Se acaba de ir mi primer semana junto a Maddie y comenzaba la segunda. Pensé que habia pasado más tiempo, pero es mejor saber que aún nos quedan dos semanas juntos. Nuestro adiós esta a dos semanas de aquí, y tenemos mucho para compartir. Espero que lo que sigue del año se pase rápido, aunque claro... cuanto más quieres algo, el tiempo no esta de tu lado. Se vuelve lento, y aburrido.

Esta noche, aprovechando que mañana miércoles no hay clases en el instituto, salimos a cenar con los padres de Maddie. Son unas personas agradables, y divertidas.
Siempre me trataron bien, jamas me sentí incomodo con ellos. Salvo el primer día en el que Maddie me presentó, recuerdo que el padre de Maddie disfrutaba de ponerme nervioso. Esa tarde se divirtió conmigo, hasta que finalmente me dijo "me agradas, Nolan" cuando yo creía que no lo hacia en absoluto.

Luego de la cena, nos dejaron a Maddie y a mi en el cine de la ciudad. Habíamos reservado para ver una pelicula de comedia romantica. Ya teniamos nuestras entradas en la mano, solo estabamos esperando a que nos dejaran entrar a la sala.

–¿Trajiste pañuelos? –le pregunto en tono burlón.

–No llorare –me río.

–Siempre dices lo mismo...

Maddie suspira y me vuelvo a reír.

–Oye, no es mi culpa que tú seas una piedra con estas peliculas –Maddie frunce el ceño pensativa, y luego sonrie relajando su rostro.

–¿Qué?

Me mira divertida.

–¿Seguro que tú nunca has llorado?

Maddie larga una fuerte carcajada haciendo que un grupo de chicas se giraran para ver. Mi mente tarda en entender el por que de su risa, hasta que lo comprendo. Se esta burlando de mi cuando llore viendo The vow.

–Cállate. Ella no lo recordaba, y eso era tan desesperante y triste –niego con la cabeza mientras ella se sigue riendo– ¿Ahora quién es la piedra?

Maddie deja de reír y se acerca para darme un beso en la mejilla. Le sonrío, me devuelve la sonrisa y nos damos un beso corto, pero agradable.

Nos seguimos riendo por otros recuerdos, en los cuales el más burlado era yo, por supuesto.

Ya podemos entrar a la sala, asi que nos colocamos en la fila de personas, esperando nuestro turno para darles las entradas al chico que controla.

Entramos a la sala y nos ubicamos en nuestros respectivos lugares. Cuando nos logramos ubicar, me dirijo al puesto de palomitas y compro un combo para los dos.

Le pago por el combo al chico que me lo entregó, y siento como mi celular comienza a vibrar en el bolsillo de mi pantalón. Por un momento pienso que es Maddie para decirme que la película ya esta por comenzar, pero cuando miro la pantalla, veo que es Zoey quien llama.

Frunzo el ceño porque me resulta extraño el que me este llamando. Asi que atiendo con miedo de que me diga algo malo.

–¿Zoey?

–¡Nolan! –es Jude.

–¿Jude? ¿Qué ocurre? –escucho una fuerte música de fondo– ¿Zoey esta bien?

–Si... bueno, no –frunzo el ceño– Tienes que venir.

–¿A dónde? ¿Qué demonios ocurrio? ¿Dónde esta Zoey?

–Ella esta aquí, sin noción alguna –vuelvo a fruncir el ceño– Vinimos a la fiesta de un amigo, y... Zoey se paso con la bebida.

–¿Qué quieres decir con eso?

–Esta ebria, totalmente ebria.

–Oh, eso ya lo entendi. Lo que no entiendo es por que no la cuidaste.

–Ya, ya... fue solo un momento de descuido, dejemos el sermón para despues. Tienes que venir, Zoey no puede llegar a su casa asi.

Eso es cierto. Chloe y Hunter pegarian el grito en el cielo. Ademas eso no ayudaria a la buena impresion que dejo Jude, no ayudaria a que Hunter confiara en él.

–Jude, estoy con Maddie ¿no puede quedarse en tu casa hasta que se le pase?

–Pues... no –vuelvo a fruncir el ceño– Zoey mintio en su casa, dijo que iria a dormir a la casa de Ruth.

Ahora me siento mucho más molesto que antes. Zoey volvio a mentirles a Hunter y Chloe, eso no significa nada bueno ¡Que este ebria no es nada bueno!

–Okey, ire –suspiro pensando en lo molesta que estara Maddie– Pasame la direccion por mensaje.

–¡Gracias, Nolan!

–¿Nolan? –escucho a Zoey preguntar de fondo antes de que Jude me colgara.

Entre la molestia y el enojo que siento, dejo las palomitas y las bebidas en el estante de la dulceria. Me dirijo a la sala 5 y justo cuando estoy por entrar, sale Maddie.

–La película esta por comenzar y... –frunce levemente el ceño– ¿Qué ocurre?

–Zoey –suspiro y me agarro la cabeza con las manos.

–¿Qué pasó con ella, Nolan? –no le contesto– Me estas asustando...

–Nada grave... –la miro– Bueno, no del todo. Esta en una fiesta, totalmente alcoholizada y no puede llegar a casa asi. Chloe y Hunter creen que esta con Ruth.

Maddie niega con la cabeza, seguramente pensando lo mismo que yo.

–¿Sábes dónde es esa fiesta? –me pregunta y asiento. Jude ya me habia enviado el mensaje con la direccion– ¡Vamos!

Me agarra del brazo y me arrastra hacia la salida del cine.

–Espera, ¿no estas molesta?

Maddie niega con la cabeza.

–No, esta bien. Podemos volver en la semana –me mira y me sonrie para asegurarme que no esta molesta.

Agradezco que no lo este, si Maddie se hubiese molestado, todo seria más complicado.

Pedimos un taxi y le indicamos la direccion en la cual se encuentra la fiesta, el taxista nos advierte que esa zona no es muy agradable y eso me preocupa más. Llegamos al lugar y puedo ver el por que no es agradable. Es ese lugar que al verlo dices "¡Ni de broma entro ahi!"

Pero Zoey lo hizo. Le pido a Maddie que se quede en el taxi mientras busco a Zoey, y acepta sin queja alguna.

Cuanto más me adentro al lugar de la fiesta, menos me gusta. Hay personas de la edad de Jude, no hay ningun adolescente alrededor. Personas tatuadas, bebiendo o fumando marihuana. Personas que me miran como carnada. Es un vecindario apartado de todo, oscuro, frio y peligroso. Un lugar al que ni la policia entraria para decir "Chicos, es dia de semana, bajen el volumen a la musica" o tal vez, ningun vecino cercano se atreve a llamar. Si, asi de feo.

–¡Nolan! –Jude se acerca a mi apartando a las personas que se cruzaban en su camino.

–¿Dónde esta ella? –le pregunto, y Jude me arrastra hacia el interior de una casa donde la musica era aun más fuerte y pesada.

Jude me lleva hasta una habitacion, en la cual Zoey esta acostada en la cama, ahogada de borracha. Espero que su cuerpo solo haya ingerido alcohol.

Miro a Jude de mala manera, y él suspira.

–Lo sé, es mi culpa por descuidarla.

–O por traerla a un lugar asi por empezar.

–Ella insistió en venir, Nolan.

–¿Y tú le haces caso? ¿Luego la dejas sola y la encuentras en este estado? ¡Demonios, Jude! –me acerco a Zoey, y cuando toco su brazo lo noto frio, inmediatamente me quito mi chaqueta y la envuelvo. Zoey abre los ojos y me sonrie– Dime que solo ha consumido alcohol –cierro los ojos esperando el impacto de la respuesta.

–Eso me han dicho.

–¿Eso te han dicho? –niego con la cabeza.

–Hola Nolan –me saluda Zoey arrastrando sus palabras.

–Zoey, nos vamos.

–¿Ya? ¿Ya termino la fiesta?

–Sí.

Intento levantarla, pero su cuerpo se hace más pesado, asi que Jude me ayuda a cargarla.

–No me mientas, aún escucho la musica.

Zoey le sonrie a Jude, y este no es capaz de mirarla a los ojos por la culpa.

–Dije que nos vamos, Zoey.

Jude me ayuda a llevar a Zoey hasta el taxi. El rostro de Maddie se transforma cuando la ve en tal estado, pasa de preocupacion a enojo hacia Jude. El chofer del taxi solo niega con la cabeza mientras dice "jovenes"

Logramos que Zoey se suba al asiento trasero, y Maddie sostiene a una Zoey somnolienta.

–Jude... –digo entre dientes.

–Si, lo sé.

–No, no lo sabes –niego con la cabeza– Que esto no se vuelva a repetir.

Jude asiente y luego sonrie.

–Suenas como un padre.

–Creeme que Hunter no sonaria así en absoluto –Jude deja de sonreir y asiente– No arruines la buena impresión que has obtenido.

Jude vuelve a asentir.

–Lo siento –me mira a los ojos y asiento– Llámame por si acaso –vuelvo a asentir, y Jude mete su mano derecha en el bolsillo– Ten, el viaje a casa sera más costoso desde aqui –me tiende dinero, y se lo acepto sin reproche. Lo mínimo que puede hacer ahora es esto.

Me subo al taxi, y nos dirijimos a la casa de Maddie. Le dije que podia quedarse en casa a dormir, pero quiso ir a su casa. Le pregunte si estaba molesta, y nuevamente sonriendo me dijo que no, que hablariamos mañana, y que cuide a Zoey.

En cuanto llegamos a mi casa, le pago al taxista dejandole propina y se ofrece ayudarme a sacar a Zoey del auto.

Con pasos pesados y lentos me dirijo hasta la puerta principal, desde afuera puedo ver que la luz de la sala esta encendida. Al tener mis manos ocupadas cargando a Zoey, golpeo la puerta con mi pie derecho. Paul es quien me recibe, y al ver a Zoey me ayuda a cargarla hasta el sofa de la sala en donde estaba Nathalie junto a Hope.

–¿Qué demonios pasó? –pregunta Paul viendo a Zoey.

Paso a contarles lo que pasó desde la llamada de Jude. Tanto Paul como Nathalie niegan con la cabeza viendo a Zoey.

–Te dije que no era un chico del cual confiar –dice Paul.

–Fue solo un descuido...

–¡Y mira como la dejo!

Zoey frunce el ceño ante el grito de Paul, y le pide que se calle.

–¿Has hablado con él? –me pregunta Nathalie.

–Si... y fue un estúpido descuido.

–Hunter lo matará –agrega Paul y Nathalie lo mira.

–Cubriremos a Zoey en esta –ambos la miramos– Sólo esta vez, y espero que no haya próxima. Zoey esta realmente ilusionada con este chico, y sabemos que si Hunter se entera de esto, lo querrá lejos. Jude puede reparar esto, no se volverá a repetir.

Asiento dandole la razón. Fue solo un desliz, un estúpido descuido, pero tiene solución. Jude tiene que cuidarla de forma correcta o no podra estar con Zoey, y eso la destruirá.

Si realmente la quiere como dice, la cuidará.

–Papá, Zoey tiene frío –dice Hope y vemos como Zoey intenta cubrirse del frío que siente su cuerpo.

–Paul, ayudame a llevarla a mi habitación.

–¿Por favor, papá? –se cruza de brazos.

–No es momento, Paul.

–¡Siempre es momento para que me llames papá!

Me rio de su grito, y Zoey vuelve a quejarse.

Paul me ayuda a llevar a Zoey hasta mi habitacion, y la recostamos en la cama. Le quito sus zapatillas y la arropo para que se le pase el frio.

–Yo lo hubiese matado –dice Paul cuando termino de acomodar a Zoey– Fuiste demasiado bueno con él.

–Si, bueno... espero que no se repita.

Paul asiente y me ve armarme una cama en el suelo.

–¿Dormirás bien aquí?

–Si, papá.

La reacción de Paul me hace reir. Como si fuera una adolescente a la que le dicen que tiene una cena con su artista favorito.

–Se que me llamas Paul solo para molestarme –intenta actuar como hombre otra vez– Pero que me digas papá me recuerda siempre a la primera vez que me llamaste asi.

–¿Vas a llorar?

Corto el momento, y me rio. Paul me mira de mala manera y me vuelvo a reir.

–Buenas noches, Nolan.

–Buenas noches, Paul.

Me arroja un cojín a mi intento de cama y me rio. Paul sale de mi habitacion y observo como Zoey duerme de forma pesada, y tranquila.

Mañana tendremos una seria conversación, y no me importara sus dolores de cabeza por la resaca.

Al otro día, como era de esperarse, la resaca de Zoey la ponia de mal humor. Pero aun asi tengo que hablar con ella, esto no es algo para pasar en alto. Debe cuidarse, y debe hablar con Jude si realmente quiere estar con él. Ambos lo haran por su relación ¿no?

–Nolan, ahora no –me dice mientras bebe el té que le hizo Nathalie.

–Si, ahora si –ella suspira– ¿Qué se te cruzo por la cabeza, Zoey?

–Solo quise divertirme.

–Pues mira a donde te llevo tu diversión.

–Dios, Nolan. Fue solo un par de copas, una borrachera.

–Zoey, les mentiste a tus padres.

Ella rueda los ojos.

–A veces olvido que hablo con el hijo perfecto.

La miro de mala manera y niego con la cabeza.

–No soy perfecto, yo tambien les he mentido. Pero... ya sabemos a donde te llevaron las mentiras una vez, Zoey –me mira– No quiero eso otra vez. No solo has mentido, sino que tambien te embriagaste y tuve que correr hacia tí porque Hunter y Chloe creian que estabas con Ruth –suspiro– ¿Y si yo no podía ir a buscarte? –Zoey suspira– No quiero que me tomes por aburrido, aunque tal vez lo sea. No quiero que me digas que soy perfecto, cuando no es asi. No quiero que ruedes los ojos cuando solo intento cuidarte. Puedo sonar como un viejo aburrido más que un adolescente, pero solo te cuido Zoey. No quiero que hagas esto, me da miedo pensar en que puedes terminar mal –ella asiente– Si quieres a Jude, no querras perderlo. Y sabes que si Hunter sabe de esto, no te dejará volver a verlo. Dudo que quieras eso ¿verdad? –ella vuelve a asentir– Bien, entonces que no se repita esto. No hagas que lo quieran lejos de tí, y que él no haga eso tampoco.

Zoey gira la taza del té y se ríe. Le frunzo el ceño y se vuelve a reir para luego agarrarse la cabeza por el dolor que siente.

–No me río de tí –me aclara– Solo recorde cuando me regañabas de niña.

Ella vuelve a reír, y sonrío.

–Siempre te decía que no hagas una maldad, y aún así la hacías.

–Y me abrazabas cuando mis papás me retaban.

–Y te decía te lo dije.

–Yo te odiaba por eso.

–Me sigues odiando por eso –Zoey me mira y sonrio– Te lo dije.

Ambos nos reímos, y volvemos a recordar momentos de cuando eramos niños.
Momentos en los cuales Zoey me manipulaba para que la siguiera en sus travesuras, para luego ser regañado.

Momentos en los cuales jugábamos en su casita del árbol, jugabamos a ser Peter Pan y Wendy. Nuestro juego favorito, y creo que sólo en ese momento no nos encontrabamos haciendo una maldad, donde la mente maestra siempre fue Zoey.

Fue lindo recordar nuestra infancia juntos, tengo tantos recuerdos con Zoey. Desde las risas, hasta los enojos.

Mientras la veo reir, pienso en lo sucedido anoche, y espero que no vuelva a suceder.

Jude tiene que cuidarla, o no podrá estar con Zoey.