— Aún no entiendo porque dices que fue un sueño amor, pero si eso te hace feliz...

JiMin salió de su ensoñación al momento de escuchar eso....

¡JODIDA MIERDA!

JiMin aun no entendía en que momento su vida se había salido tanto de eje...

Nunca se había quedado tan así sin palabras como luego de ese momento, por lo que simplemente se levantó de donde estaba, tomo sus ropas rápidamente y salió como alma que lleva el diablo del lugar, dejando a un YoonGi completamente atontado y lleno de preguntas.

Por supuesto que el rubio trató de seguirle el paso, pero fue demasiado tarde, JiMin prácticamente se había abalanzado sobre un taxi que pasaba por allí, dejando a Suga realmente frustrado.

"¿Pero qué carajos había hecho mal?"

Y la verdad era que...

Nada, no había hecho absolutamente nada.

El día de la boda había llegado, por fin el tan ansiado día para Tae y Hobi.

La boda se realizaría en una modesta capilla de la zona, para luego retirarse a donde sería una pequeña reunión con la familia y amigos más íntimos de la pareja, ya que los novios tenían su viaje de luna de miel directamente al salir. 
Era 14 de febrero, alías "San Valentín", día en que la pareja se había comprometido un año atrás.

JiMin no pudo evitar morder su labio en respuesta, secretamente ansiaba algo así todo clisé y demás, pero parecía que esto del amor no era para él, y sin querer, su mente volvió a cierto rubio que estaba seguro que no podría evitar ver hoy, es decir, ambos eran los padrinos de los novios, y mínimo para la foto tenían que estar todos juntos.

Esto le removió todo, sintió sus mejillas arder y cierta zona de su cuerpo alegrarse bastante con aquello...

Todavía no podía olvidar el haberse acostado con Suga, es decir...

¡Prácticamente se le había ofrecido en bandeja como una zorra!

Y no es que no lo hubiera disfrutado,

¡Había sido la mejor noche de su puta vida!

¿Y qué había hecho JiMin? 

Salir corriendo del lugar como el cobarde que era...

Sabía que Suga le había seguido, lo había visto y no le importó...

Sabía que Suga le había estado llamando los días siguientes, había visto los mensajes del rubio y...nuevamente ¿Qué hizo él?

Nada...

Seguramente el rubio se había cansado y no quería verle ni en figuritas, con total razón, si a JiMin le hicieran algo así, en su vida volvería a insistirle...

El pelirrosa suspiró, preocuparse por eso ahora era en vano, hoy era el día de su mejor amigo así que debía de dejar esos temas de lado, y hablando de su amigo, éste entro estruendosamente al lugar, sacándolo de su ensoñación.

— M- Mochi...MAYDAY MOCHI MAYDAY. — Tae lucia demasiado desesperado —MOCHIIIII VOY A MORIR.

¿Acaso estaba hiper ventilando?,

¿No se suponía que casarse hacía feliz a la gente?

JiMin no entendía nada. 

—¡¿Qué sucede Tae?! ¿Es por la recepción?, ¿El traje?, no me digas que estás dudando de casarte porqu—

— EL ANILLO MOCHI, EL ANILLO.

— ¿Qué anillo Tae? Sí, mirá, aquí los tengo, no te preocupes.

JiMin sacó una pequeña caja de terciopelo rojo de su bolsillo y se la mostró a su amigo, allí se encontraban dos alianzas perfectamente grabadas con los nombres de los futuros novios.

— ¡JODER, NO! ESOS NO, "EL ANILLO" .

JiMin le miró raro, no terminando de comprender a qué se refería Tae ahora, su amigo tenía cada ocurrencia últimamente...

Tae volvió a hiperventilar y con mucho esfuerzo logro gritar.

— ¡EL DE COMPROMISO JIMIN!

Una perfecta "O" se formó en los labios del pelirosa al escuchar esto.

—¡¿Ahora entiendes?! ¡Mi boda esta arruinada! — Tae rompió en llanto.

— T-tranquilo Tae, seguro tiene solución...mira... ¿Quién le da importancia a esas cosas hoy en día?

Tae dejó de llorar por un segundo.

— ¡HOSEOOOOOOK, ÉL, ÉL NO QUERRÁ, MI VIDA ESTA ARRUINADA MOCHI!

De nuevo regreso el llanto escandaloso.

Faltaban exactamente 3 horas para que la boda se llevará a cabo y sinceramente esto distaba mucho de lo que JiMin había esperado que sucediera.

En medio de tanto alboroto, un Jin bastante preocupado se asomó por la puerta.

— ¿Pero que demonios les sucede a ustedes dos? ¿Porque tanto escándalo? —

— Bueno... Resulta que... Tae no encuentra su anillo de compromiso ejem...— El pelirrosa rascó su nuca con nerviosismo.

Jin les miró a ambos bastante extrañados hasta que entendió del todo la situación, luego suspiró sonoramente.

— Tae, —le llamó la atención — ¡Ya Tae! Que llorando no lograrás nada... A ver... ¿Tienes alguna idea de dónde podría estar?

Jin debía de ayudarles de alguna manera, no podía evitar ponerse en rol de mamá gallina, y ver a su amigo así realmente le afectaba.

Tae logró calmarse por un momento, sorbió sus mocos y se limpió el resto con su manga, JiMin pensó que gracias a los cielos que su amigo todavía no se había cambiado porque eso realmente fue asqueroso.

— No lo recuerdo...

—¡¿Cómo que no lo recuerdas Tae?!

Una vena se formó en la frente de Jin, su amigo no podía ser más despistado, perdería su cabeza de no ser que la tenía pegada al cuerpo.

— De verdad chicos... No puedo recordarlo.

—Haz el intento por favor... pensemos... ¿Cuándo notaste que te faltaba? — Jin se estaba desesperando.

— Bueno...

Tae se quedó muy pensativo, eso realmente no ayudaba a calmar a sus amigos.

Jin estuvo a punto de sacudir a su amigo de no ser que JiMin se interpuso, el novio no podía llegar todo magullado, ¿Verdad?.

— Amigos, tranquilos. Pelear entre nosotros no hará que aparezca, además...

— CREO SABER DÓNDE QUEDÓ EL MALDITO.

TaeHyung se levantó triunfal de dónde estaba.

— ¿Cómo que crees TaeHyung? ¡Necesitamos certezas niño! ¡Tu boda es en menos de 2 horas! Creo, creo que me agarra la arritmia. Ya no estoy para estos disgustos...

Jin se sentó en un banco que había por allí y comenzó a auto abanicarse teatralmente.

JiMin en estos momentos realmente se preguntaba porque era amigo de ese par.

— Ya, largalo Tae, ¿Dónde puede estar ese anillo?

— Enelboxerdelstreaper ejem.

— ¿Cómo? Qué no se te entiende nada, ¡Modula Tae! — Jin seguía abanicandose...

— En..el... bóxerdeltiobuenorro.

Ante esto Jin se levantó como tiro del asiento y tomó a Tae para definitivamente sacudirlo.

— ¡¿ACASO ESTÁS DE COÑA TAEHYUNG?! ¡¿QUÉ NO HAS APRENDIDO NADA DE MI EN TODOS ÉSTOS AÑOS?!

— H- Hyung espera, no le hagas eso que le dejará marca. —

JiMin trataba sin éxito de separar a sus amigos.

— ¡PUES QUE SE LA AGUANTE! AÑOS REPITIENDO LOS 3 MANDAMIENTOS Y MIRA, MIRA LO QUE SUCEDE.

Jin era muy claro con sus enseñanzas, solo tenía 3 mandamientos que enseñaba a rajatabla...

— ¡Dilos, repitelos TaeHyung! Quizás así te salgas desgraciado.

El pelirosa podía ver cómo unas x se formaban en los ojos de su amigo, sabía que Tae se lo merecía pero no podía evitar sentir lastima por el.

— L-lo que s- se monta no se p-resta.

— Ajam.

— No orgías.

— Continúa.

—C-comer c-callado y- y luego t-tirar el papel.

— Bien, exelente.

Jin dejo de zamarrear a Tae, le tomo de los hombros y hasta le aliso la ropa.

—Ahora dime Tae, si los recordabas, ¡¿En qué maldita parte de "comer callado y tirar el papel" entra el " OLVIDARTE TU PUTO ANILLO DE COMPROMISO EN EL BOXER DE UN STRIPPER?! ¿ACASO ERES IMBÉCIL?

El mayor volvió a zamarrearle aún con más ganas, JiMin tardó unos segundos en reaccionar a y definitivamente separar a sus amigos.

— ¡Ya, ustedes! Jin hyung, Tae claramente es pendejo pero somos sus amigos y vamos a ayudarle, para eso estamos. Necesitamos organizarnos. Yo me ocuparé de todo este tema y ustedes seguirán como si nada, prometo traer ese otro anillo, ¿De acuerdo?

TaeHyung se abalanzó sobre JiMin

— Mochi, eres increíble. Mírate no más, eres mi propio Frodo, ¡Por eso es que eres el mejor de todos!

— Ya Tae, que me llenas de mocos, cochino.

Suga se encontraba decidido a hablar con JiMin, es decir, eran gente adulta que había compartido un gran momento, el mejor de su vida si le preguntaban a él, pero si el menor no se encontraba a gusto, ni modo...

Seguiría adelante...

No era como si eso hiciera que un dolor se instalará en su pecho, no, claro que no.

Tampoco era que se hubiera imaginado la trilogía del Señor de los anillos con el pelirosa y que quizás, no alcanzara ni para el tráiler.

En fin, era inevitable para ambos el cruzarse hoy, eran los respectivos padrinos de la boda, y en definitiva había detalles para arreglar, por eso era que Suga se encontraba en dónde Tae se estaría preparando.

Hobi ya estaba listo de hace rato, incluso dudaba que su amigo hubiera dormido de lo feliz que se encontraba.

Pero Tae, Tae era otro tema.

El caos y la desorganización le rodeaban, así que Hoseok le había prácticamente rogado que fuera a ver si su pareja necesitaba algo, y Suga no iba a desaprovechar la oportunidad de encontrarse con su Minnie.

Grande fue su sorpresa cuando lo vio salir prácticamente corriendo del lugar, parecia correr de el se le estaba haciendo una costumbre...

Rápidamente le siguió hasta el estacionamiento.

— Demonios, ¿Dónde dejé las malditas llaves?

JiMin se encontraba muy nervioso, el tiempo corría y además Tae no estaba al %100 seguro de dónde podría estar el anillo y la otra, que si se lo devolverían o no, rogaba que la boda no terminará en desastre.

— Si quieres puedo llevarte.

Esa voz...

Esa voz tan ronca y profunda hizo que se le erizará toda la piel.

YoonGi...

Parecía que todos sus intentos de evitarlo habían caído, sus piernas estaban de gelatina...

Humedeció sus labios, cuando se le había acercado tanto.

¿Cómo era que se hacía para hablar?

— Y-YoonGi... ¿Qué- qué haces aquí?

JiMin luchó para no comenzar a hiperventilar, el rubio llevaba unos jeans rasgados, una remera gris y un gorro que le daban un toque tan...

"Méteme en el auto y follame duro por favor... Ah y gracias".

YoonGi se encogió de hombros.

— Hobi me mando por si Tae necesitaba algo.

Santa Mierda...tanto le conocía Hobi cómo para intuir que su amigo la podía cagar...

JiMin comenzó a reír nervioso.

— ¿Qué cosas dices? Meh, no no... aquí está todo perfecto. Tae está casi listo no te preocupes, puedes ir yendo. Muchas gracias por todo, se aprecia la intención.

Suga le miró curioso, sabía que JiMin le mentía, eso se olía a leguas.

El rubio fue acercándose cada vez más a JiMin, tanto que pudo ver cómo éste se sonrojaba, mordía sus labios y hasta contenía su respiración.

Le había dado el tiempo suficiente como para qué adivinara sus intenciones...

JiMin no se movió, así que Suga le besó.

Primero solo fue un roce de labios, luego eso no bastó, el rubio le tomó la nuca y le apreso entre sus brazos, comenzó a separar sus labios, le mordió acaricio con su lengua.

Luego de lo que parecieron años, el beso terminó.

Suga juntó sus frentes y le miró, Jimin abrió sus ojos y se encontró de lleno con la mirada más penetrante que podría existir.
YoonGi le sostuvo un tiempo así para luego abrazarle, esconder su nariz en su cuello, suavemente aspirar su aroma... Nunca tendría suficiente...

El rubio suspiró cansadamente, ojalá las cosas con JiMin fueran más sencillas... Pero, ¿Le seguiría atrayendo tanto de serlo?

— Sea lo que sea, voy a ayudarte JiMin. Trataré de no hacer preguntas, ¿De acuerdo?

JiMin solo pudo asentir ante ésto, a fin de cuentas, contar con Suga no le vendría mal, el sabría cómo manejar a Hobi de ser necesario.

El trayecto fue bastante silencioso, solo hablaron lo justo como para que YoonGi supiera a dónde llegar, claro que cuando éste último recordó dónde era no estaba muy contento que digamos.

Suga se mordía la lengua para no preguntarle a JiMin que cojones hacían allí, comenzar una "no relación" indagando al otro, bueno...

Tóxico sería una palabra que le describiría bastante bien.

Al llegar al lugar, JiMin se bajó y YoonGi atinó a hacer lo mismo cuando el pelirrosa le detuvo.

— Ah, ah. No, no.— se negó —  Sólo serán dos segundos, ni se te ocurra moverte de aquí Min Yoongi.

Decir que Suga estaba demasiado indignado sería quedarse corto, como osaba JiMin el dejarle así, afuera, solo.

De nuevo...

Ni de coña.

Así que cuando el menor desapareció de su vista, se lanzó fuera del coche, lo que sea que JiMin tuviera que hacer, lo haría con el presente.

Grande fue su sorpresa al entrar y ver ese lugar de día, realmente esperaba que nadie le reconociera.

YoonGi camino un poco más hasta encontrar al pelirrosa hablando con otro sujeto,

¿Porqué ese tipo se le acercaba tanto?

Y...

¿Porqué Jimin se dejaba?

No hizo falta más para que Suga se acercara a dónde se encontraban, porque no era celoso, no, para nada.

Sólo quería ayudar a su "amigo" que estaba siendo acosado, claro.

JiMin al verle se tensó, "la fiesta iba cada vez mejor", que a nadie se le ocurriera casarse en los próximos 20 años por favor, ya que el había tenido demasiado.

YoonGi llego a su lado y "disimuladamente" posó se abrazo a su cintura, detalle que su acompañante no tardó en notar.

El joven, JungKook, hizo una mueca al ver cómo el recién llegado de aferraba al pelirrosa, de dónde el venía, eso y levantarle la pata era lo mismo, claramente estaba marcando el territorio, y lo peor de todo es que JiMin, no se corrió, si no que al contrario, se acomodo aún más a su lado.

— Lo siento Minnie, pero no, no lo tengo. Ni siquiera lo he visto, ni tampoco lo recuerdo. Si quieres puedes dejarme tu número por si llego a encontrarlo, así puedo avisarte.

Ante esto YoonGi no pudo sentirse más insultado, que quisieran coquetearle a JiMin en sus narices era mucho más de lo que podría aceptar.

"En tus sueños sujeto de dudosa profesión"

Antes de que Jimin pudiera pronunciar ni media palabra, Suga ya le estaba extendiendo una tarjeta con sus datos.

— Ten, si lo encuentras comunícate a ese número.

JungKook le miró burlón, sin embargo tomó la tarjeta.

— Ya, les aviso... Buena suerte chicos.

Sin más, ambos se retiraron del lugar, y decir que JiMin estaba enojado era quedarse corto.

— ¡¿Pero qué cojones fue eso de allí adentro?! ¡¿Quieres explicarme, Oh gran macho alfa?! ¿Acaso necesitas morderme el cuello o algo así para marcarme?!

A pesar de estar enojado con el rubio, aquella idea le excito demasiado, realmente no le importaría que Suga le hiciera lo que quisiera, pero no era el momento, ni el lugar.

El anillo no estaba con JungKook y eso realmente jodia las cosas.

¿Qué harían ahora?

El pelirrosa se subió hecho una furia al auto, seguido de un Suga que también tenía un humor de perros, esto no pintaba para nada bien.

¿Qué tanto necesitaba Jimin de ese sujeto?

— Mira, no fue mi culpa. ¿Acaso no viste como te miraba? Cómo si fueras un delicioso pedazo de carne, que sí, lo eres pero no estás en su menú. Ni hoy ni nunca.

Suga tomó con fuerza el volante, tratando de calmarse.

— ¿Disculpa? Perdón... ¿He oído bien? ¿Pero quién te crees que eres para decidir por mí sobre a quién quiero ofrecerme?

Indignado era una palabra que le quedaba chica para describir lo que sentía ahora, y Suga, el solo se mordió los labios.

— Te tengo una noticia, que nos hayamos acostado una vez, por más increíble que haya sido, no te da ningún derecho sobre mi YoonGi.

El rubio le miró fijo, con furia.

— Ese es el maldito problema contigo JiMin, te la pasas evadiendome. ¿Y qué si quisiera tener esos derechos sobre tí? ¿Y qué si quisiera que tuvieras esos mismos derechos sobre mí? ¡Joder! — YoonGi le sostuvo el rostro a un pelirrosa sorprendido — Desde que te conocí lo único que pensé fue en acercarme a tí, tuve que contenerme por Hobi y porque realmente no sabía si tendrías algún interés en alguien tan aburrido y normal como yo, pero cuando me enviaste ese mensaje... JiMin, no hay un momento en el que no piense en tí, y luego de lo que pasó esa noche yo... ¿Por qué huíste Minnie?

JiMin no podía pronunciar ni media palabra, se encontraba perdido en todo aquello, parecía tan irreal...

— Incluso ahora, te sigo como perro en celo de aquí para allá. ¿Qué me hiciste?... No, mejor no me lo digas, quiero quedarme así... contigo.

Suga selló sus labios, luego de aquello, si Jimin no quería saber nada con él, por lo menos le quedaría el sabor de sus labios por última vez.

No ocultó su alegría cuando Minnie respondió su beso, y no solo eso, si no que le estrechó contra sí.

En tan solo unos segundos, JiMin se encontraba sentado encima de YoonGi, el espacio era reducido por lo que tuvieron que juntarse aún más.

Suga comenzó a acariciarle por debajo de la ropa, mientras seguía besándole, JiMin no perdía el tiempo y fue tirando de la remera del rubio.

El mayor no pudo contener una sonrisa, su Minnie era realmente alguien muy impaciente, debería de enseñarle en otro momento, cuando tuviera más tiempo, ya que ahora estaba muy ocupado besando su cuello y dejando unas hermosas marcas allí, nadie se le acercaría así, YoonGi quería que el mundo viera que había reclamado a JiMin para sí.
Jimin gemía suavemente, a la vez de que comenzaba a desabrochar el pantalón de Suga,

¿Cómo diablos hacía para meter tremenda cosa allí?

Ni hablar, para otro momento, JiMin tomó el miembro de Suga y realmente tuvo que hacer un esfuerzo para no babear, ambos estaban tan metidos en su burbuja, que cuando sonó el teléfono Jimin salto disparado y se golpeó la cabeza con el techo del auto.

— J-joder... ¿Quién carajo me llama ahora?

JiMin tomó su teléfono, realmente dudando si atender o lanzarlo por la ventana, pero cuando vio que Tae era quien llamaba, lo poco de cordura que le quedaba volvió en sí.

— Mierda, mierda, mierda.

Suga no entendía nada, en un momento JiMin estaba acariciándole de una manera exquisita y al otro, estaba maldiciendo.

El pelirrosa comenzó a hacerle señas para que se quedará callado, y el sólo asintió.

— ¡JiMin! Hasta que atiendes, ¿Tienes idea de la hora que es? Faltan sólo 20 minutos para la boda y tú no estás aquí, ¿Qué se supone que estás haciendo?

Jin estaba histérico, y si Jin estaba así, no quería imaginarse como se encontraba Tae.

— Bueno... Hyung... verás... Resulta que vine a buscar ya sabes que a dónde ya sabes dónde.

JiMin realmente esperaba que Suga no pudiera escuchar aquello, debía de distraerlo, y que mejor que continuar con lo que estaba haciendo, así que volvió a tomar el miembro del rubio y comenzó a subir y a bajar lentamente.

YoonGi le miró indignado, no pidiendo creer lo que estaba haciendo, pero tampoco se opuso.

— JiMin... ¿Porqué hablas así? ¿Es que acaso estás con alguien allí?

— Ajam.

— No me digas que lo conozco.

—...

JiMin había dejado de prestarle atención a Jin, lo sentía por su hyung pero ver a YoonGi morderse los labios para no gemir era algo de los Dioses, y se sentía poderoso de todo lo que lograba en él.

En ese momento, Suga abrió sus ojos y le miró con desafío, y se abalanzó sobre Jimin, mordiendo suavemente su cuello.

— Y- Yoongiiiii, no seas salvaje.

— ¡¿YOONGI, JIMIN?! ¡¿NO ME DIGAS QUE ESTÁN COMO ADOLESCENTES CALENTURIENTOS FOLLANDO QUIÉN SABE DÓNDE, EN LUGAR DE TRAER EL PUTO ANILLO DE TAE?!

Jin iba a matarlos, probablemente Tae también pero JiMin jamás se había divertido tanto antes, y por la sonrisa que estaba en su acompañante intuía lo mismo.

— L- lo siento Hyung, llegaremos lo más pronto posible.

JiMin contuvo una carcajada al decir esto.

Y realmente esperaba que eso fuera cierto, ya que tenían que salvar una boda.

El pelirrosa jamás había tenido una conexión tan profunda con nadie más, incluso le era raro confiar tanto en alguien con quién, digamos que las cosas no estaban tan definidas después de todo, ambos se lanzaban miradas cómplices, y JiMin no podía evitar reír como bobo y sonrojarse.

Ese no era ningún buen indicador para nada, pero al demonio, ya estaba cansado de andar huyendo de aquí para allá, cuando la boda finalizara hablaría con Suga...

Con ese pensamiento en se acercó al rubio y le dió un profundo beso en los labios, dejándole con ganas de más, y luego se fue a buscar a Tae, ese era su mayor problema ahora.

Cuando JiMin entró a la habitación donde Tae estaba terminando de prepararse nunca esperó tanta emoción por parte de su amigo, éste se levantó del lugar y fue corriendo hasta donde estaba.

— ¡Mochi! Hasta que llegas, dime, dime. ¿Lo encontraste?

Tae estaba a punto de morir de un ataque de nervios.

— L- lo siento Tae, pero no estaba allí, Jungkook no lo tenía...

JiMin vió como la mirada de su amigo se nublo completamente, Tae iba a volver a llorar, pero lo contuvo. Incluso se sorbió un poco la nariz, calmó su puchero y trató de recobrar la compostura.

— B- bien, de acuerdo.

Tae se aliso el traje, se pasó una mano por sus cabellos y respiró profundamente. JiMin realmente no sabía que pensar, nunca había visto a su amigo tan...¿Calmo?, ¿Maduro?

— Ni modo...

— ¿Qué vas a hacer Tae?

El pelirosa no pudo ocultar su asombro al respecto.

— Decir la verdad...

Una perfecta"O" se formó en los labios de JiMin, parecía que el matrimonio realmente le había sentado bien a su amigo.

— Es decir, que me asaltaron brutalmente el otro día y que se llevaron mi anillo, sip. ¡Claro, eso haré!

Y ya TaeHyung tenía que aparecer con su novela de las 2 de la tarde, su amigo no cambiaría jamás, pero bueno, de todos modos era su problema, así que solo suspiró cansadamente, había cosas que no tenían remedio.

Un suave golpe en la puerta los distrajó, y al momento un NamJoon se asomaba por allí.

— Chicos, ¿Están listos? Jin me manda a buscarlos, ya todo esta preparado para que el novio llegue. 

El gran momento había llegado, les faltaba un anillo pero el Show debía continuar.

Una armoniosa melodía comenzó a sonar a la par de que un nervioso Hobi se acomodaba a cada rato su moño.

¡Cielos, por fin había llegado el momento más soñado de su vida, se estaba casando!

Y con quien mejor que su pequeño alíen que había dado vuelta su vida desde que había llegado, agradecía a los Dioses el haberle conocido, TaeHyung le había traído tanta luz, además de algunos dolores de cabeza, pero ¿A quién le importaba? 

Era el día más feliz de su vida, y toda su familia y amigos más cercanos se encontraban allí.

Realmente no podía pedir más.

O tal vez sí.

Que Tae se dignara a aparecer de una vez. 

— Ya, déjate ese moño de una buena vez, vas a terminar desarmandolo.

YoonGi, YoonGi era su mejor amigo desde que tenía memoria, otro al que no sabía como soportaba pero que realmente no imaginaba sin que estuviera a su lado.

— Sabes que vendrá, seguro esta maquillándose y esas cosas de alíens. 

Hoseok sabía que su amigo solo trataba de calmarlo con sus chistes pero ni eso lograba aliviarlo.

— Espera a que tú estes por casarte y luego hablaremos sobre estar calmado.

¿Era el o hacia mucho calor?

— Hmp.

— Si claro, hazte el sordo ahora, tu bien sabes que si ya sabes quie—

Hobi se quedó mudo al ver entrar a Tae, se encontraba espléndido con ese traje blanco, su novio tenía la sonrisa más hermosa que jamás hubiera conocido, debía de aguantarse para no llorar como Magdalena, aún no era el momento...

Y... tarde.

Hoseok comenzó a llorar de la emoción,

¡Nunca había sido tan feliz en su vida!

Y fue un efecto en cadena, ya que Tae al verlo también comenzó a llorar, por lo que apresuró el paso y ambos terminaron fundidos en un hermoso abrazo.

Los invitados miraban enternecidos aquella escena, no todos los días se veía gente que se quisiera tanto.

— Bien, hermanos, daremos comienzo a esta boda. — Pronunció el párroco — Estamos aquí reunidos para unir a esta pareja en Santo matrimonio...

La boda transcurrió con mucha emoción, incluso varios familiares y amigos pudieron dedicarles un mensaje a la pareja, JiMin no podía estar más contento por ellos, incluso había derramado una que otra lágrima, y estaba tan absorto en ese momento que casi no nota el momento en el que Suga se corrió a un lado para hablar por teléfono y minutos más tarde se retiró del lugar, casi...

¡Pero cuánto descaro!

¿Quién se creía que era?

Mejor dicho, quién se creía que era JiMin para meterse en sus asuntos, nadie.

Eso era, nadie.

Y eso realmente le molestaba.

JiMin mordió su mejilla, "bah", al demonio.

— Y ahora las alianzas.

—...

"Ni que Min YoonGi fuera la última coca cola en el medio del desierto"

— Ejem.

"Ni que la tuviera tan grande"

— JiMin.

"Bueno, la verdad es que si, la tiene muy grande"

— JiMin.

"Y gorda..."

— ¡JIMIN!

El pelirrosa salió de su ensoñamiento y se avergonzó al ver que todo el mundo estaba esperándole, así que rápidamente y con las manos temblorosas les acercó los anillos a la pareja.

Todo iba muy tranquilo hasta que Hoseok tuvo que preguntar...

— Tae, Cariño...¿Dónde está tu otro anillo?

Y...había gente que quería ver el mundo arder, y aquel titiritero que había orquestado tal escena.

— B-bueno... verás...yo...

Tae sentía como el mundo iba a comenzar a darle vueltas en muy poco tiempo.

¡Necesitaba un jodido milagro pero ya!

— Disculpen, aquí está, Tae me lo había dado antes para que yo se lo alcanzara, disculpen la demora.

Min YoonGi era el puto salvador de la boda.

Tae no caía de su emoción al ver el pequeño anillo en la mano de su amigo,

¡Debería de hacerle un altar en alguna plaza y entregarle a JiMin de ofrenda por aquello!

JiMin por su parte tampoco podía creer como YoonGi terminado con aquel anillo pero que demonios, ahora si podía relajarse, por suerte la boda continuo de lo más normal, y en eso no noto cuando Suga se le acercó.

— Me debes una.

— No se de qué hablas.

— Claro que sí, tu amigo ese, el de profesión "dudosa" fue el que me entregó el anillo.

JiMin casi se ahoga al escuchar aquello.

— Al final dice que los de mantenimiento lo encontraron en el baño, seguro al despistado aquel se le debe de haber caído.

"Uuuuuff... Sí, claro, el baño"
Agradecía que JungKook no le hubiera contado más a Suga.

—Así qué como salve a tu amigo, me debes una.

Yoongi sonaba muy confiado al respecto.

— ¿Disculpa? Es a Tae a quien debes cobrarle.

Entre tanta charla la ceremonia había terminado y los novios se estaban retirando, así como la gente a su alrededor, por lo que ambos comenzaron a caminar hacia la salida.

— Pero no me interesa nada que Tae pueda darme, además de que está casado y con mi mejor amigo, busco a alguien...soltero... para atrapar.

JiMin estaba a punto de replicar a esto cuando por fin salieron a la luz del sol, y en eso un extraño objeto le cayó prácticamente en la cara, de suerte que apenas pudo poner las manos.

EL JODIDO RAMO DE FLORES

Tae le había lanzado el jodido ramo de flores y encima tenía el descaro de guiñarle el ojo mientras, en eso JiMin siente como alguien lo toma por cintura y se encuentra con Suga.

— Ya no corras Minnie, no voy a dejarte huir... Sé mi Valentín.

Esa cara, no podía resistirse a esa mirada...todo el mundo estaba mirando aquel espectáculo, hasta Hobi y Tae les miraban espectantes...

— YoonGi...yo... —

Jimin esperaba no arrepentirse de ésto.

PJM95 ha subido una nueva publicación.

"Buenas tardes gente hermosa, aquí finalizando otra producción que saldrá para ustedes en breve, realmente les agradezco todos sus mensajes de aliento, ustedes son mi motor para tanto esfuerzo.

PD: Sí, al final seguí su consejo y me cambié el color de cabello, ¿Qué tal me queda?, Les amo ".

kalteneker_uwu Minie cásate conmigo!!!

Papita_Kawaii0127 Fuiste por mucho mi más grande sueño, gracias por todo, por ayudarme a crecer, por todas aquellas veces que te necesite y tu amor llego a mi de una o otra manera.

KissArmyW Jimiiiin mi mamá pregunta por ti. ¿Sigues soltero?

Se ha etiquetado a PJM95 en una nueva publicación.

"Lo siento chicas, pero ya está atrapado. #Singleboyiscaught"

A PJM95 le gusta ésto.

The End.

Hola mi gente hermosa!!! Aquí son las 4 de la mañana y por fin estoy terminando este capítulo que me llevó semanas! ¿Porque? Por mi cumpleaños, fiestas y novio que salió de vacaciones 😨😵
Pero sin más, se los dejó.
Les agradezco mucho está aventura de tan pocos capítulos!
Realmente fue todo un desafío que finaliza con casi 5 mil palabras 😱
Espero que está pequeña aventura les haya gustado tanto como a mí.
Y quizás vengan otras anexas, no se ustedes pero yo tengo muchas dudas dando vueltas jajaja
En sí, ésta es la primer historia que puedo finalizar en Wattpad y estoy inmensamente feliz por eso, gracias a todos los que me dieron su apoyo en todo momento!
KissArmyW Papita_Kawaii0127 ustedes han hecho que ésto sea posible!!!!

Gracias a mi team
#Mensosquad

Y los espero por mis otras historias!!!!!