Sin vuelta atrás; [Epílogo] Final sin retorno
En la vida, hay que tomar decisiones, y siempre puedes escoger la mejor opción, nunca, por muy complicado que sea, escoger la opción correcta, nunca va a ser imposible.
-¡Jaja!-. Mello aplaudía, mientras veía a los niños correr en el patio.
-¿Cómo ha terminado así?-. Preguntó Roger.
-Una larga historia... No me apetece contarla-. Dijo Near. Él, junto a Matt, y la SPK, habían venido de visita a Winchester, Inglaterra, el orfanato Wammy's.
-Pero Near...-. Roger le miró. -Pareces muy deprimido-. Señaló.
-Claro que lo estoy-. Near veía a Mello jugar con aquellos niños, contento, sonriente... Pero en el fondo, ese ya no era Mello. -El hombre al que amaba ha desaparecido-. Roger se sorprendió demasiado, ¿Qué acababa de decir?.
-N-Near... Tú...-. Near se acercó a Mello.
-Mello, vámonos-. Mello hizo un puchero, mientras era arrastrado por Near.
-Aaahhh, ahhh-. Estiraba su brazo, para poder volver, pero no podía.
Ya no podía volver...
Nunca más...
Near le llevó a la zona favorita de la persona que solía llamarse Mello, cuyo verdadero nombre era Mihael Keehl.
-Ohhh-. Mello veía lo que era el amanecer en la colina de Wammy's. Siempre, todos los momentos pensativos, o que han hecho cambiar algo en Mello, la mayoría habían ocurrido aquí, en esta misma colina, con estas mismas vistas. Mello sonrió de forma tierna.
Near miró al suelo, y sin expresión alguna, dejó caer algunas lágrimas.
Mello miró a Near.
-Ohhh... Aaah-. Mello se acercó a Near, y le cogió la cara, apretándola.
-Me hamces damño-. Dijo Near, hablando mal. Mello sonrió, y dio un pequeño beso en los labios de Near.
-¡Ajaja!-. Aplaudió, y volvió a darle otro beso.
-Mm...-. Near, con el corazón dolido, apretó los dientes, mirando a aquel desconocido. -¿Dónde está Mello?-. Near se arrodilló. -Lo quiero de vuelta conmigo-. Near se puso bocabajo en el césped.
-Mmm...-. Mello comenzó a soltar unas cuántas lágrimas. -¡Buaaaaah!, ¡Buaaaaah!-. Lloraba, hasta que Near se tuvo que levantar, y limpiarle las lágrimas con una servilleta.
Mello no podía respirar bien, tenía la nariz atascada, así que con un pañuelo, Near le sonó la nariz, y Mello sonrió y se sonrojó ante eso.
Mello miró a Near, quién tenía la expresión de un hombre dolido.
-Ooooo-. Dijo Mello, y puso morritos, para cruzarse de brazos.
-Vamos, no te pongas así tampoco-. Near sonrió levemente, y acarició la cara de Mello, haciendo que se sonrojara.
Near comenzó a hacerle cosquillas, y Mello comenzó a reírse.
-¡Ajajaja!-.
...
-¿Seguro que así estarás bien?-. Preguntó Matt.
-Sí-. Linda terminó de poner en la tercera maleta sus cosas, ya que cuando se fue, no pudo llevarse al completo todas sus cosas. -¿Y tú que harás?-. Preguntó Linda, y Matt suspiró.
-No lo sé... Quizás podría quedarme en Japón ya que nací allí pero... Pensándolo bien, no soy de ninguna parte. Es decir, ¿A dónde pertenezco en el mundo?, No tengo ni idea-. Linda sonrió, se acercó a Matt, y le dio un pequeño beso en los labios.
-Es una pena que tomemos caminos diferentes. Me hubiera gustado ser tu novia para siempre, eres un chico muy profundo-. Matt sonrió y negó con la cabeza.
-No digas eso, me molesta-. Dijo Matt.
-¿Lo de chico profundo o lo de caminos diferentes?-. Preguntó sonriente, Matt se rio levemente.
-Las dos-. Respondió, y Linda se sonrojó. -Te insistiría en que te quedaras conmigo... Pero...-. Matt le cogió las manos. -Ese no sería mi estilo-. Linda sonrió.
-Matt... Has matado a personas, eres un criminal y... No sé si puedo vivir con alguien que siempre se la está jugando-. Linda le miró. -Lo entiendes, ¿Verdad?-. Preguntó Linda, y Matt asintió.
-Aquel día, en el secuestro de Takada... Desde aquel día...-. Linda miró a Matt. -Noto que algo va mal... Debería haber muerto junto a Mello, quizás sería mejor que este sufrimiento y agonía de vida-. A Linda se le cristalizaron los ojos.
-No digas eso, ¡Y menos de Mello!-. Gritó Linda, y se limpió las pocas lágrimas que le salieron. -No Matt... Quizás esto que está pasando, es lo bueno. No deberías haber muerto, porque nadie debe morir-. Matt sonrió.
-Que mona eres-. Dijo Matt, y acarició a Linda.
-Matt, ¿Estás listo?-. Preguntó Rester, picando a la puerta, que estaba abierta.
-Sí... Ya me he despedido de mi princesa-. Matt le dio un beso en sus labios. Su último beso. -Vamos-. Matt salió de la habitación, y Linda también.
-¡Eh Matt!-. Matt miró hacia atrás. -Te quiero-. Dijo.
-Y yo a ti-. Dijo Matt, los dos sonrieron, y se miraron... Por última vez.
-¡Ajajaja!-. Mello se reía viendo el bonito amanecer. Estiró la mano, como solía hacer cuando era consciente de que vivía. -Mmm-.
-Esperanza...-. Pensó Near.
-Algún día, podré controlar todo lo que veo, y más allá-.
Fue lo que solía pensar Mello. Los pensamientos de un chico que solo quería dejar claro que no era inferior a los demás, que era igual que todos.
-N...-. Near miró a Mello.
-¿Quieres decir algo Mello?-. Preguntó Near. -Vamos, que no te dé miedo-. Dijo sonriente.
Mello respiró profundamente.
-N... Na... Na na... Na...-. Mello comenzó a llorar, y Near le vio. Aquella imagen era tan dolorosa, ver que uno de los chicos más listos que había conocido, ahora ya ni podía hablar... Aquello era tan doloroso. -Na... Na na... Nat...-. Near se extrañó.
-¡Nate!-. Dijo por fin, y miró a Near. Bajó el brazo, y le miró. -Nate-. Dijo a la perfección, con la voz un poco aguda, pero Near lo escuchó como si fuera el propio Mello quién lo dijo. Con aquella voz ronca y grave que solía tener en sus últimos momentos de consciencia.
-Nate-. Repitió, y Near solo lo escuchaba con aquella voz tan dulce y hipnotizante que Mello tenía en aquellos tiempos. -Hmmmm-. Mello hizo una sonrisa de oreja a oreja, cerrando los ojos.
-Near-. Matt apareció. -¿Nos vamos ya?-. Near comenzó a llorar como un bebé.
-Matt... No puedo... No puedo verle ni a la cara-. Near se levantó, y se limpió las lágrimas, pero volvió a sentarse, no podía ni tenerse en pie. -Creo... Creo que lo mejor será... Que lo dejemos aquí-. Matt se sorprendió.
-¿Q-Que estás diciendo?-. Preguntó Matt. -¡Osea que puedes estar con el amor de tu vida, ¿Y quieres dejarlo aquí?, alejado de ti!-. Gritó Matt, furioso.
-¡NO ES EL AMOR DE MI VIDA, NO ES MELLO, NO ES MIHAEL, NO SÉ QUIÉN ES ESTE HOMBRE QUE SOLO SABE JADEAR, Y REPETIR MI NOMBRE!-. Gritó Near, mirando a Matt, mientras Mello comenzó a llorar.
-¡BUAAAAAH!-. Gevanni, que había venido con Rester, Lidner y Matt, lo vio, así que se fue a abrazar a Mello.
-Tranquilo Mello, tranquilo-. Mello se calmaba.
-¿Lo entiendes Matt?... Yo nunca había visto a Mello llorar, y ahora es lo que más hace-. Matt negó con la cabeza.
-Tú no lo quieres-. Near miró a Matt. -Si lo quisieras, estarías con él... Sea idiota, o no-. Mello abrazaba a Gevanni, mientras veía la situación. Near se giró a ver a Mello, pero este se escondió en Gevanni. -Pensaba que no podrías decepcionarme más... Me he equivocado-. Dijo Matt. Near se levantó y se limpió las lágrimas. -Yo me lo llevaré-. Dijo Matt.
-No-. Dijo. -T-Tienes razón... Si de verdad lo quiero, si de verdad quiero a Mello, debo aceptarlo como es-. Dijo Near, y Matt frunció el ceño.
-¿Lo haces para autoconvencerte?, ¿Por compasión?-. Preguntó Matt, y Near negó.
-Lo hago por amor-. Near le ofreció la mano a Mello, este salió de detrás de Gevanni, y le aceptó la mano a Near. Mello sonrió, y comenzó a aplaudir.
-¡Ajajaja!-. Near sonrió, pero se le volvió a caer una lágrima.
-Matt, te daremos dinero, un sitio donde vivir y...-. Matt le quitó la mano a Rester de su hombro.
-No quiero tu caridad. Simplemente con que me dejéis ver a Mello algunas veces me vale, ya me busco yo la vida por mi mismo-. Rester sonrió, y asintió, admiraba la independencia de Matt. -Y en cuánto a ti enano-. Matt y Near se miraron. -Ahhh-. Matt suspiró. -Yo soy un desastre. Así que no se me ocurre otra persona mejor que pueda estar y cuidar de Mello-. Near sonrió.
-Gracias-. Agradeció Near, sorprendiendo a todos, ya que nunca había agradecido a nadie tan sinceramente.
Mello miró a Near, y después a Matt.
Mello sonrió. Pero no de forma exagerada, de forma normal, como si estuviera consciente, y despierto.
Mello miró a Near.
-N-N-Na-Nat... Na..., ¿Nate?-. Preguntó, mirando a Near.
-Si, soy Nate, tu... Novio-. Mello sonrió y aplaudió ante eso.
Matt se acercó a Mello.
Matt lloraba por los dos ojos.
-Lo siento Mihael, esto es por mi culpa-. Mail se acordaba de todos los momentos que pasó con Mello. Matt abrazó a Mello. -Nunca quise reconocerlo, pero... Te quiero joder. Eres como un hermano para mi-. Mello sonrió, y correspondió el abrazo de Matt.
Matt se separó de Mello.
-Eres el mejor amigo que alguien puede tener-. Mello sonrió, con una lágrima cayendo de su ojo. -Te quiero... Hermano-. Dijo Matt, y Mello sonrió aún más.
Matt se quitó sus gafas, y se limpió los ojos.
-Toma, aquí tienes-. Matt le entregó a Mello una foto de ellos dos de pequeños, junto una tableta de chocolate. -Es tu comida favorita, y una foto de nosotros dos-. Mello se extrañó, no recordaba haberse hecho una foto con aquel desconocido.
Mello cogió el chocolate, y lo mordió, sonriente. Lo tragó y sonrió.
-¡Ahhhhh!-. Sonrió de alegría, estaba buenísimo.
-Bueno, nos vamos ya-. Dijo Near, levantándose del suelo. -¿Adónde vas a ir Matt?-. Preguntó Near, poniéndose las manos en los bolsillos.
-Quiero estar aquí un poco más... Y después... Supongo que me dejaré llevar-. Dijo Matt, sonriendo, mirando el horizonte. -Estaré en mi habitación, en la de Mello y quizás... En el patio jugando con los chavales-. Dijo Matt.
-Debemos irnos-. Dijo Rester, mirando el reloj. -Nuestro vuelo sale dentro de dos horas-. Near miró a Matt.
-Gracias Matt-. Dijo Near.
-De nada Near, gracias-.
-De nada...-. Dijo Near.
-Adiós, amigo-. Near le miró sorprendido...
-E-Emm...-. Near, sonrió. -Amigo-. La SPK, Near, y Mello, volvieron a Japón. Matt, se quedó en Inglaterra durante un poco más, dejándose llevar. Linda, se hizo famosa pintando cuadros, que colgaron en museos de todo el mundo, mientras vivía en Estados Unidos. Por fin cumplió su sueño.
He sido repetitivo en esta historia, pero quiero que el mensaje quede grabado y calado dentro de la persona.
Lucha. Aunque no consigas todo tu objetivo al completo, lucha, que siempre vas a obtener un porcentaje de la recompensa en esa lucha.
Quizás Mello no era consciente en aquel momento, de que había cumplido con lo que dijo aquel día en el secuestro de Takada.
-Vivir... Por él...-.
Mello, después del secuestro y de capturar a Kira, viviría con Near, y estaría toda la vida junto a él. Algo que Near no sabía en aquel momento.
En aquel momento... En aquel instante, no lo sabía. Pero supongo que lo descubrirá.
Gracias por leer esto, cuando lo comencé a escribir, solo era un diario estúpido... Ahora supongo que son las memorias del hombre mejor vestido del mundo, que casi muere como un perro abandonado.
Ahora sí, adiós lector.
PD: Como te pille leyendo otra vez mi diario, te arranco la cabeza.
~Descansa en paz L~
Narrado por M
Sin Vuelta Atrás
CONTINUARÁ.
-A-Ah..., Mello-. Dijo Near, mirando a Mello, quién sonreía.
-Ya estoy en casa-. Dijo el rubio, y Near lloró. Los dos se abrazaron.
-Te amo...-. Dijo Near.
-Y yo a ti-. Dijo Mello.
Ahora si...
Fin.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro