Capítulo 15 "Te eligió a ti"
—Nadie besa como tú...es diferente. Se siente bien... hay un libreto a seguir, y sin embargo; me siento libre.
—Es que, yo construyo alas... no cadenas.
Pudo ver el océano azul, profundo, hermoso y pacífico, Harry entonces comprendió que podrían existir muchos ojos azules parecidos al mar, pero en los de Louis, él jamás se ahogaría, Louis siempre sería su salvavidas.
Se separaron después de que la voz enérgica de Michael sonara advirtiendo el fin de la escena. Ambos parecían absortos en sus propias emociones, incapaces de esconder el impacto del otro sobre ellos mismos, los labios hinchados y las manos temblorosas eran apenas los síntomas más visibles, detrás había un cúmulo enorme de sensaciones tejiéndose entre ellos.
Esa escena los había llevado a un lugar donde ni el mejor libreto reflejaría lo que los enamorados pueden sentir.
Estaban hechos líos, y no solo era el corazón, tenían revueltos los pensamientos, el cabello y la vida misma.
Rob intentó calmar a Michael, evitando que aquel casi fatídico momento fuera reprimido, finalmente ambos directores comprendían que si fuera de esas paredes no podían hacerlo, entonces dejarían que dentro de aquel set fueran ellos mismos y sus sentimientos más escondidos saliendo a flote.
Porque tanto amor oculto no libera a quien lo siente, y parte del amor es el vuelo libre.
Repitieron la primera parte de la misma escena en dos ocasiones más y ni una palabra entre ellos fue dicha, pero las ondas eléctricas que viajaban por sus torrentes sanguíneos hablaban por ellos, tenían un sonrojo constante en las mejillas y los ojos casi cristalizados. Harry luchó en ambas ocasiones para no sucumbir ante el primer intento de beso, deseaba tanto que las personas en el set desaparecieran para poder girar sus cuerpos y ser él quien estampara a Louis, tomaría ventaja de su estatura para encajar sus labios contra los suyos desde la primera vez y tal vez cuando Louis comenzara a luchar por alejarse, él lo detendría, tal vez ese sería el momento en que confesaría su amor.
No sucedió.
Tomaron un receso de aproximadamente una hora, aún cuando el reloj indicaba que llevaban más de dos horas horas grabando, Louis se retiró a un espacio en el fondo del set mientras Harry era llamado por Greg a un punto distante.
—¿Mejor? —preguntó Rob cuando se acercó a Louis —eso fue...interesante.
—Lo siento, estaba enojado y no supe controlarme, Harry me saca de mis casillas, me hace enojar, me desespera cuando no tiene un argumento y solo discute conmigo para llevarme la contra —era gracioso ver cuán afectado lucía, estaba hablando muy rápido, dando explicaciones que no le habían pedido solo porque temía que si se quedaba callado terminaría gritando algo que lo comprometiera —él solo quiere ganar y, y-
—Es curioso, —interrumpió Rob— Greg y yo también discutimos, mucho. Peleamos, gritamos, nos lanzamos groserías, sin embargo; nunca he tenido ganas de comerle la boca, y eso que ambos somos gays —Rob lo observaba en silencio, con la sonrisa ladina de un zorro astuto —así que no, no discutes igual con todos tus amigos. Incluso pelear con Harry, es especial para ti.
El castañito le miró sorprendido, sintiéndose expuesto porque claro que era especial, todo con Harry se volvía especial, las emociones siempre estaban ahí, a flor de piel cuando él estaba cerca.
—No sé de qué hablas, nosotros peleamos un poco antes de grabar porque él quiere una explicación de todo, es terco, demasiado obstinado, necio, insistente, tonto y ...
—Louis, para ti —interrumpió Jack mientras dejaba en sus manos su té favorito —Harry lo envía para ti.
Sonrió al vaso, como tonto y tomó aquel té humeante como si fuera un trozo de oro.
—Es tan hermoso, tan amable, tan, tan...tan.
Rob lo miraba sonriente y fascinado, Louis era una bola de sentimientos, era el tipo rudo pero adorable y lo mejor de todo; estaba enamorado.
—Sí, si, veo que es un patán —dijo Rob divertido
Harry lo miraba a la distancia, con las mejillas aún rosas y el labio presionado entre sus dientes. Caminó hacia ellos y Rob entendió que su presencia no era necesaria en ese momento.
—Hola —sus manos dentro de los bolsillos y la postura encorvada mostraban cuán pequeño se sentía en ese momento.
—Hola...—dijo, y había una chispa de alegría en su voz, lo que Harry notó, de inmediato se enderezó y su sonrisa ladeada apareció ganando un poco de confianza —gracias por el té.
—Es mi manera de disculparme por ser tan... tonto.
Louis asintió y escondió detrás de aquel vaso su sonrisa enamorada. Todavía estaban enojados, pero Harry estaba extendiendo una ofrenda de paz y sus dedos acariciando sus propios labios eran un tic nervioso que Louis conocía bien.
—Lou...—se acercó dubitativo, pateó una inexistente piedra del suelo solo para no encararlo cuando preguntó —¿de verdad te gusta Fender?
—Harry...no vamos a hacer esto de nuevo.
—Solo quiero saber, —no elevó su voz esta vez, solo era un murmullo entre ellos y la duda pintada en cada expresión —¿Qué hay en él que te gusta? ¿Es porque canta? ¿Porque tiene ojos azules? ¿Porque es rubio?
—No, no a cada una de tus preguntas, no es porque cante, o el color de sus ojos, nada de eso importa. Sam me ve y eso es todo lo que necesito para darle una oportunidad.
—¿Qué pasa con el otro chico?
—Él no me ve...lo único que yo hubiera querido es que, además de verme, me eligiera; pero nunca lo ha hecho.
—Entonces, ¿Qué viste en él?
Louis suspiró ante la inmensidad de la respuesta que tenía que dar, ¿por dónde comenzar? Había tantas cosas que decir de Harry y sin embargo, cuando giró su rostro para ver a su mejor amigo, vio en sus ojos algo que creyó, era tristeza lo que escondía, podía entender que sus labios siguieran rojos e hinchado pero sus ojos? Estaban enrojecidos y la luz de los iluminadores del set los hacían brillar, como si una lágrima intentara escapar. Le dolió verlo así, pidiendo una explicación para alguien que era él mismo, verlo así fue igualmente doloroso para el castañito.
—No puedo explicarlo con simples palabras, y sé que es un terrible cliché, pero supongo que la forma en que me hace sentir, cuando lo veo todo lo demás desaparece, podría estar entre una multitud o en el mismo palacio de la reina, sin embargo, solo lo veo a él.
El alma se le calentó cuando escuchó el fervor con el que Louis hablaba de aquel hombre. Se sintió miserable y envidió a un hombre sin rostro, porque había tomado lo único que Harry amaba; Louis. Sus pertenecías materiales y su fama no significaban nada si él no estaba, todo se reducía a Louis.
—¿Dónde lo conociste? —la voz rasposa daba una ligera tregua para preguntar sin que se notara su inminente llanto.
—En Londres pero...—suspiró— Harry, realmente no importa, él no sabe lo que yo siento, así que necesito dejar ir este sentimiento. Solo quiero que él sea feliz porque lo merece, incluso estoy seguro que iré a su boda.
Harry lo miró y sintió el enorme privilegio de haber coincidido y compartido un mismo tiempo con Louis, aún si eso significará que fueran eternamente solo amigos. Por supuesto que deseaba ocupar un lugar más especial, pero pensar en perderlo por un desliz como el anterior originó el miedo latente que lo mareaba.
—Yo... yo no podría casarme con alguien que no me ame por lo menos la mitad de lo que tú lo amas a él —respondió con evidente desazón, Louis lo escuchó y sintió el deseo de abrazarlo y pegar sus partes rotas. ¿Por qué eran así?
Amelia no lo amaba con intensidad, ni siquiera estaba seguro de que lo amara y Harry merecía un amor de película...
De película gay, porque entonces Louis podría ser ése que lo hiciera.
—Yo creo que todos merecemos a alguien así. Incluso yo—sonrió triste —Si existe el multiverso, espero que exista uno donde otro Louis sea inmensamente feliz al lado de la persona que ama. Espero que no sean tan tontos como yo, y espero que lo suyo sea mutuo, se lo merecen.
—Yo también...
—¿Qué dices?
—Que espero que haya otros universos en donde otro Harry sea muy feliz con un Louis,—se ruborizó ante sus propias palabras pero no se arrepintió, la sonrisa de su amigo le indicó que aquellas palabras eran bien recibidas —espero que estén tibios y felices, con muchas mantas y tés, ¿crees que se conozcan?
—Creo que mi Louis buscaría a tu Harry de alguna manera.
Hubo un silencio entre ellos, el tiempo parecía correr pero ellos estaban ahí, solo coexistiendo, respirando el mismo aire que el otro. Con la mente en el futuro, Harry preguntó:
—¿Crees que podrías enamorarte de alguien más? Sam, por ejemplo?
Había un hilo de resignación y otro más fuerte de esperanza, aguardando por su respuesta.
—Creo que estoy aterrado de enamorarme de alguien más, —exhaló con pesar— porque eso significaría desenamorarme de mi chico y no estoy preparado para eso.
—¿Tu chico?
—Sí, no estamos juntos pero él es mío.
—Pensé que solo a mí me llamabas así— la evidente molestia de nuevo se colaba entre sus palabras.
—¿Tú quieres ser "mi" chico?
—Pensé que ya lo era.
Louis sonrió detrás de su mano libre y solo negó —Lo eres, eres mi chico Harry Styles.
—Lo soy, pero él también— respondió con los celos en su voz. Harry le miró por el rabillo del ojo y se giró hacia el otro lado, separando el amor y el dolor por no tener algo así.
—¿Algún día alguien me querrá así? —preguntó a la nada, pero su voz no fue desechada, Louis lo escuchó y aquel pesar fue como una sacudida.
—Harry...
—¿Hmm?
—Yo...yo te quiero, más de lo que te imaginas, —Harry lo miró esta vez, un pálpito acompañó su esperanza y su sonrisa aunque pequeña, fue creciendo a medida que Louis terminaba su discurso—y no importa qué, yo siempre voy a quererte, de la mejor manera que puedo hacerlo.
Con el pecho apabullante de sentimientos y los nervios haciendo estragos en su voz, el actor tomó aire hasta responder sin pensar en nada más.
—¿Qué harías si te dijera que yo también te quiero? ¿Qué harías si te dijera que nada es lo que parece?
Louis sintió una oleada naciendo en su interior, Harry había dicho que lo quería muchas veces antes, pero esta vez había algo diferente cuando pronunció aquello. Quiso responder pero no hubo oportunidad.
—¡Harry! ¡Louis! Tenemos trabajo qué hacer —se escuchó a Michael a lo lejos y todo mundo volvió a sus posiciones.
Louis lanzó un suspiro de amor, miró a Harry, ceño fruncido por la interrupción y las manos jugando con su dedo anular como si llevara uno de los anillos que él mismo le había obsequiado antes, se encogió de hombros cuando Rob le hizo señas para que se acercaran de nuevo.
—Lou—Harry le tomó de la mano antes de que se alejara de él, su pulgar acariciando el dorso de su mano con el amor que su boca mantenía cautivo —mi color favorito sigue siendo el de tus ojos.
Louis sonrió y negó con la cabeza, apretó un poco la mano que aún sostenía Harry y le respondió muy quedito cuando se separó de él.
—Tus verdes, el mío. Son preciosos.
...
—Bien, todo mundo, se acabó el recreo. Harry, vamos a retomar la parte que nos falta de la escena anterior. Este es el momento del beso, así que quiero ver amor y pasión. Louis, a partir de este punto —señaló entre sus cuerpos— vas tomar la nuca de Harry, una cámara tomará tus manos en su cabello, tira de él muy levemente, la otra cámara estará en este ángulo y Jack hará el primer plano de sus bocas. Quiero un beso fuerte y duro porque los personajes han peleado un poco —los miró a ambos y como si nada dijo —bueno, ustedes también pelearon pero creo que ya se reconciliaron, —ambos se sonrojaron, incapaces de mirarse entre sí y Michael siguió —entonces el beso es fuerte y...Louis, la cámara se acercará apenas lo suficiente, no quiero juegos, vas a buscar su boca con desesperación y con tu mano en su nuca lo empujas un poco hacia ti, primero giras hacia la derecha y Harry, al lado contrario, repiten a la inversa. Harry, la otra toma la haremos de manera simultánea, así que quiero tus manos en su cintura, arruga su camisa con fuerza como si te quemara. Quiero que me den jadeos y —recalcó— muy importante, Louis, quiero que muerdas su labio inferior con cuidado y Harry, justo ahí necesito un gemido ¿dudas?
Ninguno dijo nada, el color bermellón ya se estaba pintando en los rostros de ambos. Tenían sus protectores listos como siempre para evitar cualquier incidente vergonzoso.
El corazón seguía latiendo con bríos y Louis agradeció que sus ejercicios de respiración con su coach vocal le ayudaran en esta ocasión.
Se posicionaron sobre las pequeñas X en el suelo, el sofá lucía imponente como siempre y sus cuerpos lánguidos se negaban a reaccionar, Louis tenía sus manos en las mejillas de Harry y éste pudo sentir su temblor, giró su cabeza lo suficiente para que su boca rozara la palma de su amigo y dejó un rápido y minúsculo besito, Louis tembló más.
Todo se hizo más íntimo cuando las luces comenzaron a opacarse y la voz de Jack gritaba un número y una señal para comenzar, a lo lejos la claqueta sonó y todo el mundo guardó silencio.
Louis comenzó a mover sus manos hasta llevarlas a la nuca de Harry, tomó el cabello de esa zona y comenzó a tirar de él como Michael dijo, Harry cerró sus ojos y sus labios se entreabrieron, el color carmín de sus labios no desaparecía ni con las tenues luces, Louis se acercó hasta que sus narices chocaron, las manos de Harry desaparecieron del rostro de Louis y buscaron presurosas su cintura, sus dedos apretaron la dulce piel y Louis jadeó por primera vez en esa toma.
Harry terminó con el juego de las narices rozándose y buscó su boca, a pesar de que el libreto no lo marcaba así, Louis también buscó su boca, sus labios delgados fueron directo hacia el labio superior y acariciaron con el más anhelado toque, Harry sintió su estómago encogerse cuando la humedad y calidez de la boca del castañito le dieron la bienvenida.
Apretó en puños sus manos y-
—¡Harry!
Aquella no era la voz de Michael, el director se levantó de la silla y todos en el set voltearon hacia donde se escuchó aquella voz.
Rick estaba pálido y uno de los guardias de seguridad detrás de él. Amelia Winston había llegado minutos antes, cuando Rick indicó que debía esperar en el roulette, la chica se negó y haciendo caso omiso, entró al set. La escena ya había comenzado y poco le importó el trabajo de todos, su ira y su orgullo no le dieron cabida al raciocinio, enfurecida con la imagen de su novio besando al chico del cual estaba enamorado la hicieron arder en llamas, interrumpiendo de forma brusca.
—¡Harry!
Harry se separó de inmediato cuando la escuchó e instintivamente se colocó al frente de Louis, como una especie de escudo.
—¡Maldición Amelia! ¡No puedes entrar así aquí a interrumpir nuestro trabajo! —exclamó Michael—¡Rick!
—¡Claro que puedo! ¡Soy su novia! ¡Y soy una directora también!
—¡Con mayor razón! —Michael dejó caer su megáfono y la Tablet con el libreto—¡Rick, Johnny! ¡Saquen a esta mujer de aquí!
Amelia ignoró por completo a todos, caminó hasta el sofá y enfrentó a Harry, ridiculizando todo el trabajo que estaban haciendo.
—Estoy esperando una explicación Harry.
Harry dio un pasó lejos del castañito para acercarse a ella, Louis lo sintió tan lejos, porque un metro nunca fue tan distante como cuando Harry se separó de él y la tomó la mano a ella, con la única intención de alejarla.
—Amelia, ¿Qué haces? —Harry dijo, con la sorpresa pintada en todo su organismo —Estamos trabajando ¿ves las cámaras?
—Te dije que vendría por ti, te he llamado todo el día y no respondiste.
—Estábamos grabando.
—¡¿Qué mierda Amelia, no puedes estar aquí! —Michael se acercó a la pareja, mientras Rob se acercaba a Louis, Harry retrocedió, con la mirada buscó a Louis y sus ojos hipnotizantes casi lo desconocieron.
—Lou —se apresuró a decir —Yo me encargo, no te preocupes ¿okay?
Louis asintió, pero no pudo evitar sentir que de alguna manera ella había llegado para impedir que él siguiera allí, le dolió pensar en que ese sería el último chance con Harry, se obligó a parecer estoico, pero la verdad es que temía que Michael se decidiera por ella.
Alrededor de diez minutos fue el tiempo hasta que la chica se calmó y ofreció una tregua.
—Déjame grabar esto Michael, puedo hacerlo —ella volteó a ver a Louis que todavía estaba con Rob pero él no le devolvió la mirada —puedo hacerlo mejor, es mi novio después de todo.
—No me importa, esto no es un juego, tengo a mis actores listos.
—Por favor —suplicó con falso llanto —déjame hacerlo, hazme una prueba, puedo hacerlo.
—No, no puedes venir aquí e interrumpir todo nuestro trabajo por un capricho.
—Michael por favor, hablaré con Greg —amenazó— estoy segura que él no se opond-
—¡Habla con el studio, con Greg, con quien quieras! Pero no cambiaré mi postura. Dices que eres una directora y-
—¡Lo soy! —interrumpió con arrogancia.
—¡Pues no lo pareces! ningún actor o actriz verdadero montaría un berrinche en medio de una filmación así, esto nos está costando miles de dólares Amelia, si no respetas mi trabajo y el de mis actores, no tienes nada que hacer aquí.
—Harry —se colgó de su brazo y le habló con un lloriqueo que daba pena —¿vas a dejar que me trate así?, soy tu novia!
—Amelia, por favor —Harry luchaba por mantenerla lejos del espacio de Louis, no se arriesgaría a que se acercara a él —llevamos horas grabando, esto no es un juego. Cálmate, hablaremos mas tarde.
—¡No! —se cruzó de brazos —Quiero hacer la escena contigo, puedo hacerlo mejor que él.
En ese momento Harry buscó a Louis, odió aquellas palabras que pudieran lastimar la autoestima de su chico, Louis se había rehusado desde un principio, fue Harry quien insistió en que filmara con él, no lo dejaría solo ante las palabras duras de la mujer.
—Louis está haciendo un excelente trabajo, respeta eso.
—Per-
—Nada, Michael es el director y él decide.
—Te vas—dijo Michael, sin intenciones de ceder —y no te quiero por aquí de nuevo, si no tienes respeto por mi trabajo y el de mis actores, no eres bienvenida. ¡Rick, Johnny! acompañen a la señora fuera.
—Michael, un minuto por favor— dijo Harry, mientras tomaba a la chica del brazo y la llevaba fuera.
Discutieron alrededor de diez minutos más hasta que el actor volvió, el rostro serio y el ceño fruncido, se dirigía a Louis cuando Michael lo llamó.
—Harry, no tengo más problemas contigo, pero si esto se repite tendremos que tomar otras decisiones. Hazle saber a esa chica, aunque ya debe saberlo; que no puede sabotear tu trabajo y el nuestro, si en verdad te respeta, haz que respete tu trabajo.
—No sucederá de nuevo—el ojiverde tenía un semblante serio y avergonzado —Te ofrezco una disculpa Michael, ella no volverá.
—No sé todo lo que pasa Harry, pero si me aceptas un consejo, déjame decirte algo "Tengo veinte años casado con mi esposo, no ha sido fácil pero ¿sabes qué nos ha mantenido a flote? El apoyo, él y yo nos apoyamos en nuestros proyectos, incluso cuando algo no le gusta de mi trabajo, lo hablamos y lo solucionamos, peleamos sí, como todos, pero nunca nos hemos dañado con premeditación...lo que quiero decir Harry, es que; cuando empiezas a sentir que tu pareja te puede hacer daño intencionalmente, entonces es hora de irte".
—Yo...lo sé —miró hacia el castañito y palmeó su hombro —gracias Michael.
—Ustedes también pelearon, —señaló hacia Louis— pero sabes qué? Jamás vi una pareja con más tensión sexual que ustedes, ¡Jesús! —rió— ése chico vale la pena, no lo dejes ir. Aquí entre nos, el sexo de reconciliación es lo mejor de las peleas.
Harry sintió sus ,mejillas arder y acomodó su cabella antes de reunirse con Louis de nuevo.
—¿Todo bien?— frotó sus manos una contra la otra, un tic nervioso de años atrás.
—Sí, ¿cómo estás?
—Bien, Harry...
—¿Sí amor?
—Ella, —tartamudeó —ella puede grabar esto, yo no tengo problemas, le dije a Rob qu-
—No. Ella ha sido grosera, estamos trabajando cariño, esto no es por diversión.
No era el enfoque que quería dar a sus palabras, sin embargo pareció como si solo estuviera haciendo su trabajo. Lo hacía, pero no era lo que intentó decir. Louis asintió y se llamó a sí mismo estúpido, por olvidarse de pronto que solo era eso, trabajo. Harry recibiría un sueldo por besarlo.
—Claro.
—Bebé, Lou —le tomó del brazo— perdón cariño, olvida lo que dije, no es lo que quise decir. Lo que intenté decir es que ella no se merece estar aquí.
—¿Y yo sí?
—Nunca te compares con nadie amor, tú eres tú, nadie te hace sombra.
—Ella se fue muy enojada, ¿tendrás problemas?
—Entonces tendré que buscar dónde dormir, ¿me dejarás dormir en casa hoy? ¿O tienes una cita con Fender? —pellizcó su estómago.
—Idiota —le empujó.
La escena volvió a retomarse como antes. Cuando las luces se apagaron y dejaron el reflector en un ambiente íntimo, los dos actores se buscaron con desespero.
Harry tenía las manos hechas un puño donde la camisa de Louis se arremolinaba, su cuerpo se inclinó hacia el otro para que el beso fuera más fácil. Las manos del castañito se escondieron entre sus cortos cabellos y cuando tiró de ellos Harry soltó el primer gemido, os labios de Louis apenas rozaban los ajenos, de manera que cuando aquel sonido salió, lo disfrutó con sus cinco sentidos.
Su boca subió unos centímetros mientras que la de Harry bajaba para encontrarse en medio de esa distancia. Los labios de Louis temblaron cuando sintió la boca entre abierta de Harry y se tomó su tiempo para atrapar su labio inferior. La suavidad que sintió fue exquisita como una nube de algodón, dulce como una mañana perezosa de besos en la cama, giró su cabeza hacia la derecha mientras sus manos acariciaban la nuca del actor, las manos de éste, por su parte apretaban más la cintura del castañito y pronto se situaron en su espalda para ceñirlo a él.
El siguiente giro permitió que sus narices sintieran el aliento del otro golpeando su mejilla, Harry se inclinó todavía más y Louis llevó una mano por el cuello del ojiverde, las manos en su espalda subían y bajaban apretándose cada vez que sus labios acariciaban los de Harry.
—Louis, quiero que lo muerdas ligeramente —escuchó por el apuntador en su oído.
Sus pies tocaban el piso, pero era como si todo su cuerpo flotara, el único peso que sentía era Harry, en todos lados, en sus manos, sus labios, su espalda, su cintura, su boca y su mente. Harry tocó apenas con la punta de su lengua y Louis entonces fue quien gimió bajito. Quizás la cámara de Jack captó el momento exacto en que un hoyuelo se su mejilla apareció debido a la sonrisa que se formó debido a aquel maravilloso gemido, Harry enroscó aún más sus brazos por el torso de su amigo.
Louis sintió la calidez de Harry rodeándole, y cuando su lengua apenas tocó la suya, giró un poco al lado contrario, se separó unos milímetros y tomó el labio inferior, aquel que había acariciado antes, y con una leve presión de sus dientes tiró de él, manteniéndolo en esa posición el tiempo necesario para que su cerebro guardara el momento en un bucle que repetiría hasta el final de sus noches. Harry gimió alto y tiró su cabeza hacia atrás, pero de inmediato volvió al encuentro con el rostro de Louis, acarició su nariz en otro movimiento que no estaba escrito, paseó por sus mejillas y se escondió en su cuello.
—¡Corte!
Las luces se encendieron, Rob y Michael los miraron por un segundo sin decir nada, hasta que el director habló.
—¡Y por eso es que estamos entre profesionales! —aplaudió y se retiró a martirizar al pobre Jack con las tomas hechas.
Harry fue llamado por Greg tan pronto como terminó la escena, estaban hablando a unos metros de distancia, seguramente del episodio anterior. Louis volvió al roulette para cambiar sus ropas. Cuando terminó, salió con sus cosas, listo para irse hasta que escuchó la voz del otro director.
—Tus vicios crecen cada día más —dijo Rob mientras extendía una toalla para secar el sudor de su frente.
—No he fumado aquí, ya sé que no se puede.
—¿Quién habló del cigarrillo? Yo hablo de tus otros vicios: "mirar a Harry y sonreír cuando crees que él no te ve" por ejemplo.
La mirada de ambos se dirgió de nuevo hacia donde estaba el actor, parecía inmerso en una conversación con Greg y Michael, lucía apuesto y Louis no podía creer que lo había besado, el fantasma de sus labios todavía rondaba los suyos y aquel consquilleo no se iba.
—¡¿Qué?!
—Tranquilo, él es tan bobo que no se da cuenta y tú...tú eres un ciego, ambos son ciegos y mudos.
—No sé de qué hablas amigo, pero...—suspiró, rendido por todas sus emociones —no puedo mirarlo y no sentir nada.
—¿Y por qué no se lo dices? Piensa, si esta fuera tu última noche, o tu única vida ¿con quién te gustaría pasarla?
—Con él ¿Pero y él? ¿Qué tal si él prefiere pasarlo con su novia?
—¿Así como prefirió grabar contigo y no con ella?
—Ella no podía grabar, el trato era que él necesitaba un doble de David, un tipo, castaño, delgado, inglés, ligeramente más bajo que él, pero sobre todo que fuera un hombre, en resumen ella no podría.
Rob rió con diversión ante las palabras. Harry le había mentido a Louis, era evidente que el castañito ignoraba esa parte de la historia y, ¿por qué no hacérsela saber? Delataría a Harry, con el único propósito de despertarlos a ambos, para que vieran más allá de sus narices.
—Creo que estás confundido —negó, divertido —El trato era grabar las escenas íntimas con las parejas reales, David está grabando con su novio. Greg le propuso a Harry traer a Amelia, pero adivina... —dijo, fuerte y claro —él no quiso. Se negó rotundamente a grabar con ella.—Recalcó— Cuando le preguntaron en quién pensaba, ni siquiera lo dudó y mencionó tu nombre, alto y claro.
—¡¿Qué?!
—Como lo oyes, Harry prefirió grabar los besos y todo lo íntimo contigo, su "mejor amigo" antes que con su novia. Él te eligió a ti. Si eso no te dice nada, pues...
El corazón le martillaba igual que los tímpano, Harry lo prefirió a él por encima de ella, él tuvo la opción de traerla, él pudo filmar con ella pero lo prefirió a él.
Todo le daba vueltas, había un caos en su cabeza y tenía el pecho cabalgando en una arritmia loca y desenfrenada.
Harry lo prefería a él, Harry prefería besarlo a él, tocarlo a él, gemir con él. Harry había preferido sentir las manos de Louis por todo su cuerpo antes que el de ella, sin importar el qué o cómo, Harry había hecho una de las cosas que Louis siempre había querido: lo había elegido a él.
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"Tienes tu propia magia y tu propio fuego, haz que todo brille a tu manera. Eres increíble" Anónimo.
¿Opiniones?
¿Dedicatorias?
Lamento no poder extender más, veo que se desesperan porque no lo he juntado :D así pasaremos al final.
Escribí todo escuchando el soundtrack de "Pearl Harbor y Gladiator" (de mis favs), así que si el capítulo no les gusta, es culpa de mi play list de hoy.
Besos.
MAKI <3
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