-Pero simplemente no puedes irte así como así. – la voz de mi hermana se escuchaba claramente en el pasillo.

-Entiéndeme, Paola – era la voz de Carlos – debo regresar a Puerto Rico, mi

Trabajo está allá.

-Yo me quede por ti, ni siquiera me había dado cuenta que ya habían pasado dos semanas desde que llegaste, por favor no te vayas.

Un silencio profundo se hizo en la habitación, me cruce de brazos y decidí bajar las escaleras en busca de mi vaso de agua, era la una de la mañana y jamás pensé que mi hermana estuviera discutiendo con Carlos en su habitación y mucho menos que ya hubieran empezado una relación y si me atrevía a decir eso era porque de otra manera ella no le estaría reclamando que se fuera de nuevo a Puerto Rico.

Cuando llegue a la cocina, busque el vaso y lo llene de agua, aún sumida en mis pensamientos hasta que sentí pasos de la sala, deje el vaso de agua en la isla y antes de poder salir de la cocina, vi a Carlos, un poco despeinado y con su pijama color verde, me sonrió como apenado y dio la vuelta por el otro lado de la isla.

-¿No puedes dormir?

-No es eso, solo que baje por un vaso de agua – señale - ¿tu?

-¿Desde qué hora estás aquí abajo? – lleno un vaso de agua.

-Desde hace más de media hora. – mentí para saber si me decía algo o no.

-Yo...yo estaba con tu hermana – lo dijo sin mirarme a los ojos – estaba en su habitación, pero no pienses mal, solo estaba hablando con ella, es una muy buena amiga.

-¿Amiga? – alce la ceja con una sonrisa apoyada en la isla.

-Sé que eres mujer y te das cuenta de las cosas antes de que te las confirmen – río – es lo que estás pensando, tu hermana me gusta y mucho solo que en momentos no sé cómo tratarla, sus reacciones son impredecibles.

-Pero tú no tienes una vida acá y ella tampoco ¿no crees que será un poco complicado que tú estés en Puerto Rico y ella en Ecuador y de vez en cuando en Francia?

-Lo he pensado – llevo el vaso de agua a sus labios y bajo la mirada por unos segundos – pero no se sabe si no se intenta, en estas dos semanas que he estado con ustedes me he divertido mucho con ella – sonrío – es muy activa y sobre todo sabe lo que quiere y como lo quiere, se nota que es tu hermana.

Reí – Gracias, ella es una niña muy linda, ha sufrido mucho en el amor, pero a pesar de eso no se cierra las puertas y creo que también está interesada en ti.

-Me lo dijo – sonrío – el mismo día que vino tu padre a hablar con Fernando.

– Realmente es muy activa – pase el dedo por el vaso que yo había dejado segundos antes - ¿qué piensas hacer entonces?

-Mañana tengo que volver a Puerto Rico, mi trabajo aquí culminó y ella no quiere que me vaya, no sé qué hacer, puedo pedir unos días de permiso en la clínica aunque eso no resuelve nada, como dices son países los que nos separan y tengo miedo que ella o yo nos fijemos en otras personas estando lejos.

-¿No estás seguro de tus sentimientos? – él se sentó a mi lado con el vaso de agua aún en sus manos.

-Nos estamos conociendo recién y puedo decir que siento una atracción física muy fuerte y ella siente lo mismo, pero de ahí a otra cosa no puedo asegurar nada – bajo la mirada hacia mis manos – debo confesar que cuando vine aquí aún tenía sentimientos por ti.

-¿Cómo? – lo mire sorprendida.

-Sé que muchas veces dije que solo te quería como amigo incluso me comporté como tal, pero era porque sabía que no tenía oportunidad contigo, sabía que eres de esas mujeres que se enamoran y no traicionan, por eso te alenté siempre a que te dieras otra oportunidad con Fernando – tomo mi mano – pero lo cierto es que desde que te veía por televisión me encantabas, más cuando tuve la oportunidad de verte en persona en Nueva York y cuando te vi tan indefensa en esa cama de hospital sabía que quería estar contigo en todo ese proceso.

-Carlos, no sé qué decir – mire mi mano sobre la de él – no me esperaba esta conversación a la una de la mañana. – trate de quitar seriedad a la conversación.

-Si te pone más tranquila yo tampoco – quitó su mano de la mía – sé que tú amas a Fernando y sé que él te ama a ti, solo quería que supieras todo lo que habías despertado en mí, eres mucho más valiente de lo que todos piensan, y me siento feliz que seas parte de mi vida.

-Yo te quiero mucho, Carlos, has sido un pilar muy grande en mi vida, de no ser por ti yo no sé qué hubiera hecho después de la pérdida de mi bebe o como hubiera llevado mi ruptura con Fernando, te debo tanto que sé que no me alcanzara la vida para pagártelo – sonrío – y créeme que no estoy exagerando, por ti yo vi las cosas más claras y me di una oportunidad con Fernando, estoy segura que en otra vida tú y yo hubiéramos formado una pareja encantadora.

-Estoy seguro de eso – se levantó de la silla – pero en esta vida hay algo que quiero hacer y no pienso quedarme con las ganas – se puso delante de mí, él era muy atractivo, su cabello negro estaba fuera del lugar y sus ojos oscuros me penetraron profundamente, su mano pasó mi mejilla y mi respiración se hizo un poco más frágil, se acercó y sentí sus labios sobre los míos, un solo roce, pero un roce lento, enseguida se separó y posó sus manos en mi cara para después besar mi frente, su mirada me busco una vez más y salió de la cocina dejándome desconcertada en la isla.

Cerré mis ojos y respire profundamente ¡había besado a Carlos en la cocina de mi casa con mi novio y mi hermana en la parte alta! Abrí rápidamente los ojos buscando a los alrededores a alguien, no había nadie, deje el vaso vacío en su lugar y corrí hacia mi habitación, mi corazón latía rápidamente, creo que debía estar blanca como un papel, por suerte cuando llegue al cuarto, Fernando dormía plácidamente, se había girado de su posición inicial y tenía una almohada entre sus manos, las estrellas se divisaban desde donde estaba, camine hacia el tocador y mire mi reflejo, estaba en shock, baje la mirada hacia el collar que me había regalado Carlos y todo cobraba sentido, esos detalles no habían sido de amigos, pero al menos él no quería nada conmigo, ese beso había sido como el final de un amor platónico, nadie lo mencionaría jamás.

-Buenos días, familia – Paola corrió hacia la silla que estaba a mi lado y se sentó - ¿listos para iniciar la semana con pie derecho?

-Si – sonreí al ver el ánimo de mi hermana – le comentaba a Fernando que hoy tengo prueba de vestuario para unas escenas en la playa, resulta que James va a llevar a una fiesta a Bárbara y le pedirá que se vayan a otra ciudad a hacer su vida.

– He visto escenas realmente buenas y de mucho peligro – miro a Fernando que sonreía – como la tuya con Sergio, parecía tan real.

-Si aunque de nada sirvieron esos golpes porque finalmente Bárbara se queda con James – empezaron a reír.

-¿Tienes fecha de tentativa para el final de la novela?

-No, solo sé que será en diciembre, los guionistas y sus asistentes aún están escribiendo el final, entregaron la semana pasada los capítulos de desenlaces que ya fueron aprobados, por eso las grabaciones van a estar a mil por hora.

-Buenos días – Carlos entro al comedor recién bañado y con tres maletas de compañía, dos en la entrada y una en su hombro – buen provecho. – sonrío.

-Gracias – respondió Fernando mirando las maletas - ¿regresas a Puerto Rico?

-Sí, todo lo que tenía que hacer en México termino el sábado, debo volver con mis superiores.

-Con permiso.- todo el ánimo de mi hermana se había esfumado, pasó por el lado de Carlos sin mirarlo y pude ver cómo corría hacia las escaleras.

-Debes ir a hablar con ella. – mire a Carlos que se había quedado con una expresión de preocupación.

-¿Me ayudas? – me miro suplicante.

-De acuerdo. – me levante de la mesa dejando a un lado la servilleta, pase la mano por el hombro de mi novio y salí del comedor.

-¿Puedo pasar, hermana?

-Si – abrí la puerta y la encontré sentada en el barandal de la ventana, una sensación de vértigo me invadió ante el recuerdo de Amelia.

-Carlos te gusta más de lo que yo pensaba – me senté en la cama y me alivie al ver que mi hermana dejaba la ventana – inténtalo.

-Tengo miedo, una vez me enamore y no resultó nada bien, me volví tan dependiente de Saúl que dejaba que él me controlará y decidiera mi vida según su criterio, yo no sé cómo manejar relaciones – se sentó a mi lado – todos estos años he tenido relaciones esporádicas, pero ni siquiera esas relaciones las he sabido manejar.

-¿Porque no me habías hablado de esto antes?

-No le veía sentido, pero me siento muy vacía conmigo misma, no sé tú tienes una relación de ensueño con Fernando y yo quisiera una igual, pensé que con Carlos... – se detuvo – ya no importa, creo que me equivoque tanto con Saúl que ahora dentro de mí ya no queda amor que dar.

-No digas eso – la abrace mientras seguí hablando – eres muy joven como para cerrarle las puertas al amor.

-Pero es que tú no te enamorabas de las personas que conquistabas, yo sí, me he ilusionado y cuando me he dado cuenta que ellos no van a nada serio los he dejado, esa es la verdadera razón.

Me sentí tan mal al escuchar esa confesión de mi hermana que solo me limité a abrazarla más fuerte, con tantas cosas que habían pasado en mi vida en los últimos siete meses no me había dado cuenta de la situación que pasaba ella, tan feliz por fuera, pero llevaba un vacío por dentro – lo siento, tanto tiempo prestándome atención a mí que me olvide de hacer lo mismo contigo, se supone que eres mi hermana pequeña.

– Tú tienes problemas más grandes como para andar solucionando la vida amorosa de tu hermana.

-Carlos es un chico como pocos y estoy segura que él te haría muy feliz, si hablan antes que se vaya al aeropuerto pueden llegar a una solución – me levante de la cama e hice que ella hiciera lo mismo – abajo está con Fernando, no dejes que las cosas se acaben así.

Me sonrió como si hubiera ganado la lotería y después de mirar brevemente su reflejo en el espejo salió de la habitación con la misma energía de la mañana.

*** DOS MESES DESPUÉS ***

-Estoy muy agradecido con la vida por darme la oportunidad de trabajar con un equipo maravilloso, este proyecto se ha convertido en una carta de presentación para muchos, pues la audiencia de la que gozamos abarca nuestras expectativas, hoy se acaba un proyecto, pero su carrera sigue, muchos seguirán aquí otros se irán en busca de más metas, solo me queda decirles que les deseo todo el éxito del mundo para ustedes, ya tienen el talento, la vida se encarga del resto. – Adolfo le sonrió a todos dejando el micrófono a un lado, enseguida se escucharon los aplausos y muchos se levantaron para abrazarlo.

Yo estaba en una de las mesas principales con todos mis amigos y mi novio, esa noche se celebraba la culminación de la novela después de que la noche anterior hubiéramos terminado de grabar el capítulo final, parecía mentira que un año hubiera transcurrido tan rápido, a mi mente vino el instante preciso en que Adolfo me llamo diciéndome que quería que protagonizará su novela, y después de tantos altos y bajos, podíamos decir que efectivamente había sido un éxito total para la carpeta de todo los integrantes.

-Me sorprende que Freddy no esté aquí – Sergio miro a los alrededores – Adolfo le pasó invitación.

-Tenía una reunión ¿recuerdas que lo comento? – Hablo Raysa – dijo que el 2 de septiembre se iría a Nueva York.

-Tienes buena memoria, Raysa – sonrío y Carolina le rodó los ojos, ella seguía siendo tan celosa.

-¿Y qué planes tienen? – preguntó Fernando dejando la copa de vino a un costado.

-Tengo el llamado para una teleserie en Azteca, pero aún no sé, no quiero lanzarme al azar. – Carolina hablo con un poco de seriedad sin quitar la vista de Raysa.

-Adolfo me dijo que se vienen nuevos proyectos con el canal, creo que nos tiene en mente. – esta vez hablo Jorge.

-Por ahora yo paso, tengo todo organizado para estos últimos meses del año – sonreí – una vez Fernando termine la gira, iremos a Ecuador.

-¿Estás segura? – Sergio mordió el bocadito de centro.

-Si – Fernando tomo la palabra – queremos un descanso después de tres años.

-Estoy de acuerdo, pero Adolfo no te dejará ir con facilidad, tienes contrato de exclusividad con Televisa al igual que Jorge y a él no se le ha hecho nada fácil, además son muchos meses alejada del medio, pienso que debes tomar vacaciones por diciembre, ten en cuenta que después de tu boda también te ausentarás.

Sonreí levemente – He pensado todo lo que dice, pero por ahora no quiero involucrarme en ninguna novela, pero tampoco voy a estar lejos de pantalla, tengo contrato con Pantene y muy bien saben que estamos grabando nuevos comerciales, además de que una firma de ropa me llamo para ser la imagen de la nueva colección, a lo que me refiero es que prefiero que estos meses sean más calmados en comparación a los anteriores.

-¿De qué tanto hablan? – Adolfo se paró al lado de Jorge.

-De la noche, de cómo se acabó todo y mañana podremos dormir hasta tarde sin recibir un llamado de tuyo de grabación. – Carolina empezó a reír.

-No sabía que tanto me detestaban – siguió la broma – los voy a extrañar.

-Claro que no – esta vez fue Raysa la que hablo – apuesto que sin importar que mañana es sábado, llamaras a todo el equipo de producción, iluminación, ambientación, guionistas, directores y jefes de piso para ponerse a trabajar en una nueva novela. – esta vez todos reímos, Adolfo tomo una de las sillas para quedarse un rato más, cuando trascurrieron 30 minutos me reuní con cada una de las personas que había estado a lo largo de mi trabajo para agradecerles personalmente por todo lo que habían hecho por mí, Antonio era el más sentimental y aunque tenía a muchas actrices a su cargo me siguió diciendo que era su favorita.

-Gracias por todo el apoyo que me has brindado, Adolfo – apoye mi mano en su brazo – sin ti nada de esto sería posible, gracias por tantos consejos en este año difícil.

-Lo que he hecho es porque te lo has ganado – poso su mano en la mía – tienes un talento increíble y un carisma que te llevará más lejos aún, en este tiempo que llevas ejerciendo la profesión te has ganado el amor de todo el público juvenil y eso no se lo debes a nadie, solo a ti y al esfuerzo que pones cada vez que lideras un proyecto, es un gusto trabajar contigo y no te voy a dejar ir fácilmente y si en algún momento fui demasiado duro quiero que siempre recuerdes que fue por tu bien.

-Lo sé, de no haber actuado así conmigo entonces todo fuera muy diferente, jamás olvidaré cada una de tus palabras.

-Quiero que sepas que independientemente de lo que pase, siempre contaras conmigo y con el canal, es en serio cuando digo que tienes un futuro prometedor con nosotros.

-Eso hablaremos el otro año – reí – después de mi boda.

-No creas que te vas a ir tan fácil de aquí, aún te tengo una participación especial en otro proyecto, además que tienes que seguir viniendo a marcar.

-¿Interrumpo algo? – Sentí la mano de mi novio apoyada en mi cintura y yo también pasé mi mano por la suya.

-No, amor – le sonreí – solo hablábamos de trabajo.

-Te has desaparecido, Fernando.

-Estamos por culminar la gira y las ventas han sido todo un éxito, eso me ha demandó mucho tiempo.

-Yo te doy fe de eso, con la grabación del último vídeo hemos pasado mucho tiempo en locaciones distintas, aunque te confieso que ha sido todo un reto trabajar con los productores de la disquera – sonreí – quién diría que él se involucraría en mi mundo y yo en el de él.

-No puedes negar que las expectativas son muy grandes – mi novio me sonrió de vuelta – aunque solo se han subido fotos a las redes sociales de lo que ha sido la grabación del vídeo, la gente está como loca al ver que lo protagonizas, es una apuesta diferente.

-¿Cuándo estrena el vídeo?

-En octubre, la semana siguiente terminamos con la grabación y de ahí viene la postproducción, si todo sale bien creo que la primera semana.

-Escuche que Donatto tiene en la mira aún nuevo talento ¿es cierto?

-Sí, se llama Lucía, pero no es el reemplazo de Amelia como dicen algunos programas de televisión, solamente es un nuevo contrato y esta chica grabara como solista, Donatto la vio audicionar en un programa de canto y le impactó, a tal punto que convenció a todos para que aceptaran una oportunidad con ella.

-Ahora estos show que buscan talento están impulsando a los jóvenes.

Nos quedamos conversando por media hora, después Adolfo fue llamado por otros asistentes y fuimos a nuestra mesa a despedirnos de nuestros amigos, el reloj marcaba las dos de la mañana y a mí me estaba venciendo el sueño, a la media hora salimos del lugar que había sido contratado para la fiesta, afuera nos esperaba Espinel, al vernos abrió la puerta del carro y entramos, a las tres de la mañana llegamos a casa directamente a dormir en los brazos del hombre que amaba.