
Dios sabe lo que pasó
Luna roja del cuarto día, en un cementerio de almas perdidas, donde alguna vez perdí la mía; donde alguna vez me arrancaron la mía.
Dios sabe lo que pasó aquella noche de 1990, cuando un tiro en mi pecho, entre esas tumbas, sonó escandalosamente, rompiendo la tranquilidad de soñado lugar.
La sentí irse, la sentí alejarse; una pena perderla, tristeza me golpeó de repente; cuando nos miramos cara a cara; y no supimos qué decirnos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro