Perder a alguien importante es complicado, te deja perdido, temeroso y con un enorme vacío en el pecho... Es muy complicado saber cómo seguir adelante, pero no es imposible y eso lo comprobé cuando perdí a Carolina... Me perdí durante un momento y luego me encontre, me fui de viaje y recuperé mi vida para poder ser feliz de nuevo.

Me alegra que hayas regresado a tiempo -afirmo mi hermana con una sonrisa-

No me iba a perder tu boda -le pase un mechón de su cabello por detrás de los hombros- luces preciosa... -mis ojos se cristalizaron-

Te extrañe -me abrazo con fuerza-

Yo también te extrañe, pero me alegra estar de regreso -sonrei-

Y luces muy cambiada... El cabello negro te queda -afirmo-

Gracias -una sonrisa maliciosa apareció en su rostro- ¿Que?

¿Has hablado con las gemelas? -negue confundida por su pregunta- yo sí, me encontré con ellas hace un par de semanas...

¿Y que pasa con eso? -enarque u a ceja-

Nada en especial, ellas están muy felices... Están trabajando, Alessa tiene una relación y todo está bien en sus vidas -dijo con una sonrisa-

Pues me alegra que todo vaya bien para ellas -admiti-

¡Chicas! -gritoneo Nicky irrumpiendo en la habitación- ¡Es hora! ¡Vamos! ¡Vamos! ¡La otra novia espera! -dijo con emoción-

Controlate, Nicky -dijo Serena con diversión- Lizzy no irá a ningún lado...

¿Y quién dice que no? -enarco una ceja- eres una pesadilla, yo me arrepentiría de casarme contigo...

Lo dice la que tiene de novio a el chico más insoportable de la vida -dije burlona-

¡No te metas con mi insoportable! -gritoneo-

Serena salió de la habitación y nosotras dos detrás de ella. El vestido de dama de honor es una pesadilla, no pude estar aquí en las pruebas y gracias a eso el vestido me queda sumamente ajustado, eso sin contar que el color rosa pálido no es de mi agrado, aunque agradezco estar algo bronceada por mis viajes y que mi piel pálida no se pierda en el tono del vestido... Igual adoro poder estar con mi hermana en su día importante después de haber estado lejos de ella y de todos durante más de año y medio. Llegamos a las puertas por dónde entraríamos las tres, le sonreí una última vez antes de que las puertas se abrieran, salí por el pasillo viendo de inmediato la enorme sonrisa en los labios de Lizzy, me sentí feliz por ambas... Sin duda son una pareja que merece la mayor felicidad de todas y me alegra que hoy vayan a unir sus vidas; ya estaba en mi lugar designado cuando Serena entro al ligar mirando a su novia con amor absoluto y lágrimas en los ojos, de pronto mi atención se la robo una mujer enfundada en un vestido rojo, con su cabello negro perfectamente peinado y su rostro con ese maquillaje imponente que siempre le ha gustado, su mirada chocó con la mía y yo solo pude sonreírle realmente feliz de verdad después de el tiempo que ha pasado, desvíe la mirada y me centre en la unión de mi hermana y su linda novia.

La ceremonia transcurrió de forma agradable, los votos de las chicas me robaron lágrimas, sonrisas y muchos suspiros... Me di cuenta de que su amor es todo lo que está bien en el mundo, ellas se apoyan mutuamente y se aceptan tal como son, se aman, se protegen la una a la otra y apesar de el tiempo que llevan juntas, ellas no han dejado de ser mejores amigas... Creo que Serena y Elizabeth son la clara expresión de lo que es realmente el amor. No podría decir que mi amor por Carolina fue así, la verdad es que ahora veo que apesar de que mi amor por ella era 100% real también era bastante dependiente y no me arrepiento por qué a nuestra manera fuimos felices durante mucho tiempo... Tampoco sé si mi amor por Luciana era igual que el que sentía por Carolina, pero sé que la amaba... o tal vez aún la amo. La ceremonia termino, las novias salieron de la iglesia y todos los invitados detrás de ellas, yo le quedé a agradecerles a todos su asistencia y a pedirles que fueran a dónde será la ceremonia como una de mis labores de dama de honor.

Vaya, vaya... Pero mira a quien tenemos aquí -dijo su voz y sonreí al escucharla-

Hola, Cam -la castaña se me acerco y me abrazo con fuerza-

No sabía que habías regresado, fue una sorpresa verte como dama de honor -afirmo-

Regresé apenas ayer... No tuve tiempo de nada por qué Serena me lleno de trabajos -rei ligeramente-

Pues me alegra verte -beso mi mejilla- espero que podamos salir alguna vez y... retomar nuestra última conversación

Lo voy a pensar -sonrei-

Ella asintió ligeramente y luego se alejo de mi. El rojo predominó frente a mi, alcé la mirada y me fue inevitable no suspirar al verla... Al ver a mi Luciana.

Hola... -susurre despacio y puedo jurar que mi mundo se detuvo-

Hola -me sonrió y quise llorar-

Ahí estaba el sentimiento que recordaba, esa dulzura que me acelera el corazón al ver su perfecta sonrisa... No sé exactamente si es amor o si estamos destinadas a estar juntas, pero sin duda siento algo por ella...

Regresaste... -tomo mi mano-

Si -sonrei-

¿Vas a quedarte? -pregunto nerviosa-

Así es -su sonrisa se hizo más grande-

Tal vez me quedé a su lado, tal vez podría decirle que siempre fue ella o tal vez tengo que ir más allá para poder saber las respuestas... Ahora soy diferente, mi mente esta en calma y lo único que espero es poder tomar la decisión correcta.