-No, Genevieve!-grita Violet y se tapa el cuerpo con la manta mientras Genevieve trata de quitársela de nuevo, se acurruca debajo de ella y continúa gritando con la nariz tapada por todo su llanto.-¡Déjame en paz! ¡No quiero ir a clase! No es asunto tuyo, ¡¿por qué me molestas?!

Ambos han estado en esto durante casi media hora porque Violet ya apagó la alarma dos veces. No es asunto de Genevieve, pero Violet no puede dormir después de mantener a Gen despierta toda la noche con su fuerte llanto. Además, quiere saber por qué Violet llora tanto.

-¡Solo levántate! ¡No puedes dormir en todo el día!-Genevieve arrebata la manta y la arroja sobre su propia cama mientras tira de Violet de sus tobillos y la deja caer al suelo.-¡La escuela es divertida! Sé que he sido una perra últimamente, pero ¿puedo pasar todo el día contigo si quieres?

Violet niega con la cabeza y permanece boca arriba mientras Genevieve se cierne sobre ella con las manos en las caderas de una manera tan maternal. Aún así, Violet no se mueve, por lo que Genevieve se da por vencida y se acuesta boca arriba con Violet antes de agarrar su mano con fuerza, a veces no se trata de lo que dices para animar a una persona sino de lo que dice el silencio cuando estás con ella. En este momento, su silencio es lo suficientemente reconfortante para Violet. No es necesario decir palabras, solo esta mano sosteniendo el silencio y mirando al techo. Incluso si es con Genevieve, Violet solo necesita a alguien para dejar de sentirse tan sola.

Genevieve pudo haber juzgado erróneamente a Violet cuando se conocieron. Ambas comenzaron con el pie izquierdo cuando podrían haber sido amigas desde el principio. Cressida no es del tipo reconfortante; ella solo hace todo sobre sí misma hasta que Violet olvida que ella también tiene un problema porque está demasiado ocupada consolando a Cressida. Siempre se trata de Cressida.

-Deberíamos pintar el techo.-sugiere Genevieve, lo que hace que ella y Violet ladeen la cabeza mientras miran el techo en blanco. Ella se ríe suavemente y ladea la cabeza hacia el otro lado.-O podríamos encantarlo, como el gran salón, tener algunas tormentas eléctricas agradables mientras dormimos.

-Encantamiento suena muy bien.-Violet gira la cabeza para mirar a Genevieve y se ríe de su comentario, vuelve a mirar al techo y aprieta la mano de Genevieve.

-Lamento haberte dejado fuera de la habitación esa vez, creo que en realidad eres muy dulce.

-Gracias.-Genevieve le devuelve la sonrisa a Violet y le suelta la mano mientras se pone de pie y comienza a ponerse la bata sobre el uniforme, ella suspira y agarra su bolso antes de volver a mirar a Violet.-Debería, uh, irme. ¿Te veo luego?

Violet asiente y se levanta del suelo mientras Genevieve sale de la habitación y cierra la puerta. Comienza a buscar en su guardarropa, saca unas medias y su uniforme normal y lo coloca sobre su cama. Es un nuevo día y Violet no quiere distracciones, así que son mallas que cubren todo el cuerpo.

Con un suspiro exhausto, Violet cierra su guardarropa y comienza a desvestirse lentamente. Agarra su ropa y comienza a ponérsela mientras se cepilla los dientes en el lavabo que tienen flotando en su habitación. Genevieve lo hizo porque estaba cansada de caminar todas las mañanas y noches para cepillarse los dientes y luego tener que volver a subir para guardar sus cosas. Es muy conveniente.

Una vez que termina de cepillarse los dientes, Violet toma su mochila, con su varita entre los dientes y su teléfono en la otra mano, ella tiene su bata colgada de su antebrazo mientras baja corriendo las escaleras para caminar hacia la sala común donde los niños que no tienen un primer período están estudiando, hay un par de saludos hacia Violet mientras camina hacia la puerta y los saluda porque la varita en su boca no le permite hablar.

Ella sale al pasillo y comienza a correr más rápido cuando ve a otros corriendo para no llegar tarde en su primer día de regreso de vacaciones, se detiene cuando llega a las puertas del gran salón y se desliza a través del espacio abierto antes de que las puertas se cierren de golpe detrás de ella, sus ojos escanean la habitación y se detienen en las dos personas que está tratando de evitar. Juntos. Thomás y Draco. Están hablando en la esquina, susurrando en realidad y Violet se pregunta de qué se trata.

-¡Violet!-una voz reconocible la llama en un susurro y se vuelve para ver a Theo apoyado contra la pared cerca del escritorio en el que siempre se sienta Draco, mira a su alrededor y señala con el dedo el suelo a su lado.-¡Ven aquí!

Ella mira a su alrededor frenéticamente antes de correr hacia él y pararse frente a él con los ojos en los de él.-¿Qué estás haciendo aquí? ¿Estás bien?-Violet pregunta y frota su mano en su brazo antes de que él se aleje tímidamente y asienta, ella nota su reacción pero no dice nada porque está demasiado cansada para entablar conversaciones sobre emociones.

-El día de la carrera es mañana.-suspira y se lame los labios mientras mira alrededor de la habitación.-Es este estúpido evento para estudiantes que McGonagall pensó que era una gran idea, pero de todos modos, ¿qué pasa con las medias? ¿Has jurado ser una santa o algo así?

Violet se ríe de su pregunta y pone los ojos en blanco con una sonrisa.-Eres gracioso.-ella responde con sarcasmo y tira de la corbata que lleva con su botón blanco hacia arriba.-¿Qué pasa con el blanco y la corbata? ¿Has jurado ser aburrido y horrible o algo así?

Theo se burla y comienza a quitarse la corbata y a desabrocharse los botones superiores de la camisa, pone la corbata alrededor de Violet y alborota su cabello engominado hacia atrás para que pueda verse más como él mismo, o incluso posiblemente porque está herido y avergonzado de que Violet lo haya llamado horrible.

-¿Mejor?

-Mucho mejor.-Violet responde mientras le quita la chaqueta y la sostiene en su brazo.-Un blazer es para las personas que se visten como personas mayores, sin embargo, no le digas a Draco que dije eso.-ella fija su collar con el labio inferior entre los dientes y asiente.-Ahora te ves perfecto.

-Señorita Blishen, tome asiento, esto es un salón de clases, no una hora social.-la voz de Draco habla detrás de Violet y ella pone los ojos en blanco y susurra adiós a Theo mientras le devuelve la corbata y la chaqueta, toma asiento en su tapete habitual y observa cómo Theo y Draco caminan en medio de todos.-Muy bien, todos, este es Theodore Nott, un amigo cercano mío, está aquí para ser mi asistente para enseñarles a aparecer un objeto. De esa manera, se sentirán más cómodos para hablar con él mañana en el día de la carrera.

Hay susurros alrededor de la habitación de las chicas mientras prácticamente babean por Theo, honestamente, los susurros ponen un poco celosa a Violet porque todos van a estar coqueteando con él y ella no sabe si él hará algo. Sin embargo, no le presta atención a nadie más que a Violet. Sus ojos están súper pegados a ella y no importa lo que pase, no puede moverlos.

-Entonces, todos recojan las tazas colocadas frente a ustedes y despejen su mente mientras intentan hacer que desaparezca de su mano y aparezca donde quieran.-Draco continúa hablando, subiéndose las gafas cada vez que se bajan.-Si necesitan ayuda, levanten la mano.

Inmediatamente, las manos de las chicas se disparan en el aire y Theo y Draco se ríen mientras se acercan a los más cercanos, Violet sostiene la taza en su mano y trata de aclarar su mente, pero no puede hacerlo cuando siente los ojos de Thomas sobre ella desde el otro lado del salón de clases. Ignoró todas sus llamadas telefónicas después de dejarlo en la torre anoche. Ella no sabe qué decir o hacer a su alrededor porque no siente lo mismo y sabe que le duele.

-¿Necesita ayuda jovencita?-Theo se ríe mientras toma asiento frente a Violet y envuelve su mano alrededor de la de ella, que sostiene la taza, ambos se sonrojan inmediatamente y él continúa.-Solo relaja tu cuerpo y tu mente, piensa en esto como una meditación, una vez que estés completamente relajado, piensa en un lugar al que quieras que vaya esta taza y hazlo.

Violet suspira ruidosamente y deja que su cuerpo se relaje mientras ella y Theo sostienen la taza, cierra los ojos e imagina la mesa auxiliar junto a su cama y siente sus manos entrelazadas con las de Theo, sus ojos se abren y ve que la taza ya no está allí.

-¡Lo hice!-ella jadea y rápidamente suelta las manos de Theo antes de que él tome las suyas para chocarlas rápidamente, sus mejillas se sonrojan y tímidamente mira hacia otro lado mientras le susurra.-Gracias Theo.

Theo se pone de pie y le sonríe con descaro a Violet mientras se aleja para ir a ayudar a otras chicas que están levantando las manos por él. Violet saca su teléfono de su bolsillo y abre sus mensajes con Thomas antes de comenzar a escribir una disculpa, por supuesto, él está al otro lado de la habitación, pero ella sabe que no la escuchará si trata de acercarse a él. Entonces, por ahora, enviar mensajes de texto es todo lo que puede pensar.

"Escucha Thomas, lamento mucho lo de anoche. Por favor háblame."

Una vez que Violet envía el mensaje, levanta la vista y levanta las cejas mientras espera a que Thomas revise su teléfono. Thomas mira su teléfono y luego, al otro lado de la habitación, a Violet, que le devuelve una agradable sonrisa. Sin embargo, su mirada ha cambiado desde anoche. Él no la está mirando con la misma sonrisa y ojos amables de siempre; él la está mirando con las cejas fruncidas y la mandíbula apretada junto con ojos enojados.

Violet inclina la cabeza hacia él con cara de disculpa, pero Thomas se da vuelta y continúa hablando con la chica a su lado. Solo esa cabeza apartada de ella hace que su corazón se rompa porque ni siquiera puede disculparse con él. No puede estar enojado con ella para siempre, es injusto, no se la puede culpar por no corresponder a los sentimientos que él tiene por ella, él se lo buscó pero ahora ella es la villana de la historia.

-¡Señorita Blishen!-Draco dice una vez más después de haberla llamado muchas veces, Violet aparta la mirada de Thomas y mira a Draco y lo ve flotando sobre ella con los brazos cruzados.-El teléfono, pásamelo. Estamos en clase.

-No te voy a dar mi teléfono.-Violet replica y pone su teléfono en el bolsillo de su bata. Ella se burla y mira a su alrededor con la mano en el aire.-Todos los demás tienen sus teléfonos, no me señale por problemas personales, profesor.

Draco da un paso adelante, haciendo que la parte inferior de su cuerpo quede directamente en la cara de Violet.-Te veré en mi oficina después de clase.-él se queja y se da la vuelta, pero continúa hablando mientras se aleja de ella.-Claramente, necesitas que te enseñen algunos modales sobre cómo hablar con tus superiores.

Theo regaña a Draco desde el otro lado de la habitación mientras Violet tiene la mandíbula en el suelo, viendo a Draco alejarse de ella, Violet no entiende por qué está enojado con ella, en todo caso, ella debería ser la que le enseñe algunos modales sobre cómo no romper el corazón de alguien. Rompió con ella y ahora está actuando como si todo esto fuera culpa de ella.

-¡Todos! ¡Guarden sus teléfonos!-Draco grita al aire mientras regaña a Violet y junta sus manos detrás de su espalda.-¡No me hagan perder el tiempo si no van a aprender algo! ¡Pónganse a trabajar! ¡Ahora!

*************

Violets es la última de la clase en irse como de costumbre porque le gusta tomarse el tiempo para ordenar sus cosas, eso es algo que no ha cambiado desde Beauxbatons, ella pone su bolso sobre su hombro mientras sale del gran salón y se dirige hacia la oficina de Draco como él le indicó que hiciera antes. Como es habitual con Draco, no sabe qué esperar, Violet no siente que mereciera que le gritaran por sacar su teléfono. Había completado su tarea, pero cuando se trata de Violet, a Draco le encanta molestarla.

Mientras Violet se acerca lentamente a la puerta abierta, golpea dos veces antes de deslizarse por la rendija y revelarse a Draco. Está sentado en su escritorio con una montaña de papeles a su lado y un teléfono pegado a la oreja, él la mira y le indica que se calle y cierre la puerta detrás de ella y ella lo hace. Ella se da la vuelta y camina hacia su escritorio antes de tomar asiento frente a él con las piernas cruzadas.

Antes de que Violeta se sentara, se fijó en sus mallas y si no estuviera tratando de disciplinarla o si no estuvieran en malos términos, se habría reído de ello y le habría dicho lo guapa que estaba. Sin embargo, están en malos términos, así que todo lo que puede hacer es morderse el labio inferior y mirar hacia otro lado.

-Entiendo...-Draco habla al teléfono mientras echa su silla hacia atrás y tira una carpeta a la papelera junto a su escritorio.-...sin embargo, no tengo tiempo para ir a una excursión, cualquiera que sea espaciosa estaría bien.-hay una breve pausa mientras Draco mira su reloj y escucha.-Muy bien, gracias, buen día.

Violet levanta una ceja con curiosidad mientras observa a Draco colgar el teléfono y poner su mano sobre el escritorio. Solo para molestarlo, Violet hace lo mismo, revelando los dos anillos de Theo todavía en sus dedos, sus ojos los miran por un segundo y luego vuelven a mirarla, entrecerrándolos directamente a los de ella.

-Te estás burlando de mí.-empieza a hablar en voz baja.-Mi salón de clases no es un momento social, tienes dieciocho años, crece y sé una...

-Diecinueve.-Violet interrumpe y se sienta cómodamente en su silla.-He crecido y actúo como una adulta, no me burlo de ti; simplemente hago lo que me dicen y te ignoro. Y si eso te molesta, estaré más que feliz de salir de tu clase.

Draco no dice nada y en cambio se regaña a sí mismo porque no lo sabía, no sabía que el cumpleaños de ella fue ayer hasta ahora, sin embargo, estaba demasiado ocupado notando cuán cercanos se habían vuelto ella y Theo para recordar algo más sobre ella. Ahora se siente terrible por haber aparecido frente a sus dormitorios anoche; se siente culpable.

Draco esconde su rostro en la palma de sus manos y suspira ruidosamente en ellas antes de volver a mirar a Violet, luego dice.-Solo vete y no dejes que te atrape con tu teléfono de nuevo.

Violet se burla y recoge su bolso con una actitud provocada por él haciéndole perder el tiempo, ella lo regaña por última vez y se da la vuelta, dejando que su cabello se mueva detrás de ella mientras sale furiosa de la oficina y cierra las puertas detrás de ella. Ella no puede comenzar a entender por qué él está tan obsesionado con ella que no puede simplemente ignorarla por un período completo. Entonces él tiene la audacia de decir que ella se está burlando de él cuando no ha hecho nada más que hacer lo que le dicen.

Pociones va a ser un desastre; desde que Violet se fue de la mansión Nott, Cressida no ha hablado con ella. Ni siquiera para comprobar o preguntar si puede ir a su casa, ni siquiera un mensaje de cumpleaños. Ahora tiene que ir a una clase en la que Cressida es su compañera y no sabe si Cressida está enfadada y, si lo está, lo estará más por Thomas.

La noche anterior al primer día de clase, Violeta pensó que Hogwarts iba a ser su nuevo comienzo, nunca imaginó que sería un lugar en el que esperaría otro nuevo comienzo. Encontrarse con Cressida en ese pasillo puede haber sido lo peor y lo mejor que le ha pasado, cuando Violet estaba en Beauxbatons, la vida era mucho más fácil y mucho más feliz. No tenía ni idea de los secretos de su familia y todavía tenía una familia. Ahora está aquí, en Escocia, y no tiene familia, no tiene amigos y vive en un apartamento de dos habitaciones que le ha comprado su ex, sea lo que sea. Su vida se ha convertido en su peor pesadilla.

-Hola.-Violet le susurra a Cressida mientras toma asiento a su lado.-¿Estás molesta conmigo? Quiero decir, ¿hice algo? ¿Simplemente no me has hablado y solo quiero saber qué está mal?

Cressida levanta la vista del papel en el que está escribiendo y mira a Violet de soslayo antes de mirar hacia abajo y hablarle al papel.-Lastimaste a mi hermano.-ella suspira.-No estaba enojada antes, pero Thomas vino a la sala común anoche llorando porque lo lastimaste.-Cressida se sienta y se vuelve hacia ella antes de continuar regañandola.-¿Eso es lo tuyo? ¿Sólo rompes el corazón de la gente?

Violet jadea y abre la boca para hablar, pero Slughorn ha comenzado a hablar y la ignoran, se hunde en su silla y siente que las lágrimas se acumulan en sus ojos mientras mira su propio papel. Las lágrimas caen sobre el papel de pergamino debajo de ella, manchándolo y haciendo que la tinta se esparza, pero a ella no le importa. Ella está demasiado herida por todos para que le importe. Una vez más, Violet mira a Cressida y esta se levanta de su silla y sale del salón de clases.

Mientras cierra las puertas de golpe, puede escuchar la voz apagada de Slughorn gritando que regrese, pero ella sigue caminando, sus pasos se hacen más grandes y sus lágrimas corren más rápido por segundos. Parece que todos en el mundo la odian y todas sus razones tienen algo que ver con su amor, o la falta de ello.

Continúa caminando hasta llegar a la cocina de la escuela que ahora mismo está vacía, con prisa por no ser atrapada, revuelve los gabinetes y agarra cada trozo de chocolate que puede encontrar. Abre la nevera y ve una botella de vino que probablemente sea para las damas que cocinan. Sus alientos siempre apestan a alcohol.

Violet toma la botella y sale corriendo de la cocina con todo apretado contra su pecho, las lágrimas todavía corren por sus mejillas y el viento que golpea su rostro mientras corre le dificulta ver a dónde va. Después de un rato, se detiene afuera en el patio y se sienta al borde de un muro de piedra con vista al lago, quita el corcho de la botella de vino y toma un largo y necesario sorbo antes de morder un pastelito de chocolate. Mientras mastica, usa la manga para secarse las lágrimas de la cara y se limpia el labio superior del glaseado.

Theo tenía razón cuando dijo que el chocolate y el alcohol eran las mejores cosas para hacer frente, sin embargo, Violet no puede vivir de eso por el resto de su vida. Necesita encontrar una manera de hacer que todo esté bien o al menos una forma de dejar de pensar en todo lo que es malo en su vida. Ella necesita que termine octubre, tal vez es solo el mes que es horrible, tal vez noviembre o diciembre sea mejor. Solo tal vez.