24
Semanas después
Las tardes para Jennie se basaban básicamente en caminar por las calles de Seúl hasta llegar a la empresa de Lisa luego de sus clases en la universidad.
Había veces en las que volvía a su casa o paseaba con Rosé por ahí, otra veces compraba mercadería o cosas para ella y su familia.
No obstante, hoy iba directo a la empresa.
Lisa le había dicho que necesitaba hablar con ella urgentemente luego de sus clases.
Jennie accedió y cuando acabó, caminó
tranquilamente hasta llegar al gran edificio.
(...)
Una vez que llegó, ingresó saludando a las personas que la saludaban con una reverencia al reconocerla como la pareja de la jefa.
Luego fue directo al ascensor donde subió hasta el ultimo piso, para salir del cubículo y caminar hasta Sohyun, quien revisaba carpetas en su escritorio.
— Hola — saludó a la omega.
Sohyun la miró, sonrió y la saludo contenta.
— Pasa si quieres — le dijo igual de tímida que siempre.
Jennie sonrió e ingresó a la oficina sin tocar como era ya su costumbre.
Al ingresar vió a Lisa sentada en su escritorio como era costumbre, mientras miraba al techo.
— ¿Aburrida? — preguntó Jennie acercándose a la alfa.
Lisa se enderezó en su asiento para sonreírle a la omega.
— Algo... Estos días son bastantes aburridos.
Jennie se sentó en el regazo de la mayor para besar sus labios repetidas veces.
— ¿Qué es eso tan urgente que me tienes que decir?
— Oh cierto... Son tres cosas en realidad...
Jennie se levantó del regazo para apoyarse en el escrito mirando de frente a la alfa.
— Dime.
— No es nada grave. — la tranquilizó —. Bueno... Depende de como te lo tomes.
— Mm... Okey...
— Primero, finalmente sacaremos la nueva temporada, tenemos un par de eventos que son bastante agobiantes pero que son lindos de presenciar al mismo tiempo... Mm, Chaeryeong asiste a la pasarela, Seungmin al museo de la moda y ésta temporada mis madres me dijeron que me toca hablar con la prensa sobre esas cosas... Todo esto es mañana.
Jennie la miró con confusión en el rostro, para luego sonreírle levemente.
— Al punto... La prensa cuando ya no tiene preguntas relacionadas al trabajo, normalmente preguntan sobre la vida privada de nosotras, lo que quiero saber es sí tú estas de acuerdo con que, sí preguntan, te nombre cómo mí pareja oficial o prefieres mantener el anonimato.
Jennie lo pensó.
Su hermana cada año veía la pasársela televisada que cubría varios canales.
Si Lisa llegase a mostrarla como su pareja oficial delante de las cámaras, su familia por obviedad se enteraría.
— Mm... Yo... — se rasca la nuca nerviosa —. ¿Qué opinas tú?
— Personalmente me gustaría poder presentarte oficialmente delante de las cámaras, pero por supuesto tú decides.
Jennie se quedó en silencio unos minutos para luego mirar a la alfa quién la veía fijamente.
Lisa pensaba que Jennie se negaría y que su relación terminaría en ese instante.
Más sin embargo, la respuesta la sorprendió.
— Bien... Si llegan a preguntar puedes decirlo. Yo voy a hablar con mí madre para que no se lleve ningúna sorpresa.
Lisa se enderezó en el asiento para tomar la cintura de la omega y besarla mientras la subía nuevamente a su regazo.
La alfa no era una idol por lo que no tenía que ocultar su relación por miedo a sus fans, sin embargó era una figura conocida y las apariencias eran muy importantes.
— Me alegro... Ahora las demás noticias... — dijo la alfa con la menor sobre su regazo —. Segundo, tengo un regalo para ti. — saca de uno de los cajones un sobre bien decorado.
Jennie al ver el sobre agradeció y lo abrió
Dentro había una tarjeta, conocida como "BlackCard" con el nombre de Jennie escrito con letras doradas.
— Está activa desde hace días, me olvidaba de dártela, puedes usarla cuando quieras, por quincena se carga quinientos mil dolares, eso sí, solo tú puedes usarla, nadie más.
Jennie la miró con los ojos y boca abiertos al oír el monto.
— ¿¡medio millón!? Lalisa, ¡por mes es en un millón de dólares!
Lisa la miraba desinteresada.
— Jennie, está empresa genera ingresos de ciento cincuenta millones por mes tan sólo en Corea, en otros países tenemos más de doscientas sucursales que superan la cifra que te di recién — le explica mostrándole las carpetas con aquella información —. Como puedes suponer, la cantidad en tu tarjeta es casi diminuta en comparación.
— Pero Lisa...
— Quedamos en nada de negación, disfruta del dinero Jennie, eso significa ser mí pareja, ir vestida con ropas lujosas, andar en coches caros, etc.
Jennie asintió guardando la tarjeta en su billetera para extenderle la otra tarjeta que Lisa le había dado en Jeju.
— Quedatela.
Jennie suspiró y guardó nuevamente la tarjeta en su billetera para seguidamente meterla en el bolsito que siempre cargaba consigo.
— Tercero. — habló la alfa obteniendo la atención del omega. — Mí celo está próximo a llegar, haciendo cálculos, será en dos o tres días, ¿vas a pasarlo conmigo? Insisto en que aceptaré completamente tu decisión.
Jennie mordía su dedo mientras pensaba en una respuesta.
Pasar un celo con Lisa conllevaría a crear un primer lazo entre ellas.
Bueno, no es como que fuera algo malo.
— Oh... Esta bien, supongo... No debe de ser tan diferente a lo que normalmente hacemos.
Si Lisa de por sí era insaciable si de sexo hablamos, en celo es muy probable que Jennie acabe con más de un dolor.
Lisa soltó el aire retenido y sonrió a la omega.
— Bien, excelente, me alegra oír eso.
Jennie sonrió besando los labios de la alfa.
— Te amo. — le dijo sonriendo la omega.
— Yo igual te amo Jennie.
Ambas se besaron nuevamente.
Un poco más tarde Jennie se encontraba caminando hasta su casa.
Lisa se ofreció a llevarla, pero la menor se negó diciendo que tenia ganas de caminar.
Jennie compró unas cosas para su familia y finalmente se dirigió a su hogar.
Al llegar entró en silencio encontrando a su madre y hermana sentadas en la cocina, como... Esperándola.
— ¿Pasó algo? — preguntó Jennie
— Jendeuk... — le sonrió su madre. — Ven, conversemos un poco.
Jennie asintió sentándose en una silla libre, Irene le extendió una revista de inmobiliaria.
— Estábamos pensando, en que es momento de mudarnos... La casa ya está quedando un poco chica y lo que ganas alcanzaría para comprar una casa propia... — le dijo su madre. — Como aún eres muy joven, tendrías que ponerla a mí nombre Que dices?
Jennie estaba pensando seriamente en la propuesta.
Bueno, con la suma de dinero dada podría darse el lujo de comprar una casa propia.
Pero... Se mudó recientemente a ese departamento y sinceramente le gustaba mucho.
¿Pero ponerla a nombre de su madre? No es que desconfiara de ella, pero no creía conveniente ponerla a nombre suyo.
— Mm... Supongo que esta bien — vió a su hermana y madre sonreír felices. — Pero... No será tu nombre el que lleve.
Su madre deformó su rostro a uno enojado.
— ¿Es qué acaso no confías en mi? Eres una desagradecida... Deb-
— Madre no es por eso... Para comprar una casa se necesitan documentos, uno de ellos es un titular legal, quién por obviedad es quién paga la casa... Todos los documentos llevaran mí nombre o el nombre de mí novia quién también es quién me paga.
Jennie lo soltó de golpe viendo como los rostros de su madre y hermana la veían confundidos.
— Ese... Es otro tema que quiero decirles. — sonríe felizmente —. Tengo pareja formal desde hace ya dos meses, pero estuve saliendo informalmente con ella por más de seis meses... — suspira. — Tengo que pedirles disculpas referente a ello, te mentí madre cuando te conté lo de los trabajos... Es algo un poco complicado...
— Eres su zorra de turno ¿verdad? Que bajo caíste... — dijo levantándose con ayuda de Irene —. Me lo esperaba para ser sinceras, es lo único que alguien como tú puede lograr, abrirse se piernas y dejarse dominar por una alfa — continuó mientras negaba. — Pero eso sí Jennie, no pienses que eres digna de tener una familia con alguien así, déjale ese lugar a tu hermana que es una señorita con todas las letras. Esa alfa te quiere solo para fornicar, si revisas su móvil puedo asegurarte que encontraras solo a mujeres bellas allí. Y no te olvides de arreglar lo de la casa, estará a mí nombre, fin de la discusión.
En cuanto las omegas salieron de su rango de visión Jennie solamente se quedó sentada en su sitio mirando a la nada mientras soltaba inconscientemente feromonas de tristeza.
— Jen... No llores... — le dijo Felix acercándose a ella con un juguete.
— Hola pequeño — sonrió quitando las lágrimas para cargar al pequeño colocándolo en su regazo — . Toma, te compré unas cosas
Felix sonrió y agradeció revisando la ropa y zapatos que Jennie le había comprado al menor.
Con Lisa, habían quedado en que los aparatos electrónicos que le habían regalado al menor en su cumpleaños, se quedarían en casa de la alfa, mientras que los juguetes y un poco de la ropa estaría en la casa de la menor.
Para evitar conflictos y demás.
— ¿Cuándo vamos a ir a ver a mamá Lis? — preguntó el menor al darse cuenta de la tristeza que tenia Jennie.
¿Mamá Lis?
pensó la omega mientras jugaba con el menor.
Es la primera vez que le decía así, antes le decía Lisa o Lalisa cuando la mencionaba.
— No lo sé pequeño... En un par de días quizás...
Bueno... Más tarde podrá decirle que Lisa no es su otra mamá.
19:23 pm
Jennie estaba en la terraza del edificio en donde vivía.
Era una noche calurosa.
Aunque no sabia si era por el comienzo de la primavera o por la candente conversación que tenia por chat con su novia.
Era algo nuevo, pero no le molestaba, era lindo.
Aunque ahora la calentura les ganaba y las ansias de verse aumentaban cada segundo.
Lili
Ven a mi casa.
19:34pm
Te enviare un coche en dos minutos,
trae algo ligero y fácil de quitar.
19:34 pm
Apenas llegues voy a joderte
fuerte y duro, como a ti te gusta.
19:34 pm
Lili... Es una propuesta tan
indecente. No sé si sea algo bueno...
1
9:35 pm
Si amor, es muy bueno...
19:35 pm
La pasaremos bien, no
haré nada que no te guste.
19:35 pm
Voy en camino.
19:35 pm
–
Con radiante felicidad fue hasta su departamento donde se dió una ducha rápida para vestirse con algo ligero, agarró su móvil y cargador, saliendo del dormitorio hasta la cocina donde esperaba pacientemente a que el coche estuviera fuera.
Minutos más tarde cuando recibió la notificación de que el coche estaba afuera, tomó su móvil y su juego de llaves para salir del departamento.
No obstante, Felix se abrazó fuertemente a la pierna de Jennie, evitando de esa forma que la omega saliera.
— No te vayas por favor... — le dijo con lágrimas. Jennie se arrodilló para abrazar al menor. Había prometido no dejarlo.
Tomó su movil sin despegarse del abrazó, para enviarle un mensaje a Lisa.
Se sentía cómo una corta pasión.
Lili
El coche dice que no sales...
¿Todo en orden?
20:00 pm
No creo poder ir... Lo siento, Felix no
quiere que lo deje solo y yo prometí
no volver a irme sin él.
20:01
Perdón.
20:01
Tráelo.
20:01 pm
Le pediré a una de las empleadas que lo cuide mientras nosotras...
Ya sabes...
20:02 pm
Lisa...
No se si sea una buena idea.
20:02 pm
Lo será, Lix aquí tiene muchas cosas para divertirse...
20:02 pm
Ven con él.
20:03 pm
Mm...
Si él quiere esta bien
20:03 pm
— ¿Quieres ir a ver a Mamá Lis?
Felix se separó para mirarla sonriente mientras aun lágrimas caían de sus ojitos.
— Si... Por favor
Fue así como ambos salieron del departamento con una sonrisa para subir al coche y dirigirse a dónde Lisa los esperaba.
LISA POV
Leí el mensaje que Jennie me había enviado diciendo que no podría venir.
Nos veíamos con frecuencia, pero la necesidad sexual estaba desbordando de mí al estar mi celo pronto a llegar.
Por eso salí del dormitorio para ir hasta la planta baja donde las empleadas se preparaban para irse.
Había acortado su horario laboral, ahora trabajaban desde las nueve de la mañana hasta las ocho de la noche.
— ¡Esperen! YeJi, Jungwon y Hani necesito que se queden por favor.
Los tres nombrados se miraron entre ellos para luego asentir y acercarse a mi.
— ¿Necesita algo señora Manoban? — preguntó Hani.
Ellos tres son los empleados más jóvenes que tengo, Jungwon tiene quince mientras que Yeji y Hani tienen diecisiete.
— Necesitó que se queden por más o menos dos horas más... Vendrá Jennie con su sobrino y necesito que lo entretengan en lo que Jennie y yo... Tenemos una reunión importante...
Los tres asintieron como soldados.
— Quiero que lo mantengan lejos de mi dormitorio para que no escuche... La reunión... Luego Jennie y yo nos encargaremos de él. — les dije —. Si Jennie viene díganle que vaya directamente a mi dormitorio.
— Si señora. — dijo YeJi.
Asentí para luego subir hasta mi cuarto donde pensaba en como esperar a Jennie.
Podría esperarla totalmente desnuda con solo la sabana tapando mi miembro.
Suena bien, pero corro el riesgo de que Felix suba con Jennie.
También podría esperarla en alguna pose sexy para ir calentando el ambiente... Pero nuevamente me golpea el pensamiento de que el niño podría ver algo extraño.
Sera a la vieja escuela entonces.
Jennie llegó a casa de la alfa cerca de cinco minutos después de haber salido de su casa.
Al llegar tres empleados de Lisa los recibieron con una sonrisa.
— La Sra.Manoban la espera en su dormitorio. — dijo YeJi.
— Nosotros nos ocupamos de este pequeño. — continuó Hani tomando en brazos a un sonriente Felix.
Jennie asintió para luego de ver que el pequeño estuviera cómodo, subir las escaleras rumbo al cuarto de la alfa.
Ingresó sin tocar encontrando a Lisa apoyada en el tocador, con su camisa desprendida.
La omega mordió sus labios para terminar de ingresar al dormitorio cerrando la puerta con pestillo.
Lisa se acercó a ella mientras revolvía su cabello con su mano.
— Luces hermosa. — dijo la alfa acorralando a la omega contra la puerta.
Jennie pasó sus manos por el torso marcado de la alfa, subiendo hasta su cuello donde terminó de quitar la camisa.
Luego, poniendose de puntitas, besó los labios ajenos con fervor y necesidad.
Sin decir palabras, sus cuerpos comentaban cuanto se habían extrañado.
La alfa tomó fuertemente la cintura de la omega para ir bajando lentamente hasta lograr que la menor diera un salto enroscando así sus piernas en el torso de la mayor.
Mientras continuaban besándose, la alfa llevaba a la omega hasta la gran cama, donde la dejó tendida.
Se quitó los pantalones quedando solo en bóxer, viendo cómo Jennie quitaba lenta y muy sensualmente su ropa.
— Será sin preparación, ese será tu primer castigo, ¿sabes por qué? — Jennie negó sonriendo —. Porque me apetece.
Jennie hizo un pequeño puchero.
— Eres mala Lili...
La alfa quitó su bóxer para gatear en la cama colocándose entre las piernas abiertas de la menor, corrió apenas las bragas negras para luego alinear su miembro y comenzar a ingresar.
— Lili... Más ― rogó la omega.
Hazme olvidar...
Sacame de esta realidad
pensó.
— Silencio.
Lisa ingresó de golpe provocando que la omega hiciera su cabeza para atrás curvando la espalda mientras gemía bajo.
— ¿Te gusta verdad? Eres una pequeña zorra a la que le gusta que le den duro. — habló en el oído de la omega mientras la embestía rudamente.
Salvame
Jennie estaba en el cielo con cada embestida, Lisa sabía complacerla completamente.
En algún punto de la acción, la alfa salió de su interior para voltear el cuerpo de la omega, para quitar completamente las bragas y seguidamente volver a ingresar de golpe.
Jennie mordía fuertemente la almohada mientras sus puños se cerraban contra las blancas sabanas.
La silenciosa regla era sencilla.
Si querían continuar un rato más sin interrupciones, debían ser completamente silenciosas.
Hora y media después la pareja salía de la ducha listas para vestirse.
Habían disfrutado su momento en la cama para luego continuar en las duchas por casi treinta minutos más.
Luego de ambas vestirse, bajaron a la sala donde los tres empleados y Felix jugaban con autos de juguetes y demás.
Jennie le hizo a Lisa una seña de silencio, para luego llevarla a la cocina donde fue acorralada por la alfa y seguidamente besada por la mismo.
— Prepararé algo para comer... ¿Que dices? — propuso la omega mirando a la alfa.
— Claro. — dijo para besar el cuello de la omega.
Jennie rió para separarse de la alfa y buscar ingredientes para cenar.
Un poco más tarde, Lisa, Felix, Jungwon, YeJi, Hani y por supuesto Jennie, se encontraban comiendo ramen y gimbap preparado por Jennie al ser lo único que la alfa tenia en la cocina.
Debía ir de compras urgentemente.
Al acabar de comer, los tres empleados se fueron a sus casas agradeciendo la comida, mientras que Jennie se encargaba de limpiar el lugar.
Lisa por su lado jugaba con Felix en los sofás de la sala.
(...)
Cuando Jennie acabó, los tres fueron a la sala cine donde colocaron una película infantil para ver mientras Felix jugaba con unos cochecitos.
— Mamá ― llamó el menor a Jennie quien mimaba a la alfa con masajes.
— ¿Mm? — contestó mirándole.
— ¿Dulces? Por favor...
Jennie rió entendiendo que el menor quería postre.
— Mm... No lo se... Dejame pensarlo
— Mamá Lis, quiero dulces... — dijo llamando la atención de la alfa.
— Jennie amor... El cachorro quiere dulces... ― le dijo perdida en la sensación reconfortante de los masajes.
— ¿Mm? ¿Y tú como su mamá lo vas a consentir? — preguntó besando su nuca.
— Por supuesto... — respondió abriendo un solo ojo.
— ¿Qué clase de postre quieres?
— Mm... Podríamos comer tostadas japonesas, a mí me encanta y sé que a Felix y a ti, les encantará.
— ¿Tostadas japonesas? — preguntó Jennie confundida.
Jamás había escuchado de tal cosa.
— Sí, es un trozo rectangular de bizcochuelo relleno con nata, helado, chocolates y lo que gustes...
Ugh... Sonaba rico.
— Suena bien.
Lisa tomó el móvil de Jennie para buscar en la aplicación el nombre de un restaurante japones donde sabía que vendían aquel postre.
Al encontrarlo, buscó el producto y pidió tres.
— Yo pediré chocolate. ¿Tú y Felix?
— A Jae pídele de fresa y a mí de frutas.
Lisa asintió para pedir el postre, dar la dirección exacta, pagar y esperar a la confirmación de la compra. Cuando le llegó la notificación de que su pedido estaba en camino se recostó nuevamente con Jennie viendo la película junto al pequeño niño.
Minutos después había llegado el repartidor con una caja bastante grande con el logo del restaurante.
Lisa fue quien recibió el pedido dándole un propina al repartidor por su trabajo, para luego ir nuevamente a la sala cine donde Jennie jugaba con Felix.
— Llegaron los dulces.
Felix sonrió grande para ir directamente a donde Lisa le extendía uno de los postres junto a una cuchara. El menor agradeció mirando sorprendido el trozo de pan lleno de dulces.
Luego, la alfa fue directo a Jennie extendiéndole otro de los postres junto a una cuchara, sentándose a su lado para comer mirando la película.
oye bro,,, creo que tu smut en este cap es cogida triste y el horno se va a poner sad
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