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Capítulo 2-El Surgimiento

La residencia de Branch, la Aldea de Celebi, era una de las comunidades más recientes de Kemeris, recientes en cuanto a construcción se refiere. La aldea fue fundada un poco antes de que el régimen de el rey Lothar se expandiera por todo el continente, su frío reinado puso en una situación deplorable a toda región y la Aldea de Celebi no fue la excepción, por ello muchos mercaderes y comerciantes decidieron establecerse en el nuevo poblado que crecía en las montañas. La posición de la aldea en el mapa estaba pensada para alejarse de todo caos que el nuevo orden trajera consigo, pocos fueron los que pudieron hacer el viaje hasta las montañas de Celebi, la mayoría de los que sí lo lograron fueron Pokémon que pudieran vivir entre las montañas y la naturaleza, como tipos planta. Uno de estos casos era el de Orzen, el Sawsbuck.

Orzen, según lo que le había contado a Branch después de varios días de plática. Era un mercader que había viajado por toda Kemeris en un afán por descubrir más de los misterios y leyendas que el mundo tenía para ofrecer, en sus viajes Orzen conoció varios lugares y a varios Pokémon. Sin embargo y como todo su expedición se vino cuesta abajo cuando Lothar se hizo con el poder, y Orzen para sobrevivir decidió alejarse de la conmoción causada por el nuevo orden y retirarse al lugar más tranquilo que la región pudiera ofrecer, así fue como el venado llegó a la Aldea de Celebi, fue movido por la guerra que se desataba en el oeste.

En estos días de platica Branch había aprendido cosas de Kemeris que los libros que siempre leía no le podían ofrecer, había aprendido de él enigmático Rey Lothar y las leyendas que lo rodeaban, para toda Kemeris, Lothar era un usurpador de la paz, un entrometido que le había robado al pueblo la tranquilidad que por mucho tiempo tuvo. Antes de hablar con Orzen, Branch no sabía mucho del rey de Kemeris, aunque ahora ya comprendía mas sobre el rey de su continente, la idea de que alguien tuviera tanto poder generaba un vacío en el estómago de Branch, era una sensación que no podía imaginarse, gobernar a tantas criaturas y tener más que todos.

Además en esas pláticas que tuvo el Grovyle con el Sawsbuck, Branch, obtuvo un recuerdo que hace tiempo había olvidado. De niño el tipo planta había leído hablar de los "exploradores", un grupo de Pokémon dedicados a traer paz a la región y a proteger a los demás, criaturas nobles que eran la luz en la oscuridad de la injusticia, a Branch le había fascinado oír sobre estos exploradores y las mil proezas que hacían, sin embargo y la razón por la que Branch había olvidado esa emoción era por que cuando le había contado a su hermano de los exploradores este le reveló la triste verdad: "Los exploradores desaparecieron, nadie sabe qué pasó, un día se fueron y la paz se fue con ellos". Aunque ahora siendo mayor Branch tuvo mucha curiosidad en saber que había sido de estos exploradores, ¿Porque habían desaparecido? y sobre todo ¿Que los hizo desaparecer?, así que cuando Branch le preguntó a Orzen sobre los exploradores este habló con honestidad.

—¿Quieres saber la verdad?—respondió Orzen intrigado y melancólico—Bien, yo te diré la verdad, los exploradores eran todo lo que oíste, amables, justos y fuertes. No dejaban que nadie se interpusiera en el camino de la verdad y la justicia, yo conocí a algunos—dijo Orzen antes de dar un respiro y seguir en su relato—pero unos años antes de que el rey subiera al poder los exploradores comenzaron a ser menos, muchos eran trasladados o desaparecieron misteriosamente, poco a poco los gremios de exploradores cerraron, y cuando Lothar obtuvo el trono, estos se fueron. Los pocos gremios valientes que quedaron cerraron por órdenes del imperio, y los exploradores tuvieron que integrarse a una nueva sociedad, o irse para siempre. Muchos rumoran que fueron exterminados por Lothar, sin duda les hubiera tenido miedo—Orzen hizo nuevamente una pausa y tomó esos escasos segundos para admirar la tarde tras la ventana—pero había algo más. algo que pocos sabían, algo que era parte de la historia de Kemeris:

Los Guerreros del Aura.

En su plática más reciente Branch había aprendido sobre unos Pokémon llamados "Guerreros del Aura", estos eran criaturas que como los exploradores estaban dedicados a proteger a las ciudades, a los habitantes de todos los lados, y a conservar la paz. Solo que tenían una gran diferencia, no estaban solos. Los Guerreros del Aura contaban con el apoyo de otro Pokémon, un compañero, un aliado, estos eran conocidos como "Sinkus" y eran Pokémon extremadamente fuertes y ágiles, aunque sin duda lo que más impresionaba a Branch era que los Guerreros del Aura tenían poderes más allá de lo creíble, según lo que sabía Orzen esto podían mejorar sus ataques, crear barreras de magia y sentir a todos los seres vivos que los rodeaban. Aunque claro, también estaba la posibilidad de que fueran cuentos de niños y leyendas, Branch contemplaba esa posibilidad, pero le agradaba oír lo que Orzen contaba.

Sin embargo y lo que más le interesaba a Branch era saber de la piedra que había encontrado en el Bosque de Celebi hace unos días. Branch y Orzen habían tratado de examinar la piedra, todo esto en los tiempos libres que Branch tenía, por qué seguía con sus obligaciones en el negocio, así que después de varios días de tratar de averiguar de dónde venía y compararla con otras piedras preciosas, Branch se llevó la enorme decepción de descubrir que por desgracia su piedra no era más que una normal, aunque tenía una cualidad peculiar, era muy resistente. Esto lo descubrieron al tratar de abrirla y saber si en su interior tenía algo más, aunque no lograron nada, la piedra al contrario de muchas otras no se rompió, ni cuando trataron de abrirla con un martillo especial. Esto solo sirvió para causar más curiosidad en el muchacho, curiosidad que al final cesó.

El estómago lleno de Branch y la pesadez de haber comido hasta llenarse le hizo olvidar la decepción que sentía, si bien la piedra le seguía pareciendo algo fascinante, se había emocionado con la idea de que podría haber sido algo más valioso y peculiar. Aunque ahora eso no importaba, la sensación de comer una ensalada y tomar un delicioso zumo de baya relajaba al tipo planta, que ahora se encontraba sentado en la mesa del comedor, frente de el Seris degustaba su zumo lentamente, ambos en pleno silencio comían y tomaban el líquido de dos cuencos de madera.

—He visto que has hablado con Orzen recientemente—mencionó Seris rompiendo el silencio completamente y dando un aire un poco más interrogante a la comida—¿Que te ha contado?

—¿A qué te refieres?—contestó Branch incorporándose a la situación que se avecinaba.

—Pues, verás Branch—dijo Seris mientras meditaba en que palabras decir—Orzen puede contar muchas...fábulas, leyendas y teorías de un pasado que sigue añorando. No dudo que haya cosas que sean verdad, pero es difícil distinguir entre la realidad y las leyendas.

—Te entiendo, pero fábulas o no, lo que dice es sumamente interesante—alegó Branch al tratar de defender todo lo que había oído en los últimos días.

—Solo lo menciono para que no te dejes llevar por todo lo que dice.

—Lo sé, gracias Seris, gracias por preocuparte como si fueras mi padre.

—Lo hago porque te quiero—respondió Seris con una sonrisa en su rostro.

Había pasado ya una hora desde que Branch había terminado de comer, el sol comenzaba a descender y las hojas del bosque que eran iluminadas por los rayos de este producían sombras que adornaban todo a su alrededor. Aunque ya no era mediodía las actividades en la aldea natal del Grovyle no cesaban, los pueblerinos seguían en sus labores y las terrosas calles eran transitadas por la mayoría de los habitantes. Branch salió de su casa con la misteriosa gema en mano, el tipo Planta caminaba junto a los demás residentes de su aldea sin rumbo alguno, deambulaba por las calles y volteaba de vez en cuando hacía algunos callejones que estaban vacíos. El sol tocaba su verde piel y por ser un tipo planta lo nutría, en las calles de la aldea y en la aldea en general se sentía una melancolía y depresión que abundaban en toda la región. El chico caminó por 10 minutos hasta que llegó a una calle que parecía estar vacía, esta contaba con algunas enormes cajas de madera, barriles y troncos cortados. A la lejanía Branch pudo observar tres figuras que parecían verlo fijamente, una estaba sentada en una caja, otra estaba parada, y la última parecía estar recargada en la pared más cercana a la estrecha calle. El tipo planta se acercó a las 3 sombrías figuras, la tierra que abundaba en las calles de la aldea parecía contener más rocas que de costumbre en esa calle. Poco a poco el Grovyle camino hasta estar a unos escasos metros de las figuras.

—Hasta que te vemos—dijo la figura que se encontraba recargada en la pared—¿Dónde te habías metido?

—Si Branch, ¿Dónde estabas?—añadió la segunda figura, la que estaba encima de la enorme caja.

—Vamos chicos, no me desaparecí por tantos días, además no parece que me hayan extrañado par de holgazanes—respondió el Grovyle.

Las dos criaturas que previamente habían hablado se acercaron a saludar al joven tipo planta, uno de estos y el primero en hablar era un Nuzleaf  de nombre Spricke, este era de la misma edad de Branch y habían sido amigos desde que se conocieron, ahora tenían una rivalidad pero seguían sintiendo un cariño fraternal por el otro. El segundo Pokémon que hablo era un Lombre, era el más alto de todos los presentes y tenía una actitud relajada, a diferencia de Spricke, el tipo agua había llegado hace poco a la Aldea de Celebi, su nombre era Rainer.

—Es bueno verte Branch—añadió un último Pokémon que se encontraba de espaldas a Branch, este tenía una apariencia como un árbol, una sonrisa bastante amigable, aunque un tanto perturbadora, sin duda lo más bizarro de la apariencia de esa criatura era que no era una planta, si no que emulaba ser una, la última criatura y amigo que conocía Branch en ese pequeño callejón era un Sudowoodo y su nombre era Mirdo.

—Muy bonito, ya nos saludamos y todo eso. Ahora empecemos con lo interesante—dijo Spricke con un tono burlón y un tanto malicioso, para después voltear a ver a todos—¿Quién de aquí trajo su apuesta?

La Aldea de Celebi era un lugar pacifico, no se acostumbraba a ver peleas entre las calles de la pequeña comunidad, por ello Branch no peleaba mucho hasta que junto con Spricke conoció a Rainer y a Mirdo, y comenzaron algo a lo que llamaban "Pelea por Apuesta". Según el Nuzleaf, el creador de la dinámica, la "Pelea por Apuesta" era un tipo de pelea en donde los cuatro amigos mostraban un objeto que hubieran encontrado, y luego alguien retaba a otro por uno de los objetos. El primer Pokémon que cayera al suelo o se rindiera se le declararía como perdedor , y el ganador se llevaría el objeto que se apostó.

—Bueno, yo traje esta pequeña medalla que mi papá encontró el otro día—dijo Rainer mostrando una pequeña medalla de plata que tenía una figura extraña escarbada en ella.

—¿Y tú Branch? ¿Qué trajiste esta vez? y por favor dime que no son bayas nuevamente—añadió Spricke burlándose de su amigo.

—Spricke tiene razón—mencionó el Sudowoodo entre unas ligeras risas—Ya nos hartamos de las bayas.

—Esta vez no son bayas, es algo mucho mejor—respondió Branch con una sonrisa orgullosa. Mientras Branch decía esto pudo notar una figura a la lejanía, está lo observó por un momento y después siguió caminando, la criatura andaba en cuatro patas y caminaba con la frente en alto, el Grovyle claramente identificó a Orzen.

Sus amigos estaban fascinados con la misteriosa gema que Branch les había mostrado, el tipo planta se guardó los detalles de cómo la había conseguido, pero mencionó que sí podría ser valiosa. Spricke, rápidamente se adelantó a sus compañeros para querer retar a Branch.

—Yo la quiero, te reto a una pelea por ella—mencionó.

—Bien, no duraras mucho tiempo en la pelea.

Ambos tipos plantas se pararon en cada orilla del extenso callejón en él que se encontraban, la tierra que cada pisada soltaba hacia que se generara una pequeña capa en la parte inferior del ahora campo de batalla, la caja de madera más grande era en donde se acostumbraba a poner premio de la batalla que se desarrollaba, así que la gema misteriosa que el Grovyle se encontró en el bosque ahora descansaba en la fría superficie, el destino de esta estaba por decidirse. Mirdo se posicionó a la mitad de ambos, en la mayoría de los combates siempre era el juez imparcial.

—¡Atención! Está por comenzar la "Pelea por Apuesta", de un lado tenemos al retador. Spricke el Nuzleaf, del otro tenemos al dueño de la apuesta, Branch el Grovyle. Tendrán un combate justo y limpio siguiendo las reglas que ya conocemos. Sin más que decir, comiencen en 3, 2, 1...¡Pelen!—exclamó el Sudowoodo.

Al oír las palabras de su rocoso amigo ambos contrincantes se pusieron en pose de pelea, por un lado el Nuzleaf tomó una pose ofensiva, y rápidamente comenzó a correr hacia su rival. Por el otro lado, Branch junto ambos brazos y protege su cara del golpe que le esperaba.

Sin embargo este nunca llegó, ya que Spricke, aprovechó que su oponente redujo su visibilidad al protegerse la cara y con un fuerte Sorpresa golpeó en el pecho a Branch, este dio unos pasos hacia atrás para alejarse de el tipo planta y no recibir más daño. Branch no se quedó atrás en la ofensiva y decidió contraatacar rápido, antes de que el Nuzleaf pudiera reaccionar, así que utilizando la larga hoja que se encontraba en su frente ocupó Destructor.

El movimiento conectó e impactó a Spricke de arriba hacia abajo, comenzando por la cara, esto tuvo el efecto esperado por Branch y tiró al tipo Planta/Siniestro al suelo, una vez en el suelo el Grovyle intentó golpear nuevamente al Nuzleaf. Aunque esto no era más que lo esperado por el Nuzleaf, ya que antes de eso dio una pequeña vuelta en el suelo y estuvo lo suficientemente lejos de su rival para poder pararse y preparar su siguiente movimiento.

Rainer y Mirdo estaban sorprendidos, no por la batalla en sí, sino por la ferocidad y energía en la que ambos contrincantes se enfrentan, ellos habían presenciado muchos combates de Branch y Spricke, eran competitivos entre ellos, y en especial según Rainer siempre habían peleado duro, pero desde que evolucionaron eran más fuertes y severos con el rival. Se respetaban porque conocían las capacidades que tenía el otro, y cada uno tenía su manera de pelear.

Ambos contrincantes peleaban duro, devolviendose golpes y esquivando los del otro, estaban muy parejos y ninguno parecía rendirse, los dos tipos Plantas se comenzaban a cansarse y la batalla en vez de ser de fuerza se volvió de estrategia para ver quien resistía más y como lograban quedarse sin perder. Llegó un momento en donde Spricke decidió hacer algo atrevido, después de rodar en el suelo para esquivar un fuerte golpe que venía con la hoja de la frente de Branch, el Nuzleaf  bajo la guardia por un momento, Branch atacó rápidamente y lanzó un fuerte Buena Baza con sus puños, el movimiento iba directo a la cara de Spricke, aunque esta ya lo esperaba, por lo que esquivó con facilidad el ataque y después juntó sus brazos y piernas y se envolvió a sí mismo, creando una especie de esfera con su cuerpo. Branch quedó atónito, no sabía que su amigo podía hacer eso, aunque no era todo, el cuerpo del Nuzleaf se cubrió de rocas y rodó directamente contra el pecho del Grovyle, había ocupado el movimiento Desenrollar, movimiento que posiblemente le enseñó alguien mas. Branch cayó al suelo, y golpeó fuertemente el piso gracias al cansancio que ya tenía.

—Branch tiene 10 segundos para pararse antes de que la batalla se declare terminada—anunció Mirdo para después comenzar a contar.

Branch oía los números que venían de la voz del tipo Roca, mientras la cuenta ascendía las fuerzas le regresaban, pero no lo suficiente. Mirdo ya iba en 7, cuando Branch todavía en el suelo abrió los ojos y lo primero que vio fue la gema naranja que reposaba en la enorme caja de madera, esperando el resultado de la batalla. Al verla, Branch recordó todo lo que había aprendido y vivido en los últimos días y sintió algo diferente, su cuerpo tomó tonalidades ligeramente más claras y una vigorizante energía le recorrió el cuerpo. El Grovyle se paró cuando la cuenta casi terminaba, con una mirada fulminante volteo a ver a su rival.

—¡No perderé, no ahora!—exclamó Branch para después correr hacia su amigo y tratar de atacar.

—Pues te llevarás una sorpresa—respondió el Nuzleaf que también corría hacia su oponente.

Ambos contrincantes impactaron con sus movimientos, Branch ocupaba Tijera X, mientras Spricke atacaba con Desenrollar nuevamente. Una ola de polvo y tierra cegó a todos los presentes, que trataban de ver que había sucedido, cuando la nube se fue Branch se encontró con una agradable situación, Spricke estaba en el suelo, movía su mano de arriba hacia abajo en señal de rendición, ademas tenia una mueca de dolor por el fuerte movimiento 4 veces efectivo que recibió. Branch lo ayudó a pararse y después de esto se dieron la mano, el Grovyle volvió a guardar la gema y se sentó para recuperar energías. La tarde siguió su curso y los cuatro amigos platicaron y descansaron antes de que al anochecer cayera y cada quien regresará a su hogar.

Branch regresó a su casa, el calor del hogar le acariciaba la piel y lo hacía relajarse después del duro combate que tuvo, así que después de saludar a su hermano regresó a su recamara y se acostó en su cama. Victorioso.

Mientras descansaba cómodamente noto un ruido que provenía de la gema ¡Crack! ¡Crack! se oyó por toda la recamara, además una luz color azul claro comenzaba a aparecer, la gema se rompía lentamente y la luz brillaba cada vez más. Branch sostuvo la gema, y al tocarla se volvió a oír un ¡Crack! esta vez más fuerte, por último una figura alargada y color azul pálido con un pequeño hocico blanco apareció enfrente de Branch, este lo comprendió al instante, la gema era un huevo, después un momento que le heló el alma su mente solo pensó una cosa:

«¿Ahora en que me he metido?»

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