Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

2 - hurt

Luego de sus clases, como Jiwoo había prometido, se va al cine con algunas de sus amigas de la universidad. Acaban viendo una película de suspenso bastante rara ya que no alcanzaron puestos para la película que realmente querían ver, sin embargo y gracias a Hyunjin y sus comentarios ocurrentes, terminan disfrutando la experiencia.

—Seguro que a tu amiga Sooyoung le hubiera gustado la película —comenta de pronto Jinsol, mientras están yendo a un bar a tomar algo y cenar—, luce como el target, alguien alternativo y que se hace misterioso.

Hyunjin ríe demasiado fuerte y la pelirroja termina golpeando su hombro con falsa molestia porque tal vez tienen un poco de razón, Sooyoung tiene un gusto peculiar con la media que consume. No puede evitar pensar que hubiera sido agradable que también se uniera a la película y que probablemente luego le sugiera verla ambas o en compañía de Chaewon y Hyeju. Ir al cine con ella le gusta porque siempre la tiene susurrando datos sobre el director, los actores e incluso del propio filme, ya que le gusta investigar mucho sobre las cosas antes de verlas.

—No pude evitar stalkear sus redes sociales —dice Heejin mientras la mayor de todas las dirige a un sitio de comida que luce interesante—, es super guapa pero se ve como alguien con una personalidad fuerte.

—Se ve muy artsy y como si leyera poesía de Sylvia Plath antes de irse a dormir —agrega Jinsol.

—¿Por qué de la nada hay tanto interés en Sooyoung? —pregunta Jiwoo, un poco confundida y con las orejas calientes—. ¿Por qué la estaban stalkeando si quiera?

Sus tres amigas se miran entre sí, intercambiando miradas que ponen a la otra muchacha un poco nerviosa. No dicen nada aunque los ojos de Jiwoo lo piden a gritos.

Buscan una mesa en el rincón más callado del local y cuando piden la comida y bebida, Heejin le dice a la pelirroja que la invitará, logrando que una sonrisa gigante aparezca en su rostro y sus ojos dejen de verse desesperados por una respuesta.

Las chicas se divierten hablando de nada en particular, piden un montón de comida y como señaló Hyunjin, para tanta comida se necesita una cantidad similar de alcohol por lo que todas terminan risueñas cuando han pasado un par de horas, sobre todo Jiwoo, quien tiene una nula resistencia al alcohol, sin embargo a nadie le molesta nunca ya que la menor solo se vuelve super cariñosa y habladora.

Un mensaje llega al teléfono de la pelirroja, dejando de lado su comida de inmediato para revisarlo rápidamente, colocando una gran sonrisa cuando ve los mensajes. Esta actitud no pasa desapercibida para sus amigas, quienes le echan miraditas curiosas pero que la chica no capta por estar muy concentrada respondiendo sus mensajes.

—¿Quién te escribe, Jiwooming? —le pregunta curiosa la mayor.

Al salir de la película no había podido evitar el escribirle a su mejor amiga para hablarle de ella, contarle el por qué le gustaría y decirle que le había recordado a ella al instante. Era algo que solían hacer desde siempre, enviarse mensajes cuando algo les recordaba a la otra.

— Es solo Sooyoung —dice risueña pero intentando quitarle importancia.

"Uhhhh Ohhhh"

Hyunjin deja salir ese ruidito tonto y ninguna puede resistir la risa floja que les nace. Estando ya borrachas es mucho más fácil traer a la mesa el tema de la amistad de Jiwoo con Sooyoung, el cual más de una vez les ha hecho levantar las cejas porque su amiga nunca parece explicar bien qué sucede entre ellas, siempre acaba perdiéndose en un montón de palabras y luego solo dice que han sido amigas por años, como si eso lo explicara todo.

—¿Por qué no vino al cine con nosotras? —cuestiona Jinsol con un puchero—, realmente quiero conocerla.

—Sobre eso... —comieza Jiwoo y sus amigas pronto se dan cuenta de que la historia no va a ir hacia donde ellas querían.

Cuando se acostó por primera vez con Sooyoung, no había podido contenerse a contarles a sus amigas en una noche donde también habían salido a tomar algo (tal vez deberían beber menos) porque hablarlo con Chaewon le hacía sentir algo asustada ya que a esta no le hacía nada de gracia la idea y con Hyeju era extraño hablarlo porque sus respuestas eran básicamente un silencio abrumador y una mirada que oscilaba entre el desencanto y el disturbio, solo agregando que por favor no dejara de contarle como se sentía y que en cualquier momento podría darle una paliza a Sooyoung, aunque fuera su amiga. Las dos eran un poco extrañas.

Según Hyunjin, Heejin y Jinsol, en cualquier momento su relación se tornaría más seria. No habían dejado de insistir en conocerla, a ellas les parecía que había un sentimiento mutuo entre ambas que iba más allá de la amistad. Era todo raro porque a veces parecía que Sooyoung no les caía del todo bien.

Les cuenta toda la conversación que tuvieron en la mañana, no pudiendo evitar sonreír al recordar la noche anterior y lo que le siguió después a la charla. Sus amigas en cambio no parecían muy emocionadas, sobre todo al escuchar como Sooyoung había dejado muy en claro que no estaban saliendo, ni iban a salir y cómo no iba a cambiar su forma de mantener relaciones. También parecían especialmente disgustadas por la forma en que rápidamente intentó cortar sus lazos con Jiwoo cuando pensó que esta quería más de ella. Jiwoo se apresuró a contar que ella estaba bien y que aceptaba la situación sin ningún problema, pero eso no fue suficiente para cambiar las expresiones de sus amigas.

—No quiero sonar ruda e incompresiva —comienza Jinsol, buscando la mirada de Heejin para saber si esta sabía a donde quería llegar—, respeto y comprendo la forma en que lleva sus relaciones, pero me parece que solo le importan sus sentimientos.

—Creo que para tener ese tipo de relaciones debería ser más responsable emocionalmente —señala Heejin y Jiwoo solo niega con la cabeza, no cree que Sooyoung haya actuado tan mal.

—Es una idiota —dice Hyunjin. Su comentario siendo obviamente disonante con el de las otras dos pero sonando más sincero.

Jiwoo está demasiado borracha para enojarse pero no lo suficiente cómo para no comprender lo qué dicen. No puede evitar que le salgan palabras en defensa de Sooyoung.

—Ella preguntó si estaba bien con tener una relación casual y me pidió que le dijera si mis sentimientos cambiaban, creo que eso es ser responsable —le defiende pero no puede evitar sentirse minúscula bajo la mirada de las chicas, como si estuviera haciendo algo incorrecto—, y yo lo acepté todo, si algo malo pasara sería mi responsabilidad.

Heejin frunce el ceño y niega repetidas veces. No va a dejar que Jiwoo actúe de esa forma.

—Por la forma en la que nos contaste, parece que estuviera preocupada de que tus sentimientos le fueran a incordiar —señala la chica y Jinsol a su lado asiente—, literalmente lo primero que te dijo cuando pensó que querías que fueran una pareja fue que se debían alejar y yo creo que eso no es nada responsable, no lo dijo con tacto, no pensó en sus palabras y no te preguntó si tú tenías otra solución, solo dijo lo que sería mejor para ella.

La pelirroja frunce los labios. No sabe cómo explicar la profunda confianza que tiene en su amiga y cómo eso es suficiente para ella. Cree que cualquier cosa que diga va a parecer un intento de excusarla.

Nadie puede entender el profundo sentimiento de conexión que siente con la mayor, no se trata de que no quiera ver cosas malas en ella.

—Pensé que te gustaba de verdad. —La voz de Jinsol llega más amable e incluso toma su mano.

Jiwoo siente una oleada de disconformidad y sus palabras se pierden dentro de su garganta, la cual se siente caliente y rasposa. Tal vez el alcohol comienza a golpear más fuerte a su organismo.

—Ya no es como cuando eramos unas adolescente —logra articular pobremente y se ríe también de su propia actitud—. He salido con Soobin y por un corto tiempo con Yuqi —dice, recordando lo bonito de ambas relaciones—, y de verdad los quería sinceramente.

Se había creído que lo que estaba pasando entre ellas podría ser el comienzo de una relación seria, eso no lo iba a negar. Pero no se trataba de que estuviera ilusionada, es solo que si la oportunidad se presentaba, no se iba a negar a ella porque Sooyoung es una persona maravillosa que siempre ha abarcado un gran espacio en su corazón. Definitivamente no tenía el corazón roto por ella, ya no más. Quería vivir una experiencia diferente y experimentar, eso era todo.

—Estoy bien —afirma, recuperando la seguridad en su voz—. Solo quiero probar este tipo de relaciones y que Sooyoung sea la primera persona me hace sentir con confianza porque ella tiene más experiencia y porque es mi mejor amiga.

Se sirve el ultimo trago de soju en la mesa y se lo toma de golpe, haciendo que sus mejillas se coloreen de nuevo y que la sonrisa segura reaparezca en su cara otra vez. Sus amigas se sienten más calmadas y seguras por la convicción en sus palabras y su actitud, por lo que deciden dejar ir el tema y demostrarle a Jiwoo que les alegra su decisión, proponiendo un brindis en su nombre.

—Jiwoo ya es toda una adulta —dice Hyunjin y recibe un golpe en su hombro por parte de la mencionada.

—Soy tu unnie, respétame alguna vez —se queja Jiwoo y todas se ríen cuando la pelinegra finge no escuchar nada.

Las chicas beben un rato más antes de irse. Heejin se queda con Jiwoo para acompañarla a su casa y asegurarse de que llegue bien y el otro par se va en la dirección contraria.

La pelirroja tiene que enganchar su brazo al de su amiga para no caerse cuando comienzan a andar, pero ya tienen mucha confianza, sabe que a la otra no le importa. Heejin es la primera amiga que hizo al llegar a la universidad, cuando se encontraba ansiosa y asustada por el nuevo ambiente y por ya no estar rodeadas de sus amigas, ella simplemente se le acercó el primer día de clases y desde entonces ya no se separó de ella.

Cuando llegaron a la casa de la mayor, se abrazaron para despedirse, siendo un abrazo largo y tendido porque así le gustaban a Jiwoo.

—Envíame un mensaje de texto cuando llegues a tu casa.

—Claro —Heejin está por irse cuando la mayor ya casi entra a su hogar, pero siente que debe decirle algo más o no podrá sentirse una buena amiga—. Jiwoo, no porque hayas conocido a alguien por mucho tiempo significa que debas perdonarle las cosas que haga que te lastimen, tenlo en mente por favor.

Jiwoo le dedica una mirada seria pero no molesta. Por un segundo no parece ir tan ebria, como si las palabras de la menor le pusieran los pies sobre la tierra. Agradece lo buena amiga que es y puede comprender que no hay maldad en sus palabras.

—Gracias Heejin, lo tendré en mente —le dice sinceramente.

✩✩✩

Llegan cansadas al evento, lo cual es lógico luego de tener que arreglarse, salir corriendo para no perder el bus y llegar corriendo para que no riñan a Jueun por no ayudar con la exposición. Todo culpa de Sooyoung, como de costumbre, ya que tiene un don para hacer que los demás lleguen tarde a otros sitios.

—Creo que fue divertido —le dice Sooyoung a la otra pero solo se gana que le enseñe el dedo del medio.

—Siempre me pasa lo mismo contigo, eres idiota.

La más alta se ríe y le regala un beso en la mejilla a la otra antes de darse media vuelta y marcharse para no distraerla más de lo que ya lo ha hecho.

Los estudiantes aún continúan colgando y reacomodando sus obras, por lo que aún no hay mucho que ver, sin embargo, al final del ala izquierda de la sala, una chica termina de colgar una bonita foto que llama mucho su atención, parece inspirada en las fotografías de Martin Parr y retrata a una chica extranjera comiendo helado. Se le ve genuinamente feliz y con sus ojos fijos en el postre, poniendo toda su atención y alegría en él, viéndose vibrante, dulce y cálidamente graciosa. Inmediatamente le recuerda a Jiwoo, así que aunque esté prohibido, le saca una foto, sin que nadie la vea, para enviársela.

Pasea un rato más, observando la cara de los estresados estudiantes, que en si parecen obras por lo nerviosos que están. En momentos así se alegra de estar en su ultimo año del grado de filosofía y de no haber escuchado a su yo de 15 años que se creía pintora y fotógrafa. Cuando se aburre de ver a tanto estudiante estresado le envía un mensaje a Jueun para saber si ya acabó con sus deberes y si pueden salir a fumar. Le responde que vaya saliendo, que en cinco minutos la alcanza.

Afuera corre un poco de viento frío, pero eso no detiene a los estudiantes de venir a ver la exposición, la cual se nota está por empezar ya que la afluencia de gente entrando se hace más notable. Le hace un poco de gracia lo idealizado que tienen a los de las carreras de arte.

—Ya estoy aquí —se anuncia Jueun.

Se alejan un poco del sitio de la exposición, sentándose sobre una pared baja que separa al edificio de al lado de este. Sooyoung le cuenta un poco de las obras que pudo ver y Jueun promete enseñarle otras más interesantes de algunos de sus compañeros que cree que son prometedores. El resto del rato la mas baja se queja de lo mal organizado que está la exposición, de cómo ha terminado haciendo más cosas de las que le tocaban y del estrés que le produce que la foto que escogió para exhibir no sea lo suficientemente buena.

—¿Esa no es tu amiguita Jiwoo? —pregunta Jueun, interrumpiéndose a si misma.

Sí que lo es, viene con tres chicas que Sooyoung sabe que son sus amigas esas tan molestas que creían que eran pareja, las reconoce de las historias de Instagram de Jiwoo. Lo que la deja un poco perpleja es que la menor venga colgada del brazo de Choi Soobin, su ex novio, el cual la mayor detesta.

Pensaba que ya no se hablaban. ¿Qué diablos hacía ahí con él?

—Vamos a saludar —dice y suena casi enfadada.

Se levanta rápidamente, casi dejando atrás a Jueun y comienza a caminar dando zancadas largas para apresurarse. Sooyoung escucha a su amiga murmurar algo sobre que Soobin va a su clase y que es algo así como un prodigio, pero no puede importarle menos, para ella es un idiota que rompió el corazón de Jiwoo.

No sabe por qué, pero decide tomar la mano de Jueun antes de cruzarse en el camino de los otros chicos, dejando confundida a su amiga porque eso es algo que Sooyoung nunca haría y cree saber el porqué lo hace justo en ese momento. Solo puede pensar en lo tonta que es su amiga pero le seguirá la corriente, para ver que tan lejos llega.

—Chuu, no sabía que vendrías por aquí.

La menor se sorprende, por la repentina aparición de la mayor y por el mote cariñoso que había dejado de usar desde hace mucho tiempo. El chico a su lado pone una cara de espanto con la que Sooyoung se regocija internamente y las otras tres chicas la miran con curiosidad, pero la mayor siente que no es una curiosidad que venga de un buen sitio.

—¡Sooyoung! —exclama emocionada la menor y rápidamente se cuelga del cuello de la mayor, envolviéndola en un abrazo que la mayor no devuelve.

La situación se torna algo extraña cuando Jiwoo deja de abrazar a su mejor amiga, se crea un silencio incomodo por lo que Jueun se ve en la necesidad de intervenir; saluda a Soobin y elogia su fotografía, diciéndole a las demás que estarán sorprendidas al verla y ofreciéndose a guiarlas por toda la exposición. Sooyoung nunca suelta su mano.

Jiwoo se porta tan alegre como de costumbre, impresionándose fácilmente por las obras que ve y llenando de elogios a Jueun, Soobin y Jinsol, quien estudia bellas artes e hizo una pintura para la exposición también. La pelirroja luce realmente emocionada de que todos sus amigos se estén llevando bien. Y la verdad es que, dejando de lado el pequeño momento incomodo, todos parecen estar pasando un buen rato mientras ven la exposición, menos Sooyoung, que se encuentra actuando de forma fría y rara con Jiwoo, aunque fue ella la que se acercó en un principio.

—Me tengo que ir un momento —anuncia Jueun, cuando ve como a lo lejos unos de sus profesores le hace señas. Sooyoung maldice internamente, la otra solo le da un guiño y, sorpresivamente, le planta un corto beso en los labios antes de irse a paso rápido.

La chica se queda ahí, frente a los otros, acariciando su propio brazo porque no sabe muy bien qué hacer. El chico evita su mirada a toda costa, las amigas de la pelirroja parecen estarla juzgando y Jiwoo la contempla con una gran sonrisa que se siente abrumadora ya que sus ojos no hacen juego con el resto de su expresión, lucen apagados y confundidos.

—No puedo creer que por fin tengas la oportunidad de conocer a las chicas —le dice Jiwoo a la mayor y esta intenta sonreír.

—Es justo como la imaginábamos —comenta Hyunjin divertida y Heejin a su lado la ve con los ojos como platos—. Jiwoo nos ha hablado tantísimo de ti.

Sooyoung piensa que se está volviendo loca, pero eso le ha parecido una amenaza. ¿Qué les habrá contado Jiwoo sobre ella? no podría haber sido algo malo, no ha hecho nada malo y aun así se encuentra sintiéndose insegura al respecto. Termina asintiendo con una falsa sonrisa y agarrando fuerte la mano de Jueun, quien vuelve a aparecer justo a su lado, causando una expresión de disgusto en Jiwoo que no pasa desapercibida para la mayor. Eso la hace sentir extrañamente reconfortada.

Se dedican a acabar el recorrido lo que resta del tiempo. Jinsol, la amiga de la pelirroja que tiene la misma edad que Sooyoung, es quien más intenta hablar con ella, de forma genuinamente educada, al contrario que Hyunjin, quien parece que todo lo que dice tiene doble intención, sin embargo y lo que más le molesta a Sooyoung, es que Heejin no le haya dirigido la palabra y solo mire a Jiwoo con ojos de perrito. No quiere pensar demás, pero de lo que si está 100% segura es de que le gustan las mujeres, puede reconocer a una lesbiana a kilómetros.

Sus pensamientos dejan de dar vueltas cuando llegan a la pieza a la que antes le había sacado una foto. Jiwoo, justo como ella se esperaba, está encantada con la obra y por un momento a la mayor se le olvida que estaba molesta por varias cosas y se siente genuinamente feliz por verla sonreír. Hizo bien en decirles que esa ala del sitio debía ser la ultima a la que fueran.

—Me ha gustado mucho la exposición, sobre todo esa ultima fotografía —comenta Jiwoo cuando se encuentran dejando el lugar—, solo verla me hizo tan feliz, se me contagió la vibra colorida.

—Tu siempre transmites una vibra colorida y feliz que contagia a todos —dice Sooyoung, las palabras dejando sus labios sin pensar mucho en ellas, como si lo hubiera dicho por instinto.

Jiwoo le regala la sonrisa más bonita que le ha visto en todo el día y casi puede sentir sus mejillas cogiendo color. Al romper el contacto visual con la menor se voltea hacia Jueun, que la mira divertida y parece estarse aguantando la risa.

—Vayamos a tomar algo, mañana es fin de semana así que no hay que preocuparnos por nada —propone la pelirroja, enganchándose a uno de los brazos de Sooyoung. De pronto se ve diez veces más feliz.

—Yo me marcho, tengo una cita de Tinder —informa Jueun y toma a su amiga de la barbilla y le estampa un beso más profundo, antes de marcharse con una sonrisa cómica y malvada en su rostro.

Oh Dios, piensa Jiwoo, ¿que maldito bicho les había picado a esas dos? esto no iba a ayudar para nada a que sus amigas cambiaran un poco su forma de pensar sobre Sooyoung.

—Vaya, que cariñosa —comenta Soobin, rompiendo el silencio y ganándose una mirada mortal de parte de la mejor amiga de su exnovia. Suficiente para que reconsidere si volver a abrir la boca es lo correcto.

—Puedo llamar a Chaewon y convencerla de que tomemos algo en casa —le dice Sooyoung a la pelirroja, observándola como si no hubiera nadie más a su alrededor.

Según la lógica de la mayor, la invitación tendría que bastar para correr de ahí a los demás y quedarse a solas con Jiwoo. No la conocen casi, probablemente no se animen a ir a su hogar.

—Suena fantástico, estar en alguna casa nos permitirá beber lo que queramos —comenta Hyunjin y Sooyoung comienza a odiarla un poco. ¿Por qué es así de extrañamente extrovertida?

—Por supuesto, además así podrán conocer a Chae, es un amor de persona —les dice Jiwoo y luego se voltea a ver a Sooyoung con sus redondos ojos expectantes, está esperando a que llame a su roomie justo en ese momento.

Como no le puede decir nada a Jiwoo cuando pone esos ojos, suspira con resignación y saca su teléfono para llamar a Chaewon. Su amiguita Hyunjin la mira divertidísima, Jinsol se mantiene neutra y la otra le ve con ojos de corderito, lo cual la enoja porque se le comienza a hacer un poco evidente que tal vez le guste Chuu. A Soobin ni lo mira, es un bueno para nada que no es capaz de sostenerle la mirada por más de cinco segundos, debe seguir horrorizado por aquella vez que pincho las ruedas de su scooter.

Al final le cuesta dos intentos de llamada que la menor coja el teléfono. La pone en altavoz a petición de Jiwoo y reza por dentro para que no tenga ganas de beber, lo cual termina siendo tan improbable como pensó, super emocionada respondió que sí pero que también estaba Hyeju, quien murmuró por detrás un "no" que fue ignorado por absolutamente todos ya que la pelirroja se había emocionado de que sus amigas también pudieran conocerla.

Por lo menos Sooyoung tendría el apoyo moral de las otras dos, así se estaba consolando.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro