Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

21

—¡Jordan! ¿Me escuchas?

—¡Aquí! —Su voz se hizo pequeña, algo le ha pasado.

—¡Joder! —Definitivamente eso me preocupó. Voy hacia donde escuché la o de Jordan.

Clina abajo se encontraba tirada, al parecer muy adolorida.

—¡Jordan! —Me asomo y ahí estaba ella.

—¡Marcus, ten cuidado, te vayas a caer!

Lo primero que hice fue tirarme e hice caso omiso al aviso de Jordan. Al estar con ella olvido que está lloviendo y tiró el paraguas para poder estar a su disposición.

—¿Qué haces? ¿Estás bien? —¿Aun así se preocupa por mí? Cuando ella ha estado en peligro.

—¿Cómo que qué hago? Venir a verte, tonto. —pongo mis manos en su rostro, necesitaba acariciarla. —Me has tenido preocupado.

Ella no dice nada.

—Dime ¿Estás bien? —hago una revisión a todo su cuerpo, pero no encuentro nada. —¿Estás lastimado?

—Te estás mojando. —¿Porque se preocupa por mí? Debería preocuparse por ella.

—¿Por qué te preocupas por mí? ¿Tú, estás bien? ¡Responde! —De verdad quiero saber.

—Tranquilo, estoy bien. He caído y me he lastimado el tobillo. —dice con un tono tranquilizador.

—¡Marcus! ¡Marcus! —Ese es Joshua.

—¡Joshua! ¡Aquí estamos, pero no te acerques mucho! ¡La tierra está inestable! —Le aviso, pues no queremos otro tobillo lastimado.

—Jordan. ¿Está bien? —pregunta Joshua por la chica que tengo a mi lado. Él también ha estado muy preocupado, aunque siga sin saber su secreto.

—¡Sí, está bien! ¡Ve por ayuda! —respondo por ella.

—¡Voy corriendo! —Joshua desaparece.

—Estás muy mojado. Te resfriarás. —Ha estado mucho tiempo bajo la lluvia, sin ninguna protección. No lo pienso ni un minuto, me quito la casaca que llevo puesta y se la pongo para que se cubra.

—Te resfriarás tú también.

—Descuida, llevas más tiempo bajo la lluvia. Tienes que cuidarte. —digo eso para que se tranquilice y no se preocupe más por mí. Para que no se moje más, recojo el paraguas de donde lo dejé y así nos cubrimos los dos.

Vi que se dio cuenta de mis puños, pero trato de ocultarlos, esperando así no me pregunte por lo que me pasó.

—¿Cómo supiste que estaba aquí? —¿Qué cómo lo supe? Desde el momento en que dijeron que saliste en dirección a los suburbios, me imaginé que lo que necesitabas era despejarte por lo que pasó en la habitación. Así que por eso dije que buscaremos en el bosque, lo que no me esperaba era a Bruno tratando de pasarse de la raya contigo.

—Eso no importa. —Me limito a decir, no quiero darle mucha importancia al idiota de Bruno. —Mantente cerca de mí. No quiero que te mojes más. —La acerco más a mí, estaba mojándose y lo que no quiero es que se enferme más de lo que podría enfermarse.

Siempre estaré para ti, pequeña. Siempre, te lo prometo.

(***)

Cuando Joshua llegó con la ayuda necesaria, nos sacaron de la colina.

El profesor y muchos de nuestros compañeros de aula insistieron en que la llevemos al hospital, pero Jordan se negó sin dar posibilidad a convencerla.

Así que decidió llamar a Alfonso. Él no dudó ni un segundo en venir por ella. Contrató un helicóptero y se la llevó.

Nadie preguntó por qué y menos porqué Bruno vino golpeado. Es más, dijo que habían intentado robarle.

Nadie se dio cuenta de mis puños lastimados, solo Joshua, Bruno y yo sabemos lo que pasó y la verdadera razón Joshua, definitivamente está lejos de saberla.

Hoy Jordan regresaría a la escuela, me estuve comunicando con ella por mensajes, quise ir a su casa. Pero no quería ser tan evidente.

Voy de regreso al salón, vine a la cafetería pues lo que desayuné no me llenó, estaba preocupado. Talvez Jordan ni siquiera venga, al saber que Bruno puedo haber dicho lo que descubrió de ella, pero aún no sabe que no tiene de que preocuparse, Bruno no dirá nada. De eso estoy seguro.

—¿Ya viste? Jordan llegó. —escuché en susurros, así que acelero mi paso.

Llego al salón y ahí estaba ella, nuestros compañeros estaban a su alrededor.

—Estoy bien chicos. No tienen de que preocuparse. —Está nerviosa, lo sé. Quizás no se esperaba esta situación.

—Jordan. —hago mi aparición y ella voltea de inmediato.

—Marcus.

Sé que ya lo he dicho muchas veces, pero Jordan se ve hermosa siempre. No me aguanté y tiré de ella para poderla abrazar. Su perfume natural es exquisito.

—¿Cómo estás? —dejo de abrazarla, pues no quiero que crean algo raro.

—Estoy bien. Tengo que hablar con el director. —Sonrío.

—No es necesario. —dice Joshua.

—¿Por qué? —Mi chica pregunta sin entender.

—Bruno era quien te observaba desde la oscuridad y por su comportamiento ha sido expulsado. —explica mi amigo.

—¿Expulsaron a Bruno?

—Sí, él mismo habló con el director y contó lo que estaba haciendo.

Su expresión de que no puede creerlo es divertida, pero entiendo su confusión. Después de todo fui yo quien le dijo a Bruno que confiese.

—Y se hizo responsable por lo que te hizo.

—¿Lo que me hizo?

—Sí, por haberte tirado por la colina. —Sé que Bruno no hizo eso, pero se lo merecía. Quería hacer de las suyas con Jordan. Todo lo que le ha pasado merecido lo tiene.

—Tomen asiento, chicos. Empezaremos la clase del día de hoy. —Todos vas a sus lugares rápidamente.

—Jordan. ¿Ya te sientes mejor? —Los profesores también se sintieron muy preocupados.

—Sí, profesor. Muchas gracias por preguntar.

Después de las clases, todo el día nos fue de maravilla. En el transcurso de la mañana Jordan ya se sentía mejor y estoy seguro que ya no se siente observada pues quién lo hacía ya no está aquí.

Joshua quiso que jugar un rato básquet, junto a los chicos. Muchas veces Jordan intentaba jugar con nosotros, pero para que no se lastime con los demás, que claramente somos más altos y más fuertes que ella. La enviaba a la banca y que mejor nos observe desde ahí.

En cambio, hoy no fue así. Nos dijo que no se quedaría, que Alfonso ya la estaba esperando.

Jordan se notaba feliz al salir, su rostro en la mañana no era el mismo de siempre, sentía miedo y estaba preocupada. Ella quería hablar con el director, seguro creyó que Bruno la delataría.

Créanme que yo no lo iba a permitir, por eso hice lo que hice y dije lo que dije. A pesar que Bruno no tiró a Jordan por la colina, quiso hacerle daño y lo que le está pasando ahora se lo merece definitivamente.

Si es que vuelve en estos últimos tres meses, es mejor que ni se acerque a Jordan y menos la acuse de algo. Pues se las vería nuevamente conmigo y nadie me detendrá.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro