El clima era frío, no se pronosticaban lluvias pero en ese lugar era totalmente normal las lluvias, seguido de una buena nevada en esos días.

Sophia se encontraba sentada en su cama viendo la foto de su ex marido, las lágrimas rodaban por sus ojos cafés. Ella quería que Peyton volviera a su lado, pero eso no iba a pasar.

La chica de ojos cafés se levanta de su cama para caminar hasta la sala de estar, ella se para delante del árbol de Navidad. Todas las luces de la casa estaban apagadas exceptuando las del árbol. Sophia estaba más triste que de costumbre, y es que la navidad estaba cerca y era la primera navidad que pasaba sin Peyton y eso le dolía bastante.

La chica alzó la mano para tocar la enorme estrella del árbol.

- Sophie esta estrella de aquí me encanta.

- Oh vamos Peyton, es muy fea - se quejó la chica de cabello café.

- Amor, no es el como se vea. Si no el que simboliza - la chica sonrió de lado y se cruzó los brazos.

La chica de ojos cafés separó su mano de la estrella y la miró para después abrazarla y llorar en silencio. La abultada panza de la chica se movió derrepente ocasionando que la chica se llevara ambas manos a la parte golpeada.

- El día que este campeón se mueva, seré yo quien lo toque cuando eso pase.

- Peyton, será conmigo con quien se mueva.

- Te amo, lo sabes, pero será conmigo. - Peyton solía competir mucho con su adorada esposa.

La chica solo se acercó a su esposo y lo besó, ella lo amaba tanto.

Sophia cominó hasta la cocina y sacó el recipiente que se encontraba en el horno de la estufa. El olor de las papas con crema y queso llenaba toda la casa.

La chica rápidamente se sirvió la comida en un plato, acercó una jarra con agua y un vasa, para finalmente sentarse en el pequeño comedor de la cocina. Sophia estaba sola en casa, sola en Navidad.