Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPITULO 39: Felices

Salgo del baño con la prueba en mis manos.

Estoy temblando. Me muero de miedo y la ansiedad crece cuando veo a Iván igual de asustado que yo.

"Dios mío, que sea negativo, por favor" - pido internamente y volteo la prueba.

- ¿Qué significa una raya? - pregunto e Iván toma la caja con manos temblorosas

- Negativo - dice con un toque de esperanza en su voz

- Así que dos rayas son positivo - digo más como afirmación que como pregunta

- Si - responde y su cara palidece

- Hay que tener más cuidado - digo dejando la prueba en el sillón y sentándome a respirar con tranquilidad.

- Gracias a Dios - lo escucho susurrar y se acerca a mi.

No hablamos por un buen rato. Ambos tenemos mucho en qué pensar.

Mi celular suena e interrumpe el incómodo silecio que empezaba a formarse.

- ¿Hola? - digo sin ver el contacto

- ¿Anni? - la voz familiar me pone alerta

- Hola - repito

- ¿Cómo estás? - dice con tono avergonzado

- Bien, gracias. ¿Tú cómo has estado? - pregunto alejándome un poco de Iván.

- Genial - responde y se queda en silencio un momento - Quería proponerte algo - habla de nuevo

- ¿Algo como qué? - digo con recelo

- Algo que sé que te beneficiará muchísimo - dice confiado - Te veo esta noche en mi casa - sentencia y cuelga.

Me quedo confundida.

¿Qué podrá ser lo que tiene que decirme?

- ¿Quién era? - la voz de Iván a mi espalda me sobresalta

- Simon - digo sin querer ocultarle nada

- ¿Y qué quería? - su tono no es frío ni grosero y eso me relaja

- Preguntar cómo estaba

- ¿Y ya? - dice desconfiado

- Y decirme que quería hablar conmigo más tarde

- Okey - dice y se acerca a mi.

Me abraza y su gesto me desconcierta. 

- Te prometo ser más cuidadoso la próxima vez - dice recordándome el susto infernal que tuvimos hace unos momentos.

- Gracias - respondo mirándolo a los ojos - Yo también buscaré una forma de protección extra - busco su boca y dejo un suave beso - Ya sabes, para estar seguros

Esta vez, es él quién toma mis labios con los suyos, dejándome sin aliento, como siempre.

El suave beso se enciende en un segundo, al igual que nuestros cuerpos. 

Aprieta mi trasero con sus manos mientras yo enrollo mis dedos en su cabello.

Camina conmigo y caemos en el sofá, conmigo a horcadas de él. 

Acaricia mi cintura y nalgas mientras yo sigo tirando de sus rizos, provocando que muerda mi labio y suelte un gemido.  Me aparto un momento y él aprovecha para tomar el borde de mi vestido y arrancármelo por la cabeza. Me quedo únicamente en bragas, ya que casi siempre evito usar sujetador. Mis pechos son lo suficientemente pequeños para sentirme segura sin él y éstos son inventos del demonio, así que es un ganar y ganar.

Iván me observa con lujuria antes de tomar uno de mis pechos con su boca y mordisquearlo con suavidad. Más gemidos salen de mi boca mientras Iván le da atención a mis sensibles pezones. 

Tomo su cara y acerco nuestras bocas nuevamente. Quito su camiseta con torpeza e intento desabrochar sus pantalones. Iván eleva sus caderas para que pueda bajar la prenda y de paso quito sus bóxers y mis bragas. 

Vuelvo a besarlo y su erección presiona en mi intimidad, haciéndome enloquecer. 

Iván se remueve, buscando el preservativo y se lo coloca en un segundo.

Me levanto un poco y me coloco su miembro en mi entrada, bajando mi cuerpo de golpe, dejándome llenar por completo de Iván.

Es una incómoda posición para alguien que no ha tenido sexo más de cinco veces, pero la incomodidad desaparece enseguida, permitiéndome moverme con más libertad. 

Eleva sus caderas para juntarse más a mí, y yo sigo montándolo, cada vez con más rapidez. 

Tomo su cabello entre mis manos ante las descargas eléctricas que el choque de nuestros cuerpos me provoca. Iván entierra sus dedos en mi cintura y vuelve su boca a mis pechos. Esta vez, los muerde con rudeza y no puedo controlar los gemidos que salen de mi boca.

Deja mis pechos cuando tiro con más fuerza de su cabello y entierra su rostro en mi cuello, succionando mi piel. 

Sus jadeos se hacen más fuertes al igual que mis gemidos y las pequeñas corrientes eléctricas que sentía, ahora se convierten en sobrecargas de electricidad que me llevan al incontrolable e incomparable orgasmo que nos ataca a ambos.

Nos quedamos quietos por unos segundos, calmando nuestras respiraciones, y luego, Iván abraza mi cuerpo desnudo y me atrae hacia él. Caemos recostados en el sofá y me cubre con su camiseta. 

Nuestros pechos están pegados y nuestras piernas entrelazadas. La sensación de sus dedos en mi esplada me hace cosquillas y yo trazo su esplada con mi mano. Recorro su cuello, omóplatos, bajo por sus costillas hasta llegar a la curva de su trasero. 

A pesar de la caliente escena de hace unos momentos, aún tengo verguenza de tocarlo así, sin pudor alguno, pero él no, ya que deja su mano en mi trasero si dejar de acariciarlo.

- Debo irme - digo luego de varios minutos en silencio

- ¿Segura? - dice escondiendo su cara en mi cuello y besándolo con lentitud

- Si - digo entre risas por las cosquillas que me provoca

- ¿Y si te obligo a quedarte? - pregunta paseando sus manos por mi cuerpo

- No soy fácil de chantajear - le sigo el juego, dejando que sus manos exploren mi abdomen 

- No sería chantaje - ríe y luego se incorpora, dejándome debajo de su cuerpo - No si tu quieres - continúa con el juego de besarme suavemente

- Que linda forma de plantearlo - tomo su cara y beso su boca - Pero no funcionará - me levanto de golpe, sin dalre oportunidad a que siga torturándome y al peligro de que me obligue a quedarme aquí.

- ¿Irás a verlo? - pregunta con un tono que no logro descifrar

- ¿A quién? - digo mientras me vulevo a poner el vestido y subo mis bragas por mis piernas

- A Simon, Anahí - se incorpora molesto

- Pues planeaba ir a mi casa, saludar a mis padres y volver a la residencia, pero ahora que lo dices, si. Iré a verlo a él también.

- Bien - se coloca los bóxers y camina hacia la puerta - Puedes irte si quieres

- ¿Es enserio, Iván? - hablo frustrada - Luego de todo lo que pasó, ¿de verdad vas a ponerte así por una simple charla?

- Podría preguntarte lo mismo - responde un poco más molesto - Después de todo lo que pasó, ¿prefieres irte con él antes que quedarte conmigo?

- No me iba a ir con él - me defiendo - Me llamó porque quería hablar y yo planeaba ir con mis padres. ¿Tienes algún problema con eso Iván?

- Me da igual - se aleja de la puerta - Puedes hacer lo que quieras con quien quieras. 

- ¿De verdad? - pregunto aun mas molesta

- Pues si - dice con indiferencia - No eres tan importante

- Pues gracias, Iván , por dejarlo así de claro - sus palabras me dolieron y mi principal reacción ante el dolor es el sarcasmo - Debiste ponerlo así de claro antes de buscarme en la discoteca y llamarme tu novia frente a tus amigos y haberte encargado de comprar la maldita prueba de embarazo. Me habrías ahorrado mucho tiempo y energías

- Anni - intenta tomarme de la mano pero lo aparto de un manotazo

- Vete al infierno, Iván - intento irme, pero mi boca se abre y suelta palabras por sí sola - Si hiciste todo esto solo por el sexo, pudiste haberte quedado con Meredith. Es obvio que las viejas costumbres no se te quitan, pero yo no voy a ser tu juguete sexual, grábatelo bien

Tomo mi abrigo y salgo de su departamento azotando la puerta.

"Maldita ingenua - me digo a mí misma - Creíste que serían felices para siempre jamás"

Camino hacia mi casa, sin poder llorar pero con ganas de gritarlo todo.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro