Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

12

—¡Mamá! ¡Ya vuelvo!

—¡Marcus! ¿A quién le has pedido permiso, muchachito? —escucho a mi madre desde el pasadizo. —Pero ¿Qué llevas puesto?

—No te rías. —Lo dije y soltó una risotada que se escuchó por toda la casa.

—¡Mamá! —Me quejo. —¡Por eso no quería que me vieras!

—Perdón hijito, es que te ves muy gracioso.

—No se supone que me vea gracioso, es más, ni siquiera debiste reconocerme.

—¿Qué dices?

—Estoy de encubierto. ¡Y no te rías! —sentencio.

—No lo haré, lo prometo.

Su promesa no duró ni un segundo.

—¡Mamá!

Cesa sus risas y se pone sería. —Pareces otro.

—Esa es la idea, no quiero que las fans me reconozcan y no me dejen pasar una tarde con los chicos.

—Me imagino. —Se quiere reír, lo sé.

—Me voy, no quiero hacer esperar a los chicos. —Me despido de ella y salgo por la puerta.

—¡Cariño! ¿¡Has visto lo gracioso que se ve tu hermano!?

Escucho lo que dice desde afuera.

—Qué cruel eres, madre.

Subí a mi auto y empiezo a manejar en dirección al parque donde me encontraré con los chicos. Les dije que no vieran por mí, que los sorprendería cuando me vean encubierto.

(***)

Recuerdo mucho este lugar, cuando venía de pequeño con mis padres, ahora me es un poco extraño venir sin ellos.

Estoy esperando a los chicos, pero aún no llegan. ¿Les habrá pasado algo? ¿Jordan estará bien? ¿Y si la llamo?

¡No, Marcus! ¡No demuestres tanto interés! —Me digo para mí mismo y tengo razón, si quiero averiguar más de Jordan necesito ser cauteloso.

Pasan unos minutos más y desde lo lejos los puedo ver, levanto mi mano para que sepan que estoy aquí.

Ya me vieron, los tres vienen hacia acá. Jordan se ve muy linda, aun así se vista de chico.

No me esperaba aquella acción, los tres me pasaron por delante como si no supieran quién soy yo.

—¡Chicos! —llamo su atención y estos voltean a verme.

—¿Lo conocemos? —dice Joshua.

—Qué gracioso, Joshua. —Que molesto que se pongan en ese plan. ¿Quiere hacerse el gracioso para Daniela? Pues es algo tonto querido amigo.

—Nunca lo he visto en mi vida. —Daniela también le sigue la corriente al tonto de mi amigo. ¿Pero qué les sucede? —¿Tú lo conoces? —Le pregunta a Jordan, la miro esperando que no entre en el juego de estos dos

—No, ni siquiera sé quién es. —¡No me lo puedo creer!

—¿Están locos? ¿Acaso están bromeando?

Sé que saben que soy yo, pero me quieren sacar de mis casillas y lo están logrando. —Soy yo, miren. —Me quito los lentes que tenía puestos, si después de esto no se comportan como personas normales, créanme que golpearé a Joshua porque sí.

—¡Oh eres Marcus! ¡Cómo no te pude reconocer! —Joshua te golpearé.

Joshua y Daniela empiezan a reírse.

—Qué tonto eres, es obvio que sabemos quién eres. —dice Daniela.

—Qué broma tan pesada. —Me pongo los lentes nuevamente.

—Pero, ¿Por qué? ¿No se supone que nadie te debe reconocer? —dice Joshua.

—Sí. Pero, ustedes son la excepción. Tontos.

—Lo sentimos, señor Marcus. —Se burla Dani.

—Bueno. —Me pongo al lado de Jordan. Dejando a las chicas en medio. —Vamos a divertirnos.

(***)

Han pasado varias horas desde que llegamos, la hemos pasado muy bien. Joshua y Daniela mucho más, pues han estado todo el tiempo juntos. Como en estos momentos.

Están por ahí paseando juntos en los juegos que aún no se habían subido. Jordan ya no quiso ir con ellos, se sentía muy agotada, pero se quedó conmigo a caminar por el lugar.
La multitud era inmensa que casi no teníamos espacio para estar lo suficiente separados, muchos chocaban con ella y quería cuidarla.

No sé últimamente quiero que Jordan esté bien, además de querer saber quién es realidad, cuál es su verdadero nombre. Quiero saber todo de ella.

Llegamos a un punto donde las personas ya no se choquen entre sí.

Nos dirigimos hacia una banca que hay cerca.

—Esta no era mi idea de caminar.

—Lo sé, fue muy incómodo. —dice ella sentándose también.

—¿Quieres algo de tomar? —Talvez esté cansada.

—No, no te preocupes. Estoy muy bien así.

—Bien.

Después de eso no dijimos ni una palabra. No sé me ocurría que más podría decir. Además, no quiero decir cosas sin sentido que me haga ver como un completo tonto.

Pero aun estando de esta manera con ella es muy placentero, es como si ambos fuéramos los únicos que estamos en este lugar.

Aún no puedo creer que sea ella, que Jordan sea la chica de la librería. ¿Cómo no me di cuenta? He sido un tonto desde el inicio.

La miro de reojo y la sentía incómoda. ¿Qué puedo hacer?

Recuerdo que mi madre hará un almuerzo y lo que mi hermana me había dicho.

《Marcus , invita a Jordan. Quiero jugar con él. 》

—¿Qué harás mañana? —pregunte y me sorprendió que hiciéramos la misma pregunta al mismo tiempo.

—Habla tu primero. —dice ella.

—Mi madre realizará un pequeño almuerzo. Y mi hermana muere porque vayas. —Y no es mentira.

—¿En serio?

—No sabes lo mucho que habla de ti, desde que estuviste en nuestra casa.

A Naomy le ha caído muy bien Jordan y me gusta que así sea.

—¡Qué linda!

—Ella tiene el afán de hacerse amigos de todos mis amigos, no sé qué le pasa. —Me los roba a todos, literal.

—Ya me hubiese gustado tener hermanos.

Me imagino lo triste que ha sido para ella, yo no veo mi vida sin mí, hermanita.

—¿Dijiste que tus padres fallecieron?

—Sí, cuando era muy pequeño. Y Alfonso desde ese instante se convirtió en mi tutor legal, más bien como un padre para mí.

—Entiendo tu dolor. Yo también perdí a mi padre cuando tenía doce años, mi hermanita apenas tenía meses de nacida.

—Mis más sinceras condolencias. —Solo atino a sonreír, pues no es nada bonito que coincidamos en esto. —Yo casi no tengo ningún recuerdo de mis padres, pero cada que Alfonso me habla de ellos, sé que tuvieron una vida muy feliz.

Claro que sí, Jordan. Pues tuvieron a una hermosa niña y sé que estarían orgullosos de ti.

—¡Llegamos! —Llegan los chicos y Daniela se pone al lado de Jordan. —¿De qué estaban hablando?

Nos desviamos tanto del tema que olvidamos de lo que estamos hablando.

—Le decía a Jordan, que mi madre preparará un almuerzo el día de mañana y lo estaba invitando.

—Oh, ¿Y sí irá?

—Aún tengo que decirle a Alfonso.

—Alfonso también puede ir. —digo, pues me gustaría que vayas. —Y Daniela también.

—No quiero ser ninguna molestia. —dice ella—Apenas me conocen.

—No habrá ningún problema. A mi hermana le gusta conocer a más gente.

—¡Estoy agotado! —Joshua aparece.

—Jordan me ha invitado a su casa. —cuenta Dani.

—¿Y a mí no? —Se queja.

—Me dijiste que irías a casa de tus abuelos.

Joshua se ríe. —Es verdad, lo había olvidado.

—Díganme ¿Él siempre es así?

—¿Un tonto? —decimos a unísono Marcus y yo. Nos miramos y sonreímos.

—Sí.

—Siempre.

—¡Oigan! No mientan. No siempre. —dice ocasionando nuestras risas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro