Me despierto de mi plácido sueño cuando la alarma de mi móvil empieza a sonar, menos mal que al menos no tengo un ruido horroroso y tengo la canción Cheap Thrills de Sia. La alarma la deje puesta ayer por la noche antes de irme a dormir porque hoy a las diez y media de la mañana me mandan por correo electrónico el lugar en donde voy a partir las prácticas de periodismo y como sé que es posible que me quede dormida deje la alarma puesta.

Estoy algo nerviosa y emocionada por saber el lugar donde iré, salgo de mi habitación y bajo las escaleras para llegar hasta la cocina y calentarme un vaso de leche y hacerme unas tostadas de mantequilla.

- ¿ya estás despierta? - pregunta mi madre.

- si estoy muy nerviosa y deseando que me llegue el correo para ya saber a donde iré.

Termino de desayunar y friego el plato y el vaso, subo a hacer la cama para así aprovechar el tiempo que queda aún para que me envíen el correo.

-Carla ve bajando que son las diez y diez - dice mi padre.

- ya voy.

Cojo el portátil de encima de mi escritorio y me siento en el sofá entre medio de mis padres. Esperamos hasta que esté.

- ya ha llegado - informa mi madre.

- no quiero ni mirarlo - digo poniendome las manos en el corazón, que me late con fuerza. - ¿Podéis mirarlo ustedes?

- por supuesto que si. - dice mi padre y lo abre.

Veo como leen la pantalla del portátil y cuando acaban me miran a mi, así consiguen ponerme más nerviosa.

- ¿y bien? - pregunto.

- el destino es Inglaterra. - dice mi madre.

- te vas a la Premier pequeña. - dice mi padre.

Un momentito que lo asimile, tengo que dejar españa, Vigo mi cuidad, mis amigos, mis padres, para irme a Inglaterra, donde voy a hacer las prácticas del trabajo de mis sueños pero donde por desgracia no conozco a nadie.

- ¿Carla estás ahí? - pregunta mi madre moviendo su mano por mi cara.

- ehh si si. - digo. - Es que woo, es algo muy fuerte que aún no me lo creo.

- pues creetelo porque te vas esta misma tarde.

- ¿qué? ¿esta tarde? ¿pero cómo?

- vamos has las maletas ya que no tienes todo el día.

Sin poder decir ninguna palabra más subo corriendo hasta mi habitación para empezar a hacer las maletas. Llevo dos porque con la cantidad de ropa que me tengo que llevar en una maleta no me cabe ni la mitad.

- Carla, tienes que buscar un piso o una casa para vivir - dice mi padre.

- dios es verdad hasta eso se me olvidaba ¿Dónde pensáis que puedo cogermela?

- en Londres todo será un caos, busca alguna ciudad más pequeña que Londres - aconseja mi madre.

- yo opino igual - dice mi padre.

- está bien, pues buscaré ahora.

Me siento en la cama a buscar algún piso o casa que sea barato, osea que no sea tan caro porque tampoco sé cuantos meses estaré allí. Y los sitios que más me convencen son Manchester, Liverpool, Bristol, Bath, Leeds y Oxford.

- no sé que elegir todo me parece precioso.

- a mi me han hablado muy bien de Manchester y allí hay muchos lugares Carla.

- pues que no se hable más me voy a Manchester - digo y mis padres aplauden.

- bien, ahora cámbiate que iremos a comer a casa de la abuela que estarán allí todos y luego te llevaremos a el aeropuerto. - Dice mi padre y asiento.

- bien.

En casa de mi abuela comemos un exquisito pulpo gallego con patatas al horno, cómo voy a echar de menos la comida de mi tierra.

Y sobre las cinco de la tarde me despido de mi familia.

Llegamos al aeropuerto mis padres y yo y facturamos la maleta y llega la hora de la despedida, que poco me gusta esto.

- cuidate mucho y darlo todo en el trabajo, te vemos muy pronto futura periodista - dice mi madre mientras me abraza. - Te quiero mucho mi niña.

- yo también mamá.

- pásatelo en grande, llámanos todos los días y si ves a Bruno Fernández o a Kevin de Bruyne tráeme algo firmado por favor - dice mi padre y rio.

- lo intentaré.

- pasajeros destino Manchester vayan subiendo al avión, gracias - dicen por megafonía.

- es la hora, os quiero y nos vemos pronto. - digo tirando besos mientras me alejo de allí.

Me monto en el avión y llego hasta mi número de asiento el once b, justo al lado de la ventanilla, menudo alivio. Me colocó los auriculares y me desconecto de todo.

Las cuatro horas y cuarenta y cinco minutos que dura el vuelo, me las paso o bien leyendo, escuchando música, viendo alguna serie y mirando redes sociales, para entretenerme un poco ya que el avión va casi vacío. No es como otras veces que te montas en el avión y está a rebozar y hay muchos niños pequeños llorando, no no y menos mal.

- abrochesen los cinturón que estamos a punto de aterrizar.

Me abrocho el cinturón y miro por la ventana para encontrarme a vista de pájaro con la ciudad de manchester.

@carlaruiz

Aterrizamos en manchester y espero para poder coger mis maletas y salir del aeropuerto, una vez que ya las tengo en mis manos, salgo del aeropuerto siguiendo todos los carteles y espero fuera para poder pedir un taxi y que me lleve hasta mi nueva casa, que se encuentra en el barrio de Didsbury, según me han dicho y leído es la zona donde alojarse más tranquila ya que el entorno es como si fuese un pueblo.

Cuando llegamos a el barrio pago al taxista y salgo del taxi con las dos maletas y buscando la casa, que es la número nueve.

- aquí es - digo y abro el buzón donde la antigua dueña de la casa me dijo que estaría la llave.

La cojo y abro la puerta, dejo las dos maletas en la esquina y paso para ver la casa.

La fachada presenta una cubierta plana, que es la característica más representativa de una casa de estilo moderno, fachada acristalada, conceptos luminosos presididos por grandes ventanales, revestimiento en mortero y espacios diáfanos, espacios amplios y con altura.

Y por dentro, esta pintada de un blanco que le da mucha luminosidad a la casa, algunos muebles pintados en blanco roto, mi habitación pintada de blanco, con una lámpara de araña preciosa en tonos plateados y una gran cama de matrimonio, un gran baño con ducha y bañera y también un yacuzzi, y un gran vestidor en otra habitación, una gran cocina de ensueño y en la parte de abajo de la casa, una piscina climatizada y una sala de gimnasio. A todo esto se le suma un espacioso jardín.

- que casa tan bonita, me encanta.

Como aún no tengo nada de comida y va siendo hora de comer, decido que lo mejor es pedir algo a domicilio ya que estoy cansada de el viaje como para salir ahora a buscar algo para comer. Llamo a una hamburguesería para pedir una hamburguesa y patatas mientras me tomo una ducha.

Quince minutos más tarde el repartidor me trae la comida y pago, me como la hamburguesa, patatas y refresco mientras veo un programa de canto en la televisión. Y cuando acabo lavo todo, me frego los dientes, me pongo el pijama y me voy a dormir, que seguro que el día de mañana será larguísimo y tengo que organizar todo.

Segundo capítulo de similares!!

Espero que os guste 💙.

Nos vemos pronto.