CAPÍTULO 2
-Buenos días, Scarlet – Sergio me dio un beso en la mejilla – Adolfo quiere hablar contigo.
-¿Por qué? – guarde mi teléfono en la cartera.
-Los comentarios de la prensa, está muy ofuscado con todo esto.
-No puede ser – toque su brazo - ¿se retrasarán las grabaciones?
-No lo creo, Carolina llego hace poco así que no hay motivos.
-Volveré en seguida. – salí del set y cruce los pasillos principales del canal en busca de la oficina de Adolfo.
-Buenos días, Adolfo – cerré la puerta tras de mí – Sergio me dijo que querías hablar conmigo.
-Si – dejo los papeles que revisaba – toma asiento.
-Adolfo, mira los comentarios que dice la prensa...
-Silencio – unió las manos – si algo me gusta de ti es que jamás has estado envuelta en polémicas que dañen tu imagen, eres la actriz del momento y muchas jóvenes se identifican contigo, eres como su ejemplo...
-Adolfo...
-Déjame hablar – me miro con impaciencia – no quiero que esto cambie, esto te perjudica a ti y no estoy dispuesto a dejar que tu nombre este en la prensa por escándalos con tu pareja.
-¿Puedo hablar? – Asintió - entiendo todo lo que me dices – apoye mis brazos en el escritorio – pero créeme cuando te digo que mi relación con Fernando está bien, tú eres testigo de eso, lo que dice la prensa es mentira, él no me ha engañado y además a mí no me importan sus comentarios malintencionados.
-Quizás sea mentira, pero hay que hacer algo para parar esos comentarios – abrió el primer cajón de su escritorio y sacó una pila de periódicos y revistas – todo esto está dañando tu imagen y reputación, tú público está hablando de ti y eso sí debería importarte, no te puedes dar el lujo de hacer como si nada sucediera. - observe cada una de las revistas y efectivamente en todos aparecía un titular similar, mi separación con Fernando por un tercero.
-¿Una rueda de prensa?
-Efectivamente, pero tienes que estar con Fernando para que todos le den credibilidad a tu palabra, tú más que nadie sabes cómo es este mundo de la farándula, utilizan el más mínimo recurso para generar chismes y lamentablemente las personas lo creen, así funciona el mundo.
-De acuerdo – suspire – te parece que sea esta tarde, Fernando no tiene mucho tiempo para quedarse por motivos de la gira.
-Si – tomo la agenda de contactos – voy a llamar a todos los medios de comunicación para las 4 de la tarde en el salón de eventos, obviamente la transmisión en vivo es de nosotros.
-Muy bien – me levante de la silla – iré a mi camerino a cambiarme, estoy lista en diez minutos.
Salí de la oficina de Adolfo con un mal sabor de boca, esto se estaba saliendo de control, cuando Fernando me dijo del proyecto temático que le propuso Donatto jamás pensé que traería tantas dificultades, era cierto que la prensa siempre estaba pendiente de nosotros por varias razones, entre ellas porque nadie creía que Fernando había cambiado su fama a pesar de su fidelidad, en segunda por las entrevistas que en el pasado había dado Mariam respecto a nuestra "falsa" relación y otra de ellas porque había logrado consolidar una carrera impecable al igual que Fernando, pero siempre habíamos sido noticias buenas, al menos hasta ahora.
-Querida – Antonio estaba en mi tocador – llegas tarde. – sonrío.
-Llegue puntual – le sonreí y me senté frente al espejo – solo que estaba con Adolfo.
-¿Problemas?
-Los múltiples titulares de la prensa.
-Están locos, Fernando en su vida te traicionaría, solo mírate – recogió todo mi cabello – eres la diosa del mundo.
-Tienes razón. – empezamos a reír y él me dio un beso en la mejilla, sus asistentes se acercaron a mí y empezaron con su trabajo mientras Susan seleccionaba los vestuarios que usaría, tenía que olvidarme de lo malo.
*** FERNANDO MONTERO ***
-Donatto, quiero que pare todo esto – lo mire con impaciencia – llama a tus contactos y dile que no tengo nada con Amelia.
-¿Y dejar de ser titulares? – Se levantó de la silla – has estado en las revistas y periódicos durante dos semanas seguidas.
-Pero no quiero estar así – me apoye en el escritorio – sabes que no es la manera, desde que estoy trabajando contigo te he dado buenos ingresos, no sé porque ahora quieres hacer marketing con escándalos.
-Tú lo aceptaste.
-Sí, no lo niego – lleve mis manos a los bolsillos – al principio parecía una buena idea, pero ahora se está saliendo de las manos y no quiero que Scarlet desconfíe de mí y que nuestra relación se dañe por esta mentira que tú inventaste.
-Fernando – se paró frente a mí – tú eras el don Juan de Nueva York, ahora la prensa quiere que seas el don Juan de México, si por algo la gente te conoció fue por esa fama, ahora no me digas que has cambiado porque no lo creo, solo es una etapa de la que muy pronto te aburrirás, el amor se pasa.
-Desde que estoy con Scarlet todo eso quedó atrás – camine por la oficina – cuando tú me dijiste que tenía que hacer creer a la prensa que tenía demasiada química con Amelia para que las entradas se vendieran más yo acepté por qué no me pareció mal, incluso acepte esas fotografías para que salieran en las revistas, pero ya para, has ido demasiado lejos, hermano.
-No, ya dije que no, esto se mantiene así, la prensa en unos días lo olvidara, solo deja que siga generando titulares, sabes que no vas a terminar con tu novia si es lo que te preocupa.
-Solo hasta que acabe esta semana, no quiero seguir viendo esas fotos en los medios, de lo contrario yo mismo iré a hablar con la prensa y le diré que fue un invento para generar más ventas, no estoy dispuesto a acabar con mi relación, Scarlet es mucho más que una etapa en mi vida. – camine hacia la puerta.
-Fernando, espera – me detuve y él continuo – no vengas a dañar nuestra relación laboral, tú sabes que yo te abrí las puertas a mercados que jamás habías soñado, acepte que te radicaras acá y sobre todo se cosas de ti – gire para verlo a los ojos – tus días de don Juan no han quedado atrás y sabes porque lo digo.
-Cállate, Donatto.
-Si no quieres que hable de verdad entonces deja de interferir en mi manera de llevar tu carrera, que lo único que he hecho hasta ahora es llenarte la cuenta bancaria de muchos ceros.
No tenía ánimos de seguir discutiendo así que salí de esa oficina dando un leve golpe a la puerta de cristal, me despedí de la secretaria y salí de la disquera, ahí me esperaba Espinel, abrió la puerta del coche y entre, no pasó mucho tiempo para que estuviéramos en la carretera.
-¿Problemas con el señor Donatto? – me miro por el retrovisor.
-Si – mire por la ventana – no quiere parar los comunicados de prensa.
-Le dije que algo así podía pasar.
-Dice que dentro de poco todo pasara, pero no quiero perjudicar a Scarlet.
-Señor, ella no merece nada de esto.
-Lo sé – suspire – pero tú no puedes decir nada.
-Jamás lo he hecho y jamás lo haré aunque a usted si le digo, no siga con ese juego que mantiene con la señorita Amelia.
-Eso fue cosa de unas copas y una pelea – lo mire con seriedad – y no lo repitas más.
-Como ordene, solo le digo que si la señorita Scarlet se entera de esto jamás se lo perdonará.
La pantalla de mi teléfono se alumbró y vi el nombre de mi novia – Amor – sonreí - ¿en qué restaurante nos encontramos?
-En Pujón, te espero en treinta minutos, aún estoy en el set, amor.
-Voy en camino.
Dirigí mi vista a las calles llenas de personas y medite sobre mi conversación con Donatto y Espinel ¿en qué lío estaba metido? Era cierto que mis días de don Juan no habían quedado atrás, o bueno no en su totalidad, era hombre y había caído en la tentación con facilidad, pero lo que era verdad era que amaba a Scarlet Medina y ella era la única con la que quería estar por el resto de la vida.
-Señor Montero, es un placer tenerlo aquí, pase por favor.
-Gracias. – me deje llevar por el anfitrión del lugar que enseguida me dio una de sus mejores mesas, me entrego la carta y solo pedí vino para esperar a mi novia que ya no tardaría en aparecer por esa puerta, tenía que cambiar mi genio.
-¡Oh mi Dios! – una joven se acercó – ¡Fernando Montero! – Estaba eufórica- ¿podrías firmarme la camisa?
-Por supuesto ¿tienes un bolígrafo? – asintió y abrió su mochila en busca de uno, a los segundos se dio la vuelta y le firme cerca del hombro, después de eso nos tomamos una foto y nos despedimos, ella se alejó sin perder la emoción.
-Niño bonito – Scarlet me sonrió mientras se sacaba las gafas para después darme un beso suave - ¿tienes rato?
-No – me levante para ayudarle a sentarse – hace poco llegue.
-¿Cómo te fue en la disquera?
-Muy bien – tome el vino y le serví en su copa – Donatto solo quería unas firmas de rutina.
-Gracias, amor – respondió al ver su copa de vino llena – en la mañana Adolfo me llamó a su oficina, quiere que ambos estemos esta tarde en una rueda de prensa para que digamos que los rumores de separación son solo eso, no quiere más escándalos.
La mire por unos segundos y moví la cabeza lentamente, no podía hacer eso, era una de las reglas de Donatto – Castaña, no puedo, tengo que regresar a la disquera, esta tarde llegaran unas personas que quieren apoyar mi material discográfico y no puedo faltar – tome su mano – de todas maneras esos chismes se opacaran dentro de unos días, tú y yo sabemos que estamos mejor que nunca.
-Lo sé, pero de verdad estoy cansada de ver nuestra imagen y la de Amelia con titulares falsos.
-Y también lo estoy, pero créeme que la prensa se va a aburrir, además la siguiente semana es la entrega de premios de TvyNovelas y veras que tendrás otro titular como a los que estás acostumbrada.
-Tienes razón – me sonrió – de todas maneras tendré que estar en la rueda de prensa, Adolfo ya convocó a todos y aprovechare para dar alguna que otra noticia buena y disipar todos esos rumores de una buena vez.
-Me parece perfecto. – el encargado de mesas llego con los platos de comida que había pedido minutos antes que llegara Scarlet y empezamos a comer, algunos que otros fanáticos se acercaron a la mesa y le dimos fotos y autógrafos, eso ayudo a que mantuviera la mente ocupada y la conciencia callada.
*** SCARLET MEDINA ***
-Te dije que todo se solucionaría, Adolfo.
-Eres una diosa – tomo mis manos – siempre sabes qué hacer.
-Gracias ¿ahora me vas a decir la noticia que me tenías?
-Sí, mañana salimos a Nueva York, vamos a grabar varias escenas allá.
-No lo puedo creer – sonreí con emoción - ¿cuando regresamos?
-Lunes en la mañana.
-Es maravilloso – me acerqué a él y lo abrace – muero por regresar a Nueva York.
-¿Qué celebran? – Carolina apareció en los pasillos.
-¡Nos vamos a Nueva York!
-¿De verdad? – al igual que yo ella estaba emocionada que se acercó a Adolfo y lo lleno de besos por la cara.
-Tranquilas que no es el fin del mundo – sonrío también – les iré a comunicar a todos sus compañeros de elenco, por hoy es todo.
-¿Fernando, vendrá contigo? – Carolina, se apoyó en mi brazo.
-No lo sé – salimos de los pasillos en dirección a la salida del canal – tengo que preguntarle, no sé cómo vaya todo en la disquera aunque ya no quiero alejarme tanto de él, estos meses apenas hemos convivido.
-La carrera de ambos demanda mucho tiempo – saco las llaves de su cartera - ¿no sientes celos?
-No – sonreí – yo sé lo que soy y sé que Fernando me quiere, él me entiende así como yo lo entiendo a él.
-Cada vez que pienso en su historia me da mucha emoción, mira que después de ser su fanática te convertiste en su novia. – ambas reímos.
-Nos vemos mañana – nos despedimos con un beso en la mejilla y cada quien camino en busca de su coche.
Llegue a casa y Fernando aún no llegaba, me fui a cambiar de ropa y aproveché para llamar a mamá y a mi hermana, todos habíamos puesto de nuestra parte para que la relación mejorara y a esas alturas ya lo habíamos logrado.
-Amor – la puerta de la habitación se abrió – hola.
-Hola, niño bonito – me levante de la cama y me lancé sobre sus brazos – te extrañaba mucho.
-Y yo a ti, amor – me dio un tierno beso y me dejo en el suelo - ¿viste las noticias? – Negué - estaban hablando sobre la gira temática y las buenas críticas que ha tenido.
-Ya era hora de que las buenas noticias volvieran para nosotros – lo abrace -, te tengo una sorpresa.
-¿De verdad? – Tomo mis manos - ¿de qué trata?
-¡Volvemos a Nueva York!
-¿Volvemos a Nueva York? – Soltó mis manos - ¿cómo?
-Adolfo, quiere que grabemos unas escenas allá y es una oportunidad para darnos unas vacaciones lejos de todo esto, quiero pasar un rato contigo antes de que vuelvas a irte.
-Scarlet, también tengo compromisos y tú tienes la entrega de premios.
-¿Qué compromisos? – omití la última parte.
-Precisamente te iba a comentar que daré un concierto en Monterey este fin de semana, será a unos empresarios de Centroamérica y eso me conviene mucho, va a ver una fiesta y quería que estuvieras conmigo.
-¿Te lo dijeron hoy?
-Si – camino por la habitación – Scarlet, yo contaba contigo.
-Yo también – puse las manos en mis caderas – pero entenderás que no puedo dejar la grabación – hizo un gesto de fastidio - Fernando, tú más que nadie sabe cómo funciona este medio, yo te puedo reclamar exactamente lo mismo.
-Es que no se trata de reclamos, más bien de prioridades.
-Tu prioridad ahora es la música así como la mía es la televisión – camine hacia la puerta de la habitación – no voy a discutir contigo este tema porque no vale la pena. – salí del cuarto un poco molesta y baje las escaleras.
-Scarlet, espera.
-Déjalo, Fernando – me detuve en el último escalón – tampoco te estoy pidiendo que canceles tu concierto, solo te conté la noticia que me dieron.
-Lo siento, no me comporté como debía – llego hasta mi – tú nunca me reclamas nada y por el contrario tú no puedes decir lo mismo de mí.
-Solo trato de entenderte – me cruce de brazos – como siempre te he dicho, ambos sabíamos que esto no sería fácil, pero decidimos arriesgarnos, solo no arruinemos las cosas con peleas que no tienen ningún sentido.
-Siempre con respuestas que no espero, eso me gusta de ti, castaña.
-Vamos a sentarnos en el jardín, un poco de aire fresco nos vendría bien.
-Tengo un plan mejor – tomo mi mano – vamos a nuestro mirador. – una sonrisa salió de mí y salimos de casa abrazados por la cintura rumbo a ese lugar mágico que Fernando había comprado un año tras y donde México se convertía en el testigo máximo de nuestro amor.
HOLA AMIGOS LECTORES, HOY LES TRAIGO EL SEGUNDO CAPÍTULO DE LA NOVELA QUE COMO SIEMPRE ESPERO LO ESTÉN DISFRUTANDO MUCHO... PARA LOS LECTORES NUEVOS LES COMENTO QUE ESTÁ ES LA SEGUNDA PARTE DE LA NOVELA JUEGOS DE SEDUCCIÓN QUE SE DESARROLLA TRES AÑOS DESPUÉS DE LA PRIMERA, ASÍ QUE SI DESEAN SABER SUS INICIOS (RECOMENDADO) LEAN LA PRIMERA NOVELA... UN BESO GRANDE.
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