---Miyagi---

En verdad fui un tonto desde un principio al no darme cuenta de los sentimientos que tengo por Shinobu, tal vea si hubiera sido más firme, él jamás me hubiera dejado, y hasta la fecha seriamos amantes, que se aman y se lo demuestran.

Sé que su padre con el tiempo nos hubiera aceptado, ya que es su hijo y yo hubiera peleado por que me dejara estar a su lado...
Pero me di cuenta demasiado tarde de mis sentimientos, ahora tengo que luchar por una oportunidad con mi terrorista.

Me enfurece que ese tipo este cerca de él, primero el mocoso del pelimorado y ahora este hombre que se ve como de mi edad...

No aguante más mis celos, la manera en como ese abogado miraba a mi terrorista, no me gusta para nada, así que me acerque a él y lo tome de las muñecas.

-Shinobu-chin necesito ver unos archivos contigo. –lo jale conmigo llevándolo hasta mi oficina.
-¿Miyagi? –pregunto cuándo cerré la puerta.
-No permitiré que te alejes de mi lado, -lo mire a los ojos- te amo Shinobu, yo estoy enamorado de ti...

Él se sorprendió tanto ante mis palabras.

-M-Miyagi esto es...
-¿Shinobu-chin? –tome sus manos.

De repente él empezó a reírse a carcajadas y lo mire.

-Que buena broma. –comento alejándose de mí.
-¿Qué? –me confundí.
-Bueno profesor discúlpeme pero se me hace tarde para ir a mis clases.
-Estás entendiendo mal yo...
-Me hizo el día su broma, por favor salúdeme a mi hermana de mi parte.
-¿Risako? –lo mire.
-Sí, mi padre me dijo que ustedes habían vuelto, felicidades. –sonrió.
-Eso no...
-Bueno con permiso. –hizo una reverencia.

Trate de detenerlo pero él salió muy deprisa. Empecé a caminar pero Kamijou entro antes de darme la oportunidad de seguirlo.

-Profesor ¿qué diablos está haciendo? –pregunto irritado.
-Tengo que hablar con Shinobu.
-No puede, -me miro- tiene que ir a aplicar un examen.
-Ahh, Kamijou. –bufe.
-Nada, ahora váyase.
-Sí...

Camine pesadamente hasta el salón y les aplique el examen, me quede mirando hasta enfrente pero sin prestar atención.

En verdad no puedo creer que Shinobu piense que mis sentimientos por él son una broma, me dolió tanto cuando lo dijo.

Aunque tampoco entiendo porque dijo eso de su hermana, ¿su padre le habrá dicho que regresamos hace unos años? Aunque como reacciono tal parece que no le dijeron que terminamos un poco después....

Yo amo a Shinobu y no importa las veces que tenga que decírselo, mis sentimientos llegaran hasta él, yo sé que todavía siente algo por mí, haré lo imposible para enamorarlo.

Después de recoger los exámenes los califique y los guarde en la oficina. Kamijou ya se había retirado, mi amado Shinobu estaba aún en clases.

Me dirigí a pasos lentos hasta la salida de la universidad y encontré a ese abogado recargado en un auto deportivo negro mientras fumaba un cigarro.

Respire profundamente y camine hacia él.

-Profesor Miyagi, ¿ya ha terminado? –pregunto.
-Así es Abogado Ryuichi.
-Por favor solo dígame Asami.
-Así será, -lo mire- seré directo.
-¿Cómo?
-¿Qué pretendes con Shinobu-chin?
-¿Por qué me lo pregunta? Acaso, ¿le interesa?
-Sí, -cruce los brazos- por favor contésteme.
-Shinobu es, -dio otra calada a su cigarro- lo que más me importa.
-Quieres decir que... ¿te gusta?
-Demasiado. –sonrió.

Sentí como todo mi cuerpo se llenaba de furia que tuve que contenerme ya que no quería actuar por puro impulso.

-¿Por qué tus preguntas? –me miro.
-Solo interés.
-Sí claro, -bufo- ¿Cuáles son tus intenciones con Shinobu?
-No tengo porque decírtelas.
-Yo te dije las mías, es justo que me digas las tuyas. –dijo altanero.
-Amo a Shinobu.
-Mmm, entiendo.
-No creo que lo entiendas. –lo mire.
-Claro que...
-ASAMI. –grito mi niño y corrió a su lado.
-¿Qué tal el trabajo? –pregunto.
-Todo tranquilo. –sonrió.
-Bueno iremos a comer y luego a dar un paseo. –comento el abogado.
-Me parece genial. –dijo mi terrorista- Nos vemos el lunes profesor Miyagi.
-Shinobu...

Ellos se subieron al auto.

Esto no puede estar pasando, ese tipo no me puede robar a mi niño, realmente no puede...

---Shinobu---

Después de una clase con mis alumnos salí y encuentre a Asami esperándome, me impresiono el hecho que estuviera platicando con Miyagi pero decidí no tomarle importancia, me despedí de él y Asami me llevo a un restaurante a comer.

-Es delicioso. –comente.
-Me alegro que te guste. –sonrió.
-¿Ya sabes dónde te quedaras? –pregunte.
-Acaso, -sonrió- ¿quieres que viva contigo?
-Pero que dices, -desvié mi mirada sintiendo como mis mejillas se sonrojaban- solo preguntaba.
-Es una broma Shinobu, -tomo mi mano- no quiero avanzar tan rápido.
-¿Avanzar?
-Termina de comer mi niño, te lo explicaré al rato.

Seguimos comiendo aunque me sentía un poco nervioso ya que Asami no dejaba de verme, trataba de no mirarlo pero nuestras miradas se encontraban.

Después de comer salimos a pasear por un parque, sentí como pasaba su brazo por mis hombros y me estremecí ante su tacto.

-¿Te molesta? –me miro.
-No, -dije apresurado- m-me gusta.
-¿Mi abrazo o yo? –sonrió.
-¡¡Asami!!
-Jeje lo siento, me encanta bromear.
-Lo sé. –suspire.
-Aunque, -me volteo y tomo mi mentón- tengo que decirte algo importante.
-¿Qué sucede?
-Shinobu, tú sabes que te aprecio tanto.
-Sí. –me sonroje.
-Estoy enamorado de ti Shinobu. –me miro.
-A-Asami, y-yo...
-Quisiera que me dijeras que piensas de mí.
-Eres un hombre sensacional, muy atento y cariñoso, me has apoyado tanto en mi carrera, en mi trabajo, confías en mí y siempre me pones como tu prioridad. –sonreí.
-Eres lo mejor para mí, único e inigualable. –se acercó más a mí.
-T-tú me...
-Shinobu...

Coloco sus labios en los míos dándome un beso tierno, tomo mi cintura y me pego más a él, yo coloque mis brazos alrededor de su cuello, no nos importaba el lugar donde estábamos solo quería sentir de nuevo el calor y la protección que me brinda.

-Te amo Shinobu. –susurro en mis labios.
-Y-yo, -yo...
-Tranquilo Shinobu, no te presiones, puedo esperar todo el tiempo necesario para que...
-Te quiero Asami. –lo interrumpí con un gran sonrojo en mis mejillas.