Hola, no se como reaccionaras ante mi mensaje, realmente espero no molestar o causar un malestar. Han pasado meses que no se de ti, ni tu de mi. Meses donde pude conectarme conmigo misma, y espero que tu lo hayas hecho igual.

Estaré en la ciudad por este fin de semana en motivo de visitar a unos tios, y me gustaria verte. Me gustaria saber de ti, saber como estas, como estan todos, que ha sido de ti estos últimos meses.

Siento que no le dimos un buen cierre a nuestra relación, y me encantaria hacerlo. He vivido una linda etapa contigo, y me gustaria que si final sea sano, y también lindo por lo que fuimos.

Si crees que ya no es adecuado, o que lo mejor es no hacerlo... lo entenderé, en serio. Pero espero que aceptes mi propuesta, no pretendo nada, solo quiero verte y desearte lo mejor mirandote a los ojos.

Espero tu respuesta.

Maddie  

Leo el mail de Maddie y sonrío. Su mensaje no me molesto, y mucho menos me causo un malestar. Al contrario, me puso realmente contento recibir un mensaje de ella. Sigue siendo alguien importante y especial para mi, fue parte de mi vida, me dio lo mejor de su mundo, y fui feliz. No puedo reaccionar de otra manera cuando me encuentro con esto, en verdad quiero saber de ella, como está, como estuvo, que fue de ella estos últimos meses. Y realmente me gustaría finalizar nuestra historia con un gran abrazo y un te deseo lo mejor, ya que nuestro adiós no fue para nada lindo.

Se perfectamente lo que siento por Zoey, lo que es hoy, y tambien se quien fue Maddie. Para comenzar a escribir una nueva historia de forma correcta, debo finalizar este capítulo.

Cojo mi celular, y le escribo a Maddie. Le digo que quiero verla, que me gustaría saber de ella y terminar de buena manera. A los pocos minutos me responde, me dice agradece por mi respuesta y acordamos un punto de encuentro.

Estoy listo para ver a la protagonista de mi pasado, listo para abrazarla, listo para desearle lo mejor mirándola a los ojos.

Llego al lugar de encuentro con Maddie, una de las tantas cafeterías de aquí, una de sus favoritas, lugar donde fue nuestra primer cita. Buen lugar para dar cierre a lo que fuimos.

Ella aun no llego, asi que me ubico en un lugar donde al llegar me encuentre fácilmente. La camarera se acerca para tomar mi pedido, pero le digo que estoy esperando a alguien, y tras una sonrisa cansada, me deja esperando.

Mi celular vibra con la llegada de dos mensajes. Uno de ellos es de Maddie, me dice que se retraso un poco pero que está en camino, el otro mensaje es de Zoey. No le dije que venía a verme con Maddie, y se que ese es un gran error. A decir verdad, nadie sabe que vine a verla, nadie sabe que se encuentra en la ciudad. Creo que solo lo sabe Bianca. Pero el hecho de que no lo sepa Zoey es un gran problema. No quise que ahogue su mente con escenas que no van a pasar, se que esa no es una excusa ni razón para no haberle dicho. Ni bien termine de ver a Maddie iré a verla, le contare y manejare la situación lo mejor que pueda.

Le digo a Zoey que estoy haciendo algo, que al terminar pasare por su casa, me pregunta qué estoy haciendo, pero no le contesto. Me va a matar, lo se.

La campanilla de la puerta suena, y trae con ella la presencia de Maddie. No cambió en nada, solo esta luciendo un nuevo corte de cabello.

Recorre el lugar buscandome, y cuando me encuentra, me sonríe. Con esa sonrisa se que esta bien, que está todo bien, y eso es más que suficiente.

Me pongo de pie para recibirla, y cuando está frente a mi, ninguno sabe cómo saludar al otro. Maddie se ríe nerviosa, y yo también.

–Hola –dice.

–Hola –le digo sonriendo, y como saludo nos estrechamos la mano. Nos reímos de nosotros mismos, y nos sentamos. La cansada camarera vuelve a la mesa, y apunta nuestro pedidos.

Cuando se retira, nos inunda el silencio. Ninguno sabe que hacer, o decir. Siento que volvimos a nuestra primer cita, solo que esta vez hay tanto por decir y no será para un comienzo.

–Te ves bien –rompo el silencio– Me gusta verte así.

Asiente sonriendo.

–Estoy bien –me observa– Yo tambien te veo bien.

–Lo estoy –sonríe– ¿Como te trata tu nuevo lugar?

–Ya deje de ser un bicho raro –se ríe– Me costó adaptarme y hacer sociales, pero fue solo un momento. Ahora me siento cómoda, y encontré nuevas amistades.

–Eso es genial, Mad. Eres buena en escoger buenas amistades.

Asiente y suspira.

–¿Y por aqui como va todo? ¿Ronny sigue igual de loco?

Me rio.

–Ronny es un tipo que nunca va a cambiar, siento que sera como Paul.

Se ríe conmigo.

–¿Y como esta ese niño siendo hombre? ¿Como estan Nathalie y Hope?

–Por suerte están todos bien –sonrio– Aunque viendo como está creciendo Hope... en cualquier momento tendré que salir armado a la calle.

Se vuelve a reír.

–Vas a tener muchos dolores de cabeza, es hermosa tu hermana.

Asiento dándole la razón, y la camarera interrumpe nuestro momento para entregar nuestros pedidos. Nuevamente el silencio vuelve a rodearnos, solo escuchamos las voces de las personas a nuestro alrededor, los ruidos de la cocina, y la tranquila música que se escucha por los parlantes.

–¿Y Zoey? –me pregunta y la miro– Estaré bien con la respuesta, Nolan. Supe algo de ustedes... ya sabes, Bianca –se encoge de hombros y sonríe– Quise hablarte cuando supe todo lo que paso con ella, pero no quise molestar. Supongo que la habras acompañado en su momento, y no quise interrumpir eso ¿está mejor?

–Por suerte lo está... costó, pero está saliendo adelante. Tiene sus momentos, pero son solo eso, momentos.

Asiente, bebe un sorbo de su malteada y sonríe.

–Tenerte a su lado ha de ser un gran apoyo. Te veo realmente bien, y eso me gusta. Si es Zoey la razón, que es lo mas seguro, quiero que cuides lo que tienen, que lo cuides como solo tu sabes. Serán felices, está escrito sin que lo noten. Cuida de tu felicidad, y no habrá de qué preocuparse.

Observo a Maddie, y me siento bien. Sus ojos son sinceros, sus ojos en verdad me están deseando lo mejor. Me está observando sin rencor, sin miedo, sin nada negativo. Me está observando con respeto, con cariño, y con felicidad. Está feliz por mi, esta feliz por ella, está simplemente feliz y eso es todo lo que necesito para seguir con mi vida. Saber que Maddie está bien, me hace bien.

–Dime que alguien descubrió ya lo increible que eres –se ríe y se sonroja– Alguien te descubrió –sonrío.

–Hay alguien, pero no pasa nada. Evito cada uno de sus acercamientos, y sigue insistiendo. Y a su manera, sin molestar y respetando mis tiempos, me acompaña.

–Mereces ser feliz, Mad –me sonríe– En serio lo digo.

–Lo se.

–Si ese chico te hace bien, no evites sus acercamientos. No tengas miedo de ser feliz.

–Bueno, comparten ese pensamiento.

–Ya me cae bien –se ríe– Si te lo dice, por algo es. Se feliz, disfruta de cada momento sin miedo al qué pasará.

–Lo mismo digo para ti. No pienses en el mañana, disfruta el hoy, se feliz por eso y pase lo que pase, siempre conseguirás la forma de levantarte.

Sonrío y la observo. Este si es un final digno para nuestra historia, para nosotros. Ambos nos estamos observando con sinceridad, con bondad, y felicidad. Después de su última mirada, hace unos meses atras, esta la reemplaza por completo. Este es el recuerdo que voy a tener de ella, observarla y ser feliz con y por ella.

El resto de esa tarde, nos basamos en ponernos al día sobre el otro. Me rio de sus anécdotas, y ella se ríe de mis locuras con Ronny. Hablamos sobre qué vamos a hacer al finalizar el instituto, hablamos con paz, con felicidad, con todas las buenas sensaciones.

–Desearía quedarme, pero debo ir a ver a Bianca, sino me matara.

–Y no quiero que lo haga, se como es cuando se pone violenta –se ríe.

–Fue lindo verte, Nolan.

–Lo mismo digo, Mad.

Dejamos el dinero correspondiente de nuestros pedidos, junto a una propina para la camarera. Salimos de la confitería, y al observarnos, sonreímos.

–Quiero que sigas conservando esa sonrisa –le digo– Me hace bien verte asi, saber que estás bien.

–Y es bueno para mi no sentir rencor, y poder ser feliz por tu ahora.

Nos regalamos una sonrisa sincera, y nuevamente no sabemos como saludarnos como despedida.

–Ven aquí de una vez –le digo y cuando la abrazo se ríe. Nos abrazamos durante largos segundos. Segundos que voy a conservar y recordar como el mejor adiós.

Cuando nos separamos, los ojos de Maddie se encuentran repletos de lágrimas. Sus lágrimas indican felicidad, y a la vez cierta tristeza por este adios, pero mas que nada hay felicidad.

–Si necesitas una amiga, sabes que estoy.

–Demás está decir que yo también estoy. No sientas jamás que vas a molestar, o algo asi.

–Te quiero, Nolan.

–Y yo te quiero a ti, Mad.

Nos volvemos a abrazar, y este abrazo es mucho más duradero. Nos despedimos del otro, nos despedimos con un adiós con un poco de aroma de hasta luego. Nos deseamos lo mejor una vez más, y nos damos la espalda. Ella va en su dirección, y yo voy en la mía. Ambos caminamos seguros, felices y con ganas de continuar con nuestra vida.

Fue un adiós como nuestra historia lo merecía.

Detengo mi caminata para escribirle a Zoey, le digo que estoy yendo a su casa y me responde con un cortante okey. Ahora se viene el momento donde Zoey se enoja conmigo.

–Estas molesta –le digo una vez que nos encontramos en su habitación.

–No quiero preguntarte qué estabas haciendo, o dónde estabas, porque no quiero que me mientas.

–No voy a mentirte, Zo.

–Si, bueno... no me dijiste que Maddie vendría a la ciudad por este fin de semana –me observa– Me enteré por Ronny. Al parecer Bianca le contó, y Ronny no sabe cerrar la boca.

–Zo...

–¿Por qué no me lo dijiste? No te hubiera dicho nada, pero ahora estoy enojada.

–Y tienes todos los motivos para estarlo.

–Cuando supe que estabas con ella... me sentí enferma. Y no de celos, si es lo que piensas. Solo... no se –suspira.

–Fue una despedida, nada más que eso –asiente– No paso nada, Zoey.

–Lo se. Es decir... te creo.

–¿Entonces?

Se encoge de hombros.

–Cosa de chicas.

–Pues me gustaria saber, quiero entenderte, quiero cambiar ese pensamiento horrible que de seguro está cruzando tu mente –me observa– Te conozco, y sé que algo así estás pensando.

–Solo tuve miedo, Nolan. Tuve miedo de que al verla, ibas a volver a sentir algo por ella. Miedo de que al estar con ella, te des cuenta de que yo no soy así... de que soy mucho menos que Maddie, y que me dejes. Tuve el estúpido miedo de que ibas a dudar de mi, de nosotros, y que me dejes. Se que Maddie es mucho mej...

–¿Te puedes callar? –la interrumpo– No quiero que sigas hablando. Si vas a hablar solo para agredirte, quiero que te calles y me escuches –quiere decir algo, pero la interrumpo– No, tu no puedes interrumpirme, no vas a interrumpirme. Me vas a escuchar y hasta que no termine de hablar, no vas a decir nada. Y si para cuando termino de hablar, aun sientes ganas de agredirte, puedo callarte a besos, porque no voy a permitir que hables de ti de esa forma ¿entendido? –asiente y baja la mirada, así que me encargo de levantar su cabeza y hacer que me mire. Sus ojos están repletos de lágrimas, y sonrío negando con la cabeza– Ustedes las chicas deberían de dejar de querer compararse con alguien más, porque cada una, a su manera es especial. Tú a tu manera lo eres, Zo. No quiero que creas que hay alguien mejor que tu, porque eso es algo que nos pasa a todos. Siempre hay alguien mejor que nosotros, es así, es la realidad, es la vida. Pero tu... –le doy un breve beso en los labios y seco sus lagrimas– Tu eres lo mejor de mi mundo, y eso tiene que ser suficiente para ti. No hay nadie mejor que tu en mi mundo. Bueno... digamos que eres mi mundo, y es el mejor lugar al que quiero pertenecer –sonrío y ella llora sonriendo– ¿Cómo voy a dudar de ti si es así, Zo? ¿Cómo voy a dudar de nosotros si soy tan feliz a tu lado? Quiero que dejes de sentir miedo, quiero que seas feliz junto a mi. Quiero que dejes de compararte, quiero que te sientas mi mundo, porque como dije eso es lo que eres. Eres mi nuevo comienzo, y quiero que seas mi mejor final. Si la vida no me deja ser tu final... quiero ser una etapa que al recordarla sonrías. Te amo, Wendy. Quiero amarte todos los días de mi vida.

–Y yo a ti... –me mira a los ojos y seco sus ultimas lagrimas– Quiero que le sigas perteneciendo a mi persona, quiero seguir siendo tu mundo, quiero que sigas siendo el mío. No quiero pensar en un posible adiós entre nosotros, porque eres el mejor hola que he tenido en mi vida, y no quiero despedirme de eso, Nolan. Quiero que esto sea algo de un para siempre. Soy feliz contigo, me siento bien, puedo ser yo y tú siempre lo vas a recibir bien, pase lo que pase. Quiero un tu y yo eterno.

Y para sellar sus palabras me besa. Su beso indica seguridad, felicidad y amor. Sello sus hermosas palabras con este increíble beso.

Siento que esta es la forma de decirme te amo sin decirlo. No hace falta que lo diga cuando mis oídos escucharon eso viniendo de ella, esa es la mejor forma de decirme Te amo, Nolan. Se que sere el chico mas feliz del maldito mundo cuando me lo diga. Soy el chico mas feliz sin que me lo haya dicho, aunque detrás de sus palabras... se esconde un te amo.

Te amo también, Zoey.

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Por mas que me pese decirlo... el proximo capitulo es el capitulo final, luego viene el epilogo. Si, me toca despedirme de ellos, pero es un adios con aroma Hasta luego, porque se que siempre puedo vovler a ellos. A donde comenzo todo...
Se que el capitulo fue corto, pero era todo lo que queria meter en esta parte. Se viene lo mejor en el final, y en el epilogo. Lo prometo. Espero que lo amen como yo.

Me voy a poner mas sentimental en los agradecimientos jajaja.
Que lo disfruten!