¿Cuándo iba a acabar su jodido celo? Woozi estaba cansado de él, cansado de sentirse necesitado y solo todo el tiempo y solo aliviarlo estando con Jeonghan. Le habían dicho que el celo era solo una necesidad sexual, algo que debía pasar o no, algo como "estar caliente todo el tiempo" como dijo Wonwoo. Pero Woozi estaba un poco más allá del deseo sexual. Claro que quería acostarse con Jeonghan, cada jodido minuto, pero también quería esconderse en él, hacerse más pequeño y enterrarse en la piel de su omega para nunca salir.

Woozi se sentía casi obsesionado con el omega.

Había sido difícil salir de la cama ese día, fue difícil dejar a Jeonghan y fue aún más difícil comenzar a funcionar como siempre, no estaba acostumbrado a la constante necesidad que ocurría en su pecho. Él ni siquiera había podido apartarse de Jeonghan, seguía llevando su listón a todos lados, y lo intentaba disimular colocándoselo a Byul, a quien había llevado de un lado a otro todo el día.

Cuando su celo terminara y pudiera volver a actuar con normalidad entonces solucionaría más de un problema, pero ahora era mejor no moverse y dejar que los chicos siguieran andando por su cuenta. Cuando llegara el momento tendría que afrontarlos.

Ahora, despues de haberse alejado lo suficiente de Jeonghan como para ya no sentir la necesidad de correr hacia él, despues de eso, encontró a Seungkwan en una de las aulas de Hyejin, un Seungkwan que parecía crear una especie de campo a su alrededor en el que ninguno de los alumnos de primero o segundo año querían entrar. Ellos miraban casi con terror hacia el omega y se ocultaban detrás de los estantes.

—Ha estado así durante una hora.— murmuró un alumno de primer ocultándose detrás. Seungkwan solo estaba sentado, observando uno de los viejos anuarios de la escuela. —Es aterrador...

—¿Seungkwan?— Preguntó como si fuera ilógico.

—¡Shhh! Si lo escucha podría voltear.— Ah, eran casi niños. Miró de nuevo a Seungkwan. —Solo llegó y se sentó allí con un anuario.

Woozi respiró profundo, y quizás comprendió el miedo de los demás chicos. Si bien no era el mejor analizando aromas ni percibiéndolos si había aprendido unas cuantas cosas el año anterior, como el hecho de que sin importar que no pudieras descifrarlo mediante el olfato las feromonas causarían algo en ti; como el terror de los alumnos hacia Seungkwan, quien estaba desprendiendo un aroma y un sentimiento tan amargo que lo hizo retroceder un paso. Era curioso, Jeonghan también había tenido un aroma similar en cuanto regresó durante la noche.

Ojala le hubiera prestado más atención al aroma de Jeonghan en lugar de solo... Le cubrió la nariz a Byul.

Giró un poco hacia atrás percatándose que más de un alumnos estaba en su espalda, la mayoría agachándose como si se ocultaran y Woozi estaba a punto de reír porque muchos eran más altos que él. Las ganas de reír desaparecieron cuando se dio cuenta de que casi todos eran más altos.

Como sea.

—Seungkwan.— Lo llamó y Seungkwan giró a mirarlo en respuesta.

Oh. Dio un paso atrás y todos los alumnos en su espalda salieron corriendo.

—Ah, Woozi.— Seungkwan le sonrió apartando un par de cosas de la mesa para invitarlo a sentar. —Estaba distraído, lo siento.

—Ah...está bien.— titubeó tomando asiento frente al omega mientras abrazaba a Byul. El aroma de Jeonghan seguía allí. —Seungkwan... ¿pasó al...?

—Seokhwa dijo que había algo que no reconocía y yo estoy de acuerdo.— Habló Seungkwan mirando el anuario. —Le describí todos los aromas pero no concordamos en uno. No es floral... bien, si es floral pero no ese tipo de floral. No viene de una planta.

Seungkwan pasó las páginas del anuario repleto de rostros y frases cortas. Woozi en serio quería mencionar lo obvio, podía intuir que algo había pasado entre él y Jeonghan, pero no podía saberlo hasta que alguno de los dos hablara y estaba seguro de que si iba a preguntarle a Jeonghan terminaría acurrucándose en él sin preguntar nada. Así que debía hablarlo con Seungkwan. Tragó fuerte llevando una mano a su cuello.

¿Por qué no podían discutir Wonwoo y Minghao? Tratar con ellos sería mil veces más fácil, porque podía decirles directamente lo que necesitaba y sus reacciones serían mucho mejor de lo que pensaba de Seungkwan. De hecho, no sabía que esperar de Seungkwan.

Tomó valor agitando un poco su cabeza.

—¿Qué pasó entre tú y Jeonghan?— Preguntó de golpe. Seungkwan lo miró. —Solo pregunto.— Se encogió en hombros alzando un poco a Byul.

Seungkwan suspiró.

—No es importante.

—Si los afecta es importante.

—No es importante en referencia a la escuela. Es... personal.

—oh... ¿sabes? En realidad no somos una mafia. Ni un trabajo. Somos amigos.— Suavizó su voz saliendo detrás de Byul. —Aunque... si no quieres hablarlo no tienes que hacerlo. Supongo.

Hubo un largo silencio que pareció incómodo. Woozi se hundió entre el asiento y Byul, su mente levemente en blanco para no pensar y su respiración haciéndose tranquila. Deseó estar con su omega, deseó no haberse movido de la cama y solo quedarse allí durante el resto del día, o hasta que su celo terminara. ¿pero cuando demonios iba a terminar su celo? Estaba lejos de sentirse tranquilo, lejos de sentirse satisfecho de Jeonghan.

Miró a Seungkwan. Seungkwan no había aceptado a Chan, podía intuirlo por lo que Seokhwa les contó, se había negado por lo que Seungkwan debería desear que Dino siguiera siendo un menor, por eso lo buscó despues, para convencerlo. Y Jeonghan fue a buscarlo porque... ¿Por qué? Tuvieron que discutir, era evidente ¿pero era solo por Chan?

Ah. Era mejor pensar en su celo.

—Si...— Habló Seungkwan de repente.— si pudieras elegir, entre casarte o no con Seungcheol... Justo ahora... ¿Qué escogerías?— Hubo un espacio de silencio entre la pregunta y la confusión de Woozi. Espacio que Seungkwan tomó para exhalar una risa. —Es tonto, lo sé. Tu quieres a Jeonghan...

Ah. apretó los labios.

—Escogería no casarme.— Confesó asintiendo. —Si fuera algo mágico que se me diera claro que escogería no casarme. Pero... siendo realista... Si tuviera que enfrentarme a los problemas que conlleva no casarme, si tuviera que enfrentarme a mi familia o la de Seungcheol... si mi decisión afectara a Seungcheol o a su familia... no sabría qué hacer. No sabría si tengo el valor suficiente para decirlo y afrontar lo que conlleva. Pero a la vez... no sé si tendría el corazón para dejar ir una oportunidad para deshacer algo que nunca quise.

Seungkwan bajó la mirada, sus ojos por fin dando un destello triste y confuso, algo que no estaba diciendo pero que se reflejaba en él. Seungkwan era expresivo, casi incapaz de esconder sus verdaderos sentimientos sin importar cuales fueran. Woozi lo envidiaba un poco, aunque para ser honestos también detestaría no poder ocultar nada.

Claro que Seungkwan ocultaba cosas, pero todos sabían cuando estaba haciéndolo. Era casi transparente.

—¿y si no fuera tu decisión? Si alguien más... decidiera romper todo y tuvieras que enfrentarte aun así a los problemas...

Bien, ya lo tenía.

—No tienes que obligarte a elegir entre Vernon y Dino.

Seungkwan pareció encogerse, sus mejillas levemente rojas.

—No es solo eso...— Balbuceó. —Dino es un grandioso menor... él... dedicó tanto tiempo y se esforzó tanto que me parece injusto. Dedicó su vida a ser un menor.

—Seungkwan, no puedes decidir sobre otros.— Aclaró mirándole al rostro. —Tus decisiones afectaran a otros, y eso está bien, pero tú no puedes tomar decisiones que no te conciernen. Dino o Chan ha decidido sobre su vida, sea bueno o malo tú no puedes meterte allí.— Tomó aire. —La decisión de Chan no es tuya, aunque te afecte.

—¡Pero...!

—Lo mejor para ti quizás no sea lo mejor para él.— Le interrumpió. —Chan tomó su decisión, y tú debes afrontar lo que significa para ti, no para él.

Los ojos de Seungkwan parecían brillar, sus mejillas rojas junto con su nariz y un par de lágrimas al borde de sus ojos, deteniéndose en las pestañas. Seungkwan ya no era un cachorro, pero tampoco era una persona cruel o analítica, por lo que evitar decirle las cosas de frente solo lo afectaría más, y tratarlo como el culpable de todo no ayudaría. Aunque quisiera ser como Wonwoo y ser suave, o como Minghao y ser casi cruel, no podía.

—Estoy cansado de que todo cambie...— La voz del omega se quebró, dejando caer por fin las lágrimas. —Quiero cambiar también... pero no me gusta la persona que estoy siendo...— Comenzó a llorar como un cachorro, intentando limpiarse el rostro. —Aunque le diera una respuesta a Dino como dice Jeonghan... yo no sería suficiente para él... Dino simplemente se irá si no es un menor... y no quiero que pase.

Ah. Respiró profundo apartando la mirada un momento. Ver llorar a Seungkwan era realmente lamentable, casi gracioso que los ojos de Woozi se hubieran puesto cristalinos. Miró a Byul y está casi le ordenó que se moviera, bien, se alzó sobre su asiento y extendió una mano hasta alcanzar a Seungkwan. Lo abrazó golpeando sus labios contra la cabeza del chico, porque no tenía nada que decir. Si hubiera sido más cruel le diría que terminaría pasando, y si fuera más suave le mentiría diciendo que todo se arreglaría pronto. Se mantuvo callado.

Respiró profundo el aroma cítrico y cerró los ojos un momento. Hasta que la terrible sensación que recorrió a su espalda llegó como un rayo. Se puso de pie justo enfrente de Seungkwan y lanzó a Byul a sus brazos.

La puerta se abrió de golpe, tan fuerte que las cosas tiritaron a su alrededor, algo abrumador y molesto que llenó el lugar en cuestión de segundos. Seungkwan se cubrió la nariz, quizás no se percató antes gracias a sus propios sentimientos, pero Seungkwan no la detectó.

—¡Seungkwan!— La voz de Minsook era dolorosamente fuerte. —No tienes permitido salir de la escuela sin mi maldita autorización.— La alfa caminó firme, pero Woozi no se movió, quizás porque no podía hacerlo. —Apártate, omega.

Ah. Deseó que Hyejin estuviera allí.

Se apartó, pero se llevó a Seungkwan con él recibiendo la pesada e intimidante mirada de MinSook. Quería huir, pero la mujer cubría la única salida y de cualquier forma terminarían enfrentándola. Lo único que podía hacer al respecto era cuidar de Seungkwan cuanto pudiera, aun si algo dentro suyo le gritaba esconderse.

—Woozi...— Seungkwan intentó apartarlo. —¡Yo...!

—¡No tienes permitido salir a ningún lado sin mi autorización!— Casi gritó MinSook. La voz de la alfa se volvió más oscura, ella pareciendo calmarse y respirar, como si hubiera notado de pronto su propia histeria. —No voy a permitir más estupideces de tu parte o de tu hermana. Me desharé de la molesta beta.

—¡No te acerques a mi hermana! ¡A ninguna!— Seungkwan casi saltó enfrente, pero Woozi lo tomó. Acercarse a la alfa era mala idea, incluso si ella no pensaba lastimarlo.

—Esa beta no es tu hermana. Ni siquiera es hija de tu madre.

—Es hija de mi padre.

MinSook extendió la mano para tomar a Seungkwan, su imponente figura volviéndose mucho más amenazante. Antes de que pudiera alcanzarlo, justo despues de que Woozi apartara al omega, justo en ese momento...

—¡Señora Seo!— La voz de Park detuvo todo. MinSook giró con molestia. —Entiendo que esté hablando con su hijo en este momento, pero... acerca de lo que hablamos antes. Hay problemas.

—Park...— Minsook carraspeó reacomodándose a si misma. —¿Qué clase de problemas?

—¿desea hablarlos en privado?

Hubo un largo silencio alrededor, la mirada de Minsook se apartó de Park, y se encajó en Woozi. Tan repentino que su piel se erizó, pero prefirió no moverse ni decir nada, estando en tal desventaja lo mejor que podía hacer era continuar callado.

Recordó la primera vez que se encontró con ella, la misma fría mirada y aroma fuerte, tan cruel y firme que era imposible de ignorar. Woozi se mantuvo quieto, no apartó su mirada ni bajó la cabeza, no se encogió como ella esperaba. No desapareció. Se mantuvo allí, regresándole la atención de la misma manera.

—Lee.— Habló MinSook como normalmente lo hacía. — Aunque pareces saber cómo moverte... no te confíes.

—Nunca lo hago.

MinSook desapareció junto a Park.

Volvió a respirar.

—¡Suéltenme!

—¡Wonwoo, cállate!— Le ordenó Cha.

—¡ah!

Por alguna razón Cha se hecho a reír. ¿Qué tenia eso de gracioso? Los uniformados literalmente llegaron hasta ellos y los tomaron como rehenes, los arrastraban por los pasillos, un uniformado para Cha ¡Y como cinco para Wonwoo! Literalmente estaban cargándolo mientras se retorcía y gritaba, quizás tenía que ver con el hecho de que Wonwoo había peleado con ellos incluso antes de que llegaran.

Habían buscado las plantas y encontraron algunas, las escondieron dentro de la habitación de Seungkwan y despues salieron a buscar más, y justo cuando estaba oscureciendo los uniformados fueron directamente a ellos, como si lo supieran desde antes y ahora los arrastraban a quien sabe dónde mientras que Wonwoo continuaba gritando.

—Gritas muy gracioso.— Se burló Cha.

—¡ah! ¡¡AH!!

—Wonwoo, cállate por favor.— Pidió Jeonghan cubriéndose los oídos, al parecer los uniformados también lo habían tomado en parte del camino, junto con Seokhwa y Minghao.

—Que omega tan especial, necesitan cinco personas para controlarlo.— Balbuceó Seokhwa mientras Wonwoo pataleaba. —¿un omega alfa?

—¡Vete al demonio! ¡Soy simplemente omega!

—Wonwoo, cállate o yo no seré tan amable como estos idiotas y te haré callar.— Le ordenó Minghao.

Bien. Se quedó callado al encontrar la mirada amenazante de Minghao. Cha seguía riéndose de él.

De cualquier forma. Se suponía que Seokhwa se quedaría en su habitación analizando si las flores eran correctas, Seungkwan tenía que quedarse con él pero el chico desapareció de pronto, y Seokhwa tuvo que hacerlo solo, tal y como Wonwoo recolectó unas plantas mientras Kyungsoo se perfumaba la nariz o algo parecido, aún estaba molesto porque el maldito omega se tardó demasiado en regresar.

Los uniformados los lanzaron casi de golpe a una de las aulas vacías, mientras que Cha y los demás entraron de pie y caminando a Wonwoo lo lanzaron como a un animal. Cerraron la puerta detrás de si dejándolos casi desconcertados. Se puso de pie queriendo perseguir a los idiotas, sin embargo, sintió a alguien deteniéndolo, y cuando giró Seungkwan estaba allí, junto con Woozi.

Woozi estaba cruzado de brazos en la pared, mirándolos desde lejos casi sin expresión, algo distinto, pero aun parecía la mierda pegadiza de Jeonghan, porque cada ciertos segundos su ojos caían sobre el omega y parecía disimularlo bastante mal. Wonwoo rodó los ojos queriendo ocultar a Jeonghan solo para ver la reacción de Woozi.

—¿Por qué nos trajeron aquí?— Preguntó Seokhwa.

—Lo hizo alguien que quería decirnos algo.— Aclaró Woozi con calma. Seungkwan asintió. —Pero... Seungkwan y yo no sabemos que pensar al respecto.

—¿sobre que?— Preguntó Minghao.

—Alguien le dio a Park el reloj de Woozi.— Aclaró Seungkwan y Wonwoo lo miró de golpe.

—¿Qué? — preguntó. —Pero si tú estabas cuidándolo...

—¿yo?— Seungkwan lo miró sorprendido, como si no fuera así. —Minghao era quien lo tenía... él lo tomó.

—No.— interrumpió Minghao. —Wonwoo... yo se lo di a Wonwoo.

¿Qué?

—Si, me lo diste, despues te dije que no quería esa responsabilidad porque el jefe actuaba como un idiota y se lo di a Seungkwan.

—Y yo no lo acepte.— Aclaró Seungkwan.

—Si. Seungkwan no lo aceptó y lo guardaste en tu bolsillo.

—Pero tú le dijiste que no lo guardara en su bolsillo y se lo quitaste.— Aclaró Kwannie comenzando a marear a Wonwoo.

—Se lo di en la mano de vuelta.— Minghao insistió.

—Y yo lo empuje, no lo tomé.

—Son idiotas.— Suspiró Jeonghan llevándose una mano al rostro. —Esto es bastante malo...

—Si no estabas allí no opinas.— Regañó Wonwoo.

—No es su culpa.— Habló Woozi sin moverse un centímetro. —Park no encontró el reloj por casualidad. Alguien se lo dio.

Hubo silencio.

—Supones que alguien traicionó a los otros.— Concluyó Cha. —Y no sospechas de tus amigos.

—¿eh?— Preguntó Seokhwa. —¿Sospechas de mi y de Kyungsoo?— Woozi no respondió. —¿no confías en nosotros?

—Nunca confié en ustedes.— Aclaró Woozi sin cambiar su expresión. —Fueron ellos quien confiaron en ustedes.

—¿de que mierda estás hablando?— Preguntó Minghao. —Estabas de acuerdo con pedirle ayuda a Seokhwa.

Woozi asintió.

—Pero no confió en él. Te lo dije.

Oh. Wonwoo apretó los labios tomando a Cha.

—Yo si confió en este tipo.— Dijo señalando al omega. —Jeonghan también lo hace.

—Kyungsoo.— Jeonghan respiró profundo cuando Cha lo miró. —Dime si le entregaste el reloj a Park.

Cha miró a Jeonghan por algunos segundos, y Wonwoo no lo soltó, confiaba en Cha.

—No lo hice.

—¿y solo le creemos y ya?— preguntó Minghao. —No quiero defender a Seokhwa pero este chico sabe casi nada del asunto.

—Minghao tiene razón.— Balbuceó Seungkwan. —Aparte... Kyungsoo tiene más contacto con Park.

Ah... Wonwoo sintió marearse. Si Cha era culpable entonces... no, no podía pensar que ese molesto omega era culpable, porque si lo fuera estarían completamente perdidos. En cambio, Seokhwa... no tenía nada contra el omega, pero ese omega era un idiota, un idiota doble cara porque Wonwoo sabía que no le agradaba en lo absoluto, pero con Jeonghan, Woozi y Minghao era todo un amor escondiendo lo mierda que era.

No tenía razones válidas para dudar de Seokhwa, pero aun así iba a hacerlo.

—Entonces...— Woozi habló. —¿Quién fue?

Hubo un largo silencio.

—Hay...Hay algo...— Dijo Seokhwa llamando la atención de todos. —Kyungsoo... Esta tarde ¿no acompañaste a Park a su oficina? Creí haberte visto pasar...

Oh. Mierda.

—Todo el dia estuvo conmigo.— Habló Wonwoo. —Bueno... casi... ¡Pero pudo haberse atorado en el inodoro y no traicionarnos! Nadie más lo vio, solo Seokhwa.

—Yo también lo vi.— Aclaró Seungkwan y Wonwoo maldijo. —Bueno... yo... lo olí. Pensé que era algo normal, Kyungsoo y Park si suelen estar juntos de vez en cuando.

—Kyungsoo...— Jeonghan por fin habló de nuevo. —Aunque sea cierto eso no significa que...

—No seas ingenuo.— Dijo Minghao.

—Es probable...— Habló Seokhwa de nuevo y Wonwoo miró. —Que Kyungsoo haya...

—Fuiste tú.— interrumpió Cha. —Admítelo.

Y solo allí se dio cuenta de que Cha había estado mirando fijamente a Seokhwa. No apartó su mirada ni un segundo, manteniéndose en silencio y solo observando con su pesada mirada. Había algo en Kyungsoo que era levemente amenazante, pero era firme y estricto, recto, casi como una lanza en dirección. Wonwoo no podía creer que un omega... o una persona, pudiera tener ese tipo de presencia.

—Lamentablemente no puedes ordenarle a las personas lo que se te de la gana.— Dijo Minghao.

—Admite que lo hiciste.— Insistió Cha sin apartar su mirada.

—No lo hice.— Respondió Seokhwa pareciendo nervioso. —Estuve todo el día haciendo lo que me pidieron... Estaba ayudando.

—Admítelo.

—Kyungsoo...— Jeonghan lo tomó del brazo.

—No me importa formar parte de algún grupo.— Dijo Kyungsoo mirando a Jeonghan. —No quiero ser su amigo o protegido. No me importa. Pero no permito que me inculpen o me mientan. — Regresó su mirada a Seokhwa. —Admítelo.

—Pero yo no lo hice...

—¿no?— Woozi inclinó su cabeza casi con desinterés.

—Tú...— Balbuceó Jeonghan mirando al omega casi en el centro, el pobre de primer año pareciendo diminuto. —¿al menos sabes ocultar las cosas? Nos contaste todo lo que había pasado con Seungkwan como si fuera nada...

—Quería ayudarlos.— Aclaró Seokhwa. —Les conté porque quería ayudar.

—Seokhwa tiene un punto.— Dijo Minghao.

Wonwoo no tenía una jodida idea a quien mirar. Estaba confundido y mareado, era demasiado para él.

—Admítelo.— Ordenó Cha de nuevo.

—Los aromas son demasiado planos como para saber si alguno miente...— Murmuró Seungkwan.

—Admítelo.— insistió Cha acercándose a Seokhwa. —a él ni siquiera le importa quien fue.— Señaló a Woozi con la cabeza. —Probablemente ya lo sabe... pero no me iré hasta que lo admitas.

—Pero yo no...

Woozi sonrió jugando con su mano y su collar. Oh. Él lo sabía. Wonwoo también, porque si hubiera sido Kyungsoo Park no tendría solo el reloj, también tendría el diario. Oh... ¿Cha podría estar haciendo todo esto para que dudaran de Seokhwa? ¿que ganaba? Tan confuso.

—Ya saben que lo hiciste. Admítelo.

—¡Peo no lo hice!

—¡Deja de mentir!— Cha gritó, como nunca había gritado antes.

—Kyungsoo.— Jeonghan casi lo empujó hacia atrás. —Detente ahora. Aun si fue él debes parar.

De nuevo, el jodido silencio.

Woozi suspiró.

—En realidad no importa quien fue.— Habló el omega por fin caminando. —Porque los dos se van a la mierda.

—¿eh?

—Yo cometí un error antes. Pero este es el suyo.— Woozi se detuvo en la puerta, mirándolos a todos. —Fue su decisión confiar en ellos, no la mía.

Y tan fácil como eso Woozi se fue.

Oh. Él sabía que esto terminaría pasando. Y los dejó fallar.

—¡Kyungsoo!

Jeonghan lo tomó del brazo en cuanto lo alcanzó. Bien, había casi corrido detrás de él durante algunos minutos, tanto que llegaron al quinto piso. Y Jeonghan lo odiaba ¿Cómo era capaz de caminar tan rápido? Ni si quiera estaba corriendo pero Jeonghan apenas había conseguido alcanzarlo, era absurdo. De cualquier manera miró al chico y respiró recuperando el aire que perdió subiendo las escaleras.

—No quiero ser parte de tus amigos. No quiero estar en ningún grupo y...

—Si Park continua molestándote puedes buscarnos a mi o a Wonwoo. — Aclaró mirándole al rostro. No quería que Kyungsoo se uniera a "su grupo" o algo así, no le importaba. Pero Jeonghan había decidido confiar en él. —Te di el diario por una razón, así que si caes yo también lo hago. Así que si tienes problemas búscame.

—Jihoon piensa...

—Sé lo que piensa, pero él lo dijo; este es mi error o mi acierto, no suyo.

Apretó los labios y trató de cubrir el sonrojo en sus mejillas. Lo que planeaba hacer sería verdaderamente vergonzoso para si mismo. No era parte de la manada de los lobos negros, así que no tenía ni la más mínima idea, pero creía que tenía algo de importancia si el omega lo había hecho antes.

Alzó su mano acercando el dorso de esta a la nariz de Kyungsoo. El omega lo miró sorprendido por varios segundos, y despues respiró hondo.

Kyungsoo le tomó la mano.

—También confiaré en ti en ese caso.

Sonrió aunque no recibió respuesta.

Cuando llegó a la habitación de Woozi ninguno dijo nada, ninguno preguntó sobre lo que había pasado o como iban a responder ante ello, no hablaron de nada, ni de los chicos, ni del reloj, ni el supuesto traidor o la confianza. Jeonghan tan solo se recostó sobre la cama y Woozi respondió de inmediato casi colocándose sobre él, abrazándolo.

A veces odiaba el celo de Woozi, a veces no. Solo esperaba el momento en el que este terminara para volver a afrontar lo inevitable.

A veces deseaba que el celo de Woozi durara siempre, porque de esa manera Jeonghan tendría una excusa para mantenerse cerca. Apenas era el segundo día y ya pensaba en acostumbrarse a él, a la necesidad de tenerlo allí y quererlo.

Quería que Woozi fuera su prioridad. O quizás solo estaba consintiéndose a sí mismo, de cualquier forma eso no cambiaba nada. Se concentró en Woozi cuando este comenzó a besarlo.

"No los amas."

Jeonghan los amaba, sin duda.

—¿fuiste tú el que nos advirtió?— Preguntó Minghao murmurando en la cama de Hoshi.

—¿eh? No. No sé ¿Qué? ¿Qué vertió?— Preguntó el alfa adormilado abrazando uno de sus tigres.

Era gracioso, por eso solo sonrió abrazando su espalda y encogiéndose allí. Debería estar en su cuarto, pero no. Quería dormir con Hoshi, sentirlo cerca y olvidarse de todo. Al menos por una horas.

Wonwoo recordaba haber tomado el reloj y colocarlo en su bolsillo, Minghao y Seungkwan tenían razón, Wonwoo lo tenía, aunque al principio no lo recordó ahora lo hacía. Era él quien tenía ese reloj.

—Seokwha maldito traidor...— balbuceó. —Entre vegano y pobre... Eres terriblemente una mierda con muchos trucos de carterista.

Y recordaba haber tenido a Seokhwa a un lado, a pesar de que este nunca se acercaba a Wonwoo. Podría darle el beneficio de la duda, pero no, estaba seguro.

"No los amas."

Quizás Seungkwan no amaba suficiente. Quizás era él quien no tenía suficiente amor como para aceptarlo, como para afrontarlo. Quizás... no merecía ningún amor.

—Chan...— Murmuró mirando el techo. —Chan...