
Trabajo
Un mes después.
Un mes había pasado desde que su nueva aventura había empezado, la verdad le sorprendía la cantidad de gente que visitaba aquél lugar, trataba de hacer lo mejor que podía para atender a los clientes lo mejor posible, y siempre le dejaban una muy buena propina, estaba feliz.
Mientras por otro lado sus compañeros estaban impresionados, desde que aquel pequeño griego llegó a trabajar la cantidad de clientes había aumentado en aquel lugar.
Sebastian: el jefe debería convertirlo en la figura pública del café.
Alejandra: así es, ¿Cómo es posible que haya logrado llamar a tanta gente?
Adrián: muy fácil, míralo es muy hermoso, además que con la inocencia que se carga llamaría la atención de cualquiera.
Alberto: ahora que lo mencionas, deberían mantenerlo vigilado, no vaya a ser que alguien se quiera propasar con él - dijo preocupado.
Iván: eso es muy cierto - este man se parecía mucho a Aldebarán, y convenientemente era a el a quien más se había apegado Milo desde que llegó.
Adrián: muy bien, Iván ve a cuidarlo, es tú amigo, y te Ara más caso a ti.
Iván: bien, bien, ay voy - dijo y se acercó al estar cerca le habló al cliente - bonjour monsieur ¿comment est votre service?
Cliente: ¿Eh?
Milo: Iván, el me estaba contando que es griego al igual que yo - dijo mientras el otro sólo saludaba con la mano.
Iván: Entonces ¿No me entendió?
Cliente: jejeje pues no...
Iván: entonces lo siento mucho, Milo yo cubriré ahora tú puesto, ahora vete.
Milo: ¿Porque?
Iván: Milo, hoy es tú examen de admisión en la universidad...
Milo: ¿Exámen de admisión? - se acordó - es cierto, el examen se me había olvidado, adiós... - dijo y se fue corriendo - dejando a los otros viéndolo con gracia.
Cliente: ¿Se conocen desde hace tiempo?
Iván: relativamente, desde hace un mes, vive con mi jefe.
Cliente: ¿Sabes si está relacionado con alguien amorosamente?
Iván: creo que no, nunca habla de eso pero no sé, teóricamente lo acabo de conocer pero es muy buen niño.
Cliente: ¿Hm?... Interesante... - dijo viendo en dirección a la que se fue.
Por otro lado
En el santuario.
Cómo ya era costumbre desde hace ya un mes, Mü y Aioros se encontraban persiguiendo a Camus que a su vez se encontraba persiguiendo a Aioria por todo el santuario para matar al lindo gatito, por su parte Aioros pensaba en todo lo que estaba pasando Aioria era su hermano pero que pasaba si estaba mintiendo sólo por vengarse de Milo, en eso se puso a meditar y un par de palabras se le vinieron a la mente.
"Fue picado por mis Escorpioncitos, eso me dio una ventaja para poder darle un golpe y escapar"
Esas palabras resonaban en su mente, porque era cierto si Milo hizo lo que se le acusa ¿Porque rayos llego así de asustado a su templo esa noche? Y si la versión de Aioria es la correcta no tendría que tener piquetes de Escorpión, pero tenia miedo, los quería a los dos, los quería mucho y no quería perder a ninguno de los dos, pero cuál será la verdad un gritó lo hizo salir de sus pensamientos.
Camus: ¡TE JURO QUE CUÁNDO TE ATRAPÉ TE QUITARÉ CUATRO DE LAS NUEVE VIDAS QUE TIENES MALDITO GATO!
Aioria: ¡CORRECCIÓN, TENGO SIETE GRACIAS A LAS REVIVIDAS QUE NOS AN DADO LOS DIOSES, NO NUEVE!
Camus: ¡PUES ÉSAS SIETE SE TE REDUCIRÁN A TRES CUANDO TE ATRAPÉ, ASÍ QUE NO HUYAS COBARDE!
Aioria: ¡ATHENA, SALVEME! - le gritó a la diosa que molesta usó su cosmo para dormir a ambos caballeros para después teletrasportarlos a sus templos.
Athena: ¡Les ordenó no dejarlos pelearse más, que suficiente tengo con la desaparición de Milo y Nike para soportar sus niñerías! - dijo molesta la diosa para después darse la vuelta eh irse.
Mü: ¿Y ahora que le pasa? - pregunto confundido.
Aioros: el patriarca me dijo que si Athena expulsó a Milo del santuario no fue por lo que se le acusa, ya que no cree que sea verdad si no qué una fuerza mayor la obligó a alejar al octavo guardián del santuario, por eso está tan preocupada, ya que sin Nike le será imposible encontrar a Milo ya que no tiene cosmo.
Mü: así que es por eso...
Aioria: así es, ve a cuidar a Camus en Acuario yo iré a Leo - dijo serio y se fue.
Mü algo confundido hizo lo pedido pasado un rato llego a Acuario y se sentó en el sillón de la sala privada del templo, no iba a entrar a la habitación ya que al único al que Camus le permitía estar así de cerca de él era a Milo, estaba pensando seriamente en decirle a Camus dónde estaba Milo para que estuviera tranquilo, pero después cayó en cuenta que si hacía eso Camus no tardaría mucho en salir a buscarlo y si lo hiciera se iría sin decirle nada a nadie y si hiciera eso Athena los enviaría a buscarlo por traición y si lo hacían encontrarían a Milo y eso era lo que no quería que volvieran a lastimar a su hermanito así que tendría que elaborar un plan perfecto
Pasadas unas cuantas horas.
Seguía esperando, la verdad no sé esperó que fuera a tardar tanto al despertar, su teléfono sonó por unos así que lo contestó.
En la llamada.
Mü: ¿Diga?
Milo: Hola Mü...
Mü: Milo, que alegría escucharte ¿Cómo estás?
Milo: Ufff... Cansado, pero estoy bien ¿Cómo están las cosas por haya? ¿Camus ya volvió?
Mü: si ya regreso.
Milo: ¿Y que dijo? ¿Ya se enteró? ¿Él también está molesto conmigo? - pregunto triste.
Mü: ya lo sabe Milo, y pues se enojó por lo que te hicieron.
Milo: ¿Cómo? - dijo sorprendido.
Mü: el sabe que no es verdad Milo, está muy triste y te extraña, de hecho a hecho lo posible por encontrarte.
Milo: ay mí Camus - dijo con un tono diferente.
Mü: ¿porque lo dices así?
Milo: ¿así Cómo?
Mü: así con un tono, diferente al cómo te expresabas de el aquí en el santuario
Milo: no lo sé Mü, desde hace tiempo no puedo dejar de pensar en el, y tengo una muy extraña sensación así cómo de maripositas en el estomago cuando habló de el
Mü: Hm.... ¿Y no te haz puesto a tratar de averiguar qué podría ser...?
Milo: ¿tú sabés que es?
Mü: Si... ¿Quieres saberlo?
Milo: Si...
Mü: eso se llama A-M-O-R
Milo: no te entiendo
Mü: - se pegó en la frente con su mano - ay pues que te estás enamorando de Camus
Milo: ¿Qué?... Eso es imposible, eso no puede ser, somos amigos, es más no lo eh visto en medio año, eso no puede ser - dijo con un pequeño sonrojó en sus mejillas.
Mü: pues al parecer estar tan lejos de el te hizo aclarar tus ideas hermano - dijo con gracia.
Milo: no puedo enamorarme de Camus el ya tiene a Saga, además no puedo condenarlo a el también al exilió, No. Él está mejor al lado de Saga esa es toda la verdad.
Mü: ¿Milo? ¿Nunca te haz puesto a pensar que Camus sólo está con Saga para darte Celos a ti?
Milo: y dale con lo mismo - dijo cansado - Mü, discúlpame por este tono que voy a usar, pero si yo le gustara a Camus, el me lo diría a la cara además que yo lo notaría ya que lo conozco, Camus no es un maldito cobarde.
Mü: Cálmate bichito, no era para ofenderte, pero... Cuando se trata de amor las personas cambian
Milo: cambiemos de tema ¿Si?
Mü: bien.
Milo: bueno por lo que te llamaba era para decirte que ya hice mí prueba de admisión en la universidad.
Mü: ¿así? ¿Y que tal te fue?
Milo: estoy seguro que bien, mañana tendré que venir a ver mis resultados
Mü: Hm... Que bien, y cuál cursaste.
Milo: pues me tocó ir por administración de empresas...
Mü: ¿Y eso?
Milo: tú amigo dijo que necesitaba un aministrador así qué...
Mü: Milo... Se supone que tendrías que tomar una carrera que te guste no que le guste a los demás >:v
Milo: jajaja... Cálmate borreguito.
Mü: ¿De qué te ríes?
Milo: de que te la creíste, no cómo crees, tome la carrera de doctorado en salud pública.
Mü: ufff... Ya me habías asustado Milo - alguien estaba a las espaldas de Mü.
Milo: ese era el chiste, bueno te dejó tengo que .... - se escucho qué abrió la puerta
Y....
— silenció —
Mü: ¿Milo? - pregunto.
Camus: ¿Estás hablando con Milo? - pregunto a sus espaldas.
Mü se quedó helado, el Acuariano estaba a sus espaldas con sus ojos brillando de alegría, Mü tenía el teléfono pegado a la oreja, del otro lado no se escuchaba nada tampoco.
¿Que había pasado allí?
Era lo que se preguntaba, el pelirrojo aprovechando que Mü seguía quieto le quitó el teléfono de la mano pero cuando iba a hablar, la llamada se colgó, Camus habló por el aparatito pero nada entonces lo alejo y se le quedó viendo a Mü.
Camus: ¿Era Milo verdad?
Mü: claro que no, era el joven que tiene su nombre, el de la florería - dijo un poco nervioso - ¿Y ahora qué? Nos descuidamos mucho - era lo que pensaba.
Camus: ¿Encerio? - dijo triste otra vez, sabía que Mü no le mentiría y si supiera algo de Milo ya se lo hubiera dicho.
Mü: sabes que jamás te mentiría - le decía también triste le dolía verlo así aunque era sorprendente, Camus estaba llorando de la frustración y tristeza enfrente suyo, Sólo Milo conocía esa faceta, ésto era impresionante y triste.
Camus: ya no puedo más Mü, ¿Dónde está? Siento que me estoy muriendo en vida - decía cubriendo su rostro con sus manos.
Mü: ay Camus... - dijo poniéndose de pie y extendió sus brazos para acercarse y abrazarlo, grande fue su sorpresa al ver al acuariano correr el por su cuenta a abrazarlo y llorar con más fuerza - perdóname, encerio perdóname, pero cuando sea el tiempo sabrás la verdad... - fue lo que pensó para después abrazarlo con toda la fuerza que el tenía.
En Francia.
Milo estaba mudo, no podía artícular palabras, estaba asombrado por lo que estaba viendo, su teléfono estaba en el suelo, y los dos individuos estaban viéndolo fijamente.
Edouard: oh ya estás aquí, quítate... - le decía al otro que lo tenía acorralado en la pared a pocos centímetros de su rostro
Xx: ¿Y el quién es? - pregunto viendo a Milo serio.
Edouard: es Milo, mi hermano menor, el que te conté estaba viviendo en Grecia y recientemente se había venido a vivir conmigo - le dijo separándose para después ponerse junto a Milo, el otro retomó su postura acomodando su saco y sonrió.
Xx: no se parece en nada a ti - le decía con cierto brilló en los ojos.0
Edouard: es obvio, nosotros somos únicos, bueno voy a presentarlos, Milo te presento a Damien, Damien Le coeur d'aquarium es un amigo mío, Damien, el es Milo.
Damien: C'est comme je te connais
<Es un gusto conocerte cariño> - le dijo para después tomar su mano y besarla.
Milo: ¿Que dijo? - le susurró.
Edouard: no le hagas caso a este pedazo de Merde - le dijo a Milo fulminando al otro con la mirada
El teléfono sonó Edouard fue a contestar, Milo tenía la intención de seguirlo pero el otro le dio un jalón apegandolo todo lo que podía a su cuerpo tomándolo por la cintura para después susurrarle al oído.
Damien: Je promets de te faire mon amour de l'amine - le susurró para después morderle levemente el pabellón de la oreja.
Milo tembló por eso, después el otro lo separó y siguió caminando buscando al otro, en la mente de Milo sólo habían dos preguntas.
Milo: ¿Que rayos me dijo? ¿Y porque ese sujeto se parece a Camus? - era lo que pensaba.
Porque si ese sujeto se parecía físicamente a Camus en todo, literalmente parecían gemelos pero después tendría que averiguar qué rayos le había dicho ese chico, así que se fue a la sala con ellos se sentó al lado de Edouard y se pusieron a hablar aunque el se sentía incómodo por las miradas que el francés mayor le daba, lo que a él más le molestaba era que se parecía a Camus y estaba empezando a sentirse mal por eso ya que Camus tenía pareja, el tenía que controlarse.
Edouard: Milo, la razón por la que el esta aquí es porque te irás a vivir con el durante un tiempo.
Milo: ¿Que?
Edouard: necesito hacer un viaje por trabajo, hacía Colombia, tienen un buen café ay, y necesito comprar para las cafeterías, pero no quiero que te quedes sólo por eso mí amigo nos hará el favor de cuidarte un rato.
Damien: si, puedes irte tranquilo, yo lo cuidare, no creo que me dé mayor problema.
Milo: Encerio puedo cuidarme sólo.
Edouard: ya lo sé, pero no pienso arriesgarme a qué alguien te haga algo Milo, aún tienes cara de turista es más, aprovechando eso el te puede enseñar francés, tiene mucha paciencia para eso.
Damien: si así es...
Milo: pero...
Edouard: por favor no vamos a discutir por eso ¿Verdad?
Milo: está bien, ¿cuando te vas?
Edouard: me voy mañana, pero no te preocupes, iré contigo para que puedas estar cómodo ¿Bien?
Milo: está bien, pero...
Edouard: si es por adrienne viene conmigo - dijo feliz.
Damien: así que tú novia va contigo - ay Milo notó algo, un poco de tristeza que el otro pareció no notar.
Edouard: así es, no puedo dejarla aquí ¿Oh si?
Damien: no claro que no - Milo se puso de pié.
Milo: iré a comprar unas cosas...
Edouard: bien pero no te alejes mucho.
Milo: ya sé, pero para que estés más tranquilo iré con Damien, así aprovechando compramos algo para la cena - dijo sonriendo tomó la mano del otro y empezaron a caminar al abrir la puerta vieron a Adrienne en la puerta ella le sonrió muy amablemente a Milo y después a Damien entró y le dio un beso casto a Edouard en los labios, Milo tomó la mano del otro y se fueron cuando estuvieron a afuera del hotel Milo habló.
Milo: ¿Porque no se lo haz dicho?
Damien: ¿de que hablas? - pregunto confundido.
Milo: decirle de tus sentimientos... - dijo parando de caminar el otro paro a unos pasos adelantes dándole la espalda.
Damien: no sé de qué me hablas.
Milo: claro que lo sabes... - habló con seguridad.
Damien: y tú ¿cómo estás tan seguro?
Milo: mí mejor amigo es igual que tú, difícil de decifrar sus sentimientos para los demás pero no para mí, porque no le dices nada
Damien: no tiene caso.
Milo: ¿Cómo que no? Son tus sentimientos.
Damien: eso no importa, el ya es feliz y no me gustaría verlo sufrir prefiero estar con el aunque sea cómo su amigo.
Milo: pero ¿Estas dispuesto a dejar tú felicidad a cambio?
Damien: Si.
Milo: bien, si prefieres hacer las cosas así no te diré nada, pero me duele mucho verte sufrir, en cierta parte, me recuerdas mucho a el, te le pareces físicamente a el.
Damien: ¿A quien a tú amigo?
Milo: - asintió - si y por eso te entiendo, jamás me gustaría verlo así, mi corazón se rompería y lo hace ahora contigo.
Damien: no tienes porqué sentirte así por mi, nisiquiera me conoces.
Milo: pero si comprendo tú dolor, y es muy feo que tengas que esconderlo bajo una falsa sonrisa.
Damien: ¿y que propones que haga? Están a un par de semanas de casarse y no me gustaría ser la causa de su tristeza, además yo no soy suficiente cosa par... - ya no dijo nada cuando sintió el pequeño cuerpo del menor abrazándolo con fuerza, no supo porque pero ese abrazó iba cargado de tanto calor, que poco a poco empezó a abrazarlo.
Milo: se que para ti soy un completo extraño, pero para mí es cómo si ya te conociera y se que tienes ganas de llorar, por eso te invitó a hacerlo, saca ese sentimiento de soledad de tú corazón.
Damien: eres un chico muy extraño, pero tienes razón, tengo ganas de llorar, llorar cómo nunca antes lo había hecho, ¿Puedo confesarte algo?
Milo: Si...
Damien: jamás había llorado desde que separaron a mi hermano de mi.
Milo: ¿Encerio? Debió ser duró - sintió cómo el otro empezó a llorar.
Damien: jamás le permiti a nadie verme llorar, porque me hace verme débil, vulnerable.
Milo: definitivamente, tiene los mismos pensamientos de Camus, ay mi cubito, sólo lo vi llorar así una vez que estuvimos solos en el templo, no me explico el porqué pero hacia lo mismo que el está haciendo ahora, abrazarme con toda la fuerza que tenía y aferrándose a mi cuerpo todo lo que podía.
Y así se la pasaron por casi media hora, abrazándose sin decirse nada pero con algo en común.
Sentían que compartían algo, una especie de calor oh más bien un frío muy familiar, que no sabían cómo explicar pero que ambos apreciaban mucho.
Tiempo después cuando se desahogo se separó retomó su semblante serio pero ahora con paz en su corazón ya no dijieron más, sólo sus miradas comunicaron lo que sus corazones sentían y sólo se dirigieron a la tienda compraron lo que necesitaban y regresaron al departamento.
Al llegar todos se pusieron a preparar algo entre risas y uno que otro juego por los menores y concineros del grupo.
Milo y Adrienne :v
Estuvieron presentes, en lo que los mayores hablaban hacerca de la mudanza, al llegar la hora de la cena hablaron entre todos, una que otra mirada discreta por parte del pelirrojo hacia el rubio que trataba de no verlo se hacían presentes para después acabada la cena los invitados retirarse.
Edouard fue a dejar a su prometida a su casa, en ese momento dejando a Milo sólo el salió al balcón y dirigió su vista hacia la torre Eiffel suspiro pesadamente y dirigió su vista ahora a las estrellas.
Milo: Te extraño tanto Camus... - dijo con sus ojos brillando al compás de las estrellas.
Sin saber del sentimiento que cada vez afloraba cada día mas en su corazón.
Continuará...
Tarea del día.
Averiguar qué le dijo Damien a Milo y ponerlo en los comentarios (~‾▿‾)~
Tarea número dos, algún dato curioso que hayan notado en el capítulo.
¿Que tiene que ver Damien con nuestro cúbito favorito?
Que creen que sea
Una de sus siete caras oh ay algo más.
Se despide Shun de Andrómeda 123 😘
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