( Capítulo 8)

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Bankotsu había pensando y pensando luego de aquel café se había dirigido a su apartamento a ducharse nuevamente para poder ver si de ese modo lograba despejar un poco los malos pensamientos que agobiaban su mente.
El moreno dejaba correr el agua por su bien formado cuerpo mientras cerraba sus ojos, recordando a su pequeña Kag.
Sobre todo en la tantas cosas que habían compartido con su hermosa ex-prometida durante los cuatro año de relación que habían tenido  y no podía dejar de arrepentirse y recriminarse de haberse prohibido tanto con ella y solo por temor a lastimarla.
Para el moreno las Azabache siempre, sería un frágil cristal.

-- Ella será mía --

Las palabras de Taisho no dejaban de resonar como un eco en su mente una y otra vez y no pudo soportarlo más.
Bankotsu había evitado por todos los medios ir hasta la casa del platinado pero el debía saber si Kagome se econtraba allí, necesitaba sacar esa opresión que sentía en el pecho.
Decidido por un impulso del momento, salió de la ducha y se alistó para luego de esto, ponerse en marcha.

El ojiazul había elegido un atuendo elegante pero que a la vez dejaba acentuar su muy bien trabajado cuerpo, tomó las llave de su auto y se puso en marcha, ya que sabía tenía unos 40 minutos de viaje hasta la dirección que le había otorgado Naraku, la colocó en su GPS y se dirigió hasta allí.

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Bankotsu había llegado a la ostentosa residencia de Taisho y veia el timbre con dudas sin saber si debía seguir adelante o simplemente marcharse de allí y ya.
Pero su lado impulsivo ganó  nuevamente, ese mismo lado que últimamente había parecido en él, decidido tocó esperando a que todo esto, no terminara mal. 

Sesshomaru colocó las llaves en la puerta y abrió llevándose una gran sorpresa, al ver quién era el que se econtraba de pie frente suyo.

-- No puede ser cierto, a caso quiere que lo mate? --

Sesshomaru miró hacía atrás buscándola a ella, aunque sabía bien que eso sería imposible, el la había dejado en su apartamento  solo minutos atrás.

__Valiente, eh-__

El Platinado fue el primero en romper el silencio, cruzándose de brazos mientras se apoyaba en el marco de su puerta.

__ Kagome... Ella se ecuentra aquí?__

Los azules no se despegaban de los dorados eran prácticamente iguales de altura y tamaño.
Sesshomaru negó con la cabeza y sonrió.

-- Ahora no se ecuentra aquí pero hace un rato si las paredes hablaran, estarías llorando como bebé --

No, claro que no debía decirle eso, pero el ojidorado siempre había tenido ese lado malvado sobre todo cuando alguien no le agradaba pero está vez quería ver que es lo que el hombre que tenía en frente deseaba, pero si de algo tenía la certeza y es que hasta el momento despreciaba más que a nada en el mundo al moreno.

__ Kagome no se ecuentra aquí, quizás.. si hubieras llegado momentos atrás, serían otras las condiciones. __

Bankotsu investigó sus dorados con sus azules para ver si había pizca de burla en lo que había dicho y no, no la había...

Lo que decía, era verdad...

__ Ya veo... con que te sigues acostando con Kag __

Sesshomaru no respondía solo se dedicaba a observarlo fijamente sin bajarle la mirada, porque si hablaban de intimidar, el era todo un experto en el área.
Aunque para ser sincero consigo mismo, el ojidorado ya quería pegarle, su tolerancia era 0 cuando se trataba de algo o alguien que no le agradaba.

-- Porqué no acepta que la ha cagado y ya?--

Qué tan difícil sería sacarse a la azabache del cuerpo y sobre todo de la mente? Se preguntó.

-- A caso yo terminaré cómo este tipo?-- otra interrogante más para Taisho.

__ Bien se que eres de pocas palabras y también se que no debería estar aquí, como también no deberías llevar la mano sin vendaje aún, pues se te pueden infectar lo puntos en fin, no es por tu mano que estoy aquí, no le daré vueltas al asunto.

Soy consciente que me estás provocando con tu actitud hostil y no Taisho, no pelearé contigo, estás loco y lo he visto con mí propios ojos el otro día cuando has querido cortar mí cuello.

Solo te diré que ella no va a olvidarme tan fácil y en el primer error que cometas vendrá corriendo hacía mís brazos.
Yo he sido siempre el refugio de Kagome cuando se ha sentido mal, siempre ha sido de ese modo y créeme que eso, no cambiará.
No solo ha sido mí prometida, ella ha sido mi mejor amiga y mí confidente de toda la vida.
Kag es muy joven aún y hay muchas cosas que no ha experimentado todavía asíque es normal que sienta atracción hacia alguien más, después de todo he sido su único hombre desde los 16 años.

Te conozco un poco Taisho pero estoy más que seguro de que existen mujeres que harían lo que sean para dormir contigo , porqué con mí Kag?... __

Sesshomaru quería desconectarse y no escucharlo más, pero si hablaba de ella, el necesitaba oírlo , el debía escuchar lo que tenía que decir de la Azabache aunque lo que más anhelaba en estos momentos era anudarle la lengua y que no vuelva a mencionar su nombre con esa maldita boca.

-- Su Kag?--

Había visto su cuerpo desnudo durante horas, de perfil, de espalda, de frente, de cerca de lejos  y en ningún lado de ella decía ," Propiedad de Jhoeil" como para andar gritando a los cuatros vientos que la Azabache era suya, el platinado ya lo había asesinado mil veces en su mente.

__ Entonces si tan seguro estás de que ella, volverá a "tus brazos" , Porqué... te ecuentras aquí, en mí casa?__

El moreno parpadeó reiteradas veces y quedó pensando por unos momentos.
Sesshomaru lo había dejado sin palabras y con un ira increíble.

__ No hablaras? Bien entonces lo haré yo..

Quiero que te lo grabes en tu cabeza, que no me interesa ni un poco lo que tengas para decir con respecto a Higurashi, asíque no vuelvas a gastarte, será en vano.

Ahora quiero que me escuches tú..

La enamoraré y me la quedaré para mí y sabés más?..
Será mía, para siempre...
Ahora sí, ya puedes retirarte __

Sesshomaru cerró la puerta, en la cara de Bankotsu dejandolo atónito por lo que acababa de decir.

-- Lo mataré!!!--

El ojiazul en su mente no dejaba de gritar y también pensaba que en un solo día, dos personas le habían cerrado la puerta en su cara.

Y bueno Johiel no era el único afectado ya que el Platinado se había quedado con un fuerte dolor de cabeza que se iba incrementando con el solo hecho de pensar que debía hablar con su padre.
Iba masajeando su cien, había comenzado el día tan bien con su pequeña belleza totalmente desnuda sobre su cuerpo, fundiéndose el uno con el otro que....

--No puede ser --

Pensó mirando su entrepierna, ya estaba duro como una piedra, con el hecho de tan solo pensarla.

-- Me tienes loco nena --

Sesshomaru trató de despejar su mente y no pensar más en la azabache porque sino andaría como carpa todo el día y eso no estaba en sus planes, se puso a chequear algunos números y despaviló sus pensamientos por unos minutos para marcar a su padre y hacerle una video llamada.

( Sonidos de celular)

El señor Inu-No se econtraba en su oficina tecleando en su PC cuando tomó su celular que había comenzando a sonar, reconociendo perfectamente ese tono de llamada, era el de su hijo mayor, lo cual le pareció más extraño, aún.

__ Buenas tardes, hijo mío__ dijo, sin mirar a la pantalla.

__ Serían buenas, si a estas alturas comienzas a confiar en mí, no lo crees?__

Toga apartó la vista del monitor por un momento y se giró con su silla, observando a su primogénito que lo veía con esa misma intensa e intimidante mirada que solo él y su madre podían poner.

-- Es igual a ella --

__ Explicate porfavor Sesshomaru que tú padre aún, no es adivino __

__ Me has excluido de la cena en donde el Señor Higurashi aceptará ser socios de nuestra empresa, no es así?__

El mayor de los Taisho iba armando el rompecabezas y se tocó el puente de la nariz negando, una similitud que compartían con su hijo cuando algo los estresaba.

__ Entonces si era la niña Higurashi quien estaba hoy contigo, su voz es muy dulce difícil de no recordar__

Sesshomaru estaba muy enojado y no le hacía ni un apíce de gracia ni siquiera que su padre hable de ella.

__ No te he excluido Sesshomaru, simplemente cuando noté como mirabas a la joven Higurashi, comprendí que realmente estabas interesado en ella y quise que no involucres lo laboral y lo que sientes por la niña, porque no lo sé...
Quizás realmente deseo que asienten cabeza tú y tú hermano.
He llegado a la conclusión de que me han salido mal de fábrica.
He visto a Inuyasha bajar de un auto con 10 jóvenes y sabes lo que me ha dicho?__

Sesshomaru arqueo una ceja.

-- Qué le sucede a padre?--

Me ha dicho que ha estado con las 10 mujeres, al mismo tiempo! puedes creerlo? __

-- Si puedo, he estado con 15 a la misma vez y Miroku con 18 asíque si lo creo...--

En fin estoy feliz de saber que quieres a alguien y si es hija de Higurashi, pues bueno eso será solo un detalle que deberás cuidar pero.. __

__ Espera un poco padre, ella si  me gusta pero nada más que eso y tengo la capacidad como para no mezclar personal y laboral __

Toga se quedó perplejo por unos segundos.
Su hijo aún no admitía sus sentimientos, por la joven?.
Vaya que eso sería interesante de ver, pensaba el hombre convencido que había visto la mirada de cachorro que su hijo le dedicaba a la bella jovencita, como para decir que solo le "gustaba".

__ Comprendo entonces y no ha sido por eso que te haya dejado fuera de la cena, simplemente fue porque pensé que te habías enamorado de la niña, pero claro este viejo debe estar equivocado, creo que sería más fácil viajar a la luna que ver a algunos de mí hijos comportarse como unos hombre decentes y si tanto te molesta querido hijo, puedes venir a cenar con nosotros , además te recuerdo que has sido  tú, quien me ha solicitado todo el día libre. __

__ Hmph, en una hora estaré en mí empresa, si Inuyasha llega a encontrarse en mí oficina, lo golpearé, adiós __

-- Eres especial Sesshomaru --

Pensaba Toga mientras cortaba la llamada.
Se dispuso a ordenar unos papeles mientras recordaba cuando su hijo mayor tan solo era un infante en pañales que corría tras él, tropezando por el camino tendiendole sus pequeñas manitos.
Sesshomaru siempre había sido su sombra el más apegado a él, incluso mas que con su propia madre y con Inuyasha ya la cosas eran otras...
El menor era muy devoto a su madre asíque le era imposible no estar siempre al pendiente de su hijo mayor aunque Sesshomaru era todo un adulto para su padre seguía siendo su pequeño cachorro y el caracter especial de este no ayudaba en absoluto cuando algo le molestaba.
Aunque había aprendido a lidiar con ello desde que el Platinado tenía unos tres años de edad, a Toga le seguía siendo indescifrable con que podría salir cuando el se enojaba.
Pero tambien admitía que con la llegada de Rin había sido una especie de cable a Tierra para su primogénito quien amaba a su hermanita, ayudándolo mucho a manejar ese carácter violento e impulsivo que todos tanto temían en la empresa.

Su hijo, era autoridad, disciplina, perfección y era un joven demasiado inteligente, en la universidad cursaba su tercer carrera y la última según por lo que le había dicho el mismo platinado, por eso mismo cuando le había solicitado un día, ni lo había pensando y se lo había concedido y ahora en una hora ya lo tendría de regreso en la empresa.
Si su hijo era muy especial, pensó y se dispuso a seguir con sus asuntos, después de todo Sesshomaru era así, sangre de su sangre y lo amaba aunque el aveces pasaba por alto ese detalle.

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Kagome se preparaba para la cena, estaba completamente agotada, sus piernas temblaban y el agua tibia de la ducha había aflojado totalmente sus músculos, relajandola por completo.

-- Maldito Taisho--

Cada rincón de su cuerpo dolía exquisitamente porque no había rastro de su piel que no llevase alguna mordida o chupón o las marcas de los dedos del platinado que le había hecho el amor en tantas posiciones algunas que ni siquiera sabía que existían, pero ella lo recordaba patente, deseando más de ese sexo salvaje y pasional.

-- Creo que mí cuerpo lo ama--

Kagome se sentó en su cama y comenzó a secarse lentamente, no se sentía igual a cuando lo hacía él pero debía hacerlo para vestirse e irse o llegaría tarde y definitivamente no podía hacerle eso a su padre.

-- Debo de dejar de pensar aunque sea unos minutos en ese dios del sexo --

La azabache se había vestido muy sensual y elegante a la vez.
La presencia del señor Inu-No la intimidaba un poco
Debía admitir que era un hombre muy apuesto y elegante y tenía algo muy similar a su platinado y era esa personalidad abrumadora que poseía con esa dorada e intensa mirada era como si quisiera indagar algo en ella.

-- Que le habrá dicho  Sesshomaru, acerca de nosotros?--

Se preguntaba mientras estiraba su cabello en una coleta alta y colocaba sus gafas, tan típico en ella.
La azabache pidió un Uber y se dispuso a tomar todos los papeles que había solicitado su querido padre.
Porque si ya se le había hecho un poco tarde y necesitaba llegar rápidamente.

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Kenta había elegido el restaurant simplemente porque sabía que era el favorito de su hija para realizar la importante cena.

El restaurant parecía ser aéreo ya que se econtraba en el último piso de un enorme rascacielos en en la planta número 57.
El hombre sabía muy bien que su hija por una extraña razón amaba ese lugar quizás era por la altura ya que desde pequeña solía apoyarse en los vidrios y observar como todo se veía pequeño desde arriba y según ella se sentía un gigante que había comido frijoles mágicos.

__ Buenas noches, caballeros __

Higurashi se puso de pie saludando a ambos hombres que lucían muy elegantes, tendiendole su mano.
Y los invitó a tomar asiento.
Habían comenzado una amena charla aunque
Sesshomaru no dejaba de mirar disimuladamente hacía todos lados y no veía a la azabache por ninguno y aunque no lo admitiera en voz alta ya había comenzado a extrañarla.

__ Aún falta media hora para la hora pactada y creo que nos hemos adelantado de mí hija __

Toga sonrió mirando a su hijo que el más que nadie sabía muy bien el porque habían llegado mucho antes de lo acordado.
Sesshomaru había insistido demasiado en salir antes por si llegaba a había mucho tránsito o al menos eso quiso hacerle creer a su padre ya que su motivo era algo más personal.

__ Puedes ir a beber si lo deseas hijo __ Susurró y el menor  sonrió, se puso en pie , haciendo una reverencia y decidió ir a la enorme barra que estaba a una considerada distancia.

-- Beber un poco me hará dejar de pensar unos minutos en ella --

Sesshomaru se sentó en una de las banquetas y pidió un whisky en las rocas.
Se dejó relajar bebiendo el contenido mientras sentía como el líquido quemaba su garganta y cerraba los ojos recordando la visita inesperada de Joheil.

-- Imbécil--

El platinado echo un tanto su cabeza hacia atrás y sintió un peso en sus piernas, también como besaban su cuello, asíque rápidamente abrió sus ojos y los dorados se clavaron en los castaños.

__ Hola mí amor __

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Kagome apesar de su cansancio corporal se sentía ansiosa y ni siquiera sabía muy bien el porque o quizás si lo sabía.

No podía evitar que su corazón latiera a prisa en solo pensar lo bien que se había sentido las miles de caricias que le había brindado el platinado y tenía tantas ganas de volver a verlo aunque no lo admitiera en voz alta pero no se había atrevido a mandar un mensaje después de todo, ni siquiera sabía con exactitud si había sido plenamente el deseo del momento por parte de él que lo llevo a comportarse tan hermoso con ella o que en realidad porque le costaba creer que aquel hombre insensible que ella creía que era, resultará ser todo un caballero de esos que solo puedes soñar.

Asíque simplemente se prometió no pensar mucho en el platinado si las cosas funcionaban estaría muy feliz realmente le gustaba sesshomaru pero también debía pensar en su trabajo y sentirse a gusto ya que sabía que su padre había elegido ese hermoso lugar solo porque a ella le gustaba y la bella joven no solo amaba la hermosa vista sino también la inmensa barra en donde trabaja un amigo de toda la vida jacky.
La joven lo amaba era uno de los mejores bar-tender del mundo y siempre le preparaba sin ninguna duda las mejores piñas coladas del mundo asíque llegaba más que bien con unos 20 minutos de sobra asíque estaba muy decidida antes de reunirse con su padre y los Taisho a pasar a saludar a su pícaro Jacky y a tomar esa deliciosa bebida que solo a él, le podría quedar tan exquisita.

Kagome iba acomodando su outfit cuando en una de las banquetas reconoció a un hombre platinado sentado pegado a una de las barras con una hermosa mujer de cabello rizado rubio que lo sostenía por el cuello y parecía besarlo.

__ Sarah__

El Platinado sorprendido vio a la joven que se había sentado en su regazo e hizo una mueca de disgusto ante tal atrevimiento.

-- A caso no puedo tener un minuto en paz?--

Si ella era una de las tantas con la que había tenido algún que otro ecuentro pero que al igual que Kagura se tomaba atribuciones las cuales no le correspondía como tener ese contacto físico que el no le permitía a nadie,  bueno a nadie....
Había una excepción para todo y esa era cierta azabache que por casualidades de la vida había llegado justo en ese preciso momento en donde la esbelta mujer yacia en las piernas del hombre con el que había compartido la noche.

La ojiazul rogaba que el no la haya visto para poder escabullirse pero quién la vio primero fue su amigo y con su voz tan alegre, muy característica de él, la llamó.

__ Ojitos azules __

Así solía llamarla a su adorada azabache, Jacky amaba a su pequeña Kag.
El, al igual que Sango eran súper amigos y siempre la apodaba así pese que ahora hacía más de un mes no se veían ya que solo había llegado al país hace un día, reconocería la belleza única de su amiga a kilómetros de distancia.

Sesshomaru estaba aturdido y cuando iba a alejar a la mujer giro su cabeza y se encontró con que ella está allí su --bebé--
La vio caminar hacia donde se econtraba él y rápidamente sacó a la mujer de su regazo, creyendo que la azabache le haría una escena por un momento pero definitivamente el platinado no conocía lo soberbia que podía llegar a ser ella cuando lo quería.
Vio como su preciosa ojiazul pasaba por frente suyo sin siquiera dedicarle una mirada con esa elegancia y altivez que solo ella podía tener y se sentaba en una banqueta un tanto alejada de él.

__ Qué te parece si repetimos lo de hace tres semanas atrás?__

Preguntó y esto llegó a ser audible para kagome que abrazaba a Jacky con alegría aunque dentro suyo sentía que algo se había roto.

-- Que idiota fui --

Sesshomaru sintió incluso que se le cortó el aire.

--Ella no pensaría mal o si?--

Se preguntaba cuando llegó a su audición lo que había dicho Sarah.

__ Aléjate de mí  __ Susurró cuando bajó de la banqueta y camino hacia donde se econtraba la Azabache hablando con el joven de los tragos, pero se detuvo por un momento sin saber que hacer.

-- Si se conocen, quien será?--

__ No sabes cuánto te he extrañado muñeca , tengo tantas cosas que contarte he andado por París y me he follado a cada bomboncito francés que cuando le cuente a Sango se caerá de espaldas y querrá que vacacionemos los tres juntos, allí __

__ Créeme cuando te digo que se ha enamorado aunque jamás lo admita sabes como es Sango, ha encontrado a alguien tan adicta al sexo como ella__

Jackotsu casi escupe la bebida y abrió sus ojos tocandose el pecho como si fuera a sufrir algún fallo cardíaco.

__ A eso tengo que verlo para creerlo. __

Kagome negaba sonriendo mientras bebía su piña colada pero no quería girar su vista,  no quería verlo con esa despampanante mujer porque por una extraña razón dolía en su pecho.
Aunque ella y el solo habían tenido sexo y nada más, le era imposible no recordar lo bien que se había sentido estar en sus brazos.

Era cierto que ambos estaban interesados en Shippo pero eso no los unía sentimentalmente, la Azabache lo único que sabía es que el vídeo con la pelirroja junto con Bankotsu y ahora haberlo visto a Taisho con esa mujer en un momento tan íntimo ya habían sido lo suficiente como para sacudir su estómago en un vuelco rotundo.

Sesshomaru se quedó observandola fijamente sin saber si hablarle y peor aún.
Se sentía por primera vez muy nervioso, sus manos sudaban y su garganta se econtraba seca.
Cómo iba a saber que Sarah estuviera allí, en el mismo lugar que él?
Si era cierto que había estado con ella pero solo había sido una más del montón, esa mujer no causaba absolutamente nada en él.

-- Maldito Karma--

__ Jack debes prometerme que nos juntaremos el finde semana con Sango, si? Se que tienes mucho trabajo y ya debo irme a una reunión, mí padre me espera __ dijo, tomando su mano y apretándola, el pelinegro asintió y se estiró para besar su mejilla despidiéndose.

Sesshomaru quiso apresurarse cuando la vio marcharse, ya que simplemente había quedado sentado sin saber que hacer y ahora seguramente su pequeña azabache, ya se iría junto a su padre y el suyo después de todo ya era la hora pactada.

Kagome quería ir a recostarse en su cama y no levantar en lo posible hasta Navidad, esperaba que su madre la llame y le diga "ven Kag vamos a cenar deliciosa comida" y ya .
Pero no, ella estaba allí porque también debía trabajar para costear su ropa que no se pagaba sola, ni sus estudios, ni sus gastos asíque su momento de angustia tendría que esperar para después, además que ahora tendría que comprar todo lo que sea necesario para su pequeño bebito pelirrojo.
Mientras caminaba iba pensando en números pero una voz conocida la interrumpió.

__ Hola __

Ella se giró y cuando fijo su vista en los dorados algo en su estómago se revolvió y le dieron unas ganas enorme de decirle que no le hablara más y que se alejase de ella para siempre.
Pero era una adulta y debía comportarse como tal.

__ Buenas noches, Taisho __ trato de sonar amable y apresuró su paso .

__ Podemos hablar, Higurashi?___

-- Princesa me vuelves a evitar como en un principio --

__ Nuestros padres también tienen que estar presente si tienes algo que decir sobre las acciones que mí papá le dará a tú empresa __

-- No quiero hablar de trabajo y lo sabes --

Sesshomaru quizo tomar su mano pero ella en un ágil movimiento prácticamente corrió y guardo silencio cuando la vio saludar a su padre y al suyo viendo como tomaba asiento definitivamente el hechizo se había roto y ella había vuelto a la normalidad.

-- te mataré Sarah--

__ Te he extrañado hija __ Susurró su padre y kagome sonrió.

__ Yo te he extrañado aún más  __ respondío en voz baja y Kenta acarició su mano sonriendo.

El Platinado estaba sentado en frente de ella sin dejar de observar su actuar.
Su padre ya había comenzado a hablar y la Azabache aún no había hecho contacto visual con él, desde que se había sentado en la mesa eso lo estaba comenzando a desesperar.

-- No puedo sentirme así, solo porque no me hable, a caso no lo hará más?--

Toga se había percatado de todo, el no era ajeno a la situación y también veía la tensión en su hijo lo conocía demasiado para saber que algo le sucedía.
Asíque solo podía pensar que quizás había sucedido algo entre los jóvenes.

__ Señorita Higurashi debo felicitarla, cada gráfico, cada estadísticas, han estado impecables podrían decirse perfectas__

Kagome estaba demasiado distraída asíque miró a Inu-No y sonrió simplemente asintiendo con la cabeza en modo de agradecimiento.

-- Vaya ella se encuentra triste, que le has hecho hijo? --

Se preguntó el hombre que como bien dice el refrán -- El diablo sabe más por viejo, que por diablo--

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La comida había llegado a la mesa y como peores jugadas del destino, quien era la camarera encargada de atenderlos, era ella..

-- Sarah --

Se dijo en su mente el platinado al verla repartir las cartas y mirarlo descaradamente para luego guiñarle un ojo.
Kagome se había percatado absolutamente de todo pero no existía mejor persona en el mundo que ella, para fingir que nada le importaba, que nada le afectaba aunque por dentro las cosas eran muy distintas.

Tomó la carta ignorando la situación y comenzó a leer perdiendose un largo momento.
La verdad se le apetecería todo porque le gustaba prácticamente todas las comidas del menú pero en esos momentos su estómago estaba completamente cerrado asíque simplemente pediría...

-- Agua--

Quizás?.. Se preguntaba.

-- No, no debo preocupar a papá --

__ Hija, la joven espera __

Ya todos habían ordenando pero kagome se había perdido por unos minutos en su espacio sideral.

__ Sopa __

Los tres hombres la miraron extrañados.

__ Gracias __ Terminó, por decir.

Ella no quería mirar a la joven y perderse en su hermosa figura entallada en ese vestido rojo sensual que llevaba puesto, parecía haber estado diseñado solo para su cuerpo.

-- Nunca me veré como ella--

Kagome tenía serios problemas de autoestima desde que prácticamente era una niña pequeña.
La imagen que el espejo le devolvía a la bella joven de corazón noble era totalmente distinta a la verdadera realidad.
Aquella belleza que podría compararse con la de un ángel, ella no lograba verla y nunca lo había hecho.
Sus padres había luchado mucho con ella y pese que a su adorada hija nunca había presentando problemas graves hoy en día su salud se veia comprometida ya que cada vez que algo la angustiaba o preocupaba su estómago inmediatamente se cerraba por completo.
Si bien la Azabache deseaba comer, no podía hacerlo, simplemente no podía y nada tenía que ver con su imágen era simplemente las consecuencias que producían los nervios en su cuerpo.
Sin contar que era la única hasta el momento que sabía de su repentino diagnóstico, y no había dicho nada por temor a que se mal interpretara todo.

__ Te sientes bien, mí niña?__

Ella solo asintió y luego de unos minutos en donde se dedicaron a firmar papeles y demás, comenzaron a cenar en modo de celebración .
Todos con sus deliciosas comidas y kagome bueno... con su sopa de verduras de la cual solo había probado cuatro cucharadas.

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La charla del señor Inu-No y Kenta era demasiado amistosa ya que al fin eran socios, ambos hombres se llevaban de maravilla incluso habían formado una amistad entre ellos asíque por un momento decidieron olvidarse de sus hijos y charlar amenamente de cosas de la vida.

Aunque la situación de los jóvenes era totalmente distinta a la de sus padres.

La Azabache no le había dirigido la mirada en toda la noche al platinado ni por casualidad y estaba concentrada en jugar con su sopa que ya se había enfriado en su plato hace rato.

-- Qué sucede, bebé?  --

Debía admitir que no entendía mucho a las mujeres tampoco es como si alguna vez le haya importado alguna pero verla haciendo eso con su boquita como un puchero de niña pequeña lo enloquecía, el hombre juraba que mataría a Sarah si su ojiazul no le hablaba más.
Al margen que para el las mujeres eran un enigma sin resolver, podía darse cuenta que algo le había molestado.

-- Mierda..--

-- Quieres que me enamoré de ti, Taisho?--

Aquella pregunta resonó en la cabeza del hombre quien se había ilusionado por un momento con el solo pensar que quizás podría llegar a tener una oportunidad con la única mujer que era inalcanzable tanto para él como para cualquier otro hombre.

Y ahora solo podía observar como ella miraba por la ventana pérdida en la inmensidad de la bella imágen nocturna que les regalaba ese bello lugar.
Y no podía evitar detallar su hermoso rostro, tan perfecto, tan único como jamás había visto alguno en su vida.

-- Porqué me vuelves loco Princesa? Es el Karma que estoy pagando que todo me salga mal contigo?--

Kagome se sentía estúpida por haber pensando por un momento que Sesshomaru podría llegar a tomarla encerio con ese encantador personaje de Príncipe Azul que había montado cuando estuvo con ella.

-- Demonios como he podido caer yo también en su trampa?
Y Porqué me sorprende? El y yo no somos nada estoy actuando estúpidamente pero ...
Debo de admitir que por una extraña razón realmente se había sentido bien con él y no solo en el grandioso sexo era más bien como si...
Ah basta! Sango tiene razón no sirvo para esto del sexo abierto y ya lo dejaré atrás por mí salud mental ...--

El miraba sus manos puestas sobre la mesa y ese impulso de volver a sentir aunque sea un leve contacto con su piel ganó, queriendo sujetarla para acariciarla y sentir nuevamente su delicadeza pero apesar de su distracción la azabache apartó sus manos rápidamente en un acto reflejo.

-- Porfavor bebé, no me hagas esto --

Sesshomaru tenía un mal presentimiento y se estaba comenzando a impacientar, no sabía que la Azabache se encontraba tan enojada para pedirle a su manera que no se acerque nuevamente a ella .

Y eso que el no sabía que aún era peor de lo que pensaba y es Kagome por primera vez estaba experimentando un sentimiento nuevo en ella, uno que jamás había vivido hasta el momento con su moreno y de todos los sentimientos que existían podría decirse que era el peor, uno muy difícil de manejar y controlar cuando se instalaba en un persona...

Celos....

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Holis mí gente linda cómo andan? Espero que súper ❤️

Bien si me he perdido por unos días pero aquí he vuelto 🤭. Lo siento mucho es que volver a la rutina me ha dejado uff .

El capítulo tiene un poquito de todo asíque espero que lo disfruten y me lo hagan saber con sus ⭐ y sus comentarios ❤️.

Uff que piensan que pasará? Kagome agarrará a los madrazos a Sessh? Jaja 😂

Ya lo Veremos....

Los leo 🙌