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29

— Que no mujer... ¿Como van a servir hamburguesas en una ceremonia de compromiso? Es ridículo. — dijo  mientras revisaba la lista de pendientes.

— Sería rico, si no fuese porque es mí hija la que se casa, yo voy solo a comer. — le respondió Sungkyung a su esposa mientras conducía.

— Podríamos servir sopa — dijo Chaeyoung feliz.

Gayoung la miró.

— Dejá que yo me encargue del bufet hija. — respondió sonriente.

Sungkyung, Gayoung y Chaeyoung iban camino a la salida del hospital, Chaeyoung tenía revisión mensual, y por
supuesto sus madres la acompañaron.

Por mientras hablaban de la boda de su hija, hasta que vieron como de urgencias ingresaba una joven en camilla con varios médicos a su alrededor.

— Espera espera — le dijo Sungkyung a su esposa —. ¿Esa no es Jendeuk?

Sungkyung miró bien la situación, dando con que la joven en la camilla probablemente inconsciente, era Jennie.

Chaeyoung tapó su boca sorprendida queriendo seguir a los paramédicos.

Sin embargo, los doctores no se lo permitieron cuando ingresó a urgencias.

(...)

Lisa miraba el techo de su sala mientras pensaba en nada.

Había sido una idiota al dejar que Jennie se fuera, sin embargo reconocía que la omega necesitaba de su espacio.

Luego hablarian para evitar problemas y de fortalecer su relación.

Porque Lisa se negaba a rendirse con Jennie.

En eso su celular suena, atiende al instante al ver el numero de su madre.

— ¿Madre?

Lisa hija, debes venir al hospital central inmediatamente...

— ¿Por qué? ¿Qué pasó? ¿Están bien?

Nosotras si hija, es Jennie... La vimos ingresar a urgencias del hospital, había mucha sangre y ella estaba inconsciente...

— Voy enseguida.

Guardó el móvil nuevamente para colocarse rápidamente un abrigo sobre la blusa que llevaba, para tomar las llaves del coche y conducir rápidamente hasta el hospital.

Si algo le ocurría a Jennie, no se lo perdonaría en la vida.

(...)

Al llegar al hospital la recibió Chaeyoung un poco nerviosa.

— ¿Está todo bien? ¿Como se encuentra? — preguntó la alfa.

— No lo sé... Mamá es quien habló con el doctor

Lisa asintió pasando sus manos por su frente, para luego saludar a sus madres cuando estás se acercaron entre tristes y preocupadas.

— ¿Qué les dijeron? ¿Se encuentra bien? — preguntó el alfa inmediatamente.

— No saben lo que le paso, Jennie aún no despierta... — comenzo a explicar Gayoung —. El doctor tuvo que realizar una cirugía puesto que de su cabeza salía mucha sangre, dicen que probablemente cayó de un lugar alto por sus golpes externos, creemos que pudo haber sido... algo más

Lisa miró preocupada a sus madres

Gayoung y Sungkyung intercambiando una mirada, la alfa asintiendo a su esposa.

— El doctor también mencióno de hacerle algunos estudios extras... — le dijo Sungkyung.

Lisa la miró inquieta.

— ¿De qué? — preguntó ansiosa.

—  Jennie estaba en cinta, cariño... — dijo
Sungkyung

— ¿Estaba? — preguntó Lisa mirando a su madre.

— Perdió al cachorro... Era muy pequeño y no estaba casi desarrollado, no soportó el golpe... Lo sentimos...

Lisa quedó quieta y muda.

Su mundo se derrumbó en cuestión de segundos, la dejó en completa oscuridad.

No había un lazo físico que las unía, pero seguramente sí sentimental.

— Pueden pasar a verla. — dijo un doctor llegando a donde estaban la familia —. Aún duerme pero si lo desean pueden ingresar a verla.

Lisa se levantó de golpe para ir tras el doctor que le daba algunos consejos referente a la salud de la omega.

— Lamento informale de la pérdida del cachorro. — dijo el doctor —. Si no es mucha molestia me gustaría hacerle unas sugerencias para cuando pueda salir de aquí.

Lisa asintió ingresando al cuarto donde Jennie estaba conectada a varios cables mientras aún dormía.

Su rostro recuperando color con una marca rojiza en su mejilla derecha y unos hematomas al lado de los ojos.

Lisa se sentó al borde de la camilla mientras acariciaba el cabello castaño de su pareja, un sentimiento de culpa la invadió de golpe.

Al verla irse esa mañana de su casa, había notado la palidez con la que Jennie salió.

Si tan solo hubiese hablado con ella, sí la hubiese convencido de arreglar el asunto, nada de esto hubiera pasado.

— Bien. — dijo el doctor —. El reposo es primordial, nada de excesos físicos, su cuerpo esta debilitado por tanto esfuerzo físico. Es común un debilitamiento del sistema inmune, patologías cardiacas o problemas de articulaciones. Por eso es necesario el reposo. — dijo mirando el papel —. Si ella lo desea puede ver a un psicólogo por la perdida del cachorro, le haremos estudios para ver si aún puede concebir.

Lisa asintió a todo mientras se acercaba a la cama de su omega.

— Como recomendación... Deberían encontrar a quien hizo esto, puede ser peligroso para la gente. — Dicho aquello el doctor salió de la habitación.

Jennie abrió los ojos despacio viendo el techo blanco de una habitación con olor a desinfectante.

Sintió mimos en su mejilla, para luego notar la presencia de Lisa junto a ella.

No obstante sus pensamientos se enfocaron en todo lo sucedido antes.

Por ello se sentó sobresaltada en la camilla.

— Sh sh... No hagas esfuerzos bruscos. — le dijo Lisa tratando de que no se levantara.

—  Las tarjetas, bloquealas, no dejes que saquen dinero, por favor Lisa...

Lisa la miró no entendiendo de que hablaba.

— ¿Qué?

—  Mi madre y Irene tienen acceso a la tarjeta imantada que me diste, no se como pero sacan dinero de allí para ellas... Por favor no dejes que lo sigan haciendo, no se lo merecen.

Lisa asintió sacando su celular, dirigiéndose a la aplicación del banco y bloqueando momentáneamente el acceso de ambas tarjetas que le dió a Jennie.

— Listo. — dijo la alfa guardando el móvil nuevamente.

Jennie suspiró para luego relajarse en la camilla.

— ¿Qué sucedió? — preguntó referente a en donde se encontraba.

— ¿Recuerdas algo? —dijo acariciando la mejilla ajena.

— Discutí con mamá y Irene, descubrí que sacaban dinero de la tarjeta imantada y que compraban por internet sin consultarme o siquiera avisarme... Me moleste y les grité... Mamá me hecho de casa.

— Te golpeó — dijo haciendo referencia al golpe.

Jennie asintió apenada, recordando de golpe algo importante.

— ¡Fefi! Tengo que sacarlo de casa... —dijo intentando levantarse.

No obstante, Lisa la obligó nuevamente a acostarse.

—  Tienes que quedarte allí hasta que el doctor lo diga. Y lo siento si sueno como una completa idiota, pero lamentablemente no puedes sacarlo de esa casa... Allí esta con su madre y ni la justicia puede entrometerse...

Jennie quería llorar, su pobre bebé de seguro estaba asustado y solo...

— Necesito decirte algo. — dijo Lisa tratando de cambiar el tema sin llorar.

Jennie asintió mirándola.

— Estabas en cinta, cariño...

Jennie la miró preocupada.

— ¿Estaba?

Lisa acarició la mano de la menor suspirando.

— Lo siento... — dijo mirándola a los ojos —. Era muy pequeño, no soportó el golpe...

— Oh... — dijo mirando por la ventana mientras limpiaba las lágrimas que caían.

El silencio reinó en la habitación.

(...)

Después de un rato Lisa logró hacer que la omega hablara con ella.

La pareja estaba conversando tranquilamente cuando que las madres de Lisa ingresaron a la sala, Jennie solo las observó.

— ¿Cómo te sientes? — preguntó Gayoung.

— Fatal. — dijo lentamente.

— Lamentamos su pérdida... — dijo Sungkyung.

Jennie asintió, Lisa no dijo nada.

Más tarde ingresó el doctor junto a unas enfermeras.

— Bien, es un gusto poder verla joven Kim — habló el doctor —. El suero ya hizo su trabajo y le daremos el alta luego de esta conversación... No obstante quería pedirles disculpas por las malas noticias.

La pareja y el matrimonio se tensaron.

— Mm... La joven Jennie es infértil.

El cuarto se quedó en silencio por un rato, hasta que el matrimonio salió junto al doctor del lugar para dejar a la pareja solos.

Lisa miró a Jennid preocupada al verla soltar pequeñas lágrimas.

Jennie se sentía como la mierda.

— Es... Es muy pronto aún para pensar en cachorros... — dijo Lisa dando mimos a la castaña para calmarla.

Se sentia triste sí, pero las cosas eran así después de todo.

— Lo siento... — dijo Jennie —. Y-yo...

— Sh... No pasa nada, no es tu culpa, Tú no eres la mala, amor... Tenemos más opciones para tener hijos, podemos alquilar un vientre, podemos A-adoptar.

Sin darse cuenta Lisa también comenzó a
llorar.

Por supuesto que le dolía enterarse de que no podía tener hijos con la omega a la que amaba, era humano y le dolía mucho.

(...)

Media hora después, Jennie estaba saliendo del hospital con Lisa rodeándole la cintura.

La alfa conversaba con sus madres y hermana, quien por supuesto ya sabían de la noticia.

— Gracias por todo — repitió Jennie cuando estaban despidiéndose. —. Y nuevamente disculpen las molestias ocasionadas.

— No es ninguna molestia, eres parte de la familia Manoban... — le dijo Gayoung sonriendo.

Luego de aquello el matrimonio se subió al auto en espera de Chaeyoung quien se acerco a Jennie.

— Mí boda sera este fin de semana, estás obviamente invitada y espero poder verte allí... — le dijo sonriente.

Jennie asintió agradeciéndole.

Una vez que las tres mujeres se fueron, la pareja se quedo quieta, para luego cruzar miradas.

— ¿Vamos a casa? — preguntó la alfa con una pequeña sonrisa.

Jennie se le quedó viendo pensativa.

Sin embargo ambas subieron al coche de la alfa para conducir hasta la gran casa.

Al llegar, Lisa abrió el garaje con el botón, para meter el coche y volver a cerrarlo.

Y antes de que saliera del coche, Jennie la detuvo tomando las mangas de el abrigo que la alfa llevaba.

— ¿Pasa algo? — preguntó la alfa volviendo a acomodarse en el asiento.

— No estás obligada a quedarte conmigo — dijo simple —. No voy a atarte a mi, maté a quien sería nuestro hijo y no puedo darte más. Lo siento...

— Jennie. — regañó Lisa —. No fue tu culpa, ¿lo entiendes? Tenemos que superar esto, juntas.

Jennie asintió limpiando sus lágrimas.

— Haremos exámenes en la clínica de la familia para evitar confusiones. Aún así quiero asegurarme de que puedas engendrar, y si no puedes hacerlo no hay problema, buscaremos alternativas... ¿Si?

Jennie se abrazó hacia la alfa fuertemente para comenzar a pedirle disculpas por todo.

Lisa de igual forma le pidió disculpas por
sus acciones.

Para luego, aún con la omega sobre su regazo, comenzar a conversar un rato.

— Joy quiere hacer negocios conmigo, es por eso que nos reuniríamos...

Jennie la miró

— Lamento no habértelo dicho... No quería que pensaras otra cosa.

— Tenemos que trabajar en eso de la confianza.

Lisa asintió para luego volver a quedarse en silencio.

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