💥 03
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¡MALDITO ASCO!
Una vez que el avión aterrizó, caminaron hasta el hotel que los alojaría durante unas semanas, mientras las chicas hablaban despreocupadamente sobre lo bella que era la ciudad, los chicos conversaban sobre un posible plan.
Al llegar al hotel, fueron recibidos por un héroe profesional: "Bagliore Blu".
Un hombre de no más de 25 años, cabellos negros, ojos turquesas y realmente guapo los recibió, dándoles a conocer sus habitaciones individuales.
— Pueden descansar y desempacar, esperamos que en su estadía disfruten Italia...-
— Grazie mille- sonrió Momo
— Por cierto, los esperamos en la sala principal para reunirnos con los demás Eroi, a las 10:00, ¿de acuerdo?-
— Claro- dijo el pelirrojo
Cada uno tomó una habitación, eran de color beige con decoraciones en madera, las sabanas eran de color blanco con un baño privado y elegante.
Katsuki se tiró en la cama, pensando en el viaje y la pelea que había tenido con Nahir en el avión se molestó consigo mismo, ¿Acaso estaba preocupado? ¿Por la "anciana"?
— ¡Por un carajo!- grito a la nada.
— ¿Estás bien?- preguntó con un gritó el pelirrojo, que se había asomado por la puerta
— ¡Se me cayó algo!- gritó en respuesta y fingiendo buscar debajo de la cama.
— Te ayudaré, después iré con Nahir a comer, ¿Quieres venir?- dijo mientras se agachaba cerca de la orilla de la cama
— ¿Con la anciana? ¿Porqué?-
— ¿Anciana? Nahir es muy joven aún-
— ¿Vienes a decirme que es guapa y hermosa?-
— No, sólo que iré a comer con ella... ¿Tú piensas eso?- sonrió con picardía en el suelo, aún no encontraba nada.
— ¡Es una maldita nerd amiga de Deku!-
— Pero es guapa, no lo niegues-
— ¡Callate ya!-
Las mejillas del chico se tornaron rosada pero él, al estar en la cama, juntó su rostro contra una almohada.
— Bien, ¿Era esto lo que se te cayó?- pregunto el pelirrojo al ver en el suelo un pequeño libro.
— Sí, déjalo por ahí- su voz se escuchaba extraña a causa de la almohada.
— No sabía que te gustaran estas cosas...-
— ¿De qué hablas?- preguntó levantando el rostro, mirando a su amigo, sus mejillas competían contra el tono de su cabello.
— ¿En serio? Esto es de hombres...- murmuró en voz baja. Katsuki le arrebató el libro, dejando a su amigo con el rubor en las mejillas.
En las mejillas del mismo rubio también se concentró el calor pero su ceño seguía fruncido, aquel libro no era nada más ni nada menos que un libro de posturas sexuales, en otras palabras, un Kamasutra.
— ¡Esto no es mío!- lo arrojó contra la esquina de la habitación, provocando que al caer se escuchara un sonido brusco.
— No lo niegues amigo. ¡Es de hombres! Muchos no lo leeríamos por vergüenza... Pero esto demuestra que no temes que las chicas entren y lo vean-
— ¿Las chicas? ¿La anciana y la princesita?-
— ¡Cualquiera! Aunque creó que no es de hombres meter a cualquier chica a tu cuarto...-
— ¡No me refería a eso!-
— En fin, creo que estás ocupado con éstas cosas... Te dejaré solo mientras voy con Nahir a comer-
Le sonrió al rubio mientras se disponía a salir, sin embargo una extraña sensación se manifestó en Bakugō.
¿Por qué la albina tenía que ir con él? ¿No se disculparía con él por aquel drama estúpido que hizo en el avión?
Estaba por salir de su habitación cuando otra sensación lo invadió, ¿Por qué mierda quería hablar con ella? ¿Acaso ella le importaba esa nerd?
— ¡Por un carajo!- volvió a gritar y de sus manos salían pequeñas explosiones.
Regresó a la cama con grandes zancadas y se dispuso a organizar su ropa.
...💥...
Una hora más tarde, alguien tocó a su puerta, se sentía tan raro que no quiso alterar más su poca cordura; sin embargo, los toques no cesaban y grito con furia un quién.
— ¡Soy Momo! ¿Bajaras a comer?-
Era la princesita, no quería comer a solas con ella, sería más incómodo que estar con Nahir y Eijiro.
— Largo-
— Kirishima-kun ha vuelto y trajo helado...-
Odiaba que lo compraran con comida, pero algo lo sorprendió, al parecer la azabache dijo que "Red Riot" había regresado solo.
— Bueno, si decides bajar estaremos en la sala- los pasos de pequeños tacones resonaban sobre el suelo, alejándose cada vez más.
...💥...
— ¡Esto es muy sabroso!- los ojos de la azabache brillaban por el sabor tan delicioso de aquel postre.
— ¡¿Verdad que sí?! Nahir y yo comimos uno en el parque- sonrió el pelirrojo
— ¿Y la maldita anciana?-
— ¿Nahir? Salió de patrullaje con Lysandro-san-
— ¿Quién mierda es ese?-
— Otro héroe de esta agencia, él borra la memoria- aclaró Yaomomo
— Debería estar aquí para comenzar a planificar la estrategia- farfulló el ojirojo
— ¿Acaso estás celoso?-
— ¡Yo no estoy eso!-
— Si claro, eso dijiste cuando éramos estudiantes y ella hablaba con Denki- se burló el chico, recordando aquel suceso.
Momo también lo recordó, su preocupación era palpable.
— Chicos...-
— ¡Ella estaba saliendo con un idiota!... ¡Y todavía lo hace!-
— ¿Acaso hay alguien mejor que Denki? Él es amable con ella, respetuoso, cariñoso, la apoya en sus decisiones... ¡Eso es cosa de hombres!- sonrió finalmente el pelirrojo mostrando su afilada dentadura.
"Tal vez yo" gritó internamente pero al darse cuenta de que estaba por gritarlo, se calló. No dijo ninguna palabra y su ceño volvió a fruncirse.
— Otro que no sea él estaría bien...-
— ¿Y si soy yo?-
De nuevo su cuerpo se volvió a tensar, quería cambiar el tema de conversación, así que preguntó lo que su "asqueroso sentir" quería saber.
— ¿En serio Nahir salía con Denki?-
— ¿Por qué la pregunta?-
— Que yo recuerde, jamás salieron como novios...- menciono la chica, colocando de nueva cuenta un poco del delicioso helado en su chuchara.
— Pero sí salieron a paseos muy seguido...- afirmó el chico
Sin embargo, el chico de ojos carmín no creía esto, sabía por la albina que ambos salieron. ¿Acaso ella mintió? ¿O ellos mintieron? De todas maneras, ¿Por qué carajos le importa?
— De todas formas, pasó algo por lo que Nahir se peleó con Kaminari-kun...- mencionó la azabache sin pensar, poniéndose colorada al instante.
— ¿Tú sabes algo, Yaomomo?-
— ¡Habla de una buena vez!- exigió Bakugō
La chica negó con la cabello, su cabello se movía de izquierda a derecha mientras seguía negando y en ese instante aparecieron dos albinos, Nahir y el tal Lysandro.
— ¡A-amiga, qué bueno que regresas!- dijo con nerviosismo Momo mientras tomaba a la ojiazul del brazo y salían corriendo; dejando a tres chicos confundidos y dos botecitos de helado.
—Qué porquería...-
—A mí no me engañas, yo sé que tú la quieres- bromeo el chico pasando su brazo por los hombros de su mejor amigo.
Eijiro esperaba palabras ofensivas pero al no escucharla miró a Katsuki, quien dirigió la mirada a otro lado, tratando de ocultar inútilmente sus mejillas color rosa.
— Es asco...- negó bajo la atenta y cálida sonrisa de su amigo.
— Lo que tú digas-
— ¡¿Y tú que mierda sabes?!-
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