21 de diciembre.

Era una fecha especial el día de hoy, en ese día Eri Midoriya pasaba a cumplir 12 años de edad y con eso se iba haciendo más grande, la cumpleañera se estaba levantando de su cama con alegría para ver la fecha.

Eri: ¡Es hoy, es hoy!

Sale corriendo de su habitación al comedor donde estaban todos desayunando.

Nejire: ¿Sucede algo?

Eri: ¡Es hoy!

Izuku: Pasame la leche del refrigerador.

Eri: ¿Por qué?

Izuku: Solo hazlo.

Eri: Bueno.

Al abrir el refrigerador se encuentra con un pastel de cumpleaños con su nombre, ella emocionada se voltea para ver a su familia con algunos letreros.

Todos: ¡Feliz cumpleaños!

Eri: Si se acordaron.

Izuku: Por supuesto que nos ibamos a acordar, tu madre nos hizo practicar esto por una semana.

Nejire: Era para estar seguros.

Los niños se acercaron a ella con una caja que era su regalo.

Nana: Tenemos tu regalo.

Toshi: Aquí tienes.

Eri: Gracias.

Al abrirlo se encuentra con una computadora de color roja con una manzana en medio.

Eri: ¡Genial!

Nejire: Sabíamos que te iba a gustar.

Hace una semana.

Nejire: ¿Estamos seguros de que le va a gustar?

Izuku: No lo sé.

Nejire: ¿Qué te regalaban a ti en tus cumpleaños?

Izuku: Cosas de All Might, ¿y a ti?

Nejire: Salíamos a pasear.

Izuku: No sabemos que darle a nuestra hija.

Nejire: Así es.

Izuku: Mira, si tuvo tanta energía para pedirnos un teléfono entonces estará feliz de que le demos una computadora.

Nejire: Sí, espero que tengas razón.

De regreso a la actualidad, Eri estaba muy feliz por su computadora que abraza a sus padres.

Eri: Muchas gracias.

Nejire: Y aun falta el de tus hermanos.

Nana: Aquí está.

Era una pulsera envuelta en papel de colores, la pulsera decía “Mejor Hermana”.

Eri: Es precioso, gracias.

Nejire: ¿Donde consiguieron eso?

Izuku: Bueno.

Hace cinco días, los niños estaban llegando a un puesto donde vendían accesorios, solo dejaron cinco monedas frente al vendedor.

Toshi: Queremos una pulsera.

- Lo siento, pero eso les va a costar mucho.

Nana: ¡Papá!

Izuku: Creo que mi hijo le dijo que les diera una pulsera *Tronando sus nudillos* ¿O no?

- C-claro.

Toshi/Nana: ¡Sí!

Volviendo a la casa, todos estaban comiendo el pastel mientras planeaban que hacer hoy.

Izuku: Nos la regalaron.

Nejire: Te tenemos preparada una fiesta.

Eri: ¿En serio?

Nejire: Claro, es como la primera fiesta que te hicimos cuando estuvimos juntos.

Eri: Lloré porque me dejaron sola en la habitación a oscuras.

Izuku: Nunca dijimos que fue perfecta.

Eri: ¿Y a qué hora será?

Izuku: Será después de tus clases.

Eri: ¿En serio tengo que ir a la escuela?

Nejire: Tranquila, tu padre se encargó de eso.

Izuku: Solo me pidió promocionar la escuela como el lugar donde nació el nuevo Símbolo de la Paz, y al infeliz se le olvidó lo que tuve que pasar en ese lugar.

Nejire: En otras palabras, vas a salir temprano.

Eri: Muy bien.

Nejire: E invitamos a tus amigos.

Izuku: A los que conocemos.

Eri: Solo conocen a Kota.

Izuku: Sí, pero me encargué de eso mientras estaba en la escuela.

Hace tres días, después de que Izuku saliera de la oficina del director comienza a repartir varios volantes en el salón de Eri para que fueran.

Izuku: Fue fácil.

Eri: Muy bien, me iré a preparar.

Nejire: ¿Y a cuantos de nuestros amigos invitaste?

Izuku: No muchos, solo a Kah-chan, Todoroki, etc.

Al escuchar ese nombre los niños comenzaron a crear un plan.

Toshi: Vamos a derrotar al villano.

Nana: Así es, ¿y cómo?

Toshi: No lo sé.

Ya habiendo pasado las horas Era estaba regresando de la escuela para llegar a su casa, ahí estaban todos vestidos para ir a la fiesta.

Nejire: Llegó la cumpleañera.

Eri: Te ves más emocionada que yo.

Nejire: Porque solo se cumplen 12 una vez, luego vienen los 16, luego los 18, después te casas y...

Izuku: Lo que tu madre quiere decir es que tienes que disfrutar cada momento de tu vida, como tu cumpleaños en este caso.

Eri: Ya veo.

Izuku: Ve a vestirte, nosotros te esperamos.

Entrando a su habitación comienza a buscar algo de ropa en su closet y en eso se encuentra con un viejo peluche, fue el que le habían regalado cuando ella apenas había cumplido siete años.

Eri: Ya han pasado cinco años, que rápido pasa el tiempo.

Al final ella solo se puso un vestido rojo con amarillo y en vez de usar zapatillas estaba usando unos tenis rojos.

Eri: Estoy lista.

Izuku: ¿Por qué los tenis?

Eri: Me gustan, eso es todo.

Izuku: Se me hacen familiar.

Nejire en ese momento se dio cuenta de como su esposo era inútil para captar las indirectas, tanto él como Eri estaban usando el mismo diseño de tenis.

Nejire: Hay que irnos de una vez.

Estando en el auto Izuku conduce de forma tranquila, todos estaban impacientes por llegar, en especial Eri.

Eri: ¿Ya llegamos?

Izuku: Aun no.

Cinco minutos después.

Eri: ¿Ya casi?

Izuku: No.

Quince minutos después.

Eri: ¿Y ahora?

Izuku: Se ve que lo impaciente lo heredó de ti, Nejire.

Nejire: Cállate.

Luego de un largo camino lleno de preguntas por fin pudieron llegar al lugar de la fiesta, de ahí solo ingresaron para encontrarse con todos sus compañeros.

Todos: ¡Feliz cumpleaños!

Este escenario le recordó a su primer cumpleaños que tuvo con su familia, fue la primera vez que alguien se lo celebraba.

Eri: Amo mi familia.

Todos estuvieron conviviendo entre sí para celebrar ese momento, Eri estaba conversando con sus amigos, Izuku junto a Nejire estaban saludando a algunos invitados mientras que los gemelos estaban haciendo lo suyo debajo de una mesa.

Toshi: ¿Recuerdas el plan?

Nana: No.

Toshi: Mmm.

Cinco minutos después.

Toshi: ¿Y ahora?

Nana: Ya.

Toshi: Muy bien, hagamoslo.

El niño crea un hilo de energía vital para que su hermana lo tomara y corriera hacia otra mesa pero se tropieza en el amigo.

Nana: Ay, mi cabecita.

Después de haber sujetado el hilo a la otra mesa pasa Bakugo que no se da cuenta de esto y cae al suelo.

Bakugo: ¡¿Qué demonios?!

Al ver debajo de las mesas no se encuentra con nadie, los niños estaban corriendo a lo lejos pero Nana se vuelve a tropezar.

Nana: Ay, mi cabecita otra vez.

Tiempo después Izuku estaba sirviendo algunas bebidas a los invitados, Nana se acerca y con su singularidad calienta la bebida de Bakugo mientras que Toshi le agregaba algo salado.

Bakugo: Aquí está mi vaso.

Al momento de ingerirlo termina escupiendo la bebida para rascarse la lengua con un cubierto.

Bakugo: ¡¿Qué diablos?!

Los niños estaban felices de que su misión se estaba llevando como éxito, la única persona que sabía de todo esto era Eri porque siempre los está vigilando.

Eri: Si que terminaron siendo muy traviesos.

Al final Eri disfrutó su cumpleaños por completo sabiendo que no podría ser feliz en otro lugar que no sea donde está su familia.

Fin del Capítulo 28.