Capitulo 22.-
La puerta se abre poco a poco y veo la rubia nuca de Kent. Mason es un poco más alto por lo que puedo ver como la cara de Amanda se mueve frenéticamente y llora de desesperación... No es el plan hacerle daño, por lo menos no yo no seré quien lo haga pero Kent es otra historia.
-¡Amanda!- Corre hacia la chica pero antes de que la toque lo golpeo fuertemente en la cabeza con la palanca. Cae al suelo y se desmaya, lo que me da tiempo suficiente para llevarlo a la cama y atarlo.
La castaña parece gritar pero lo amortiguado de su voz no llega a mi cerebro, solo puedo pensar en lo extasiado que estoy, la sangre golpea mis oídos y mi respiración se hace pesada. No puedo esperar pero debo hacerlo. Voy a cobrar cada segundo de dolor hoy.
Agarro una inyección más del kit que he preparado, quiero que cuando Kent abra de nuevo los ojos vea mi verdadero rostro, ese que tanta veces magulló, aquel que se contrajo de dolor y lloró frente a él llenándolo de regocijo... Ese rostro va a ser el que vea durante toda la larga agonía y el último que vea en toda su patética existencia.
***
Bajo del ático a paso ligero, una pareja está subiendo las escaleras. Me meto al baño para que no me vean, debo esperar a que terminen de besuquearse o se vayan a una habitación para seguir mi camino. No tardan más de 5 minutos y desaparecen. Al llegar al cuarto de Amanda, la castaña intenta zafarse, con los ojos me suplica que la ayude, me intenta hacer gestos con los que señala a Mason el suelo junto a mi y a Kent en la cama. Entro y cierro la puerta con la llave que llevo en mi bolsillo. Es muy útil que esta chica sea tan ordenada que en cada habitación tenga la llave respectiva en un bowl o un llavero en la pared.
Me acerco a ella sin prisa.
-Tranquila todo va a estar bien. - Ella parece relajarse y Kent empieza a removerse despertando. -Pero no para él.
No parece comprender al instante pero empieza a zarandearse en la silla un segundo después, supongo que entendió el mensaje. Junto a la cama, del lado contrario a Amanda, en la mesita de noche, he dejado el kit de jeringas y algunos utensilios que había guardado en casa de Mason especialmente para este momento.
-Hola Kent
-¡Bicho!... ¡Ayúdame, antes de que despierte Mason!
-¿Yo?
-Si, apúrate imbécil
-No no no... muy mal. Cuando uno pide un favor, debe hacerlo de buena manera. Hay un dicho que versa así : En el pedir está el dar. Y tu no estás haciendo un buen trabajo en pedir... ¿como pues quieres que te ayude?
-Vale, vale disfrútalo... pero sácame de aquí ¿ok? por favor
-Muy bien, ya estás hablando como un ser humano. - Su cara se contrae, está desesperado pero lo he molestado- Verás Kent. Nunca has necesitado de mi, creo que recuerdas bien que siempre has sido bastante idiota conmigo
-Ok, ok... quieres venganza, entiendo. Pero este tipo es igual que yo o peor, así que en cuanto despierte no solo me va a dar una paliza a mi, amenazó a Amanda y eso es algo que no permitirás ¿verdad?
-En eso te has equivocado - su cara se deforma- al igual que en muchas otras cosas. Siempre has sido el niño dorado de la escuela, querido por los profesores y admirado por los alumnos pero nunca he entendido por qué. Eres un niño mimado, un imbécil con los menos afortunados y un mal novio con Amanda. Nunca la atiendes ni la escuchas ¿como dices preocuparte por ella?
>>No, no me gustaría que Mason le hiciera algo. Pero tampoco haré nada para evitarlo, al igual que ella nunca hizo nada para evitar que tú y tus amigos me hicieran lo que les dio la gana. Siempre que estaba presente, lo ignoraba como si fuera solamente una mancha sobre la pared.
-¡Idiota! Mason va a despertar
-¡No lo hará si yo no quiero!- Lucen confundidos- Verán, esa es la diferencia entre ustedes y yo. Mientras ustedes piensan que saben y son más que los demás, habemos otros que realmente sabemos más de lo que parece y no lo anunciamos. Simplemente actuamos. No te voy a dar detalles pero por el que menos deberías preocuparte es de Mason.
La música resuena en toda la casa y las paredes vibran entre los brincos y alocados festejos adolescentes en la planta baja.
>>Me has dado tanto... que creo que ya llegó la hora de regresarte un poco.
Me acerco con cautela mientras dejo que la espectativa y el miedo hagan su trabajo en él. Acomodo entre mis manos mi fiel exacto... Ese que ya ha probado la sangre de los malditos, la esencia de la justicia, me encamino y sonrío.
>>¿Recuerdas ese día en la cafetería? La primera vez que me llamaste bicho... Estábamos en la fila del almuerzo y un saltamontes cayó en tu bandeja, lo aventaste a la mía y te hiciste el gracioso compárandome con ese animal. Diciendo que eramos de la misma especie por lo repugnantes que éramos, que como llevaba ensalada en mi plato, debía ser para mi amigo, para compartirlo con la colonia.
-No sabía que tuvieras tan buena memoria
-Me alegra que aún conserves el sentido del humor. ¿Como me dijiste?- Me gire para quedar frente a él con el utencilio en la mano
-Bicho... -nombró mientras el temor hacia mi se hacia presente, ¡eso! Témeme, hazlo.
De un zarpazo le di un corte sobre el torso, haciendo que Amanda desde su lugar respingara y empezara a llorar, la camisa azul del rubio se manchaba de carmín mientras Kent inspiraba por el ardor y la sorpresa.
-Recuerdas esa otra vez en los baños? Tan coincidentemente entraste después que yo a los orinales y te pusiste junto a mi solo para espiarme y burlarte de mi pene. Después de ese día toda la escuela se reía por mi supuesto mini amigo. - No contesta- ¡¿Lo recuerdas?! -El grito sale gutural... desde mis entrañas.
-Si...- apenas lo dice, otro corte le atraviesa y Amanda no para de llorar, ya le llegará su paga. Kent está jadeando, menudo machito salió.
-Es bueno que reconozcas tus errores, como buen líder debes aceptar tus fallas. No puedes cegarte ante los hechos. Al igual que cada vez que me empujaste y golpeaste, no pude cegarme ante cada magulladura, moretón y herida que tenía en el cuerpo
¡Corto! ¡Corto! ¡Otra vez! La sangre brota, los gritos empiezan y los jadeos de una respiración forzada los acompañan. La música de fondo amortigua el sonido y me siento feliz, el sudor ya ha perlado su frente y la sangre ha teñido su piel, la camisa y parte de la cama de la anfitriona. Sigo con las piernas y los brazos. Ver y sentir el aroma de su sangre es embriagador, hasta adictivo podría decir... No hay sensación mejor aquí y ahora. Me llena y me hipnotiza.
-Se podría decir que ante el peligro puedes llegar a ser honesto Willson pero, hay cosas que no le has contado a Amanda ¿cierto? -Los ojos de ambos se abren como platos- Hay cosas en las que estuviste metido y no lo saben más que tus cómplices, tu computadora y tu ¿Se lo dices tu o lo hago yo?
-¡Cállate imbécil!- Me alegra tanto haber husmeado en la vida de éstos ineptos mientras estaba en sus cuerpos.
-¡Uy! Respuesta incorrecta - De un movimiento, corto a lo largo de su cara atravesando el ojo, eso genera una melodía de gritos y quejidos que me embelesan cual resplandor de estrella fugaz. -Amanda... Lo siento cariño pero tu querido noviecito te ha sido infiel -La chica se molesta pero me sigue mirando con odio inigualable, debo admitir que su carácter es firme- Pero no de la manera en que tú crees.
Eso la deja confundida y sonrío, lo conseguí.
>>Este chico, tan varonil y el sueño húmedo de más de la mitad del instituto, no te había besado antes como en aquella fiesta de Hugo hace unas semanas ni lo ha vuelto a hacer ¿cierto?. No contestes, tranquila, solo lo sé. No bailaba contigo y muy rara ocasión tenían sexo ¿nunca te preguntaste por qué?
Ella mira hacia Kent con desconfianza, he captado su atención.
>>Verás, hay ciertos... gustos que nuestro delantero favorito no ha hecho públicos. La verdad es, que a él le agradan más las relaciones abiertas - miro en dirección a la castaña con fingida inocencia- ¡oh! ¿No lo sabías? Que tonto.... Kent prefiere a los chicos querida.
Con el ceño fruncido y lo que creo es un "púdrete" se gira de nuevo a mi.
>>No solamente ha estado con un chico, este ejemplo de estudiante, ha participado en algunas pequeñas fiestas sexuales, unas orgías si quieres llamarlo así y generalmente su amante favorito es.... ¡Redoble de tambores por favor!.... !Mitch el traficante! Y señores, tenemos un ganador ding, ding, ding... jajajaja
La cara de la chica se deforma en indignación y rabia. El rubio cierra los ojos con pesar y vergüenza, esto es tan dulce, tan delicioso de ver. Está llorando, aquel que tantas lágrimas me sacó , ahora está indefenso, a mi merced y llorando por que no le siga destruyendo la vida.
>>Digo, no es que esté mal ni lo juzgo ¡oh no! Pero al menos debió ser sincero contigo ¿no es así? Tu confiaste en él y ¿que hizo el patán? te embaucó¿y todo por qué? por apariencias, por jugar al chico popular, solo por eso. -Amanda chilla de coraje e impotencia. ¡Bien! Seguimos con el espectáculo principal.
>>Entonces, Kent ¿crees que mereces este castigo por lo que has hecho? No solo a mi... si no a la que dices que quieres.
-Amanda, Amy lo siento... en verdad yo - ella gira la cabeza.
-¡Hey! Déjala, no quiere hablar contigo... responde ¿lo mereces?
-No, nadie merece ésto. -dice con dificultad.
-¡Buuup! ¡Error!- Varios cortes repartidos por su cuerpo hacen que la sangre brote de su cuerpo a borbotones, con cuidado corto la arteria femural, la clase de biología si sirvió después de todo.
Su dolor es como música para mis oídos, sus lamentos, gritos y chillidos son como un dulce manjar y estoy disfrutando ésto, al fin, después de tanto tiempo... Pagará.
Amanda grita de miedo entre la mordaza mientras voy haciendo un lindo mapa a través del cuerpo del rubio.
-¿Recuerdas aquellos inocentes animales que desollaron para humillarme?...Bien, creo que dicen "ojo por ojo...
-¡Nooo! ¡No! Ya déjame en paz . Ya déjame... ¿que quieres, que quieres de mi? -Me acerco con el filo del exacto en el límite de su cabello y el rostro.
-¡Quiero que sufras! que supliques, que te humilles y te duela tanto que quieras morir, que te sientas tan miserable y tan basura como me has hecho sentir todos estos años.
-Ya... ¿ok? Perdón... lo siento, no debí haberte tratado así...no debí golpearte ni llamarte bicho ¿contento?
-¿En serio? Ni siquiera te esforzaste, no lo sientes... ¡Solo temes por tu patética existencia! ¡temes al dolor!Pero jamás te vas a arrepentir de verdad... Te di una oportunidad ¿y así lo agradeces? seres como tu son una escoria que no merece vivir ¡Hugo no tuvo tanta suerte! Y a ti quise darte la oportunidad que siempre me negaste pero al final lo arruinaste, tu soberbia y orgullo serán tu perdición.
Con cuidado inserto la hoja entre el límite del cabello y comienzo a hacer un corte horizontal mientras un hilillo de sangre va bajando por su frente, termino en la oreja y bajo por la mandíbula, los gritos me causan tanta adrenalina que me cuesta trabajo que no me tiemble el pulso. Termino en el cuello y regreso al punto de inicio para terminar el trabajo del otro lado. Al ver que ha quedado más o menos simétrico, me apoyo con la hoja afilada para levantar la piel desde la frente hacia abajo, los gritos de ambos llenan mis oídos y la sangre, mis ojos de una excitante sensación. Jalo con fuerza hasta que se desprende cada espacio, hasta dejar la carne viva a la vista.
El horror no abandona sus ojos y no quiero que sigan mirándome, no lo soporto, me dan asco. Sin embargo, tendré la satisfacción de ser lo último que verá en su vida. De un golpe, incrusto el exacto en el ojo que no había cortado y lo retuerzo para arrancarlo mientras gritos desgarradores y sonidos guturales salen del chico.
-Con éstas manos tomaste el objeto de mi humillación, con estas me has golpeado una y otra vez.... -Con fuerza corto las manos desde las muñecas aunque tengo que cerruchar al llegar al hueso y al ver que no lo conseguiré simplemente sigo con la otra mano. Jalo de la carne viva de su nariz para que el dolor me ayude a abrirle la boca y lo hace entre gritos.
Le cerceno la lengua sin miramientos y la arrojo hacia Amanda. Es una imagen que no olvidará. Cuando miro de nuevo hacia Kent, no respira, creo que ya ha muerto... Un lindo final, muy justo.
Amanda me mira con terror mientras me le acerco.
-No temas cariño, a ti yo no te haré daño. Necesito lavarme y vuelvo. -Me meto a su baño privado y me cambio la playera por la que le he quitado a Mason del suelo. Salgo y tomo otra jeringa para dirigirme al baño de abajo. Entro, pongo el seguro y me pongo el sedante.
***************************************************************************************Holaaaa!!
Nuevo capitulo en las andanzas de Nico. ¿como a ven? Estamos a punto de que esto acabe... pueden empezar las apuesta jajaj más bien sus teorías de como acabará esto... si alguien le atina, le dedicaré el epílogo ;)
No se olviden de dejar sus comentarios, votos y recomendarla si les está gustando, los quiero y les dejo un mega empalagoso abrazo ...maw!
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