Liam se encontraba sentado en el sofá con la mirada baja sosteniendo una bolsa de hielo sobre su ojo y se veía notablemente incomodo, me senté a su lado con el botiquín de primeros auxilios en mis manos, lo abrí y saque algodón y alcohol, deje el botiquín en la mesita y abrí el alcohol mojando el algodón.

-No tienes que hacer esto -dijo Liam aún si mirarme y dejando el hielo sobre la mesa

-Mírame -dije omitiendo sus palabras

Liam giro su cabeza y dirigió su rostro hacia mi, con la mirada clavada en la nada.

Su labio estaba partido y sangrando, al igual que su nariz. Su pómulo se encontraba rojo y su ojo morado, su camisa blanca estaba manchada de sangre y su cabello desarreglado, al verlo llegar no lo podía creer ¿Que había sucedido para que lo dejaran de esta forma?. Verlo así era terrible, mi estomago se contraía y me sentía frustrada y nerviosa, quería saber que había sucedido para que llegara en ese estado, no entendía por que, pero dolía.

Tome el algodón y comencé a limpiar suavemente la sangre ya seca que provenía de su boca.

Presioné un poco mas para limpiar bien y Liam hizo una mueca de dolor.

-Lo siento -dije, separando el algodón de su rostro

-No te preocupes, yo soy el que tendría que disculparse -dijo, mirándome a los ojos y regalándome una débil sonrisa que hizo que hiciera otra mueca de dolor.

-¿Me dirás que sucedió? -pregunte seria, cuando buscaba mas algodón para comenzar a limpiar la sangre de su nariz

Liam se removió incomodo

-Eso no es importante

Suspire dándome por vencida

Con una mano tome su barbilla para que su rostro no se moviera y con la otra mano comencé a limpiar su nariz. Estábamos muy cerca y mi mano haciendo contacto con su piel, me daban cosquillas en el estomago, como podía intente ocultar lo nerviosa que me ponía nuestra cercanía.

-¿Por que haces esto? -preguntó serio, levante mi mirada hacia sus ojos para ver como me observaba, como si buscara una respuesta en mi rostro.

-Por . . .¿Por que preguntas eso? -pregunte nerviosa, alejándome de él y volviendo a buscar mas algodón y alcohol. Cosa que en realidad solo era una excusa para disimular lo nerviosa que me encontraba.

-Solo, pensé que eras . . . distinta.

Volví mi mirada hacia Liam, quien seguía observando cada movimiento que hacia.

-¿Distinta? -pregunte volviendo a mi trabajo anterior y curando su nariz

-Auch . . .-se quejo Liam

-Lo siento -dije nuevamente con voz apenada

-No te vuelvas a disculpar.

Solo asentí y continué con mi trabajo.

Luego de terminar de curar sus heridas me dirigí a mi habitación y busque la crema que Liam me había dejado para mi nariz golpeada y volví a la sala.

-Toma -dije sentándome a su lado y dándole la crema.

Liam la tomo y pequeña sonrisa se dibujo en su rostro.

-¿Por que sonríes? -pregunté curiosa

-No es nada -respondió y abrió la crema colocando un poco en su rostro casi a la altura de su ojo.

-No lo hagas tan arriba o te entrara en el ojo.

-Es que no me veo, mejor voy a el baño

Seguramente mis manos comenzarán a temblar más, pero no podía dejarlo curarse solo.

-Yo te la pondré -dije.

Liam me miro sorprendido y con un poco de incomodidad.

-No tienes que hacerlo -dijo parándose, pero lo tome de la muñeca antes de que pudiera hacerlo totalmente.

Liam me miro y se sentó nuevamente.

Lo solté y tome la crema de su mano coloque un poco en dos de mis dedos y la deje sobre la mesita, acerque mi mano a su rostro y pasando por alto las fuertes palpitaciones de mi corazón y mi rostro sonrojado comencé a dar suaves masajes en su mejilla hinchada y roja. La mirada de Liam estaba sobre mi y sus manos sobre su regazo.

-¿Nunca antes habías hecho esto? -preguntó con tono de diversión

Fruncí el ceño

-¿El que? -pregunté sin dejar de mirar su mejilla y concentrándome en mi trabajo

-Curar a alguien , porque. . . esa es la razón para que estás tan nerviosa ¿o me equivoco?

-No estoy nerviosa -dije tartamudeando

Liam solo río y ante una gran mueca de dolor tomo mi mano como acto reflejo alejándola de su mejilla y llevándola hacia su regazo.

-¿Estás bien? -pregunté preocupada

-Creo que si, es lo que me merezco por haberme peleado con un imbécil -dijo tocando suavemente su mejilla.

-¿Al menos valió la pena?

Liam me miro con una mirada que no logre descifrar y luego la bajo mirando nuestras manos juntas.

-Creo que si -susurro, mas para él, que para mi.

No sabía que había sucedido, pero algo me decía que esto no era una pelea por una estupidez, sino que algo se escondía tras esos golpes. Solté mi mano de su agarre y comencé a guardar las cosas en el botiquín cuando una idea cruzo por mi cabeza.

-¿Cuantos eran? -pregunté.

-¿Que?- pregunto él.

-¿Con cuantos tipos te peleaste?

-Oh eso . . .-dijo despreocupado

-Dime.

-En un principio era solo uno . . .pero luego se hizo un gran alboroto y ya no los pude contar.

-¿Contra cuantos peleaste? -Insistí

-Tres. . . cuatro . . .tal vez cinco, no lo se.

-Sácate la camisa.

-¿Que? -preguntó sorprendido en un principio pera que luego una sonrisa se tornara en su rostro -No sabía que eras esa clase de chicas Ayers, en otra ocasión lo haría con el mayor gusto, pero en este momento estoy realmente cansado.

Rodé los ojos y me alegre de que dejara de ser ese chico avergonzado que era cuando comencé a curarlo.

-Ya quisieras tener tanta suerte Payne, solo haz lo que te digo, quiero ver si te golpearon en algún otro lado.

-Voy a fingir que te creo -dijo y se saco su camisa.

¡Dios! Esto había sido una mala idea, él era tan perfecto, sus abdominales, su rostro, sus músculos, sus ojos . . .sus labios. Aparte esos pensamientos de mi cabeza y observe con cuidado su pecho donde como sospechaba se veían dos moretones, me levante y observe su espalda, su perfecta espalda, pero solo habían músculos sin marcas de golpes.

Volví a mi lugar mientras que Liam me observaba.

Me aclare la garganta y desvié mi mirada de su cuerpo dirigiéndola a la mesita donde se encontraba la crema y la tome.

-Póntela -dije entregándole la crema.

Liam la tomo con una fingida cara de tristeza.

-¿No me la pondrás tú? -dijo haciendo un puchero

Se veía tan tierno, era tan agradable verlo de buen humor y que pudiéramos bromear y hablar sin que terminemos enojados. Era increíble que tenga que estar todo golpeado para que esté de buen humor. Reí ante mi pensamiento y su puchero.

Liam me observo y levanto su mano libre para colocar unos cabellos rebeldes detrás de mi oreja y dejo su mano sobre mi mejilla, me paralicé al instante y observe a Liam mirándome con una pequeña sonrisa muy tierna y sus ojos achinados.

-Gracias . . .Amira, y espero luego no te arrepientas de haberme ayudado - dijo, casi en un susurro

No entendía a que se refería, e iba a abrir mi boca para hablar cuando se acerco a mi para darme un rápido beso en mi mejilla libre.

Sin decir mas se levanto con la crema en la mano y se fue hacia su recamara.

Yo me quede allí, con mi corazón palpitando tan rápido que pareciera se me saliera del pecho, mi estomago con miles de cosquillas, mis manos temblando y mi cabeza toda revuelta. Escuchar su nombre en sus labios y de una forma tan dulce y serena, hizo que mi corazón se detuviera por un segundo para luego explotar, él dijo mi nombre como si hubiera estado esperando la oportunidad perfecta para decirlo y no puedo elegir mejor ocasión. Su beso, ese beso hizo que mi mundo se derrumbara, fue dulce, tierno, tímido, con un simple beso en mi mejilla, me hizo sentir tan feliz y segura. Y a pesar de que está mal sentir y pensar esto respecto a el chico con el que vivo, es algo que no puedo evitar, por que mis sentimientos hacia él crecen cada día mas. ¿Por que estoy sintiendo esto por un chico que acabo de conocer?

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-¿A que hora llegas? -pregunté a Bibi por el móvil

-A las diez, y también iremos de compras -dijo alegre

-¿De compras? ¿No tienes suficiente ropa ya? -pregunté en tanto daba un sorbo a mi café

-Desde ahora en adelante mi querida amiga, saldré mucho mas y necesitare mas ropa.

-¿Con Harry?

Bibi río al otro lado de la linea.

-Si, con Harry -dijo con demasiado entusiasmo

-Necesitamos hablar te espero a las diez, ni un minuto tarde ¿de acuerdo?

Luego de bañarme y vestirme con un jeans, una blusa blanca justa y una converse rojas, tome mis cosas, deje una nota a Liam, como ya se estaba haciendo costumbre, y salí a la calle a esperar a Bibi. Necesitaba hablar con ella, la energía con la que hablo sobre Harry me puso en alerta, sabía que significaba ese entusiasmo y no quería que sufriera nuevamente por ningún hombre.

Al llegar Bibi, subí en el asiento del copiloto y la mire seria.

-¿Que te sucede? -preguntó Bibi con el ceño fruncido

-¿Te gusta Harry? -mi voz sonó mas a afirmación que a pregunta

-¿Que?

-Te gusta Harry ¿cierto?

Bibi arranco el coche y nos pusimos en marcha.

-No me gusta, él es divertido, simpático, atractivo, pasional, pero no me gusta . . . de manera romántica. -dijo con picardía las ultimas palabras

-Te conozco Bianca Miller, te pones nerviosa al hablar de él y eso solo significa una cosa.

Bibi seguía con la vista fija en el camino.

-De todos modos, no soy la única que oculta cosas -dijo en tono de reproche y con la mirada seria.

-¿A que te refieres?

Bibi bufo

-Vamos, ¿piensas que me creo lo de tu compañera?

Oh mierda

-En realidad vivo con una persona con una actitud bastante desagradable -no era del todo mentira.

-No me mientas, solo dí la verdad, tienes vergüenza

-¿Que? ¿Por que tendría vergüenza? -pregunte desorientada ante su conclusión

-De seguro, ella es una chica como tú, y no quieres que te vea involucrada con alguien como yo -dijo a punto de llorar

-Bibi para el coche y hablemos.

Ella paro el coche y largo un sollozo.

-¿Que te sucede? Sabes que puedes contarme lo que quieras. -dije acariciando su espalda

-Ella . . .ella es mejor amiga ¿cierto? -preguntó limpiando una lagrima de su mejilla

No podía verla en ese estado, se veía tan dolida y triste, en ese momento no me importo nada mas que Bibi. No importaba Liam, el contrato, perder o lo que fuera a suceder a partir de ese momento, solo importaba mi mejor amiga.

-Nadie podría ser mejor amiga que tu -Bibi me miro

-Entonces ¿por que no quieres que entre o te visite en tu apartamento?.

Suspire

-Te aseguro de que no es por nada de lo que piensas -dije tomando un pañuelo de mi bolsa y entregándoselo -la razón, es que no vivo con ninguna chica, sino que con un chico.

Bibi abrió mucho los ojos.

-¿Vives con Niall?

-No, no, claro que no -negué rápidamente -es otro chico

La cara de Bibi era todo un poema y sabía lo que estaba pensando.

-No es lo que piensas, en la inmobiliaria hicieron mal el papeleo y tengo que vivir con él hasta que encuentren otro apartamento que nos guste o alguno de los dos se rinda.

-Tenías que haberlo dicho antes

-Lo siento en verdad, pero no podía hacerlo. No te enfades.

Entonces Bibi hizo algo que jamás pensé que aria, comenzó a reír como si hubiera escuchado el mejor chiste del mundo.

-Te juro que es la verdad -dije, pensando que no lo creía

Ella dejo de reír y me miro con una sonrisa tímida

-Creí que te habías conseguido una nueva mejor amiga.

-Tu eres la mejor y única amiga que tengo en el mundo.

-Lo se pero, estabas tan rara -entonces su rostro se frunció -¿quien es el chico? ¿lo conozco?

Este era el momento que temía.

Iba a responder, cuando el sonido de mi móvil me sobresalto.

-Espera un momento aún no hemos terminado -dije a Bibi tomando el teléfono de mi bolsa, ella solo asintió

-Hola -respondí

-Tenemos que hablar -dijo Niall con tono frío e irritado

-¿Sobre que? -pregunte curiosa

Niall suspiro al otro lado de la linea y deje de respirar al escuchar sus palabras

-Sobre tú y Payne, Liam Payne.