Así comienza la historia.

Desde hace mucho tiempo... No, así no comienza la historia.

Desde hace como dos generaciones atrás, en Alemania, específicamente en Baviera, Nuremberg, inició una empresa. Que obtuvo por nombre; Klausen Corporation. Donde el abuelo de mi padre, invirtió casi todo su dinero en otras empresas. Las ayudaba a crecer y luego, las compraba. Y así, se fue creando un gran imperio. Después de varios años, descubrieron que la nueva forma de invertir en una empresa y tener alianzas con ella, sería volverse familia.

¿Cómo así?, Sencillo. Unir familias de la manera más común. Matrimonio.

Si, un poco cavernícola, a mi parecer, pero bueno, eso lo inventaron ellos. Resulta que, desde que descubrieron está nueva forma de hacer crecer aún más el imperio, decidieron casar a mi abuelo alemán, con mi abuela española. Este imperio se extendió por casi toda Europa, y el matrimonio arreglado se volvió una tradición.

Un matrimonio entre dos personas totalmente desconocidas, un matrimonio en dónde, según mis abuelos, mis padres, mi hermana y todas las personas que forman parte del imperio; "el amor surge con el tiempo".

Tal vez sea cierto, tal vez no. No lo sé, por parte de mis padres y mi hermana; sus matrimonios, son mejores, se aman y son felices.

Otros dicen que es un completo desastre eso de casarse sin conocer y sin amor.

Por mi parte, estoy preparada. Desde muy pequeña sabía que en algún momento de mi vida iba a casarme, y sabía de antemano que sería arreglado. En estos matrimonios no existe el divorcio. Si, así que si, no logras mantenerlo a flote, serás infeliz, toda la vida.

Nunca pensé que, conocer a una persona podría poner tu vida de cabeza, hasta que lo conocí a él.

Al hombre con quién compartiría mi vida, al que me entregaría en cuerpo y alma. Del cual me iba a enamorar con todo mi ser.

Pensé que todo era una simple alianza con su gran empresa, y la nuestra. Pero fue tan solo mirar sus ojos azules, tan claros como el cielo y tan profundos como el mar, para saber que esto iba más allá.

Fue tan solo mirarlo, para saber que en esta alianza íbamos a ser... Simplemente nosotros.