La que Jimin le contó lo desconcertó, era una perspectiva muy diferente a la que tenía él de la sociedad. Él nunca se cuestiono esto de tener un menos por herencia y las diferentes condiciones laborales que podrían existir, a él nunca le falto comida y su familia siempre tuvo sus necesidades sastifechas, entonces, ¿por qué él papá de Jimin siendo un más recibía un pago bajo?
 
Jungkook empezaba a notar que siempre fue fiel a un sistema que no tiene las misma condiciones para todos, algunos inician la carrera unos paso por delante, y otros no podían acortar esa brecha de diferecia.
 
Ahora tenía un sentimiento muy fuerte que quería buscar la verdadera libertad, sentir la adrenalina correr por sus venas y hacer algo, quería cambiar esta realidad, y sí, era un pensamiento tan repentino y radical, pero ya no quería que sigan eligiendo por él. No quería tener una libertad moritoriada y restringida.  Ahora entendía los pensamientos de su hermana, y deseaba ser como ella, él quería ser libre y valiente.
 
Jungkook abrió la puerta de su habitación para salir, tomando por sorpresa a Ryunjin, causando que pegue un grito por el susto.
 
—¿Qué estás haciendo? ¿Para que son esos afiches?— Cuestionó Jungkook.
 
—Para la universidad.
 
—No me mientas.
 
—Iré a una manifestación.
 
—¡¿Irás a una manifestación?!
 
—Baja la voz—. Le pidió agarrando su mano y llevándolo hacía su habitación—. Iremos a reclamar por el boleto estudiantil.
 
—¿Qué es el boleto estudiantil?
 
—Es un  beneficio que les permitirá viajar gratis a todos los estudiantes hacía sus establemientos.
 
—Tú puedes pagarlo.
 
—Pero hay personas que no. Y por eso es un privilegio.
 
—Pero, ¿por qué vas a ir a la manifestación?
 
—Porque la educación debe ser para todos, no un privilegio—. Explicó, mientras metía los afiches a su mochila.
 
—¿Puedo ir contigo?

Ryunjin lo miró confundida, ¿Jungkook realmente acababa de preguntar eso?
 
—Creo que ya no me gustan mucho los privilegios.
 
—Como te cambia el amor—. Dijo riéndose—. Está bien, vamos. Pero ve a prepararte, y rápido, tenemos que irnos antes de que se den cuenta.
 
—¿Vamos a escaparnos?
 
Ella asintió.
 
Aunque Jungkook tenía miedo y culpa, había una necesidad mucho más grande, que  opacaba a esos sentimientos; la búsqueda de la libertad.

Penso que directamente irán a la manifestación, pero no. Primero fueron a una casa, ahí le dieron pasamontañas y guardaron sus documentos. Ryunjin le explicó que eso era para que no logren identificarlo con facilidad.
 
De ahí, fueron hacía un parque, en donde se registraba a las personas y se le pedía información específica, todo eso era por si algo les pasaba.
 
Para el inicio de la marcha faltaba media hora todavía, además, para sorpresa de Jungkook, habían muchas personas, así que tenían que esperar que registren a todas.
 
Ahora, Jungkook se encontraba junto a su hermana y conocidos de ella, comiendo lo que cada uno había llevado. Todo estaba bien, hasta que Jeon se percató de la presencia de Jimin.
 
Se sintió muy feliz al verlo y quiso ir corriendo hacía donde estaba, pero cuando se dió cuenta que no estaba solo, las ganas de acercarse se le fueron
 
Él entendía que Jimin podía tener amigos, pero ese chico no parecía ser un simple amigo.
 
Quitó su vista del par, y miró hacía otro lado. No quería seguir viéndolos.

—No sabía que podrías llegar a ser tan celoso—. Comentó su hermana.
 
—¿Celoso?
 
—Puedes ir y hablar con él, Jungkook.
 
—Está con ese chico, no quiero interrumpir nada.
 
—Que terco eres—. Su hermana se levantó del suelo y gritó el nombre de Jimin, agitando sus brazos para que el menor la vea—. Ahí viene.
 
Jungkook a veces odia la extrovertidad de su hermana.
 
—¡Jungkook!— Exclamó emocioando Jimin, una vez se percató de que el mayor estaba ahí.
 
Jungkook se dio vuelta, encontrarse con el castaño corriendo hacía él. Así que se levantó, abriendo sus brazos para recibirlo.
 
Jimin lo abrazó con fuerza y luego se separó, pero mantuvo una mínima distancia.
 
—¿Qué haces aquí? Nunca pensé que te vería en una manifestación.
 
—Yo tampoco pensé que estaría en una.
 
—Estoy muy feliz de que estes aquí.
 
—Creo que tu amiguito no—. Dijo Jungkook, señalando al chico que se encontraba a un costado de ellos.
 
—Él es mi primo—. Aclaró Jimin, alejándose de Jungkook para agarrar la mano del chico y acercarlo más a ellos—. Se llama Valentín.
 
—¿V-Valentín?
 
—Sí, viene de Argentina—. Informó.
 
—Iré a buscar a Sunghoon, te dejo con tu novio—. Verbalizó Valentín.
 
Jimin se sonrojó, y Jungkook los miro confundido.
 
—¿Que dijo?
 
—Que iría a buscar a Sunghoon—. Traducio Jimin— ¿Sabes sobre la rebelión revolucionaria?
 
El mayor negó.

—Es básicamente un golpe para derrocar a los milatares europeos, todo empezo en Argentina hace cuatro meses, actualmente avanzaron hasta África. Él está aquí hace tres meses, ya que sus papás están cumpliendo la misión de cuidar a su país.
 
—¿Cuatro meses? ¿Y nadie sabe nada?
 
—El ejército militar de cada país es quien engaña y ayuda en el golpe, solo dejan vivos a los comandantes superiores para que manden información de que todo va bien y así engañar. Además hay una alianza entre todos los países invadidos. China y Rusia han dado un golpe y salieron victoriosos, ahora falta Corea del Norte y después pasan por nosotros.
 
—¿Va a haber una guerra?
 
—Sí... Pero hay pocos civiles europeos aquí.
 
—¿Nadie sospecha nada?
 
—Solo hay que hacerles creer que tienen el poder—. Sostuvo Jimin—. Está manifestación además de ser un reclamo es un engaño para que ellos crean que nos tienen dominados.
 
Jungkook intentaba procesar toda la información, pero era mucha, no lograba entender que nunca se haya enterado de nada.

Holiis, eso es todo por el capítulo de hoy. Espero os guste y nos vemos mañana. Gracias por todo y se despide:

–almin♡