Violet había salido cabizbaja de su salón de clases con su bolsa del almuerzo caso rodando por el piso del corredor. Varias chicas la observaban con disgusto al verla pasar, el cabello de Violet, hermoso y natural al mismo tiempo le daba celos a muchas. «Sí se enteraran que el chico más lindo de la escuela también esta enamorado de ella, sería un caos total»

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Un grupo de chicas habían estado animando a Dilan para que saliera con ellas al comedor —pero ninguna lo logro—. Muchas se rindieron, otras prefirieron quedarse con él «Pensando que podrían caerle bien al muchacho por eso». Estaba renuente a salir de allí, ni siquiera sus ruegos lo harían levantarse.

—¡Vamos, Dilan ¿No tienes hambre? —Una chica llamada Kilin, rubia, alta y con ojos azules trataba de parar a Dilan de su pupitre halando su brazo.

—He dicho que no Kilin —Hablo serio—, ¿Cuantas veces debo decirlo?

La chica abrió más de la cuenta sus ojos sorprendida por la forma en que le hablo, era la primera vez que lo escuchaba hablarle tan serio.

—Pues tú te lo pierdes —Soltó el brazo de Dilan con brusquedad—. Ire con Justin, él si sabe tratar a las mujeres.

Kirlin se fue del lugar dando fuerte zancadas en el piso, Dilan estaba mal humorado por la actitud de la chica.

—"Él sí sabe tratar a las mujeres" —Repitió tratando de copiar la molesta voz de la chica—, ¡Ash! —Trato de sacar su frustración.

En ese momento entraron dos compañeras de clases hablando en susurros, cómo vieron al chico en la posición con la que los estudiantes duermen se sentaron a su lado hablar.

—¿Viste el cabello de esa chica? —Le pregunto una a la otra.

—Si... —Respondió la otra sorprendida—. Era hermoso, quisiera tenerlo así.

—Como es que se llama... ¿Viltet?.. —Pensó unos segundos recordando el nombre correcto—, Ahh, Violet, ese es el nombre.

—Sí esa misma, muchas chicas la miraban por el pasillo, que envidia, hubiera querido que a mí también me vieran con envidia cuando estaba en tercer año.

Al escuchar ese nombre, el instinto animal de Dilan despertó en su interior. Se levantó con brusquedad del pupitre y salió disparado del salón de clases.

Las dos chicas se quedaron atónitas por la rápida acción del muchacho. Él quería ver a Violet.

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