¡¿POR QUÉ?!
Porque sí xd. Ok, no.
(Editado)
~ Taehyung ~
— ¡Ya llegué! —gritó alguien en el piso de abajo.
El niño Soobin había llegado. ¿Había venido en bus? ¿En taxi? ¿Caminando y estaba completamente empapado? Esperaba que no porque no quería cuidar de un niño enfermo, ya tenía suficiente con la gripe que me estaba comenzando a dar.
— Yo bajo, tú te quedas aquí —me dijo Jung Hoseok.
— ¿Por qué? Ya sé que eres su hermano, pero no te ves como deberías —respondí desafiante por ninguna razón lógica.
— ¿Crees que no lo sé? Que piense que estás loco, me vale, pero no quiero que lo asustes con esa cara de perro endemoniado que tienes ahora.
— Tú no te ves mucho más tranquilo que yo.
— Tus expresiones faciales son más sencillas de controlar —dijo secamente y se fue. Respiré profundo cuando lo hizo, me sentí un poco más tranquilo al estar solo.
Me tiré en la cama exhausto y molesto. Aún estaba lloviendo fuerte, incluso caían rayos, de modo que aquel chico irritante no podía irse. Cerré mis ojos y solté un suspiro largo. Todo iba normal hasta que sentí que tiraron de mí. Fruncí mi ceño y resoplé.
— ¡¿Qué demonios te pasa, imbécil?! —grité realmente molesto. ¿No que quería estar con su hermano? ¿Para qué tenía que venir a joderme? Abrí mis ojos y me senté en la cama intentando calmarme—. Lo que está quieto se deja quieto, t... —no había nadie—. ¿Jung Hoseok? —llamé desconcertado luego de levantarme y caminar hasta la puerta para abrirla. De repente, un segundo tirón me sorprendió.
Di algunos pasos hacia atrás, asustado. Ahora la sensación de ser halado era más débil, pero seguía allí. Raro. Caminé hacia atrás casi hasta quedar contra la ventana. Cada paso que daba era pesado, se sentía como si yo fuera un pedacito de metal negándose a ser atraído por un imán gigante. Di un paso adelante y la sensación de pesadez se desvaneció, por lo tanto di tres pasos hacia atrás y noté como la sensación molesta volvía a hacer presencia con más intensidad. Raro... No quería moverme. Me senté en un rincón y me hice bolita, pero por desgracia tenía que ir al baño. Bufé irritado y me levanté.
— ¡¿Que qué cosa?! —escuché que gritaron en el primer piso. Por causa de la lluvia y la inmensidad de esta casa la voz no resultaba clara, por lo tanto no tenía manera de saber si el grito lo profirió el niño o el idiota de su hermano. Como sea, no le tomé importancia y abrí la puerta del baño.
— ¡Pero ¿por qué?! —grité furioso cuando no pude dar el siguiente paso. Di dos pasos atrás y corrí hacia adelante pensando en que había sido imaginación mía, pero comprobé que no lo era al sentir como si me hubiera estrellado con una pared al tiempo que seguía sintiendo el molesto tirón a lo largo de todo mi cuerpo. Estaba confundido y estresado, eso lo sabía, podía saber la intensidad de mis sentimientos porque, después de todo, era yo quien los tenía; sin embargo, una sensación de incomodidad y ansiedad se instaló en mi pecho suavemente, pero se sentía diferente, como si no me perteneciera. De no haber sido por el grito que me llamó desde el primer piso, seguramente me habría dado un colapso nervioso. Me levanté con pesar del suelo y caminé lentamente hacia el dueño de la voz al tiempo que vociferaba una respuesta y me dirigía hacia la puerta. No, pero espera... Quería comprobar algo, así que corrí con todas mis fuerzas ya sabiendo lo que iba a pasar para luego gritar un "¡¿por qué?!" bastante irritado al sentir un dolor más intenso que el anterior y levantarme del suelo rápidamente para ir a verificar que no era yo el único afectado por esto.
¡¿Por qué?! No era cierto, no era cierto, ¡no era cierto! Yo no podía... No era posible que yo... Grrr, ¡¿por qué?! ¡¿Por. Qué?!
~ Hoseok ~
— ¡Ki-Jung Hoseok, ¿puedes venir?! —grité desesperado esperando que mi hermano no lo notara. Estaba asustado. Muy asustado. Muy. Demasiado. Mucho. Más. Que. Asustado. A-te-rra-do.
— ¿Ahora se llaman por el nombre del otro? ¿Eso es algo que las parejas hacen? —me preguntó Soobin genuinamente interesado por la respuesta.
— ¿Eh? Ah, no. Hace poco estuvimos haciendo un ejercicio que nos dejaron de tarea y que consistía en fingir ser el otro mientras hacíamos una grabación para luego escribir un informe al respecto. Supongo que nos metimos tanto en ello que se nos pegó eso de llamar al otro por el nombre que no era —mentí descaradamente esperando que Kim Taehyung estuviera cerca para que me escuchara y no metiera la pata. Por fortuna tenía que elevar la voz por culpa del ruido de la tormenta y la voz de Kim Taehyung era realmente profunda y fuerte. Era linda, no podía negarlo. Pero eso no significaba nada. Na-da. ABSOLUTAMENTE NADA. Sólo tenía una linda voz, no más.
— ¡Ya voy! —gritó con mi voz chillona. Mi. Voz. Chillona. Por eso era que no solía gritar, pero bueno, ya qué. Conté –sepa Dios por qué razón– cinco segundos desde que escuché su respuesta y me senté tranquilamente a esperar en una de las sillas tipo bar que habían en la barra de la cocina... O ese era mi plan hasta que, de nuevo, una fuerza desconocida tiró de mí hacia atrás haciendo que cayera sentado en el suelo golpeándome la cabeza, la espalda y... Y la cola de Taehyung, pues, ¿para qué negarlo?
— ¿Qué estás... —comenzó a hablar mi hermano, pero se detuvo al verme tirado como un sapo en el suelo para luego comenzar a carcajearse como loco tapando así el quejido que se alcanzó a escuchar desde mi cuarto.
— Ya vine —anunció Kim Taehyung feliz una vez llegó a la cocina—. Jun-Kim Taehyung, ¿qué te pasó? ¿Estás bien? —preguntó falsamente preocupado al verme tirado en el suelo encajado entre dos sillas por culpa de su gran estatura.
— ¿Tú qué crees? Cállate y ayúdame.
— Eso te pasa por llamarme feo hace un rato —susurró en mi oído para que sólo yo escuchara mientras me tomaba en sus brazos y me levantaba del suelo. ¿De verdad yo era así de fuerte, o sólo era que el cuerpo en el que me encontraba era demasiado liviano?
— ¿Te duele que te digan la verdad? —levanté una ceja, como si todavía tuviera dignidad en lugar de estar colgando en el aire como un muñeco porque el chico no me soltaba.
— Al parecer, me duele estar lejos de ti.
— Awn, ¡qué lindos! —exclamó Soobin, quien, al parecer, lo había escuchado todo—. ¿Se pueden dar un beso? —preguntó emocionado.
— No, qué asco —dijimos los dos al mismo tiempo.
— Bueno, pero no me regañen. Yo sólo decía...
— Ya. Mejor comamos algo.
— ¿No vamos a esperar a Yoonie hyung?
Se hizo un silencio gay tras la pregunta de mi hermano. Miré a Taehyung al tiempo que Taehyung me miraba a mí. Fruncí mi ceño sintiéndome nervioso, pero luego ese ceño fruncido cambió a una cara de susto al sentir una especie de emoción y algo parecido a la vergüenza que no me pertenecían.
— Él... Él...
— ¡Estoy aquí, familia! ¡Ya llegó por quien lloraban, la vida, la alegría de esta casa! —gritó el rey de Roma cerrando ruidosamente la puerta principal.
— Apestas a perro, Yoongi —solté sin pensar. Siempre que llegaba todo mojado a casa le decía lo mismo. Me gané una mirada extrañada por su parte. ¿Por qué habrá sido? Jung Hoseok, estás pendejo.
— Hola, Min Yoongi —saludó por inercia el bobo que estaba a mi lado y sentí una vergüenza y unas ganas de golpearme contra una pared que, de nuevo, NO eran mías... Aunque golpearlo contra una pared no parecía una mala idea... En un contexto NO sexual, por amor de... Diablos, el cerebro de Kim Taehyung era un assco—. No nos prestes atención, estamos jugando a ser el otro. ¿Por qué no mejor te bañas y te pones ropa seca mientras calentamos la comida? ¿Te parece? —preguntó melosamente causándome ganas de golpearme contra una pared.
Por suerte, durante la cena los únicos que hablaron fueron mi primo y mi hermano. A eso de las ocho de la noche ambos ya se habían ido a dormir y yo me había quedado en la sala tomando café mientras veía una comedia y me quejaba entre dientes del bobo que estaba junto a mí.
— ¿Qué crees que fue lo que pasó hace un rato?
— No lo sé... Sólo sé que tenías razón, a mí también me dolió estar lejos de ti —hice una mueca al haber estado de acuerdo con él.
— ¿Y si... —lo pensó un segundo antes de seguir hablando—. ¿Y si nos separamos a ver qué pasa? ¿Cuánto mide tu casa?
— Me da cosa tu idea, pero bueno. Y... Mi casa... Supongo que unos... No sé, tal vez ¿veinte por quince? ¿Un poco más?
— Es grande... Es gigante, en realidad —hizo una mueca—. A ver, levántate y... ¿Dónde queda la mitad de la casa?
— Calculo que por ahí —señalé a mi derecha, confundido por sus preguntas—. Ah, ya entendí —el entendimiento me golpeó—. Tú corre hacia esa esquina señalé a la izquierda— y yo corro hacia el otro lado.
— ¿Aquí es la mitad? —preguntó una vez llegamos a donde había señalado.
— Sí, aquí es.
— Listo, entonces... Uno.
— Dos...
— ¡Tres! —gritamos antes de salir a correr en direcciones opuestas. Cada paso que daba se sentía difícil de dar. Cuando ya estuve a unos diez pasos de él sentí que era como intentar correr entre agua cada vez más profunda y en el paso número quince (sí, los conté) me caí de espalda como si me hubiera chocado fuertemente contra una pared. El sonido de dos cuerpos cayendo al suelo simultáneamente resonó en todo el desierto primer piso de mi casa. Hice una mueca de frustración, resoplé y me levanté.
— Woah, qué coordinación —dijo mi primo impresionado parado en la mitad de la nada—. ¿Qué están haciendo?
Iba a responder, pero el cosquilleo nervioso que invadió mi pecho me interrumpió, así que dejé que el tipo que seguía tirado en el suelo al otro lado de la casa en medio de la sala respondiera. Esas sensaciones obviamente no eran mías porque ¿por qué me sentiría raro al ver a mi primo caminando por ahí sin camisa como todos los días? ¿Acaso era... Ah, verdad que a Kim Taehyung le traía loco Yoongi... ¡¿Entonces yo sentía lo que sentía el bobo que tenía mi cuerpo justo ahora?! No, no, no, yo no quería sentir mariposas al ver a mi primo, que no era feo, pero tampoco mi tipo. Me despedí vagamente de mi primo cuando pasó frente a nosotros con una taza de café y seguí intentando procesarlo todo sin volverme loco.
— Ya se fue, ¿lo volvemos a intentar?
— ¿Eh...? —balbuceé distraído—. Ah, sí. Uno.
— Dos...
— ¡Tres!
Tras tres intentos más, decidimos parar. Ya habíamos comprobado que no podíamos alejarnos más de veinticinco pasos del otro y que dolía más mientras más intentábamos hacerlo. Estaba tendido en el suelo sintiéndome miserable cuando, de pronto, recordé una película vieja en la que dos señoras cambiaban de cuerpo también.
— Esto es como si el Universo nos estuviera diciendo que tenemos que estar juntos —dijo en voz alta como pensando para sí mismo.
— ¿Estás pensando lo mismo que yo...? —a lo mejor compartíamos pensamientos, ¿cómo saberlo?
— Es lo más probable.
Y corrimos de nuevo, sólo que esta vez con dirección hacia donde estaba el otro. Al primer intento pasamos por el lado del otro, al segundo lo tiré al suelo con mucha fuerza, al tercero me tocó a mí caer sobre mi trasero porque se vengó por lo de la vez anterior y al cuarto golpeamos nuestras cabezas con una fuerza tal que hasta creí sentir sangre saliendo de la mía, por lo que decidimos dejarlo hasta ahí y nos tiramos en el suelo frustrados y agotados.
— ¡¿Por qué, Kim Taehyung?! ¡¿Por qué no me puedo separar de ti?!
— Porque somos almas gemelas y no podemos vivir sin el otro, bombón —respondió burlón con una tonta sonrisa de lado tirado junto a mí.
— Eres un idiota —resoplé luego de darle un manotazo para que se callara.
— Y tú te quejas mucho. Vamos a la cama, mi amor —dijo burlón de nuevo haciendo que rodara mis ojos al recordar que me había llamado igual cuando Soobin insistió en que nos dijéramos algo lindo si no queríamos dormir con hambre.
— Cierra la boca y deja de joder.
☆
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
Puesto 72 en extraño. Puesto 12 en irreal. Puesto 127 en divertido. Puesto 159 en cambio. (18-02-2021)
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
No lo puedo creer.
Muchas gracias 😭😭😭😭🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡🧡
Okey, la hora de la emoción se acabó, perdón por el momento de fangirl. Ahora sí puedo saludar :D.
Hola~
¿Sí se entendió? ¿Tienen preguntas? ¿Hay algo que no se entienda, una palabra, situación, expresión?
Amo la relación de esos dos, no sé por qué. Y... AAAAAAAAAAAAAA, amo a Soobin. Soobin Vhope shipper #1. Realmente me encanta.
Amo los comentarios también, así que si se ponen intensos con ellos, por mí no hay problema.
Perdón si hay algún error :(
Gracias por leer, cuídense mucho. Besos y saludes 🧡🧡.
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