"¡Qué empiece la subasta!"

Pasaron algunos minutos y comenzó a llegar más personas para participar en la subasta, pronto todo el lugar estaba culminado y no quedaban asientos vacíos.

La sala en la es de un tamaño mediano con poca luz para resguardar la identidad de los clientes, y al final había lo que parecía el lugar perfecto para un espectáculo, en otras palabras, un escenario.

-¿Estamos todos? ¡Espero que sí!- Un hombre joven con un traje formal negro, con su saco, y pantalones de una tela notoriamente cara, una flor blanca en su bolsillo derecho, y unos zapatos marrones, se paró en medio del escenario. -No perdamos el tiempo y empecemos con está increíble noche- Anunció, sus ojos lilas con pupilas de estrellas brillaban, aún opacando las luces del escenario, y la oscuridad en las mesas donde los compradores disgustaban sus alimentos, mientras que por el contrario, su cabellera castaña muy apenas se notaba.

Dos asistentes subieron con cuidado un gran jarrón morado el cuál parecía contener pequeñas estrellas que brillaban dentro del líquido que contenía la botella. Las asistentes eran mujeres bellas, voluptuosas, ambas lucían sensuales vestidos rojos, y tacones altos, mientras que sus cabellos estaban bien amarrados en un rodete alto, dándole una imagen muy esvelta a ambas, sumada a un aura que hacía suspirar a los hombres.

-Nuestro primer artículo se trata de un nuevo vino que fue fabricado con una cosecha nueva de uvas del imperio de los elfos- Anunció el muchacho mientras centraba el foco de atención de todos en el producto.

-¡¿Imperio de los elfos?!- Una mujer en el público no pudo evitar preguntar con bastante entusiasmo.

-¡Han oído bien! Uvas del imperio de los elfos, es decir, este vino tiene una maravillosa capacidad de recuperación y protección a venenos de cualquier bestia o planta de nivel 50 o más y hoy pueden obtener la oportunidad de adquirir está botella entera.

Dirigidos por el presentador, varios meseros se movieron rápidamente repartiendo copas con un poco de vino para cada invitado.

-Y por supuesto, dejaremos que prueben el producto para que vean su valor- El presentador estiró la mano e invitó a todos a beber el vino.

-Adelante socio, pruébalo, esté vino te vendrá de maravilla si tienes heridas y recuperarás tu energía- Aseguró el hombre muy emocionado al beberlo.

-¿En serio?- Bellota miró la copa y curiosa se llevó la bebida a la boca.

-¿Qué tal? ¿Eh?- Lo codeo el hombre.

-Sabe increíble... Pero...- Bellota guardó silencio un momento.

Todo su cuerpo se empezó a sentir caliente envuelto en una cálida sensación de abrigo, pero luego ese sentimiento cambio a uno en el cual se sentía maravillada y llena de energía.

Una barra que solo era visible para ella apareció frente a sus ojos y un número llegó del 1 al 10 rápidamente además de otras apariciones como, +Resistencia al veneno Nivel 7 +Autocuración Nivel 9.

-¿Quién empezará a participar por esta maravilla embotellada? ¡Empecemos con 35 monedas de plata!- El presentador empezó con su oferta.

-¡40 monedas!-

-¡45!-

-¡50!-

Uno tras otro, empezaron a subir el precio, Bellota por su parte no parecía muy interesada en gastar su dinero en este artículo y solo se dedicó a observar la subasta.

...

-¡Vendido al cliente de máscara morada por 376 monedas de plata!- El presentador parecía muy a gusto con el resultado.

Algunas personas aplaudieron al comprador por su logró mientras otros se veían resentidos.

El segundo artículo fue mostrado y empezaron a subir el precio nuevamente.

-¡Armadura de escamas de Dragon vendida a 540 monedas de plata!- Anunció.

...

-¡Vendida Margarita de 300 años de potenciación de energía por 50 monedas de oro!-

Con cada artículo vendido aparecía otro más caro y valioso, Bellota empezaba a sorprenderse por todo lo que había en ese mundo y se distrajo como nunca antes, incluso olvidando su situación actual.

-¡Finalmente el último artículo de la noche! -El presentador sonrió con gran malicia.

-Oye socio, ¿Por qué no has comprado nada? Eres muy tacaño- Se burló levemente el hombre junto a Bellota.

-Nada de eso es necesario para mí... -Bellota dio una excusa, pero la realidad era que no quería dar su dinero al menos que fuera algo que de verdad le ayudará.

De pronto todas las luces se apagaron, dejando la sala en completa oscuridad, la música levantó la tensión y la expectativa de los compradores, hasta que los láseres de colores focalizaron el centro del escenario.

Una neblina blanca salía de los costados, de lo que una vez regresó la luz, pudieron distinguir como lo que sería una enorme jaula con sus barrotes de color blanco, la jaula tenia sus barrotes centrales en forma de flores de cuatro picos, mientras que en la parte superior se podía disfrutar de la forma de un corazón con alas.

Pero eso no era lo más interesante, sino lo que había dentro...

Todo el público parecía intrigado por este último producto y pusieron toda su concentración en el presentador.

-Aunque las reliquias, armaduras y objetos de curación son muy útiles, en esta noche les traemos un producto mucho más valioso, mucho más precioso que eso, es el poder obtener una preciosidad entre tus manos para siempre, les presento, ¡A la maravilla extranjera!- Se hizo a un lado para que los compradores pudieran ver a la "mercancía".

Una "preciosa mujer" con un vestuario hermoso, que resaltaba desde su piel pálida, ojos verde oscuros como la profundidad de un eterno bosque y un tono de cabello inusual, un azabache brillante, hermoso, luminoso, rasgos considerados delicados y extraños para los ojos de los clientes, principalmente los hombres parecían hipnotizados con la imagen de la belleza extranjera.

Por su parte aquella "mercancía" se notaba muy afectada por el veneno, hallándose sentado en medio de la jaula con sus manos atadas a la espalda, y la cabeza caía, su débil mirada no se despejaba del suelo.

-...-

-...-

-...-

Kaoru no podía creer lo que estaba viendo, se llegó a frotar los ojos como cuatro veces preocupada de estar alucinando.

Peor fue la tormenta interna que le tocó afrontar... Pues chocaba su malicia, su deseo de venganza hacia Butch, con su moralidad... Ambas facciones no se ponían de acuerdo, provocándole una crisis interna, que gracias a la oscuridad no se notaba.

-¡Es Butch!- Se cubrió la boca Bellota, pues lo reconoció de un vistazo y se resistió a empezar a reírse, pues si, en primer lugar lo estaban haciendo pasar por mujer, el que lo compre se llevaría el fiasco de su vida, y en segundo lugar "¿Cómo llegó a ese estado?" Por mas que le daba vueltas, su cabeza seguía batallando con su malicia y su moralidad, "¡Te lo mereces!" Pensó ella y guardo silencio, "¿Lo ayudaría?" ... "¿Si?" ... "¿No?" ... Después de todo ella no era como él y no lo dejaría morir, o descubrir lo que podría ser peor que la muerte.

Pero lamentablemente el precio inicial era muy alto y no sabía si podría ganar la subasta.

-¡El precio inicial será de 300 monedas de plata!- El presentador parecía un lobo esperando a los apostantes.

Y por supuesto todos le siguieron la cuerda.

-¡400 monedas!-

-¡450!-

-¡600!-

Butch muy apenas podía distinguir los sonidos y las voces que se oían, incluso los gritos.

La extraña iluminación, la oscuridad que sirve para proteger a los compradores de la subasta, no le permitían caer en cuenta de su situación.

-¿Quién ofrece más por esta preciosa criatura?- Pregunto el presentador mientras le levantaba levemente el mentón a Butch con su bastón, para que sus compradores puedan deleitarse con su pálido rostro, que parece tallado por ángeles.

"¿Qué ocurre?"

"¿Dónde está...?"

"La anciana..."

-...- Su mente se mantenía divagante, apenas pudiendo recordar lo que había sucedido.

"Oh, es verdad... Entonces... ¿Me están vendiendo?"

Su rostro no demostraba conciencia, producto del fármaco que usaron para cedarlo...

-¡200 monedas de oro!

-¡250!-

El precio subía y subía más Bellota estaba empezando a sudar, después de todo ella sólo tenía 400 monedas de oro...

¿Podría ganar o no?

-¡300 monedas! -Grito ella fuertemente.

Muchos empezaron a retirarse a partir de ese momento, el precio era muy alto.

-¿Te gusta esa chica socio? ¡Entonces gánala!- Lo apoyó volviendo a codearlo.

Ese fue un baldazo de agua helada para Bellota, pues... Su cabeza le decía "NOO" ... "¡No existe tal sentimiento!" ... "Menos con él" ... "¡JAMÁS!"

-¿Gustar? Para nada- Negó en seguida, aunque muy en el fondo ella simplemente no podía permitirse que Butch fuera llevado por algún pervertido.

-¡380 monedas!- Grito otro hombre!

-3..385- Bellota ya no podía ni hablar correctamente, le temblaba la voz, primero por los nervios de llegar al límite de su monedero y segundo porqué ¡Se quedara sin dinero!

-¡390!- El hombre volvió a subir el precio.

-395- Bellota rogo que el hombre se rindiera.

-¡500 monedas!- Un nuevo comprador se unió a la competencia y subió el precio de golpe.

-"¡Rayos!"- Golpeó la mesa Bellota con frustración ¿Qué haría ahora? Arriesgar...

-Socio... ¿Me harías un préstamo?- Bellota miró a un lado y le preguntó a su compañero de mesa.

-¿Tanto deseas a la chica? Bueno, pero solo tengo 200 monedas conmigo gaste el resto en el último artículo- Accedió el hombre.

-Me sirve, muchas gracias- Bellota tomó aire y luego se levantó -¡600 monedas de oro!- Apostó dándolo todo.

El público se detuvo y parecía que nadie subiría el precio nuevamente.

-¿Nadie da más? ¿No?- El presentador esperó un poco y luego siguió... -En ese caso, la belleza extranejra será vendida a la una, a las dos y...- Fue interrumpida por una voz brave que resonó por toda la sala.

-¡Mil monedas!-

Bellota miró atrás sintiendo como todos sus esfuerzos se derrumbabam y pudo distinguir como un hombre encapuchado que en silencio se acercó al escenario.

-¡Vendida por mil monedas de oro al hombre encapuchado!- El presentador anunció el resultado.

El joven encapuchado, lucía una máscara que recordaba a las alas de los cuervos, con ese color negro oscuro, imposibilitando que puedan ver sus ojos.

Sin darle tiempo a nada al presentador, el joven dejó caer el dinero sobre el escenario, y con una de sus manos arrancó la puerta de la jaula.

Luego se agachó para ver a la jovencita más de cerca, para finalmente tomarla en brazos, enderezarse y bajar del escenario.

-...- El veneno seguía dificultándole a Butch, el recuperar sus fuerzas, lo que le causaba mucho estrés.

El encapuchado una vez salió del restaurante con la muchacha en brazos, se metió dentro de un carruaje y desapareció rápidamente, sin dejar rastro alguno.

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En el carruaje:

P.O.V Butch:

Medición... Quiero reaccionar, pero mis ojos se cierran...

¿Quién está ahí?

Mi visión es muy imprecisa y borrosa...

Siento mi cuerpo flácido... Sin fuerza, incluso creo que si me siguen zarandeando vomitare...

¿Estoy en movimiento?

~~Duele...

Me duele mucho la cabeza...

Siento que me desmayare nuevamente...

No quiero...

No quie---

---ro...

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Fin del P.O.V

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Continuará: