
꙳Cap. 7꙳
『 Narrador 』
-Cyno, bajate de ahí o te voy a tirar. -Le dijo el híbrido con una mueca de que andaba molesto.
-No, te pregunté algo, dime una respuesta. -El peliblanco tomó sus muñecas y las puso a los costados de su cabeza, al mismo tiempo acercándo su rostro al del contrario.
-No tengo nada que responder, es media noche, ya déjame dormir. -Dijo para levantarse bruscamente y tirar de encima al peliblanco y volver a acostarse de lado para dormir. -Muy bien, ahora si, buenas noches.
El moreno solo se limitó a bufar y acomodarse a un lado del híbrido para dormir, aún que no fuera lo que hizo, ya que se quedaba pensando en las palabras y le evasión del pelinegro a su pregunta.
Al amanecer el moreno notó los rayos del sol traspasar por las telas de la casa de acampar, a lo que se quejó al notar que no había dormido nada, el hibrido no pudo evitar notar ésto y se volteó a mirar al lado de donde estaba su contrario.
-¿Qué te pasa? -Le habló en un susurro audible, a lo que el moreno no pensó responder, quedándose callado mirando al suelo de la casa de campaña. -Agh, eres un niño.
Se había vuelto a voltear al lado contrario del moreno, hasta que sintió un abrazo por detrás y bufó.
-¿No me quieres ya? -Dijo el moreno mientras clavaba su nariz en el cuello del híbrido, a lo que el contrario suspiró.
-¿Quién dice qué no lo hago? ¿Por qué piensas e-? Oh... -En cuanto se daba cuenta volteó nuevamente para el lado de el moreno y lo tomó de las mejillas con sus manos. -Claro que te quiero, Cyno... Pero no puedo definir nuestra relación ahora, es algo confuso en éste momento aún que sigues casado con Nilou... No quiero apresurarme a cosas así, es mejor que lo dejemos de lado un rato, ¿no crees?..
Dió un beso a su nariz después de terminar de hablar, con el peliblanco escuchando con atención y viendo sus movimientos, abrazandolo más fuertemente y gruñir con frustración.
-Ya quiero que ésto termine...
-Esperemos que pronto lo haga... Hay que dormir un poco más, se ve que no dormiste nada con las ojeras que traes. -lo atrajo más a él abrazandolo por el cuello y sonriendo a él.
Durmieron abrazados plácidamente hasta que escucharon un grito de Collei, saliendo rápidamente de su casa de campaña y mirando que pasaba.
-¡Mátalo, mátalo, mátalo! -Miraban como gritaba escondiendose detrás de el jóven que anteriormente los acompañaba.
-¡Ah! ¡T-tranquila! Solo es una mantis. -Le dijo con objetivo de que la chica dejara de sangolotearlo.
-¡Pero está en mí casa de campaña! -lloriqueaba mientras apretaba los hombros del rubio, a lo que éste soltó un quejido de dolor.
-¿La gente de Sumeru no está acostumbrada a los bichos? -Hablaba mientras se incaba a medias tratando de aguantar el dolor en sus hombros.
Los mayores se reían levemente de la escena un tanto divertida, el híbrido se dedicó a trasladar al bicho a otro lado lejos de la casa de campaña de la peliverde, mientras la misma se disculpaba con el rubio por lastimar sus hombros.
Pronto tomaron desayuno, levantaron sus cosas y emprendieron su pequeña expedición por el lugar, cosa que no resultó para nada, ya que no habían señales del peligris en el área, cosa que le parecía preocupante al rubio.
-Mhh... Tal vez está con Lisa... -El moreno a escuchar tal nombre, se había sorprendido, más no se hizo ilusiones y dejó al rubio continuar hablando. -Es la tutora de Razor, tal vez están tomando una lección ahora y por eso no está aquí.
Al terminar de decir aquello, todos estuvieron de acuerdo en ir a buscar a la ciudad, donde como recordaban, todo se veía lleno de vida, caminaron hasta la cede de caballeros de Favonius, entrando a la biblioteca, encontrando a la castaña acomodando algunos libros, la misma volteando a mirar a quien provocaba el ruido entrando al lugar, quedando sorpendida al mirar al moreno.
-Por Barbatos, ¿qué hace el gran y adorable juez mahamatra en monstand? -Rió levemente haciendo burla a su estatura, el contrario mencionado anteriormente tomándolo a broma y riéndose de aquella broma, acercándose con una sonrisa relajada.
-Asuntos de la matra, nada que realmente llame la atención de una perezosa. -Bromeó mientras la peliverde quedaba confundida por la situación.
-¿Quién es ella? -Preguntó la mencionada en un susurro al híbrido mirándo como los otros dos bromeaban y reían aún.
-Es Lisa, una de las compañeras de Cyno en la academia, la dejó, pero es increíblemente inteligente. -le respondió mientras miraba con algo de molestia la escena frente a él, ya que sabía que en el pasado ellos dos tuvieron un tipo de romance antes de ellos dos conocerse.
Pasados unos dos minutos, las risas cesaron, y mientras los dos mayores hablaban más seriamente, el híbrido estaría hojeando un libro que encontró en el lugar, escuchando de reojo lo que decían los dos mencionados.
-Mhh, ya veo, así que piensas que Razor es el hermano que perdiste hace mucho tiempo... -Hablaba la castaña mirando a suelo posicionando su mano en su barbilla mientras pensaba para después soltar una pequeña risa. -¡Mhm~! Ya decía que lo adorable que tenía no era casualidad, realmente, se parecen demasiado, sin contar el color de su piel, Razor es completamente albino... -Hablaba volviendo a tomar su postura seria.
-La genética es increíblemente extraña. -Suspiró poniendo una mano en su cadera y mirando al suelo antes de volver a hablar. -Bennett nos dijo que eres su maestra, y como no lo encontramos en el bosque, él pensó que estaría aquí, pero no es así, ¿verdad?.. -Habló con cierto desánimo.
-Sí, soy su maestra y tutora, con respecto a verlo, hoy sí lo ví, de hecho, antes de que llegaran lo ví con una muchachilla, tal vez hizo una nueva amiga, no se veía que fuera mala persona, así que lo dejé pasar, de todas formas, mandé a un amigo mío a vigilarlos a lo lejos, la chica es de fuera, se nota por sus prendas de ropa, siempre hay que ser precavidos, y más cuando se trata de un niño huérfano. -Dijo explicando a detalle la situación.
-¿No sabrás a dónde se fueron? -Habló el moreno con algo de emoción en su mirada, esperando una respuesta de la otra.
-Me parece que se iban a Levantaviento, pueden ir a ver si quieren. -Contestó la castaña con una sonrisa en su rostro.
Al momento de obtener aquella información, se despidieron rápidamente y el peli blanco corrió fuera del lugar con sus tres acompañantes detrás de él, salieron de la ciudad de Monstand directo a Levantaviento, buscando por todos lados, sin resultados, hasta que lograron escuchar a lo lejos un grito femenino por una cueva cercana, todos acercándose a aquella y mirando la escena.
-¡A-aléjate! ¡¿Quién eres?! -Gritó la mujer.
-Mhm, eso debería de preguntarte yo, y más por el hecho de que tienes un cuerpo inconsciente de uno de nuestros ciudadanos aquí. -Dijo un hombre alto de tez morena y cabello azul obscuro a la chica, con una espada en mano en posición de ataque, con un tono de voz bastante calmado a pesar de la situación.
-¡S-solo se desmayó, y-y no te incumbe quién soy o qué hago aquí! -Tartamudeaba la mujer con nervios.
-Oh, no, no, no, querida, mientras estés en la nación de la libertad, tienes que cumplir sus leyes, no querrás que te llevemos a Fontaine a que te juzguen por posible intento de homicidio, ¿o sí? Y yo soy una de las mayores autoridades aquí, así que sí mr incumbe absolutamente todo sobre ti. Tú decides, hablamos por las buenas, o... Te llevo a la cede para que juzguen tú caso para suponer su gravedad. -Hablaba el peliazul ahora en un tono amenazante, a lo que la mujer gritó cosas incomprensibles.
Finalmente llegó el pequeño grupo, el moreno mirando primero todo, a lo que quedó completamente en shook al mirar a su ex-esposa con el cuerpo de un niño inconsciente detrás de ella. La peliroja al mirar a ese grupo, quedó con los ojos abiertos como platos, y bajó la espada que había empuñado mientras temblaba.
-C-cyno... Y-yo- ¡No es lo que parece, l-lo juro! -Hablaba desesperadamente soltando su espada al suelo mientras entraba en pánico.
El moreno no se limitó a más que a acercarse a ella con un aura completamente amenazante, invocando su lanza y con uno que otro rayo saliéndo por su visión, a lo que la contraria solamente rogaría por piedad desesperadamente.
-¡N-no, espera, t-te juro que es un m-mal entendido! -Caminaba hacía atrás evitando cualquier cosa que se aproximara, hasta que chocó con una pared rocosa, viendo como el moreno se acercaba poco a poco, con ella aún el cuerpo de su aparente hermno delante de ella, decidiendo invocar su arma y apuntarla a el cuello del menor. -¡Un paso más y lo asesino!
A la acción de la chica, el moreno se detuvo, sabiendo que lo haría en el peor de los casos.
Todos mirándo por detrás la escena llena de suspenso y tensión, solo se limitaban a observar, hasta que el híbrido se acercó sacando su arco, apuntando a la peliroja un de sus flechas, a lo que ésta solo puso una cara de molestia.
-¿Por qué trajiste a esa zorra?.. -Dijo ya enfadada, parecía perder la cordura poco a poco. -¿Lo trajiste para follartelo cuando te aburras? ¡¿Eh?!
Ninguno de los dos habló hasta que el moreno decidió romper aquel silencio tenso.
-¿Qué ganas haciéndo ésto?.. -Miró fijamente al adolescente en el piso, pareciendo querer despertar ya, debido a algunos quejidos que soltaba, pareciendo la peliroja no notar ésto.
-¡¿Qué gano?! ¡Ganaré tú amor, que me amaras a mí en vez de ese sucio zorro salvaje! ¡Solo debía de llevartelo y seducirte para que me amaras otra vez, tenemos que estar juntos, somos el uno para el otro, solo que no te has dado cuenta de que me amas a mí, él no te dará nada de lo que yo te puedo dar! -Hablaba mientras bajaba el arma y gritaba a todos lados aquello que daba claro que perdía la cabeza. -¡Estás confundido, yo lo sé, yo-! ¡Agh! -Gritó empuñando nuevamente el arma frente de ella al ver como el albino se levantaba y trataba de atacarla, más aquél al tratarlo terminó herido, con una puñalada en uno de sus hombros, a lo que la peliroja al notarlo, soltó el arma, sacandola de aquél muchacho que nuevamente estába en el suelo, quejandose de dolor y tomando su área herida con sangre saliendo rápidamente.
La peliroja estuvo a nada de volver a atacarlo, de no haber sido por el híbrido, quien se atrevió a disparar una de sus flechas a la chica, la cuál gritó de dolor y se arrodilló en en piso a donde la flecha había cruzado, aprovecharon aquél momento para que entre los dos morenos y el rubio auxiliaran al albino, mientras los guardias forestales se aseguraban de que la peliroja no hiciera más daño.
En algunas horas, Cyno se encontraba nuevamente hablando con la castaña fuera de una de las habitaciones de la cede de caballeros, donde se encontraba su hermano, siendo atendido por su herida por las enfermeras del lugar, mientras hablaban, el híbrido se acercó a ellos con un semblante molesto, pero afligido, tomó al moreno de la mano para llamar su atención, lográndolo, y suspiró antes de hablar.
-Cyno... Quiero hablar contigo. -Habló con la cara abajo y mirando al suelo.
El mencionadose despidió de su amiga y caminó junto a el híbrido hasta un lugar completamente privado.
-¿Qué pasa, Tigh? -Dijo una vez tomando de su mejilla y dirigiendo su mirada a él.
-Me siento horrible por disparar a Nilou... Sé que no la herí de gravedad, pero no puedo dejar de pensar en que antes de todo ésto éramos amigos y todo era tan normal... -Habló con desgana. -No está muerta, pero no puedo evitar sentirme mal aún así.
El moreno tomo con su mano libre el hombro del híbrido, acariciando de éste suavemente como un signo de apoyo antes de tomar una pequeña bocanada de aire y hablar.
-No tienes porqué sentirte así... ella fue la que te hizo daño primero, ahora con ésto ella va a ser juzgada por la matra, tal vez hasta le den atención psicológica por intentar matar a Razor... Los rumores de antes pararán y nos van a dejar en paz, volveremos a nuestra vida normal muy pronto, te lo prometo. -Terminó de hablar dejando un beso suave en sus labios, a lo que el contrario sonrió de forma tierna Y rió levemente.
-Mhm~... Sí tú lo dices, entonces te voy a creer. -dijo juntando su frente con la del contrario hablando en susurros tomando las manos del otro. -¿no quieres ver a tú hermano? ya está estable, seguro tienes ganas de conocerlo, y él a ti.
-Claro, vamos.
Dijo eso último para volver a besar sus labios y tomar con más firmeza una de sus manos, caminando juntos hasta donde se encontraba el menor diciéndose entre ellos cosas cursis y una que otra cosa sugestiva, dándose cuenta cada que no les hacía falta nada más que ellos dos para ser felices.
✧─────────── ・ 。゚★: *.✦ .* :★. ───────────✧
Voy a morir después de ésto, es más, éste fanfic no existe, es un producto de su esquizofrenia, es un gusano que les revuelve la mente, un invento del gobierno, TODO.
En fin, literalmente voy a subir el epílogo después de subir ésto, ahí se ven.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro