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Los Tres Mosqueteros


( Capítulo 28)

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Holis gente linda 🙌 cómo están? Espero que súper.
Bien.. espero que recuerden este fic que tenía casi dos meses de no actualizar 🥺 realmente antes de este capítulo tuve otro el cual borré de raz porque no me convencía nada, hasta que me surgió una idea tremenda 😏 ya se lo podrán imaginar cuando lean este capítulo 🙈.

Sin más las dejo con la lectura 🙌 y les mando un abrazote enorme a las distancia ❤️.

PD: Gracias siempre a la página de Es Sesshome por sus bellas portadas ❤️🙏

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El ojiazul había finalizado su día laboral y como tantas noches había llegado tarde a su hogar, ya que, su hermano mayor al haber elegido una carrera muy distinta, no ayudaba mucho en los negocios de la familia y todo recaída a sus espadas, no había tenido tiempo de ver a sus amigos y pese que sabía que el pícaro de Miroku estaba a las afueras, sesshomaru seguía cerca, más no había tenido ni un minuto de poder ver a su fiel amigo, ni llevar el ostentoso regalo a su pelirrojo sobrino.

Suspiró y se preguntó si realmente ese era el motivo por el cual no había tenido unas horas ni para compartir un café junto con él, o si había algún otro  transfondo en el cual ni siquiera quería pensar...

-- no vuelvas a acercarte a mi--

Aquellas palabras de vez en cuando se colaban en sus pensamientos y para ser sincero con el mismo perturban su inmutable tranquilidad.

En qué momento había sucedido? Ni el mismo lo sabía, quizás había sido en su niñez, en su adolescencia o en el momento que aquellos profundos y latentes sentimientos habían surgido en él por el menor de los Taisho.

Había transcurrido casi dos semanas de lo acontecido entre ambos y no era tan fácil "alejarse " y ya .
Sabía que habría gente de por medio que resultaría afectada en un efecto domino pues con ese amor prohibido que nunca debió haberse consensuado lastimarían a mucha gente y lo sabía, mediante algunas llamadas con su fiel amigo quien ignoraba absolutamente todo había dado con la noticia que la tierna Sango e Inuyasha tenian algo a lo cual todavía no daban nombre y él...

Bueno.. Él habia compartido alguna que otra noche junto a una hermosa pelirroja a quien había conocido en la universidad hace poco, nada serio, pero se veía en ella el entusiasmo cuando estaban juntos cosa que lo hacía sentir peor .

Entró a su hogar y arrojó su maletín al suelo cansado de su propia su mente, se dirigió a su sala y tomó un poco de agua fresca para beber.

-- No podemos hacerle esto a Sesshomaru--

Koga arrojó el vaso contra la pared.

__ Sal de mí cabeza!__

Gritaba el joven que no podía más porque ni un minuto había dejado de pensar en él.
Porque el menor de los platinados corría por sus venas, por su piel, su sabor , su masculino aroma estaba impregnado en cada parte de su ser y su nombre estaba tatuado en su corazón por más que su mente le gritaba que no, no podía ir en contra de lo que sentía.

Lo lamentaba con el alma por su hermano de corazón y sabía que no solo era arriesgado para él, sino sobretodo para el dueño de sus pensamientos.

-- Ya no lo soporto más, Inuyasha --

Tomó las llaves de su moto y dejó las cosas como estaban, saliendo prácticamente corriendo de su hogar, había enloquecído.
Lo extrañaba tanto que ya no lo soportaba más, ya no más tenía que decirle que lo amaba y que no le importaba luchar contra cualquier perjuicio que podría llegar a existir en un futuro.

Koga no sabía lo que estaba a punto de hacer solo se dejaba guiar por lo que su corazón dictaba, su mente ya no cooperaba con todo lo que sentía.

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La castaña se perdía en los intensos dorados que la veían con deseo y a la vez ternura.

Nose explicaba porque con Sango sentía esa conexión que solo la había sentido con alguien en quien no quería ni pensar, mucho menos en esos momentos porque aveces quería salir, buscarlo, darle una buena golpiza y obligarlo a que saliera de su corazón pero sabía que eso era imposible, él era el dueño de este por ende era un propietario y no un inquilino.

Acarició el rostro de la joven que solo sonreía, sobre de él.
Habían aprendido tantas cosas uno del otro y esa extraña amistad que nunca había llegado a tener con nadie que no haya sido con su ex amigo Shaoran. Ahora estaba allí con la mujer más hermosa que había visto, con un extraño lazo el cual los unía y no solo lo compatible que podían llegar a ser en la cama sino más bien los secretos que sabían el uno del otro, simplemente porque así lo habían decidido, dos completos extraños que habían aprendido a conocer todo del otro en tan poco tiempo.

No sabía en que momento había decidido confesarse con la castaña y abrir su corazón solo con ella, contando aquella oculta verdad, la misma, que llevaba como una mochila en su espalda, confesarle cuan profundamente enamorado estaba del mejor amigo de su hermano mayor.

Quizás había sido cuando ella se dispuso a llorar aferrada en su pecho diciendo que extrañaba al idiota de Miroku de quién se había enamorado y solo había obtenido traición de su parte.
Verla tan vulnerable y tan herida como él, fue el punto exacto en donde ambos pasaron de un sexo divertido y satisfactorio a ser el oído del otro y el hombro de contención , cómplices, amigos que se besan sin ropa y se escuchan sin reclamos pero quizás solo quizás...

Tomó su rostro entre sus dedos y sonrió en sus labios.

__ soy muy hermoso, no lo crees?__

Sango carcajeó y estiró con sus manos sus mejillas para depositar un cálido beso en esos labios que se le habían vuelto una costumbre hermosa tener.

__ Lo eres, no podría negarlo pero no tanto como lo soy yo. __

Le guiñó un ojo, él y sango eran tan iguales que no podía creer haber vivido tanto tiempo sin conocerla.
Era un mujer alucinante, increíblemente hermosa tanto por dentro como por fuera, con una resiliencia de vida admirable, tenía su respeto y mucho más.

Acarició sus rellenas mejillas sonrojadas, besó su frente.
Está cerró los ojos, dejándose hacer, hasta que sus labios se fundieron y comenzaron a besarse mientras se abrazaban.

- no me puede estar pasando esto-

Inuayasha no dejaba de pensar en Koga pero no podía resistirse a Sango era un imán que tenía hacía ella.

Podía haberse enamorado de los dos? A eso no quería ni pensarlo.

Solo estaba disfrutando de su cálido aroma a cítricos y su dulce boca que lo besaba como solo él lo había hecho....

-- Eres dulce sango, solo espero que esto no se salga de control --

Las castaña deseaba a Inuyasha, se había acostumbrado estos días a no solo demostrarse quién era mejor y más sensual en la cama sino, que ambos se escuchaban y se comprendían, algo raro pero que se estaba volviendo un pasatiempo muy interesante.

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__ No vuelvas a hacer eso!__

Kagome golpeó su pecho con su mano.

__ El qué?__

Sesshomaru acariciaba su espalda, con suavidad.
La Azabache se econtraba recostada sobre su musculoso y fornido cuerpo .
Mientras este trataba de evadir la vergonzosa charla.

__ Sesshomaru te desmayaste por unos minutos. __

Levantó su rostro y lo miró incluso preocupada.

__ Nosé controlar mis emociones, mucho menos, cuando se trata de ti. No esperaba que me lo dijeras . __
Escondió su rostro en el pequeño cuello, debía hablar con urgencia con su psicólogo.

Kagome ajena a los pensamientos de él, acariciaba su varonil mandíbula enternecida.
Y se preguntaba, en como era posible que alguien como él, mundo conocía como temido y respetado, era tan dulce y encantador con ella.
Sin contar aquella parte que  tanto recelo le guardaba y era haber sido todo un galán entre las damas, pero con ella, era un principe y ya se había convencido de ello.

-- Realmente creías no enamorarme, Taisho?--

__ Lo de hoy yo lo siento, mucho. __ dijo,  aferrandola más contra él. __nunca creí querer mí vida al lado de alguien y he sido un mal hombre en el pasado, o al menos así, me han catalogado por no querer una relación cuando no creía en el amor y ahora estoy pagando las consecuencias de mis actos pasados. __ No quiero perderte por algo tan insignificante para mí. __

Kagome suspiró, sabía que en algún momento de la noche iban a tocarlo.

__ Yo te he conocido Sesshomaru, y te he visto con muchas mujeres. __ suspiró, un tanto molesta recordando la situación que había sucedido en el día..

El platinado estaba inmóvil no sabía que iba a decir.

-- mujeres para pasar el momento, nunca me han interesado solo las usaba.--

Lo pensó más calló no era algo propio de decir simplemente la aferró aún más a él, era difícil de creer pero era cierto, solo había conocido el amor con la azabache.

__ Pero eso no cambia lo que tenemos, al menos no de mi parte, no son de mí interés las mujeres con quién te hayas acostado.__

Kagome aquella vez en la sala donde estaban Bankotsu y sesshomaru había escuchado toda la charla mientras fingía dormir y había escuchado todo el relato del platinado.

-- Princesa no puedes ser tan directa se me rompe el corazón.--

__Mí enojo radicó más allá de un descarado comportamiento de una simple mujer.__ terminó por decir.

No le gustaba mucho expresarse pero necesitaba dar tranquilidad a su amado principe. Porque sentia el retumbar de su acelerado corazón contra su pecho, sabía bien como padecía el nerviosismo el hermoso hombre.

__ Me molestó demasiado su actitud, desde que puse un pie en tu empresa, fue hostil y mal educada conmigo, hizo llorar a Shippo y eso es algo que no puedo tolerar. __

-- Qué esa arpía, hizo qué?--

Se sentó aún con ella aferrada a él apoyando su espalda en el amplio respaldar y de eso modo la sentó cubriendo su cuerpo con la frazada, tomó su barbilla y miró sus ojos totalmente cristalizados.

-- Bebé hermosa--

__ Estoy muy enojada con ella. __ puntualizó, sintiendo un nudo en la garganta.

Los hermosos ojos azules de kagome brillaban creando el fenómeno más bello que él, haya visto alguna vez
Estos cambiaban en diferentes tonalidades de azules incluso llegando a parecer celestes .

__ Cómo es eso que hizo llorar a Shippo?__

Asintió.

__ Habíamos llegado a la empresa y un amable señor de Seguridad me permitió el paso, luego saludó a Shippo, me explicó por donde debía seguir para llegar hacía tu oficina pero cuando pasé por el primer piso, aquella mujer me detuvo, alegando que  necesitaba una cita  para poder hablar con cualquiera de los tres jefes. __

Kagome no sabía si seguir con el relato, le había dolido demasiado el acto de Natsuki, porque pese a su corta edad era muy consciente que en un futuro cuando su Shippo creciera debían explicarle que era adoptado, era su obligación contarle que había tenido unos padres que lo amaron.

Justamente cuando Natsuki había preguntando acerca de quien era, kagome solo se  había limitado a responder que "no necesitaba cita para poder ver al padre de su hijo", sin dar mayor explicación.
Allí fue cuando con aquella  mirada inspeccionando a su pequeño, cavó fuerte en su interior, fue un puñal directo a su corazón, obviamente las diferencias abismales entre su bebé que era pelirrojo de ojos verdes, ella azabache con ojos azules y su hombre que también tenía características peculiares,  difería mucho de ellos, en cuanto aspecto físico pero él, era su niño, su primer hijo y nadie tenía el derecho ni siquiera de tener una opinión en mente respecto a esto.
Definitivamente kagome tenía un carácter bien definido y sabía bien lo que acontecía su decisión de haberse convertido en madre.

Le sabía amargo continuar con la historia porque de solo pensarlo quería volver y darle una buena paliza a la mujer, sentía un vacío en su estómago con el solo hecho de pensar que su pequeño llegase a sufrir por personas como Natsuki en un futuro.

__ Y qué sucedió luego, princesa?__ se estaba desesperando al verla sería y distante.

__ Le dije que no necesitaba una cita para poder ver al padre de mi hijo.
Ella miró despectivamente a Shippo, eso realmente me dolió y por si fuera poco me sacudió fuertemente del brazo, haciendo asustar a mí pequeño.__ la Azabache mostró la parte de dentro de su brazo donde había algunas marcas de uñas clavadas.

-- Voy a matar a esa mujer, juro  que mataré a Natsuki--

__ No debí haberla golpeado, yo me bajé a su nivel haciendo eso pero estaba muy enojada.
Y tampoco se controlar mis emociones cuando lo estoy. No quiero que nadie haga sentir menos a Shippo, nadie. Creo que estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo para que venga alguien de afuera a querer descargar sus malos hábitos con un bebé.__ su voz salió un tanto alta.

Una lágrima se escapó de la furia y rodó por su mejilla, Sesshomaru la capturó con sus dedos.

La ira dominó al platinado pero no era el momento, no luego de saber todo el relato y la capacidad de contener de su joven mujer de haberse guardado todo hasta ese momento. Su deber era brindarle seguridad tanto a ella como a su pequeño.

__ Shippo es nuestro, nadie lo dañará porque yo nunca permitiré ello siempre debes contarme cuando algo de esa magnitud se trate, él es nuestra prioridad y debo curar tu brazo porque se puede infectar. Debiste haberme avisado. __

__ No era tu día, Inu me contó lo de la empresa y ahora solo quiero que me abraces. __

Se aferró más fuerte a él, ya el mal momento había pasado.
Quizás las palabras de Natsuki alegando que seguía teniendo encuentros con Sesshomaru en su momento la habían endurecido pero nada se había comparado con meterse con su pequeño porque la Azabache tenía la plena confianza en su ojidorado asíque ni se inmutó por ello, sabía que Sesshomaru la amaba y ahora más que nunca era totalmente recíproco.

__ Te amo cosita mala__ besó sus labios, tratando de hacerla olvidar un poco y también tratando el de olvidar y no matar aquella odiosa mujer.

__ También yo, tonto __ lo tomó por el rostro, se colocó suavemente  a ahorcadas de él y comenzó a besarlo nuevamente con mucha pasión.

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Sango se econtraba en unas sensuales ropa interior mientras bailaba sobre la mesa de una manera muy erótica.

Inuyasha solo negaba con sus fornidos brazos en su nuca disfrutando del momento. Suponía que su cuñada y su hermano o se habían dormido o seguían su discusión en la cama asíque con los niños durmiendo, un poco de alcohol ensima y mucha exitacion se deleitaba con el sensual espectáculo.

( Sonidos de timbre)

-- Pero qué?--

Sango se alarmó y lo miró a lo que Inu hizo un gesto como diciendo que tampoco sabía.
Se sacó su remera y se la colocó a la joven para luego ir a ver de quién se trataba, ya que no querían que los niños se despierten a esas horas de la noche.

__ San debo ir a ver, no quiero que despierten a los pequeños. __

La ayudó a bajarse y tomó sus manos besandolas.
La joven asintió y caminó solo un poco por detrás de él para sentarse en una de las altas bancas y tomar un poco de refresco.

Inuyasha un tanto desconcertado abrió la puerta un tanto molesto por la interrupción, sin siquiera preguntar, muy típico de él.

Pero no llegó a decir nada que el moreno que estaba del otro lado estampó su boca contra la suya.

Koga lo tomó con fuerza por el rostro mordiendo levemente sus labios.
Inuyasha abrumado abrió un tanto la suya, el otro
Lamió su labio inferior mientras gemia agitado, se habían extrañado tanto que el corazón de ambos hombres desbordaban con amenazar en colapsar en cualquier momento.

-- Pero qué?--

Ambos se desconectaron pegando sus frentes con el otro.
Koga lo tenía contra la pared ni siquiera se habían tomado la molestia de cerrar la puerta haciendo que la fría ventisca del bosque se cole entre ambos que respiraban pausadamente uno sin entender nada y el otro dispuesto a ser el Romeo de la historia.

__ Te amo __ se atrevió, a decir.

Inuyasha no sabía que decir su corazón iba a estallar estaba seguro que lo haría porque desde sus cortos 5 años había tenido muy claro sus sentimientos aunque los haya evadido practicamente toda su vida y esta, no sería la excepción.

__ Yo no a ti. __

El ojiazul sonrió y lo volvió a tomar con brusquedad ambos luchaban con fuerza pero sus bocas no podían despegarse.
El moreno con su pie empujó la puerta cerrandola en el proceso.

Inuyasha lo empujó contra la otra pared, Koga sonrió.

Se pegaron el uno con el otro, mientras se observaban fijamente, estaba claro se necesitaban.

__ Has enloquecido. ___

__ Por ti .  __

__woah.  . . __

Sango quedó perpleja sintiendo el frío colarse por la holgada remera larga de Inu que llevaba puesta, sus cabellos caían totalmente sueltos y sus mejillas parecían explotar de rojas. Definitivamente era una mujer bellísima.

__ Oye, no la mires así.! __  Reprendió, al moreno que quedó embobado mirando a la mujer y también avergonzado porque seguramente los había visto, el moreno desconocía que ella, sabía absolutamente todo.

Inuyasha se alejó de Koga rápidamente y por un extraño motivo sentía que le debía una explicación a la joven, aún sabiendo que eran solo amigos.

El ojiazul pícaramente sonreía tratado de no sentir molestía nunca creyó encontrarse con la joven ex - de Miroku, la hermosa Sango, allí con él..
Eso, quería decir que iba enserio? Sabía que Inuyasha no llevaría a nadie a su hogar.

__ Sang... __ la tomó por los hombros, la castaña estaba en otra sintonía ella sabía perfectamente toda la historia entre Inu y Koga pero se había sentido muy diferente verlos juntos de esa manera, su rostro quemaba, no era molestía, quizás un chiquitín de celos pero tampoco podía quejarse por tal ardiente espectáculo que le habían dado .

__ Y.. yo.. está bien.. c.. __

( Llantos)

Los monitores se activaron alertando que el más pequeño del hogar se había despertado y no de muy buen humor, se oía muy claro como iba balbuceando algunas extrañas palabras que resonaban por los parlantes que había dejado Sesshomaru sobre la mesa.

Los tres jóvenes se miraron pensando lo mismo.

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( Momentos atrás)

__ Descansa tranquila, mi princesa. __ Susurró y besó su frente acariciando con su mano la suave cabellera de la joven que dormía muy plácidamente sobre de él, luego de haberse entregado al amor.

Había aclarado lo de Natsuki aunque a la charla le había faltado lo que nunca llegó a contar en el sala, supuso que luego hablarían de ello, su mujer era insaciable y ahora estaba descansando, ella debía dormir lo suficiente para recuperar energías.

Con el dorso de su dedo acarició, su mejilla para luego hundir su nariz en su cabello, que daba leves suspiros totalmente cansada.

Siempre, la observaba, antes de dormir.
Dolía hacer lo mismo cada noche, no importaba que tan cansado podría encontrarse, porque le fascinaba contemplarla había pasado a ser hobbie.
Jugaba con ella en dormida, la acariciaba, rozaba su nariz, delineaba sus labios..

Incluso ya habiandola amado de todas las formas que se pueden amar, de tenerla para él, jamás podría asimilar que era suya.
Que no solo era un simple noviazgo y ya.

Cualquiera lo hubiera catalogado de loco incluso su psicólogo con quién la mayor parte hablaba de ella, le había dicho que reconsidere muchas cosas, pero que podía hacer?..

Él no podía luchar contra lo que sentía.
Sesshomaru desde el día uno en que la vió supo que era ella o nadie, no importaba que por su vida hayan pasado ciento de mujeres de las cuales nunca les importó nada.

La pequeña mujer que tenía sobre suyo que se aferraban a él como si no hubiese otra persona en el mundo, había aparecido para poner su vida de cabezas y allí estaba observando su pequeña, perfecta y delicada mano carente de cualquier joya, incluso sus hegemónicas uñas , llevaban una sutil capa de barniz que le daba brillo a estás y ya...

-- Higurashi de Taisho --

Sonrió con arrogancia ante ello.
Su mujer, suya, de nadie más, absolutamente de ningún hombre...

-- Ella es mía y de nadie más absolutamente ningún hombre jamás podrá tener su atención --

( llantos)

Sesshomaru miró hacía los pequeños monitores.

La apartó delicadamente y rápidamente se colocó un pantalón tomando el monitor y el parlante.

-- mí pequeño --

__ Acá está papá.__ habló, tratando de tranquilizarlo atravez del monitor y salió casi disparado a la habitación.

Corriendo al cuarto del pequeño que le duró poco el llanto porque se entretuvo con unos botones coloridos que poseía su carroza que tenía por cuna y de esta se emitió una movida y melodiosa canción infantil haciendo que Shippo comience a mover su cuerpito de aquí para allá mientras con sus manitos aplaudía y reía.

El platinado ingresó rápidamente un tanto preocupado pero al verlo de pie con ese pijama de osito hermoso que poseía el corazón le desbordó de alegría al saber que su niño era felíz.

__ Te gusta bailar, eh- __..

Shippo mostró sus pequeños dientes en una enorme sonrisa mientras trataba de cantar con palabras inentendibles.

__ apa apa apa __

Sesshomaru lo tomó en brazos y comenzó a girar con él.

-- Bueno.. quizás si haya otro hombre --

Sonrió ante el pensamiento, Shippo le había enseñado amar sin esperar nada a cambio y a su joven princesa le había sucedido lo mismo.

-- tu si puedes robarle la atención a mamá pero solo tú --

__Amble__ señaló, su pancita.

__ Sabes que has asustado a papá, no es así?__

__ Y a su tío también. __

Sesshomaru miró a Inuyasha apoyado contra el marco de la puerta.

__ Tranquilo. __

Se acercó hacía Inu mostrando que Shippo se econtraba bien, es más, estaba felíz porque era más que obvio que había adorado su cama.

__ Por qué, lloraba ? Creí que quizás podría haberse golpeado.__

Inuyasha estaba nervioso, por poco ,su hermano podría haber visto toda la situación en la cocina y no podía dejar de pensar en Sango y Koga que les había pedido que aguarden en su habitación.

__ Shippo en este horario siempre despierta por una o dos mamilas.
Además que es la necesidad de saber que estamos junto con él. Es algo que va a llevar un largo proceso muchas veces elegimos hacerlo dormir junto con nosotros. Te ha despertado?__

El menor de los platinado negó y se acercó tocando la manito del pequeño.

__ Sango decidió dormir y yo estaba por recoger las cosas de la cocina cuando escuché el monitor. __

Mintió algo nervioso aunque sesshomaru le creyó totalmente.

__ Te ayudaré, puedes traer la mochila? __ le señaló, en una mesita no muy alejada.

-- mi sobrino me ha salvado, increíble --

__ Tengo biberones y al menos unas tres latas de esas amarillas. No será necesario. __

__ Tenías todo preparado? __ arqueó una ceja.

__ Solo los biberones, ya sabes madre y esa extraña leche mágica. __ se rascó la nuca .

Sesshomaru negó sonriendo, su madre era todo un caso.

La pancita de Shippo rugió, los ojos esmeralda se cristalizaron asustado por el ruido.
Y una pequeña lágrima se escapó rodó por su regordeta mejilla.

-- no bebé mío --

Lo abrazó fuerte, consolandolo.

__ Oye, pequeño tu tío te hará una mamila y créeme será mucho mejor de las que prepara el gruñón de tu papá. __

Inuayasha le hacía cosquillas en los piecitos mientras sesshomaru caminaba y bajaban hacía la cocina.

Shippo iba sonriendo mientras su cabeza iba apoyada en el pecho de su padre.

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Sango miró por la perilla de la puerta de la habitación observando si regresaba Inu.

Koga se econtraba sentando en el suelo apoyando su espalda contra la pared mientras de reojo detallaba a Sango.

Si era simplemente hermosa, él lo sabía desde el día que la vió con Miroku.
Sango era una perfecta joven, cómo no le iba a gustar a Inuyasha? Pero lo que le parecía más raro aún es preguntarse si ese sería el motivo por el cual Miroku, no daba señales de vida? O al menos no quería regresar?..

-- Aunque aquella noche  -...

El ojiazul recordó aquel partido de football en el que compartió junto con Inuyasha.
Esa noche mientras salían del estadio vio salir muy abrazado de una mujer de cabellos rubios.
a su pícaro amigo.
Se dirigieron un saludo fugaz, más siguió su camino junto a la mujer.

__ Oye.. niña, lo que acabas de ver hacer un rato .... __ no sabía como explicarlo.

__ No entiendo que les impide estar juntos, no les hacen daño a nadie. __

Quedó perplejo ante lo dicho.

-- Ella lo sabe?--

__ T.. tú? __

Sango se dignó a girarse.

__ Yo, qué? __ caminó, hacía él y se sentó del mismo modo en el suelo.

__ Creí que te había molestado, no lo sé.. estás aquí con él, con su ropa. __ la apuntó con el dedo, señalando la remera de Inu.

La castaña arqueó una ceja.

__ Inuyasha y yo, somos solo amigos. __

-- ajá y junto somos los tres mosqueteros --

El ojiazul cruzó sus brazos y ladeó levemente su rostro.
Sango se sintió cohibida un momento por sus intensos azules.

__ No como tú que tienes a cierta pelirroja de novia, esa mujer de solo pensarla me dan ganas de jalarle sus rizos y limpiar mí suelo, Hmph. __ miró, hacía un lado.

__ Oye! Ayame no es mí novia y por qué hablas así de ella? __

__ No la nombres!! __ Exclamó, y con su dedo índice golpeó su pecho.

__ ey! Tranquila. __ levantó sus manos en modo de rendición. __ Okey , ya entiendo que no te cae bien. __

__ Nadie que se mete con mí amiga, me cae bien. __ puntualizó.

Koga parpadeaba tratando de conectar hilos.

__ Hablas de Kagome? __ preguntó, ingenuamente.

__ Shss cállate y si.. hablo de Kag solo guarda el secreto, si? __

Acercó, su rostro al del moreno que rápidamente se sonrojó.

__ Si o no?__ preguntó.

koga asintió un poco embobado ante la cercanía.

Justamente se abrió la puerta, en el momento que se encontraban en una pose un tanto comprometedora.

-- Qué?--

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