Unos minutos fueron los que pasaron mientras los cuatros se divertían con sus tonterías. Pero al menos necesitaban comer, mayormente los dos tortolitos que no habían desayunado nada por levantarse tarde.

Así que ya los cuatros se estaban yendo para el comedor, y en ese momento Error paró a Ink, que ambos se miraron por unos segundos.

- ¿Puedes seguirme? Te quiero mostrar algo -

Le dijo con una sonrisa, a lo que Ink de alguna manera desconfío, no por nada, pero después de lo que pasó… 

- Pe-pero no vamos a dejarlos a ellos dos solos para que vayan al comer -

Intentó agarrar la primera excusa que se le ocurrió, a ver si al menos caían.

- No te preocupes, vamos a ir juntos, tampoco es que estemos solos, así que vayan -

Fue Dream esta vez quien habló con una sonrisa inocente, aunque luego miró hacia el frente guiñando el ojo hacia los otros dos chicos. Ink no entendió si ese guiño era para él, o para Error, el muy…

- Así que vamos Blue -

El nombrado sin entender mucho de lo que pasaba, le siguió el paso apresurado que Dream había empezado cuando tomó su mano y empezó a casi correr hacia el comedor. Dejaron a Ink y a Error, el primero con una expresión seria mirando por donde se habían ido pensando en lo que había hecho Dream.

- Para qué quieres enemigos si tienes a Dream que te deja solo conmigo cuando no quieres estarlo -

Esas palabras al menos hicieron sonreír al menor, que le miró de reojo.

- ¿Qué querías hacer? -

- Ven, sígueme -

Le respondió dándose media vuelta para ir caminando con el menor detrás de él.

- Digamos que sí, ese regalo lo hicimos entre los tres, pero yo hice uno especial para ti -

Su forma de decirlo tan orgulloso le hacía gracia al menor. Y mientras iban caminando hasta su habitación se quedó pensando un momento en lo que le iba a regalar.

- ¿Eso te quedaste haciendo hasta las 4 de la mañana? -

- Mm? ¿Cómo sabes? -

- Pues digamos que la luz que pusiste al lado de la cama molestaba mucho y no me dejó dormir mucho -

Le respondió sonriendo levemente, pero a pesar de que había estado despierto, ni siquiera sabía que había estado haciendo el mayor. Eso hacía que todavía fuera una sorpresa, y estuviera emocionado por saber que le había hecho.

- Espérame aquí -

Le dijo Error, mientras este entraba al cuarto, dejando a Ink en la parte de afuera de este esperándolo. El menor le hizo caso, quedando apoyado en la pared al lado de la puerta. Y el mayor fue directamente a buscar el regalo en el cajón que lo había dejado, y al tenerlo salió de la habitación. Miró al contrario con una sonrisa, y sin dejar que este viera aun el regalo se lo dejó encima de la cabeza.

- Eh? -

Era chiquito, y liviano, y al mover la cabeza levemente hacia adelante, cayó un pequeño amigurumi (muñeco de peluche tejido) a sus manos. Era un conejito, blanco, y muy bonito para los ojos del menor.

- ¿Lo hiciste tú? -

Movió su cabeza para mirarle con una pequeña sonrisa, a lo que Error se la devolvió, asintiendo con la cabeza a su pregunta. Ink solo volvió a mirar el muñequito con esa misma sonrisa, quedándose unos segundos así antes de darse la vuelta y abrazar al contrario una vez más.

- Gracias, Error -

El mayor solo correspondió al abrazo.

- De nada, era lo mínimo que podía hacer por ti.. -

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