-Hey, hey, wander, ven conmigo, he preparado galletas muy especiales para ti.
-pero... La señorita myrtle...ella no...despierta...

Todos los presentes guardaron silencio ante las palabras del más chico, podría ser que era el único que no comprendía bien la situación, por su parte el resto se miraban incómodos,  nadie quería explicarle, lo que no sabían era que gran amenaza ya había tenido pláticas con el intentando suavizar la idea de la muerte, por ello no estaba tan alarmado, si muy triste pues sabía que no podría pasar más tiempo con ella.
El ya gran amigo del pelirrojo salió sin dirigirle la mirada a nadie, Stella fue quien tomó la palabra.

-ella...

Negó con la cabeza indicando que no podía hacer nada en una situación así, algunas personas principalmente los adultos que la habían conocido por muchos años empezaron a llorar, wander no sabía por qué pero su empatía hizo que el también llorará y se aferra más a Stella la cual se aguantaba las lágrimas a no más poder, ella aún con el nudo en la garganta se acercó, le dio al niño a gran amenaza y entro, como semi-lider de la comunidad era su deber arreglar todo para un funeral, algo curioso era que la mayoría de los habitantes seguían registrados como vivos, pues el simple hecho de ir a cambiar el acta como difunto consistía en un viaje de 3 días solo la ida, nadie quería salir de ahí, en realidad casi todos habían permanecido sus vidas enteras en ese pueblito, incluso gran amenaza que se fue regreso por la propia nostalgia y el estrés de su solitaria vida, cosa que el había considerado una buena decicion, ahí pudo volver a comenzar y mejorar su vida, principalmente por el hecho de sus el niño lo seguía a casi todos lados dependiendo bastante de el.

-ven pequeña planta rodadora.
-Asi no me llamo...
-Es un buen nombre para alguien que se la pasa moviéndose de un lugar a otro.

Inconscientemente el menor río ante eso, le gustaban los apodos que ponía, nunca le había puesto uno estable, posiblemente ese fuera su nuevo apodo, nunca le gustó el nombre que le habían puesto las personas, incluso tenías más de uno, pues no todos estaban de acuerdo.

-jeff ¿Qué va pasar ahora?
-Ojala fuera vidente, por el momento ven conmigo, seguramente ya te podrá salir la canción del otro día.
-!si!

Su intención era distraer al niño en lo que Stella se llevaba el cuerpo, no estaba aseguro de él porque lo hacía, su yo del pasado seguramente hubiera ignorado todo, pero ahora...no podía, se sentía mal, tanto por el como por el niño, posiblemente ahora quedaría al cuidado de Stella o de mandrake, todo era un caos total en su mente.

La noche llego, comúnmente a estas horas ya estarían todos dormidos, sin embargo gran parte de los adultos estaban juntos discutiendo sobre el asunto.

-Alguien tiene que decirle.
-Ya lo explique, no creo que lo entienda bien pero está sabe que ya no la va a ver.
-Bien echo Jeff, pero tenemos otro inconveniente, alguien tiene que cuidar al niño.
-Siempre lo hemos cuidado todos, que siga así.
-Entiendo eso, pero necesitas una figura cercana, que lo guíe por buen camino.

La discusión era sobre llevada por gran amenaza y Stella los cuales estaban en posturas muy diferentes.

-¿Acaso lo quieres tú? Es una responsabilidad enorme.
-No... Entiendo eso, pero creo que ustedes son más que capaces.
-no es de que seamos capaces o no,para empezar yo no puedo dejar el pueblo, no podría ir a registrarlo, tendría que desaparecer una semana.
-Señor madrake...
-Jovencito, yo apenas puedo caminar, no sería capaz de eso.
-General insurgente...
-No, no, no, yo no estoy muy cuerdo, cualquier ataque de pánico y podríamos tener dos funerales.
-Señorita trudit...
-No, ni yo ni mis hermanas estamos dispuestas, todas estamos planeando salir de aquí a viajar.
-Eso suena muy egoísta...
-Ya tuve miss hijos, mis cartas, lamentos y alegrías, me toca hacer lo que yo deseo.
-¡¿Qué acaso nadie es un adulto?!
-Lo dice el señor yo soy cool y me voy a ser una músico famoso.
-Para empezar lo logré, tengo la sensación de que soy más sensato que ustedes villanos de pacotilla.
-¿Villanos? Jeff tranquilo, exactamente por que somos sensatos...

La líder no termino de hablar cuando gran amenaza se paro.

-¡¿Saben que?! ¡Yo lo haré! ¡Ustedes son bastante inútiles! Me lo llevaré a la ciudad, lo regístrate y podra cumplir sus sueños, yo seré lo que ustedes no fueron para mí.

A todos les había caído como una pedrada, todos estaban consientes de que gran amenaza había estado en una situación similar, ellos habían echo exactamente lo que hacían con wander, estaba con todos pero solo al mismo tiempo, tanto así que apenas a los 13 se le ocurrió irse, pese a los regaños de todos se fue, de vez en cuando les mandaba cartas o fotos, le fue realmente bien por su cuenta, al menos eso pensaba ellos, pues en realidad le había ido de mal en peor, desde meterse con drogas hasta irse con pandillas.

El día siguiente fue de luto, todos habían honrado a la difunta en un funeral un poco improvisado, el ambiente además de triste era incómodo, grana menqza veía con recelo a todos los que estaban consintiendo al niño para que no se sintiera mal. Apenas el día había terminado gran amenaza había hecho que el niño empacara cosas convenciendo lo de ir de paseo, no era del todo mentira, irían a la ciudad más cercana unos días, tenían tramitar un acta tanto para wander como para la señorita myrtle, en el camión el niño iba haciéndole miles y miles de preguntas, el por su lado intentaba bromear sobre ellas manteniendo en secreto su acción, simplemente para darle una sorpresa, ambos llegaron a un hotel, no era muy lujoso sin embargo el oji azul estaba más que impactado, nunca en su vida había visto edificios tan grandes, lugares tan brillosos, pisos que no fueran de madera, todo le estaba deslumbrando.

-Señor...lamento decirle que tiene que comprobar que ese niño es suyo.
-No es mío, vengo a redactar una acta de defunción de su tutor...señor no soy un pedófilo, deme una habitación.
-Lamento el inconveniente, de igual manera quiero recalcar que tenemos mucha seguridad.
-si, si, solo deme una habitación, por 3 días.

Realmente le habían acusado de algo como eso, se sentía bastante enojado, tenía que controlarse, estaba en presencia de este, no es como si no lo hubiera perseguido o lo hubiera visto en sus ataques de ira sin embargo si planeaba realmente adoptarlo tenía que ser más sensato en sus acciones.

-¿Qué es eso?
-Una máquina expendedora.
-¿Es como un refrigerador?
-Algo así...Mira, ten.
-¿Una moneda?
-elige uno de esos números, mete la moneda, y pon los números que elegiste ahí.

El chico nervioso siguio todos sus paso, vio como una golosina caía hacia abajo, gran amenaza la saco y se la dio.

-¿He?
-Le compraste esos dulces a la máquina.
-¿He?
-Nada de ¿He? Estoy seguro que entendiste.
-Claro que no, ¿por qué una máquina quiere dinero?
-Ella no quiere dinero, las personas que la crearon si.
-Ho...

Sin duda tenía que enseñarle muchas cosas, estaba por cumplir los 6 años y su vocabulario era muy limitado, dio un suspiro pensando en eso, en que realmente tendría que inscribirlo a una escuela, pero la del pueblo sólo era primaria, tal vez en un dado momento tendría que cambiar su lugar de vivienda solo para hacer la primaria y secundaria, incluso si podía tan vez le tramitaría alguna beca para que pudiera estudiar sin tanto problema.
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-¿Silvia?...¿Estas llorando?
-¡Claro que no! Estoy sudando por los ojos, la pregunta no hacía falta, me sorprende que tu lo digas sin llorar.
-Tenía 5 o 6 años ¿Qué querías? Paso hace tanto...
-Aun así, yo...cuando me recuerdan lo de mi papá todavía lloro, tu cuentas todo con una gran sonrisa.
-eso me decía la señorita myrtle, los grandes problemas se enfrentan con grande sonrisas.
-Voy a llorar más... ¿Por qué nunca me cuentas estas cosas?
-Nunca preguntas.
-bien en ese caso ¿Puedo seguir preguntando?
-Sipi.
-¿Qué pasó con ese que te cuidaba?
-la señorita Stella es muuuuuuuy vieja, el es el líder ahora, algo así como un alcalde sin título.
-suena genia...quisiera conocerlo algún día.
-Bueno, tal vez lo convenza algún día de venir, solo tal vez, ya tengo años que no lo veo en persona.
-Ho, espera, ¿Es el salón que le mandas cartas cada rato?
-Si, cada vez que sucede algo le cuento, nunca le guardo secretos.
-¿Sabe de hater?
-si y no... Le he dicho muchas cosas pero no directamente.
-¿No le gustaría que tú fueras....así?
-Mmm gran pregunta, dudo que se moleste, es muy abierto a todas esas cosas.
-Ow wander, en realidad me encantaron eres, ojalá pudiera ser más como tú.
-No,no,no, Silvia, tú tienes muchas cosas increíbles, eres muy bella, inteligente, fuerte, con esa actitud tan wow.
-Pff ven aquí planta rodadora.

Sin previo aviso Silvia se lanzó a su amigo a abrazarlo, el gustoso le correspondió su abrazo, ambos eran mejores amigos por qué lograban comprenderse entre si.

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:V bien un flasback, esto en si es un homenaje al famdom cuando hacia sus teorías locas por qué no sabían quien era planta rodadora ¿Se acuerdan todo el montón de teorías súper Random que salieron? Qué si wander era un villano y planta rodadora lo hizo bueno, que era su padre, que era su maestro, que Jeff había convertido a wander etc etc :v xD el fandom es muy creativo.

Mi personaje secundario favorito es gran amenaza, en realidad fue de mis  grandes lamentos al terminar la serie y ver que no tuvo más participación, lo amo ;-; xD bueno sé que ustedes están consentracion en la carta UwU no de preocupen, el próximo será mucho love y comedia para contrastar con esto :3

Les dejo este meme