Soledad
Narradora:
El sol estaba en lo más alto en el mundo yo kai y en un lugar alejado de todo ruido estaba un yo kai de cabello negro, piel de color melocotón, una gran marca roja en medio dela cara pasando por encima de sus ojos.
Aracnio era el nombre de ese yo kai, que veía en calma, el como las hojas caían y se movían por el viento que las movía.
- Hay mucha paz aquí... -Susurro el peli-negro privandose por unos segundos del sentido de la vista, para poder admirar la belleza del paisaje con el sentido del oído.
En aquel sitio la paz reinaba y Aracnio estaba calando por aquello, hasta que algo interrumpió su tranquilidad.
- Es extraño.... Normalmente cuando estoy en calma el siempre viene.. -Se dijo a si mismo Aracnio abriendo nuevamente los ojos.
La gran mayoría de ese día, Aracnio se la pasó en medio de aquella paz, aunque en su mente siempre estuvo en medio de un debate y con una duda que reinaba en el.
¿Dónde estaba Eleganfibio?
Había pasado ahí más de tres horas y en todo ese tiempo el no se apareció, aquella soledad que en el pasado definiría como "Hermoso" hoy la definía como "Horrible".
Aún no podía entender bien el por qué aquella soledad que tanto le gustaba en el pasado ahora no la quería en su vida.
Estuvo una gran parte de su tiempo pensando en ese, pero no llegaba a ninguna conclusión, hasta que un momento se le vino a la mente.
"- Hola Aracnio!!! -Grito un chico de cabello marrón largo y atado en una gran coleta.
- ¡¡¿Que haces?!! -Le pregunto aquella ocasión el chico recién llegado, sentándose a un costado de Aracnio."
Eso era...
Eso era lo que le faltaba...
Le faltaba...
- Su presencia... Por algún motivo la extraño... Pero, ¿Por qué? Antes hubiera dicho que no lo necesitaba y así era, pero ahora..
La presencia de Eleganfibio era lo que no estaba en su día y el se preguntaba el por qué lo necesitaba tanto.
- Otra vez la misma pregunta... ¿Por qué la presencia de Eleganfibio es tan importante para mí? ¿Por qué siempre me preguntó si soy importante para el? -Se pregunto Aracnio tirándose en el pasto y observando el techo.
El lo sabia, pero aún así quería evitar a toda costa ese pensamiento, pero no pudo...
El estaba enamorado de su amigo desde hace unos meses, aunque puede ser que halla sido de más antes, pero el se dio cuenta de esos sentimientos hace poco tiempo, según el.
No quería confesarsele por miedo a perder su amistad pero lo tendría que hacer tarde o temprano, no?
- Será mañana... -Se dijo a si mismo el de piel melocotón.
Estuvo un buen rato pensando en lo que le diría a Eleganfibio para confesarle sus sentimientos. Pero nada se le ocurría.
Así es, se había decidido a decirle sus sentimientos, como dicen "El que no apuesta no gana".
" Tal vez una carta escrita a mano...
Aunque también puedo invitarlo a un festival que se celebrará en el mundo humano...* -Esas eran algunas de las posibilidades que se le ocurrían a Aracnio.
Luego se unos minutos se aburrió de ese sitio y de todas las preguntas que debería responder el mismo para poder dormir bien y poder hacer mañana todo lo que se había propuesto.
- Supongo que mañana se lo diré.... -Se dijo a si mismo el peli negro, levantándose de aquel lugar lleno de paz para dirigirse hacia su casa.
Significados...
Al final, aquella advertencia que Venocto le había dado a su general era cierta...
"- Los significados de algunas cosas irán cambiando a medida que aquel sentimiento valla creciendo, usted se dará cuenta... " -Fueron las palabras exactas del yo kai hacia Aracnio.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro