donde soohwa comienza a sanan
con su cachorro.

third part

( T_T)＼(^-^ )

—gyoon, quiero a mí cachorro. necesito a mi cachorro, me siento terrible, pero más me siento mal por haberle gritado a soohwa— soltó antes de convertir sus ojitos negros en cortinas de agua, la cual caía sobre la delicada tela del saquito aguamarina del otro alfa.

quién estaba confundido y sorprendido al oír las palabras ‹gritale, soohwa› en una misma oración, nunca, pero nunca jamás se imaginó que su grandote amigo le haya gritado a su omega, a quién le era un fiel esclavo de sus deseos y amor. gyoon no solo sentía la tristeza de yohan con tan solo oírlo llorar, sino con olfatear la habitación, sentía el aroma a tristeza, en toda la casa.

el alfa pelirrosa se separo del azabache, sosteniendo sus hombros para verlo a los ojos, ojos los cuales estaban humedecido de la tristeza que cargaba.

gyoon sabía que tuvo que enterrar a soohwa cuando tuvo la oportunidad, pero... al oler el aroma a temor y desesperación del castaño, pensó que sería buena idea enterrar a ambos idiotas.

—yohan, cuéntame que paso.

pidió en señas. y el otro asintió para comenzar su monólogo, mientras se secaba las lágrimas con el puño de su saco.

—yo... yo estaba demasiado sumido en mí tristeza,— comenzó con sus manos temblorosas. — y soohwa me decía que- que deje ir a nuestro cachorro, que esta-esta en un lugar mejor— el alfa menor vio como el labio inferior del contrario temblaba y se lo comenzaba a morder, así evitando volver a llorar. —pero no se que paso, lo último que recuerdo es que mi lobo me dominó y a soohwa tirado en el piso,— recordó soltando lágrimas silenciosas, la aterrada cara del omega. —trate de ayudarlo pero no me dejaba, no me dejaba gyoon. y ahora esta haciendo todo por mí, cuando intento ayudarlo se niega, o cuando intentó disculparme dice que esta todo bien, pero no lo esta. no esta todo malditamente bien. finalizó con palabras mientras se revolvía sus negros rizos, bajando la mirada.

gyoon quieto en su lugar intento pensar en lo que puso pasar en ese momento, seguramente algo muy aterrador para el omega para que se comporte así, seguramente el lobo de yohan lo intimidó y lo dejo asustado.

—yohan,— lo llamó mientras sacudía su mano en el hombro del mencionado, lentamente este lo vió. —¿ no intentaste ponerte en los zapatos de soohwa?— con esa pregunta, yohan comenzó a fruncir el ceño. —digo, el fue el primero con quien tuvo contacto con el bebé, probablemente debe ser difícil para él y-

—¿y él no debería también en mis zapatos?, yo también sufro por el bebé y lo que más me molesta es que se olvidé de él, así como si nada— dijo con la sangre comenzado a hervirse. —como su solo fuera un pedazo de papel inservible.

‹¿cuál era la necesidad de entender a alguien que no lo hace contigo?› era uno de los tantos pensamientos negativos en la mente del alfa mayor, no le gustaba pensar así, pero estaba en su derecho, pero aún tenía el deseo de sanar y que su omega también.

y al ver que este no cooperaba, oh suspiró profundamente antes de levantarse del suelo, y preguntar; —¿no te molesta si habló con soohwa?

go asintió mientras se levantaba de la cama y suspiraba. — hazlo si quieres, pero no creo que vaya a oírte, ha estado sensible a otros alfas.

—¿esa es una de las razones por las que cerraste el café?— yohan asintió.

—si, supongo que con mi esencia ha estado... relativamente tranquilo. iré a preparar algo para la merienda. él esta el baño desde que llegaste, toca la puerta y no entres.

gyoon asintió y caminó hasta el baño, sintiendo el olor a tristeza cada vez más fuerza, era probable que yohan se haya acostumbrado al olor que no lo haya notado. cuando estuvo a dos pasos de la puerta, toco esta con sus nudillos, suavemente.

—¿uh?, ¿gy-gyoon eres tú?— Preguntó para luego sonarse fuertemente la nariz.

—sí soohwa, soy yo, gyoon— Respondió mientras se arrodillaba frente a la puerta. ¿puedo hablar contigo?—el omega murmuró un ‹esta bien›. — bien... he estado preocupado por ustedes chicos, aunque no se noté, los quiero mucho, se que es raro, pero ustedes son mi familia... quiero que vuelvan a lo de antes, ante-

frenó sus palabras a causa del fuerte golpe que provino del otro lado de la puerta.

—¿antes de qué? ¿de que hoseokie se vaya?, pues no es tan fácil...

dijo mientras abrazaba sus rodillas y se escondia en estas, mientras repetía esas 5 palabras negando, y sintiendo sus ojos nublarse.

el alfa suspiró antes de apoyar su mano en la puerta. —sé que no es fácil, yo lo entiendo, no-

otra vez fue interrumpido, esta vez por la abertura de la entrada, mostrando a un furioso omega, con su cabello erizado, mostrando sus pequeños colmillos y su pecho subiendo y bajando rápidamente.

—tú,— dijo susurrando, señalando con el dedo índice al pelirrosa. —tú no entiendes por lo que pase, ni a mí, ni a yohan... ¡no puedes entender el dolor que tengo que me quema el pecho! ¡jamás lo vas a entender!

—¡pero perdí a jihye, eso es similar!— Respondió a los gritos.

—¡Jihye al menos esta vivo y coleando, está contigo, habla contigo, siente contigo! ¡al menos sabes que es lo que hiciste mal y lo hablaste, yo nisiquiera pude verlo— gritó con fuerza, antes de dar un portazo, encerrarse de nuevo en el baño y llorar con fuerza.

dejando sin habla al alfa que aún estaba en el suelo, incluso boquiabierto, quien sintió la gran mano de su mayor.

—¿no pudiste?— el otro negó. —esta bien, en un rato saldrá, vamos abajo, le dejaré su merienda aquí.

oh asintió mientras se levantaba y bajaba al 2do piso, mientras que yohan se arrodillado sobre el piso, dejando una bandeja con té negro caliente, galletas de manteca y un pequeño florerito con una florecita amarilla.

—soohwa, te dejó la merienda en la puerta, iré abajo a hablar con gyoon, baja si me necesitas... te amo.

dijo antes de irse como dijo. luego de unos minutos la puerta fue abierto, dejando ver la achocolatada cabellera del omega, quien suspiró como un tonto al ver el detalle de su alfa, para proceder a tomar la bandeja de madera y meterla al baño.

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—¿él actúa así siempre?

—de vez en cuando se va al baño, pese a no ser el mejor oyendo, por nuestro lazo se que llorá y llorá mucho... o hace sus necesidades o se baña, más que nada sus necesidades.

gyoon lo vió asqueado. ‹uhg!›, para librarse de la imagen de soohwa limpiandose el trasero feo que tiene, giró su cabeza de manera frenética, paro en cuanto oyó los golpes de la puerta principal.

—¿qué pasó?— Preguntó yohan preocupado.

—alguien esta tocando la puerta— contesto el menor mientras se levantaba de su asiento. siendo acompañado por yohan, ambos bajaron por las escaleras hasta el 1er piso, siendo sorprendidos por el rostro relajado de jihye, quien traía flores y una caja con cositas dulces.

—¡hola yohan, sunbae!

y en ese momento, a ambos muchachos se les prendió el foco, a lo que ambos se miraron.

—¿piensas lo mismo que yo?— Preguntó divertido oh, en cuanto yohan este asintio.

aunque este algo molesto, pero no tanto, con su compañero, haría lo que fuera para ayudarlo a sanar, sintiéndolo más débil, debía actuar rápido, aunque el mismo este en un peor caso.

‹lo que sea por ti soohwa›

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—¿soohwa Hyung?

ahora mismo, jihye esta en misma posición en que gyoon estaba cuando intentó hablar con el mencionado. acepto de inmediato la petición de ambos alfas para ayudar a su hyung favorito, sabía que estaba en un mal momento, su hermana también había perdido a un cachorro prematuro, así que algo sabía sobre como ayudar en esos casos.

—... ¿ji-jihye?, ¿qué haces aquí?

—te vengo a ayudar hyungie— respondió con su característica sonrisa. —¿puedo entrar? si no quieres, no hay problema.

ambos alfas se sorprendieron al ver que la puerta era abierta de inmediato con lentitud por el propio omega. el beta ingreso sonriente, en cuánto entró al cuarto de baño, vió como soohwa cerraba la puerta despacio y se sentaba en el piso, chae lo imita.

ambos se quedan en silencio por un buen rato, hasta que jihye comenzó a olfatear el espacio donde estaba.

—hyung, ¿hueles eso?— Preguntó mientras ladeaba su cabecita.

soohwa no entendía.

—hay un olor rico en el aire, a algo dulce.  comentó con sus ojitos cerrados, acercándose un poco a soohwa.

—seguro son las galletas que me dejo yohan, ¿quieres una? —ofrecio con una sonrisa mientras le extendía el platito donde reposaban las galletas de manteca.

jihye acepto gustoso la masita, la olfateó pero frunció el ceño junto con un puchero.

—¿jihye? ¿no te gustan las galletitas de manteca?— preguntó desconcertado.

—no, no es eso, no huele como lo que sentí— respondió manteniendo su puchero.

soohwa poso su mano mano desocupada, la izquierda, y la comenzó a frota en los negruzcos cabellos de su menor, relajandolo tanto, que este pregunto si se podía apoyar en su hombro, a lo que el omega acepto. jihye colocó su cabecita en el lugar mencionado y ahí lo encontró, encontró el olorcito dulce que sintió en el primer momento.

—hyung huele muy rico— dijo mientras frotaba su mejilla acanelada sobre el hombro de su hyung.

—oh...— a soohwa no le quedó de otra que agradecer sonrojado (nadie aparte de yohan le había dicho eso) y seguir acariciando la cabeza, recostandose contra la puerta, sintiendo los cálidos brazos del beta envolviéndolo. el castaño se estaba sintiendo raro, pero era una rareza cómoda, como si en su pechito estuviera floreciendo algo cálido.

y con esa idea, se durmió.

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