ERIKA

Invité a Jong Hyun y Dae Ki a ver el partido de Seo Won. Estamos sentados en las gradas, todavía no comienza, pero muero de ansias.

—Espero que sea bueno en esto y no me arrepienta de haber venido —comenta a mi lado.

—¡Cállate! Voy siempre a tus partidos de fútbol y eres malísimo.

—¡D'angelo, soy el mejor! —ironiza—. Irás a verme, ¿verdad?

—Sí, ¿cuándo he faltado?

—Ahora que tienes novio... No me dejes de lado, ¿está bien? —Toma mi mano para entrelazar nuestros dedos.

—No te preocupes, no soy como tú.

—Erika...

El partido está por iniciar, el equipo sale a la cancha y ahí está Seo Won buscándome. Apenas me encuentra, su linda sonrisa se manifiesta a la distancia; también saluda a Jong Hyun y Dae levantando la mano.

—¡Fighting, Seo Won-ssi! —Lo anima Dae.

—Deja de hacer eso—Se queja Jeong.

—¿Por qué? Es el novio de Erika, para eso vinimos.

—Exacto, es el novio de ella, no el tuyo. Mejor cállate.

—Jong Hyun, déjalo en paz. Agradezco que Dae Ki se encuentre conmigo para apoyar a Seoltang.

—También estoy contigo, pero no le voy a estar gritando como un aficionado. No sabemos cómo juega. Mejor miremos, y luego analizamos si es adecuado que...

—Cierra la boca, Jeong, entendimos tu punto. Eres aburrido.

Él es muy bueno en baloncesto, lo ha practicado toda su vida. Me contó hace un tiempo que ganó medallas con su equipo de secundaria, incluso cuando terminó la escuela continuó practicando junto a sus amigos. Los horarios del trabajo le impidieron seguir. No fue sino hasta el ingreso a la universidad que pudo disfrutar de esto otra vez.

Seo Won es ágil, corre de un lado a otro sin dejar de lucir atractivo con su camiseta. El cabello se le pega a la frente debido al sudor; aun así, no pierde el encanto. 

No entiendo mucho sobre deportes, solo vine a ver cómo se divierte haciendo lo que ama. De repente, encesta, logra su cometido y festeja con sus compañeros.

Seoltang está feliz, todos aquí lo estamos. 

JONG HYUN

Dae Ki se encargó de codearme cada cinco minutos para no perder la oportunidad de molestar sobre lo bueno que es Seo Won en el baloncesto. Tengo que admitirlo, lo es. Sus pases fueron grandiosos, su condición de deportista está por encima de la mía. Ahora quiero mejorar mi rendimiento y demostrarles que puedo ser más atlético de lo que ya soy.

Tengo ganas de irme al departamento. Y lo hubiese hecho si no fuese porque el novio de mi amiga nos pidió que lo esperemos. Por obvias razones no puedo dejar sola a D'angelo, hay mucho idiota dando vueltas.

—¿Vas a salir con tu novio? —pregunta Dae Ki.

—No, me iré a dormir; mañana hay clases temprano. Me esperarás, ¿verdad, Jeong? — consulta con inquietud, aunque su duda es innecesaria.

—Sabes que sí, nunca te he dejado sola —La abrazo, mas ella busca a Lim.

No he vuelto a ver a Seo Won tras hacerse novio de Erika. No sé cómo debo tratarlo a partir de ahora. ¿Cambia en algo? Nuestra relación se basa en un saludo cordial y luego desaparecer de su vista. Lo poco que sé de él se debe a las incansables menciones de mi rommie durante cualquier momento del día. Dejando eso de lado, es un completo desconocido que dejo entrar a mi casa porque le hace bien a D'angelo.

Hace unos días era su amigo, hoy es su maldito novio.

Detesto esto. Mis hermanos también lo harán. Tal vez cuente con el apoyo de mi madre si hace méritos, pero veo complicada su situación. Seremos tres contra uno en uno juego justo. Tendrá que esforzarse, y mucho.

—Ahí viene Seoltang—exclama con notable alegría.

Lim se ha dado una ducha. Trae un atuendo distinto al del juego, va a reencontrase con su novia que muere de ganas de abrazarlo.

Casi por arte de magia mi celular suena, siendo la excusa perfecta para alejarme.

—Erika, te espero en el estacionamiento, ¿está bien? Tengo que atender una llamada. Saluda a Lim Seo Won-ssi de mi parte.

—De acuerdo, Jeong.

La llamada no es importante, se trata de Min Wook. Él no quiso venir al partido y corre la suerte de no tener la obligación de presenciarlo. A nadie le interesa Seo Won en el equipo de la universidad; no obstante, vamos a relatar las maravillosas jugadas como si se trataran de una gran hazaña.

Dae Ki camina a mi lado. Su tolerancia no debe ser suficiente para presenciar los halagos del poetastro de Lim. Está haciendo mímica con el fin de saber quién se encuentra del otro lado de la línea, mas lo ignoro, porque molestarlo se ha vuelto una rutina diaria que no puedo desperdiciar.

—¿Es Kyu Bin? —susurra.

—No, cállate.

—¿Con quién estás, Jeong? —Pregunta Wook.

—Estoy con el idiota de Dae Ki. Se volvió fan de Lim Seo Won—Ironizo antes de colocarlo en altavoz—. La próxima vendrá como su porrista personal.

—¡Debiste verlo jugar, es muy bueno!

—Jugador promedio...

—Envidioso.

—¿Envidia de qué? —Me quejo—. No sabía que estábamos ante el Dream team.

—Amigos, perdón, pero tengo que dejarlos—ríe—. Tengo cosas más importantes que hacer antes que escucharlos pelear. Nos vemos mañana.

—Adiós, Wook.

No sabemos cuánto demorará la nueva pareja en venir hasta el estacionamiento, pero al menos el panorama de gente disiparse nos entretiene.

—Hola, chicos ¿Qué hacen? —Pregunta Ji Woo, una de nuestras compañeras.

—Estamos esperando a alguien, ¿ustedes qué hacen? —Interrogo al notar que viene acompañada de una amiga.

—Vinimos a ver el partido de baloncesto; ahora vamos a beber algo. ¿Quieren ir con nosotras?

—Sí, nos encantaría.

—¿Están esperando a Min Wook?

—Esperamos a Erika—contesta Dae Ki.

—¿Erika D'angelo? —Sonríe—. Entonces es cierto lo que se dice de ustedes...

—¿Qué cosa?

—Ya saben... Erika y ustedes...Están juntos.

—¿Nosotros tres? —Exclama D'angelo a mis espaldas—. ¡Lo que me faltaba, un triángulo amoroso!

—Erika, ¿de dónde saliste? —digo sorprendido—. ¡Escucha, eso no es cierto! —Le respondo a la chica.

—Sí escuché sobre Jong Hyun y yo—Acota mi amiga—, ¿Pero Dae? ¡Ya es demasiado! ¿Lo dicen porque soy extranjera? ¡Vivo en Corea desde los cinco años, y ese estereotipo de libertinaje no existe! —Reprocha.

—Eso es totalmente falso —Continúa Dae Ki—. Hay muchos estereotipos erróneos, Erika-ssi es una chica respetable.

—¿Habías escuchado rumores sobre nosotros? ¿Por qué no me dijiste? —Inquiero entre molesto y asombrado.

—A nadie le interesa, Jong Hyun.

—Lo siento—Interrumpe Ji Woo—. Erika, no te enojes conmigo, es solo que...

—Idiotas que inventan rumores —Bufa Lim antes de pasar su brazo por encima de los hombros de D'angelo—. Jong Hyun, llevaré a Erika a casa. Si quieres quédate con tus amigas para que puedas explicarles cómo son las cosas—Su tono es grave, parece una amenaza.

¿Se enojó conmigo? ¡Yo no inventé ese tonto rumor!

Dae Ki me observa anonadado, las palabras de Lim resonaron contundentes. Además, se llevó a Erika de un momento a otro.  

Al menos la actitud prepotente del mayor no resultó desagradable para Ji Woo y su amiga. Al contrario, no dejan de mencionar lo lindo que es, lo bien que se ha desempeñado dentro de la cancha, y cómo defendió a D'angelo ante las habladurías.

Dicen estar sorprendidas de que él sea el novio de Erika. El sorprendido soy yo al oírlas. ¿Qué tiene de especial? Es uno más del montón. No será ni el primero ni el último pretendiente.

Por otra parte, ¿quién será el responsable de esparcir una mentira tan grande? No debí hacerme amigo de Dae Ki. Esto del triángulo amoroso me parece de mal gusto. 

MESES DESPUÉS

JONG HYUN

Seo Won está en el departamento, lo frecuenta seguido, por no decir todos los días de la semana. Me molesta,pero prefiero eso antes de que la invite a ella a su departamento.

No sabría decir con exactitud lo que me pasa. La aparición de Lim en nuestras vidas no me entristece, es todo lo opuesto. D'angelo está feliz, y eso también causa un efecto positivo en mí.

Nuestra relación se ha estabilizado, ya no discutimos ni siquiera por el uso de mi ropa. No la necesita. Hace unos días la vi con una de las sudaderas del equipo de baloncesto. El apellido Lim en su espalda lo luce con mucho orgullo, supongo que mis prendas ya no son de utilidad. Mis amigos de Busan dicen que exagero, los de la universidad también. 

Intento estudiar en mi cuarto para no interrumpir a la parejita feliz en la sala. No obstante, cada tanto salgo a dar una vuelta en busca de agua, como en este preciso momento que llevo hora y media con la garganta seca esperando a que Seo Won se vaya y no lo hace. Tal vez debería tener una botella sobre mi escritorio, pero necesito desplazarme por momentos para no aburrirme.

Camino por el pasillo a paso lento. No es como si fuera a hacer ruido para advertirles mi aparición; vivo aquí, tengo derechos y cumplo con las normas impuestas por mi mejor amiga.

De pronto los veo acurrucados en el sofá. Es la primera vez que noto esa proximidad. Por lo general, acostumbro a evitar estar cerca cuando él viene. Lim Seo Won no es de mis personas favoritas. Mantengo distancia.  

Se están besando. Erika lo está besando. Aquí, en nuestro departamento.

Él acaricia su rostro, después ella lo abraza. Se separan por unos segundos solo para mirarse a los ojos y susurrarse palabras cursis. Nunca la he visto así, desprendiendo felicidad y cariño sin que nada más le importe.

Sí, estoy celoso. Hasta tengo ganas de llorar. Se siente como una traición por parte de D'angelo cuando no lo es. Ella no ha hecho nada malo. 

Regreso a mi habitación sin que lo noten. Ya no tengo sed, ya no tengo ganas de seguir estudiando.

Me recuesto sobre la cama con una mezcla de emociones confusas. Hay una sola persona que puede escucharme en un momento como este. He tocado fondo en menos de un minuto.

—Jeong Jong Hyun, ¿Qué pasa?

—¿Por qué contestas desesperada? ¡No pasó nada!

—Tú nunca me llamas, pensé que le había sucedido algo a Erika... ¿Qué quieres?

—Hyo Ri, por favor... —Intento contener el llanto—. Dime qué fue lo que hice mal en todos estos años.

—¿Es en serio, Jong Hyun? —Se escucha indignada—. ¿Te acabas de dar cuenta ahora?

—No lo sé, estoy confundido. ¡Ayúdame!

—No lo haré. ¡Erika está feliz, déjala en paz!

—Pero la acabo de ver con Lim Seo Won besándose en la sala. No me gusta.

—¿Y crees que a Erika le gustó verte besar a otras? —Interroga con dureza—. ¡Ya perdiste tu tiempo, idiota! No me hagas repetir las cosas otra vez.

—Lo sé. Sé que estuve mal antes, solo dime qué puedo hacer ahora.

—¡Nada! ¡No harás nada!

Han Hyo Ri está furiosa. Es amiga de D'angelo y, aunque también es la mía, va a estar de su lado. Menciona que soy un inmaduro que no entra en razón, que con tal de salirme con la mía soy capaz de arruinar a otros sin pensar en sus sentimientos.

Está siendo muy dura, incluso remarca el hecho de que D'angelo dejó una vida muy diferente en Argentina para quedarse a mi lado.

—¿Quieres morir, Jeong? ¡Te mataré si te entrometes!

—¡No haré nada! No sé para qué te llamo si nunca puedo contar contigo.

—¿Y yo cuándo he podido contar contigo? ¿Crees que tus disculpas mediocres fueron suficientes?

—Pensé que hacerme sentir menos era demasiado relevante—contrataco.

—¡Nos apartaste a las dos! —dice enojada—. Vete a la mierda, Jeong.

—No entiendo.

—Te odio, Jong Hyun, solo te preocupas por tu bienestar. Cuando dejamos de ser útiles para ti nos apartaste de tu vida. No te importamos, solo quieres tenernos controladas. Tienes miedo de quedarte solo porque sabes que nadie va a soportar tu carácter de mierda.

—¡Deja de decir que no me importan! —expreso con fastidio—. Son mis mejores amigas, nunca las dejé de lado. Tú me tratas mal por puro placer y sigo cuidándote, porque te quiero, siempre te he querido, Hyo Ri.

—¿Vas a llorar, Jonghyunie? —Se burla—. Tu llanto de cinco minutos no compensa el mío de meses ni el de Erika en todos estos años.

—Estoy cansándome de tus ironías. Ya dime de una vez lo que quieras decirme.

—¡Madura, niño malcriado! —corta. 

Las cosas terminan mal, nunca logro conectar con ella porque se encuentra a la defensiva. Me guarda rencor por algo que sucedió hace muchos años y no hay forma de remediarlo. Lo intenté, juro que lo intenté.

Nunca es suficiente.

Y va a odiarme mucho más, porque voy a ignorar su pedido de quedarme con los brazos cruzados. Desconozco lo que pueda llegar a suceder; por consiguiente, voy a responsabilizarme por todo. 

Hago ruido con las llaves, con los pies, con la puerta, con todo aquello que se atraviese en mi camino y logre alertar a esos dos para que dejen de besarse. Si es que lo siguen haciendo. Tengo que irme. 

—Erika, voy a salir.

—Bueno... ¿sucede algo? —Se levanta del sofá para acercarse—. Estás nervioso, Jeong. Tus ojos...—Hace un corto silencio—. ¿Algo pasó en Busan?

—No, nada malo sucedió. Voy a salir con una chica.

—Estás así por una chica...Entiendo —Sonríe sin ganas—. Lleva tus llaves.

Ya no le importa si ensucio mi reputación, tiene a otro a quien cuestionarle.

—Erika—susurro—. Recuerda nuestro pacto de que en casa nada de...

—Ya vete —Señala la puerta.

Sobre la mesa de madera hay cuatro botellas de cerveza. Preferiría algo más fuerte para hacerle frente a las burlas, mas no voy a quejarme.

Una base de rap estilo libre se escucha de fondo. Mi llegada podría ser épica y con estilo; pero la realidad es que vengo cabizbajo y decadente.

—¿Qué pasó? —pregunta Min Wook en tanto abre mi cerveza—. ¿Cuál es la urgencia?

—Gracias—La recibo antes de tomar asiento—. Tenían razón.

—¿En qué?

Opto por dar un gran sorbo antes de volver a hablar. Estos tres me golpearán duro en el rostro apenas abra la boca. Puedo imaginarme la reacción de cada uno de ellos. Tienen sus ojos clavados en mí a la espera de una mínima confesión.

—No me digas que embarazaste a alguien, Jong Hyun —Recrimina preocupado.

—¡No! Es otra cosa.

—Dijiste que era urgente y vinimos cuanto antes, así que dinos de una vez —dice Dae Ki de brazos cruzados.

—Tenían razón.

—No tengo idea de qué hablas, amigo—dice Kyu Bin.

—Me gusta D'angelo—Asumo como todo un fracasado—. Me gusta desde que soy un niño.

Min Wook y Dae Ki dejan dinero sobre la mesa, en tanto el rubio toma los billetes y los recibe jocoso.

¿Qué significa esto? ¿Van a pagar la cuenta y me van a dejar solo?

—Hicimos una apuesta, Jong Hyun. Sabía que te darías cuenta de esto, pero ellos dos pensaron que no lo harías jamás.

—¿Una apuesta? ¿Pueden ayudarme en lugar de ser tan imbéciles?

—El único imbécil eres tú—dice Wook—. ¿Qué quieres que hagamos? ¿Que lo asesinemos?

—Lo único que puedes hacer es seguir con tu vida.

—¡No, ustedes tienen que ayudarme! ¡Debe tener algo malo!

—¿Algo malo? ¿Te refieres a que realmente es un vampiro? —Se burla Kyu Bin con los ojos sorpresivos.

—Ok, me encargaré del agua bendita y la estaca de madera—Interrumpe Dae Ki—. Kyu Bin, consigue un collar de ajos; Min Wook, tú trae una cruz.

—¿A qué hora deberíamos juntarnos? ¿Les parece a las 12 AM para que el sol ilumine su rostro y se evapore? —Continúa Choi.

—¡Ya basta! Hablo en serio. Aaah, ¿por qué fui tan idiota?

Apoyo mi frente sobre el borde de la mesa. Me frustra saber que nadie tiene intenciones de ayudarme.

—¿Cuál es tu plan, Jong Hyun?

—¿Cómo sabes que tengo un plan? —Lo observo.

—Porque eres necio y cabezadura. ¡Rápido, quedé en verme con alguien!

—Vamos a vigilarlo hasta encontrar algo sospechoso. Si lo descubrimos, Erika lo dejará.

—Es una idea estúpida, porque Seo Won-ssi es buena persona.

—Cierto que eres de su club de fans—Resoplo.

—Admite que es un gran jugador de baloncesto—ríe.

—Sí, lo hizo bien...

—Bueno, te ayudaré porque me das lástima.

—¡Gracias, gracias, Dae Ki!

A partir de mañana seguiremos a Lim Seo Won.

El plan consiste en salir unos minutos antes de nuestras clases para correr hasta la facultad de arquitectura. El tiempo es importante.

Una vez en el edificio nos aseguraremos de que no está metido en asuntos raros, como una segunda novia, drogas, o una mala reputación. Si hay que seguirlo hasta su casa, entonces lo haremos, porque cualquier tipo de dato o información suma.

Nadie es perfecto. Lim debe tener algún defecto que repercuta a futuro. Algo lo suficientemente válido como para ser abandonado por Erika, claro está.

Necesito que sea imperfecto. Más que yo.

Hemos dejado la clase cinco minutos antes de que finalice. Al profesor Cho no le ha parecido sospechosa nuestra huida, incluso creo que a nadie le importó. De cualquier forma, le preguntaré a D'angelo si hay fechas importantes de exámenes o trabajos grupales improvisados, a ella nada se le escapa.

Corremos. Es sabido que la universidad es muy grande, pero ahora lo compruebo al dejar todo mi esfuerzo físico.

Aun pensando en el objetivo de este plan, recuerdo que no le he avisado a Erika que tendrá que regresar sola al departamento. Me detengo solo para escribirle.

Jong Hyun—Vete a casa, no podré llevarte. Perdón.

Te quiero.

Avísame cuando llegues.

✔✔

Frente a la puerta vidriada analizamos la situación. Estamos dudando hasta de las credenciales universitarias que tenemos en nuestras manos. Es decir, con ellas podemos ir a biblioteca, a los espacios de uso común, a cursar, pero... ¿ingresar a un edificio que no nos corresponde?

—¿Esto nos permite tener acceso a todas las instalaciones?

—Sí, ya les dije que sí —Asegura Wook.

—¿Y si al pasarla la puerta no se abre? Quedaremos mal delante del señor de mantenimiento que se encuentra ahí dentro.

—Es una universidad pública, es la mejor de Seúl, ¿por qué no podríamos pasar?

—No sé, en Busan...

—Esto no es Busan—Lo interrumpo—. Pasa la tarjeta por el lector.

—Pásala tú—Me empuja Dae Ki.

—¡Hola, Jae Sun! —expresa Wook—. ¡Qué linda te ves hoy!

Aplica su labia con una linda chica que jamás he visto. Ella trae su credencial en la mano, dispuesta a ir a sus clases. Sigue caminando con Min Wook a su lado que no deja de hablarle, mas parece interesada en la cantidad de idioteces que él tiene para decir. 

La puerta se abre e ingresamos detrás. Los tres nos dirigimos hacia las escaleras, asumiendo que Seo Won cursa en los pisos de arriba y la distribución es igual que en nuestra universidad.

Choi Min Wook no viene con nosotros, pero si al salir de aquí él insiste en quedarse, tendré que llevármelo a la fuerza.

—Está ahí—Señala Kim.

Su clase todavía no finaliza, vamos a tener que esperar.

—Kyu Bin, quédate y vigílalo, nosotros regresaremos al estacionamiento.

—¿Y yo por qué?

—Porque yo no puedo quedarme, no debe verme. Tú improvisa, cualquier cosa nos envías un audio.

Kyu Bin queda a cargo de esta primera fase, nadie mejor que él. Si se pierde, seguirá con la excusa de que aún no se acostumbra a Seúl y se integró tarde. Culparán a su mentor por eso. Espero que no cause problemas.

Min Wook insiste en dialogar como si hubiésemos venido de paseo. Pensé que la chica llegaba tarde a sus clases, aunque no le saca la vista de encima.

—Wook, tenemos que irnos—Interrumpo, apretando con fuerza su brazo.

—Sí, voy en un segundo. Te veo en el estacionamiento.

Me siento relajado cuando estoy al aire libre. No hace calor, tampoco frío, ya estamos en un término intermedio. Dejando de lado que estuve y sigo corriendo de una punta a otra solo porque se me ocurrió aceptar mis sentimientos después de años.

—Erika te está esperando al lado del auto—dice Dae Ki al mirar hacia el estacionamiento—. ¿No le dijiste nada? Eres de lo peor, después te enojas con ella porque no te avisa dónde está.

—¡Sí le dije! No sé por qué está ahí.

Min Wook aparece y no nos queda otra más que escondernos detrás de un arbusto como en las películas. Erika voltea a ver de un lado a otro con preocupación. No ha visto mi mensaje, ahora tengo que llamarla.

—Hola, Jeong, ¿dónde estás?

—Erika, ¿leíste mi mensaje?

—No, lo siento, es que...

—No podré llevarte al departamento, estoy ocupado.

—Está bien... —La veo asentir a la distancia—. ¿Estás con esa chica?

—Sí—respondo rápido—. ¡No! Estoy con Dae Ki.

Suena raro después de los rumores.

—Y Min Wook... y Kyu Bin...

—Está bien—ríe—. Iré al departamento.

—Avísame cuando llegues, no me dejes preocupado.

—Lo haré. Adiós

Se aleja del vehículo para dirigirse hacia la acera que la llevará hasta tomar el autobús. Me gusta mucho verla, no sé si es costumbre o admiración, pero desde que tengo memoria lo hago. Es tranquila, de apariencia despreocupada, aunque en su interior guarda la fuerza de una leona.

Podría arriesgarme en este mismísimo momento y correr hacia ella, mas no puedo hacerlo. No puedo arruinar su momento de felicidad, su seguridad y autoestima. Por ahora voy a concentrarme en Lim Seo Won. Es él quien estará a prueba.

Kyu Bin averiguó los horarios de nuestro objetivo, esto nos facilitará el trabajo en los próximos días. Mientras tanto, estamos en el auto persiguiéndolo.

Los chicos se han camuflado. El rubio trae unas gafas oscuras para no ser reconocido; Dae Ki un cubrebocas y gorra; Wook la capucha de su sudadera. ¿Ya venían preparados o le temen a Seo Won? Porque a mí no se me ocurrió nada de eso, me hacen quedar como un incompetente con este plan mediocre.

Intento mantener una distancia prudente con el auto para no levantar sospechas. Tengo la vista de un halcón, eso no será un problema. Fui uno de los mejores en práctica de tiro, perseguir al novio de mi amiga no es la gran cosa.

Mientras Seo Won deja su auto en el garaje, nosotros estacionamos en la calle del frente.

—Min Wook, llegó tu turno —comento sin dejar de mirar hacia el edificio—. ¡Bájate!

—¿Yo por qué?

—Porque a ti nunca te ha visto. Entra y averigua dónde vive y algo que sea interesante, por favor—volteo hacia el asiento trasero donde se encuentra.

—Mierda, Jeong, si algo sale mal, te mataré.

—¿Acaso no quieres a Erika? ¿No te gustaría verla feliz por siempre?

—Sí la quiero, pero no sé qué clase de favor le haría si se queda contigo—sonríe—. Ya vengo.

Wook sale del edificio junto a una chica de cabello negro que lleva una carpeta en la mano. Voltea hacia nosotros y hace una seña de Ciao llevando dos dedos a su frente.

¡Es que nunca pierde el tiempo!

—¿Quién es ella? —ríe Kyu Bin.

—Eso fue muy rápido, ¿no?

—¿Pero a dónde va? —Cuestiono incrédulo viendo cómo se aleja.

¿Qué pasó por mi cabeza antes de enviarlo en busca de información? Espero que no haya hecho algo estúpido. Su auto quedó en la universidad, tal vez por eso se fue con la chica. ¿Pero qué pasó con Seo Won? 

D'angelo— Jong Hyun ¿vendrás a almorzar?

✔✔

Erika está preguntando por mí a través de mensajes. Me siento nervioso, tengo que mentirle para seguir ocultando mis sentimientos que poco le importan ahora. 

—Pregúntale si va a almorzar con Seo Won—dice Dae Ki al notar que no estoy reaccionando. 

Jong Hyun— ¿No almorzarás con Seo Won?

✔✔

D'angelo—No, él entra a trabajar en 30 minutos

y sale del trabajo a las 8 PM :(

✔✔

Leo el mensaje en voz alta, hasta hago énfasis en la carita triste que coloca al final. No puede ser.

Por los horarios que me brinda deduzco que él está por salir o llegará tarde.

D'angelo— Jeong, ¿vas a venir a almorzar o no?

✔✔

Jong Hyun—¿Puedo ir con Kyu Bin y Dae Ki?

✔✔

D'angelo—Sí.

✔✔

Jong Hyun— ¡Gracias, ya vamos! ♥

✔✔

ERIKA

Jong Hyun odiaba a Dae Ki, ahora están juntos todos los días. El rumor del triángulo amoroso tiene sus bases solidificadas, con la diferencia de que mi lugar lo ocupa Han Kyu Bin. Voy a molestarlos con eso en cuanto tenga oportunidad.

Quedé a cargo del almuerzo, sin embargo, Jonghyunie lavará los platos mientras yo dormiré una increíble siesta. Espero que a todos les guste el Japchae, fue rápido de hacer y me encanta. 

Seoltang—Te extraño mucho, hermosa.

✔✔

Erika—También te extraño ☹

✔✔

Seoltang—Trataré de verte hoy, sino mañana. ¿Está bien?

✔✔

Erika—De acuerdo. Que tengas un buen día en el trabajo.

✔✔

—¡Menos mal que llegan! —expreso al oír que se quitan los zapatos en la entrada—. Tengo hambre.

—Perdón, es que compramos algo en el camino —Enseña una bolsa con el logo de Baskin Robbins.

—¡Aaah, Jonghyunie! —Me acerco emocionada—. ¿Compraste helado de chocolate?

—Sí, tu sabor favorito.

—¡Te acordaste! Te quiero —Beso su mejilla—. Gracias

La comida ha quedado buenísima. No es por alardear, pero mi madre me enseñó todo lo que sé, y soy una excelente alumna.

—Jeong, tú lavas los platos.

—Tú cocinas, yo lavo.

—Tienen todo bajo control —dice Kyu Bin—. Gracias por la comida, Erika.

—Cocinas muy bien —acota Dae—. Me has contado que tu madre te enseñó, pero nunca me invitaste a comer nada.

—Ya sabes por qué —Hago una seña hacia Jeong y reímos.

Salir con Dae era lo que menos podía hacer con Jong Hyun en modo intenso; no obstante, eso quedó en el pasado. Ahora son amigos, y puedo tenerlos a los dos en un ambiente pacífico.

Quiero que mamá conozca a Dae Ki. Lo amará.

Me cuentan que tuvieron reunión con el equipo de fútbol y por eso demoraron en venir. A veces el entrenador se vuelve muy exigente, pero no hay problema con Jeong, bajo presión se supera a sí mismo. El servicio militar cambió algunos hábitos y reforzó otros. Es estructurado en algunos aspectos, como la limpieza y el orden, aunque su personalidad sigue intacta. Tiene un corazón noble.

Hoy se acordó de comprar mi helado favorito, es un pequeño detalle que para mí vale un montón. ¿Querrá decirme algo? Quizás no encuentra el momento para hablarme sobre esa chica que lo trae tan nervioso.

Está pasando otra vez. Le gusta alguien y parece que va en serio.

JONG HYUN

Las manecillas del maldito reloj no avanzan. Quiero salir de aquí y encontrar algo cuestionable en Lim Seo Won. Deseo realmente que su relación con Erika finalice, aunque no quiero que ella resulte herida con todo esto.

—¿Creen que él tenga algo malo? —Indaga Kyu Bin a mi lado, se encuentra de copiloto.

—Claro que no —refuta Dae Ki.

—¡Tú qué sabes, Kim! —Me quejo—. Tal vez sí lo tiene.

—Aquí el único que tiene algo malo eres tú —Me señala—, la plasticidad neuronal, por ejemplo.

Lo ignoro, a fin de evitar la discusión. Necesito refuerzos, no enemigos.

Debo admitir que es el plan más estúpido que se me ha ocurrido. Nunca hice algo así, pero por Erika D'angelo haría lo que fuera, me lo he replanteado millones de veces. Su amistad, su sonrisa, su compañía... qué no haría por tener todo eso y conservarlo.

—¿Dónde está Min Wook? —pregunta Dae Ki.

—No sé, él tiene sus propios planes, no contesta mis mensajes—digo.

—Tranquilos, no tarda en llegar—dice Kyu Bin. 

La tranquilidad se encuentra lejos de mi persona en este momento. ¿Cómo podría sosegar la culpa y necedad? He negado tantas veces estos sentimientos que hasta he llegado a creer que podían desaparecer sin dejar rastros.

Nunca dejé de pensarla. Nunca dejé de quererla.

—Jong Hyun, ¿estás bien?

—Sí.

—No parece.

—¡Kim, cierra la boca! —Lo observo por el espejo retrovisor—. ¿Por qué sigues aquí?

—Porque Erika es mi amiga—sonríe—. No hay otra razón.

Kyu Bin carcajea, a él todo le causa gracia, más cuando se trata de peleas sin sentido.

—¿Te quieres morir, Dae Ki?

—¿Y perderme de algo interesante? No lo creo.

Estoy harto de esperar a que Wook aparezca. Se supone que no tarda en llegar, pero con él nunca se sabe. Voy a pegarle un reloj en la frente.

Un golpe en la ventanilla es suficiente para alertarme de su presencia. Sube al coche como si se tratara de un detective encubierto.

—Conocí a una chica llamada Lee Sook, vive en el piso de arriba de Seo Won—Es lo primero que dice—. Por cierto, es hermosa, me dio su número y saldremos mañana en la noche.

—¿Tan pronto?

—Cuando veo una chica linda no puedo esperar tanto. Además...

—¡Ya dime qué averiguaste! —Interrumpo su relato. 

—Él llega a su casa todos los días a las 9PM. Sook se lo encuentra a diario en el elevador. Dice que es un tipo muy serio pero simpático con los vecinos. Algunos piensan que es medio raro porque no tiene muchos amigos.

No me sorprende, su cara ceñuda arruina hasta el ambiente más festivo. Es un solitario.

—Antes vivía con su novia, pero después de romper la chica se fue del edificio.

—¿Hace cuánto fue eso?

—Un año más o menos.

Esta información no me sirve de nada, un año es mucho tiempo.

—¡Ahí está! —Alerta Kyu Bin.

Seo Won habla por teléfono. Sonríe con cara de estúpido enamorado, más de estúpido que de enamorado, pero ¿quién soy yo para juzgar sus facciones?

—Dae Ki, llama a D'angelo y ponla en altavoz

—¿Para qué?

—¡Para verificar que Seo Won está hablando con ella! ¿Tengo que explicarte todo?

Desde el asiento trasero lo escucho resoplar; no obstante, saca su móvil y busca el contacto de D'angelo tal como se lo pedí.

—¡Hola, Dae!

—Erika-yah... —titubea.

Me busca con la mirada, pero no pienso aportarle ideas para mantener la conversación. Si él no va a colaborar, entonces yo tampoco.

—Nos fuimos del departamento.

—Ya lo sé, estoy aquí —ríe.

—Sí, lo sé... ¡Tengo que colgar, después hablamos!

La llamada finaliza, el castaño queda con el celular en la mano. Definitivamente no sirve para improvisar una mentira, me recuerda a Kal Jun Ho, uno de mis grandes amigos en Busan. Cuando no puede engañar actúa de manera exacerbada, deja al descubierto que algo trama. Mi madre solía decir que "las personas honestas producen acciones honestas", con el tiempo lo entendí.

—Que gran improvisación, Dae Ki —Me burlo.

—¡Cállate! Pensé que me ayudarías.

—¿Tú me aportas ideas? —ironizo—. ¡No! Entonces no me pidas ideas a mí.

—¡Oigan! —Se entromete Kyu Bin—. Seo Won se va, ya dejó de hablar por teléfono.

—¿Ves? ¡Estábamos por perderlo!

—Ya les pasé mi reporte, me iré a casa. Ven, Dae Ki, te llevaré, estás alterando a Jong Hyun.

—Seo Won-ssi es una gran persona, no encontrarás nada malo en él—dice antes de bajar del auto. 

—Desaparece de mi vista, Kim. ¡Wook, llévatelo lejos!

Min Wook baja del coche para irse en su auto, por suerte se lleva al fastidioso del grupo. Su voz gruesa me recuerda a mi padre impartiendo orden. A pesar de los consejos, hago lo que quiero y por impulso.

Pongo en marcha el auto con un solo objetivo en mente, mas es decepcionante saber que el destino final es mi departamento. Seo Won va a visitar a D'angelo, otra vez. Al menos Dae Ki no se encuentra presente para fastidiarme.

Veo a Erika y me siento fatal. ¿Cómo es que nunca me di cuenta de que seguía enamorado de ella? ¿Por qué creí que con el pasar del tiempo o con frecuentar a otras mujeres eliminaría tanto recuerdos y sentimientos hacia mi mejor amiga?

Nos dimos un beso el mismo día que conoció a Lim Seo Won. Es ilógico. Mi pésima suerte se repite sin importar lo que haga.

Erika me gustaba en la adolescencia. Pensé que eso estaba superado y con el pasar de los años cambiaría. Nunca merecí a D'angelo, no sé qué me hace pensar que ahora podría ser distinto.

Tengo un nudo en la garganta acompañado de cargo de conciencia. No puedo obviarlo otra vez. No lo soporto más.

...

Hola, ¿me extrañaron? jaja

Primero que nada, quiero pedirles perdón por la demora en subir este capítulo. He tenido algunos inconvenientes de horarios y responsabilidades. De todas formas, es bastante largo (al menos desde mi punto de vista) 😅

Haré hasta lo imposible por publicar el 11 en esta semana.

Gracias por la paciencia y el amor a esta historia. 

JK 💜