ㅤㅤㅤ── cinco ──
🏮 TW: SEXO 🏮
Jimin bostezó ampliamente mientras sentía los brazos de Yoongi retirarse. Con un ronroneo se estiró hacia él y alcanzó su cintura para impedirle huir.
──¿A dónde vas...? ──musitó adormilado.
El alfa acarició y palmeó su mano antes de retirarla con cuidado.
──Al baño, dame un momento ──susurró justo antes de dejarle un beso en su frente.
Jimin aún con los ojos cerrados asintió y se hizo una bolita bajo las sábanas. La noche anterior había querido contarle lo sucedido con el rebelde y, en general, ponerse al día con él, pero cayó rendido en cuanto tocó el colchón.
Aún no se había hecho a la idea de que un embarazo consumía mucha energía y en parte le aliviaba saber que Yoongi estaba mejor para volver a llevar algunos asuntos. Lo único que quería era estar con su alfa y cuidar del cachorro.
Mientras esperaba a que Yoongi saliera del baño, medio dormido salió de la cama en busca de alguna manta. El otoño entraba al fin, su estación favorita. Poco a poco tomó mantas del cajón del alfa y las arrojó a la cama, incluso tomó algunas de sus capas porque eran calentitas y reconfortantes, además de llevar su aroma. Entonces volvió a acostarse en medio de ese lío de telas con olor a menta y lluvia.
Cuando Yoongi salió y vio la escena, sonrió enternecido.
──¿Y esto? ──murmuró mientras se volvía a acostar en su lado de la cama, el izquierdo porque Jimin le había arrebatado el original tras la boda.
──¿El qué? ──balbuceó el omega, casi babeando contra las mantas.
Yoongi calló una risa mientras pasaba su mano por encima del menudo cuerpo y acariciaba su vientre por encima del camisón.
──El nido que has hecho ──comentó alegre, gruñendo con cariño mientras le regalaba feromonas──. Sólo me ausenté unos minutos.
Jimin sonrió inconscientemente, girándose para poder esconder la cabeza en su pecho, dándose cuenta de que había ganado volumen.
──Fue instintivo, déjame ──se quejó, divertido──. ¿Has entrenado en la camilla o qué? ──comentó divertido mientras acariciaba gustosamente sus definidos brazos.
Yoongi se inclinó hacia su cuello para frotar la mejilla allí, mimándole para buscar sus ronroneos.
──Es mi lobo ──murmuró──. Se está preparando para proteger a la manada.
El omega asintió, dándole la razón. A veces olvidaba que el cachorro afectaba también a los de su alrededor, que no era cosa de solamente ver crecer una barriga.
Yoongi mordisqueó su cuello con cuidado, haciéndole temblar y sentir calor en el interior de cada pedacito de su cuerpo.
──Alfa... ──murmuró inquieto──. En este estado me cuesta más controlarme, ten piedad~
En cambió este sólo ahogó una risa contra su cuello y coló la mano bajo el camisón para buscar su tersa y cálida piel, acariciando suavemente su muslo y pelvis. Jimin se estremeció de las cosquillas, notando su entrada humedecerse más rápido que en su peor celo. Solamente necesitaba un pequeño roce para despertar sus deseos.
Abrió los ojos sólo para confirmar lo que sospechaba, viendo una mueca satisfecha en el alfa.
──Lo estás haciendo a propósito ──farfulló con la voz entrecortada de la repentina excitación.
Yoongi subió un poco más su camisón, solamente hasta la cintura, y tomó su pierna para pasarla sobre su cadera.
──No es como si no estuviésemos casados, o no nos hubiésemos acostado ya, o no esperásemos un cachorro ──dijo.
Jimin amaba esos comentarios irónicos y la sonrisa torcida con que los decía, eso sólo le puso más nervioso.
──¿Cuánto tiempo tenemos? ──preguntó a juzgar por la luz matutina que entraba por la ventana.
──Suficiente ──susurró el alfa, acercándose a sus labios, sabiendo que aún les quedaba algo de tiempo antes de que los sirvientes fueran a molestarlos.
Jimin no dijo nada más, sólo tomó su mejilla al tiempo que Yoongi buscaba apoyarse en su cintura, y entonces ambos se unieron en un beso instintivo pero dulce, algo meloso por parte del omega que aún no terminaba de estar completamente despierto.
Yoongi se deshizo el nudo del batín él mismo con su otra mano, y no tardó mucho en buscar la entrada del omega para asegurarse que estaba suficientemente dilatado.
──No quiero jugar ──se quejó este, sin abrir los ojos aún cuando no le besaba──. Quiero hacerlo ya.
El alfa rió un poco por su impaciencia, pero no le podía negar nada y mucho menos en ese estado, con aquel puchero.
──Tranquilo, eres un impaciente ──se quejó con diversión, mordiendo automáticamente su labio inferior.
Jimin sintió su miembro adentrarse segundos después y agradeció no tener que esperar mucho. Se sentía sensible ante cualquier tacto y sobretodo necesitaba el cariño de su alfa, aun cuando estaba embarazado necesitaba su nudo.
──¿Me vas a morder? ──gimió de forma dulce y baja, sintiendo sus mejillas colorarse.
Yoongi le observó y le sujetó la pierna como si pudiese romperse en cualquier momento, notando su delicada belleza al tener sexo bajo la luz dorada del día.
──Me gustaría reforzar la marca ──gruñó suave, aumentando la presión de sus estocadas inconscientemente.
──Más lento ──se quejó el omega, ronroneando──. Muerde suave, ¿sí?
Yoongi asistió, haciendo rozar ambas narices. Entonces procedió a darle justo lo que quería; besos calmados y cariñosos, mordidas dulces y caricias lentas en tanto penetraba su estrecha y húmeda entrada.
Jamás en toda su vida había hecho algo parecido, sus relaciones con el harem eran simple necesidad o calmantes para el celo, incluso con Jimin habían sido momentos pasionales o salvajes. Pero esa vez sentía que cualquier movimiento brusco podía asustarlo o hacerle daño, y solamente quería cuidarlo y darle su amor.
Jimin no necesitaba nada más que las caricias y los besos de su alfa en ese instante para calmar el calor de su entrepierna, y entre cada vaivén de sus cuerpos se encargaba de agradecerle con gemidos melódicos o suspiros bajos ahogados contra su cuello.
Cuando ambos sintieron el clímax cerca, el omega se sonrojó al pensar en que mancharía el cuerpo de su alfa, pero tampoco evitó que eso pasase. Y Yoongi no dijo nada, todo lo contrario, mientras se deshacía dentro de él con un gruñido bajo se dedicó a reforzar con cuidado la marca de dientes de su cuello y a limpiar el desastre de su orgasmo con los dedos, que más tarde lamió.
──Cielo, ha sido... ──Jimin suspiró, quedándose cerca aunque el nudo fuese más pequeño esa vez──. Precioso.
Yoongi sonrió contra su frente con un jadeo antes de besarle allí mismo.
──Tú eres precioso ──susurró──. No mereces menos.
Jimin volvió a sonrojarse, pero esa vez no titubeó al esconder su cara adormilada en la almohada.
Cuando Yoongi pudo salir de él lo abrazó fuerte y le condujo a dejar la cabeza sobre su pecho. Poco a poco el omega volvió a dormirse a pesar de ser tarde, pero el alfa se podía imaginar lo agotadores que habrían sido esos días para él, así que le dejó dormir aún cuando tuvo que levantarse a realizar sus quehaceres como rey.
Aquella misma tarde Yoongi pudo escaparse en la medida de lo posible para volver junto a su omega, pues Hoseok y Jungkook le habían contado lo sucedido con el rebelde el día anterior.
Tras mirar en el jardín, su habitación o la biblioteca, Yoongi se rindió y preguntó a varios sirvientes dónde se encontraba Jimin, que resultó haber sido visto por última vez subiendo las escaleras de la segunda planta. Entonces él adivinó y lo encontró allí, junto al piano.
En la sala faltaba iluminación, pero era compensado con los candelabros que el omega había llevado. Además había retirado las sábanas de algunos muebles que habían y parecía más cálida.
──Como un omega como tú en un lugar como este ──bromeó Yoongi, caminando hacia el interior.
Jimin dejó de sacudir el polvo de las repisas y le sonrió con picardía.
──Como te atreves a dirigirte a mí de ese modo ──respondió dramático, rodando los ojos.
──Oh, disculpe alteza Park ──comentó el alfa con sus manos tras la espalda antes de adoptar un rostro impasible.
Jimin al fin dejó lo que hacía y prestó toda su atención en Yoongi, casi sorprendido de verle allí.
──Disculpas aceptadas rey Min ──murmuró, acercándose hasta posar las manos en sus hombros con confianza, aspirando inconscientemente su aroma en el aire──. Pero si quiere que acepte el compromiso tendrá que esforzarse más ──bromeó, siguiendo el juego.
Yoongi se aguantó las ganas de sonreír.
──Lo sé, por eso traigo un regalo de cortejo, que espero que acepte ──susurró, acercándose a su rostro pero sin besarlo aún.
Jimin, intrigado por la respuesta y sintiendo un cosquilleo nervioso por el juego, rió un poco.
──¿Y de qué se trata?, espero que no sea una isla ──murmuró.
El alfa chasqueó la lengua, haciéndose el ofendido.
──Es algo mucho mejor. Algo que nadie más podría obtener y no le robará nunca ──respondió llevando sus manos a la estrecha cintura para pegar sus cuerpos──. Le daré mi corazón, alteza.
──Es un buen regalo...
Jimin, perdido en las feromonas que notó y su voz ronca, miró sus labios unos segundos antes de besarlos y derretirse allí mismo con la sensación, como si no los hubiese probado miles de veces antes.
──Aceptaré el cortejo entonces ──susurró contra su boca.
Yoongi se adelantó a estirarle del labio inferior, consiguiendo de su parte una risita preciosa.
──¿Estáis bien? ──preguntó entonces.
Jimin asintió, llevándose una mano al vientre sólo para comprobar que seguía igual de imperceptible el embarazo, pero eso significaba que iba sobre la marcha.
──Perfectamente, estaba aprovechando la calma para limpiar un poco esto, quiero hacerlo más acogedor ──explicó mirando alrededor.
Yoongi emitió un gruñido de aprobación sin soltar su cintura en ningún momento, mirando los pequeños cambios hechos.
──Pediré que Hoseok o alguien te ayude ──murmuró con su ceño fruncido.
──¡No! ──El omega se abrazó a él con relativa fuerza, aunque se había sentido mejor al saber que ya no le molestaba ver a Hoseok cerca de él──. No quiero que nadie venga aquí, es nuestro sitio... Si quieres puedes ayudarme tú.
El alfa no dijo nada de inmediato, sólo acarició su espalda y cabello hasta que comprendió lo que significaba; al estar embarazado probablemente habría tomado la sala como una especie de nido figurado, pues solamente se habían percibido sus aromas desde hacía un tiempo. Hinchó un poco su pecho.
──Está bien, entonces la cerraré con llave para nosotros. ──Accedió. Entonces recordó el motivo de su visita──. Por cierto, ahora que tienes un rato para hablar... Quería comentar lo que ocurrió ayer, Jungkook y Hoseok me pusieron al corriente sobre el rebelde.
En cuanto escuchó aquello Jimin se mordió el labio inferior, debatiéndose en si debía contarle todo. Pero al fin y al cabo era el primer rey del país, quien había llevado el problema desde el inicio y quien les seguía la pista, además de su confidente número uno.
──Sí... También quería hablarte de eso. ¿Qué te contaron? ──cuestionó, alzando la cabeza para mirarlo.
Yoongi mantuvo la vista perdida en algún punto del suelo, como trazando mapas mentales.
──Que era un rebelde forastero a juzgar por su apariencia y ropa. Y que no le pudieron sacar información antes de que se suicidase ──explicó.
Jimin asintió pero se aclaró la garganta para añadir algo más.
──Eso... no es todo. No se lo conté a los consejeros por si acaso, realmente no sabía qué más hacer hasta hablar contigo. ──Suspiró.
──¿Qué no les contaste? ──preguntó Yoongi, lejos de reprenderlo.
──Entré en la celda para examinar el cadáver y encontré una nota escondida en su boca, un pequeño papel escrito en latín ──informó Jimin. Al no recibir respuesta siguió──. La traducción más coherente sería "la caza de brujas no ha terminado, lo malo y lo peor se juntan, viene la oscuridad".
Yoongi prensó sus labios conforme pensaba en esa nueva información, pero no decía nada.
──Y... habían mayúsculas a propósito, decían "Min" ──añadió el omega, aferrándose un poquito más a él como si pudiese protegerlo──. Pero... En el ataque algunas flechas llevaban un cartel que decían "basura de Busán", no entiendo por qué... no entiendo qué pretenden, a por quién van o qué quieren conseguir ──farfulló, escondiendo la cara en el cuello de su alfa──. Y no entiendo por qué el rebelde se suicidó si llevaba un mensaje de advertencia.
Yoongi acarició su cabello y espalda para calmarlo y el aire se convirtió en una nube apaciguadora para Jimin.
──Tranquilo pequeño, déjamelo a mí ──susurró el alfa.
──No quiero que te vuelvan a herir. ──Se quejó Jimin──. Tengo miedo Yoongi...
Este lo balanceó un poco en sus brazos.
──Acabaré con esto, tú no te preocupes por nada, ¿vale? ──murmuró sobre su cabeza, besándola repetidas veces.
Jimin cerró sus ojos y confió en esa promesa, sabiendo que intentaría terminar con la amenaza cuanto antes, porque era un buen alfa.
──Sólo quiero ser padre ──susurró entonces──. Lo único de lo que quiero hablar o preocuparme es de saber cambiar pañales y dormir a un bebé.
Sintió los brazos de Yoongi estrecharle un poco más, pero sin hacerle daño.
──Si es lo que quieres adelante, déjame el resto a mí, ¿sí?
Jimin asintió con una sonrisa inconsciente, casi adormilado por el aroma a menta y lluvia. Pese a todo, sabía que serían buenos padres y que podrían seguir adelante, no importaba el obstáculo.
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ଓ ଘ ଙ
¡Gracias por las 1K lecturas!
Espero que os haya gustado el cap, quería un poco de intimidad para ellos dos, merecen cosas buenas ♡
¿Alguna teoría sobre los rebeldes? →
Os leo 👁️
P.D.: Lo resubí porque tenía micro errores perdón.
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