No quise hablar con Zoey desde esa tarde, aunque a decir verdad, ella tampoco se acercó a mi. Solo siguió ignorándome, evitandome, siendo la misma de estos últimos días. Podría haberme acercado, pero no quise. Los días pasan y mi enojo crece, de la misma manera en que crece mi amor. Podría hasta reirme de mi mismo.

Ronny me dijo que no me sienta molesto con ella, me dijo que Zoey solo tiene a Jude, o eso es lo que ella cree y le va a contar todo a él. Según Ronny, Zoey no hablo por maldad, solo que necesitaba de alguien que la escuche, y solo tenia a Jude. Puedo entenderlo, pero aun entendiéndolo me siento molesto.

Quizá esté exagerando al decir que me siento traicionado, pero es la verdad, así me siento. Le entregue una parte preciada de mi, más allá de su rechazo, y ella simplemente lo divulgó. Me costó tomar valor de decírselo, sabiendo su posible respuesta y ella solo se lo contó al estúpido de su novio, quien por cierto se debe seguir riendo de mi.

Ojala pudiera decir que me tiene sin cuidado que Jude se ria de mi, que no me importa, que me da igual, pero no es así en absoluto ¡vamos! Estamos hablando de que el chico que está con la persona que amo se burla de lo que siento por ella ¿como diablos puedo sentirme al respecto? Simplemente fatal, porque sé que él sabe que me gustaría ocupar su lugar y también sabe que tengo todas las de perder. Me dijeron que el valor que yo le daría a Zoey, Jude no se lo está dando, dicen que no la está cuidando como yo lo haría. Bien, pero ¿de qué sirve que el resto lo sepa y ella no? Para ella solo es él, yo solo soy su pobre mejor amigo enamorado. Pobre Nolan.

En estos días de enojo, y tristeza, me encerré en mi mundo. Se que es mejor enfrentar las cosas que se te presentan en compañía, pero no siempre es así. A veces simplemente tienes que enfrentarte a tu dolor solo, porque solo tú sabes cómo te sientes, sólo tú sabes lo mucho que te cuesta seguir. Podrías recibir un abrazo, un consejo, un "te entiendo" pero no, nadie te entiende a la perfección. El abrazo solo calma un breve momento, y seamos sinceros, son muy pocas veces las que seguimos el consejo de los demás.

Uno de los consejos que estuve recibiendo fue que me olvide de Zoey, que la deje poco a poco atrás, porque solo voy a conseguir lastimarme mas aun. No quiero olvidarme de ella, aun asi, si quisiera ¿podría? ¡Claro que no! Duele como la mierda amarla, sentir lo que siento, pero es un dolor que merezco por haberme callado por tanto tiempo, por haber hecho feliz a alguien a base de mentiras. Duele amarla, pero mas me duele la idea de olvidarla.

Me encerré en mi mundo, en mi mismo, me atormento de todo lo que siento... solo. Aunque trato de no pasarme mucho tiempo encerrado en mi habitación para no preocupar a Paul y Nathalie. Lo que menos necesitan es preocuparse por mi, tienen ya demasiado con sus trabajos.

Es la tercera vez que me encuentro leyendo a James Dashner y su cruel es bueno. Hay personas que no leen una vez más el libro una vez que lo terminan, pero a mi me gusta volver a esos lugares que me quitaron las noches de sueño, o me tuvieron por dias soñando con lo que sucede en la historia.

Unos golpes en la puerta de mi habitación, interrumpen justo el momento en donde muere mi personaje favorito.

–¿Si? –digo sin dejar de leer.

Paul entra a mi habitación y cierro el libro.

–Voy a arrojarte ese libro a la basura –dice.

–Déjame ser un adolescente aburrido en paz.

Se ríe y mira el desorden de mi habitación con el ceño fruncido.

–¿Tu madre subió aquí? –pregunta y le niego con la cabeza– Bueno, supongo que eso es bueno para todos –se ríe– Saldremos a cenar con Hunter y Chloe ¿vienes? Luego creo que vamos al cine –suspiro– Zoey no va, se quedará en casa.

–Aun así no tengo animos de ir.

Abro el libro y finjo seguir leyendo, solo para evitar los consejos de Paul.

–Nolan...

–Papá no quiero ir –lo interrumpo.

–Dylan quiere verte –me encojo de hombros y Paul suspira. Cierro el libro nuevamente y me siento en la cama– ¿Qué carajo con este estado cabron tuyo? –otra vez me encojo de hombros– ¿Te diste cuenta de como le contestaste a Hope ayer?

–Dios, Paul...

–Ahí está de nuevo, estas malditamente cabreado y no se porqué, pero nosotros no tenemos la culpa ¿sabes? –niega con la cabeza– La próxima vez que trates asi a tu hermana, te quedaras sin pelotas.

–Los hermanos cada tanto se pelean.

–¡La trataste pésimo, Nolan! No descargues tu enojo en nosotros... –suspiro– Zoey se está comportando de esta manera porque está enojada con todos, esta malditamente cegada por el enojo y no se da cuenta de todos los que sufren por ello. No dejes que el enojo te consuma a ti también.

–¿Terminaste? –agarro mi libro y sigo leyendo.

–Estoy a nada de patearte el culo, Nolan. Pero teniendo en cuenta que es la primera vez que me hablas asi, lo dejare pasar –lo miro– No hay segunda.

–De acuerdo ¿puedo seguir leyendo?

Paul suspira pesadamente y sale de mi habitación.

–¡Cariño, llama a Chloe para decirle que pasamos por ellos. Nolan no va!

Escucho a Nathalie preguntar por qué, escucho cómo hablan de mí, como preparan sus cosas, hasta que finalmente los escucho despedirse.

Silencio, y soledad. Eso es todo lo que tengo ahora. Y creo que aprecio un poco el silencio.

Bajo a la sala y se enciendo la televisión, recorro todos los canales, hasta que finalmente encuentro una de mis películas favoritas a punto de comenzar. Me acomodo en el sofá y disfruto de la historia, de la acción, de los personajes y me olvido de todo.

Aunque el sonido desesperado del timbre, me trajo nuevamente a la realidad ¿quien mierda llama de esa forma?

–¡Ya va, maldición! –digo mientras camino hacia allí. Cuando la abro, veo a Zoey, llorando, con ojos desesperados. Me aterra que no se me mueva un pelo por ello– ¿Qué quieres? –le digo de mala manera.

–Te necesito –me dice con voz quebrada y me rio.

–¿Que me necesitas?

–Nolan, no me hagas esto ahora...

Dicho esto me empuja y entra a la casa.

–Si, puedes pasar.

–¡No actues asi conmigo! –llora.

–Ya no se como quieres que actúe contigo.

–Dije que te necesito... –se lleva ambas manos a la cabeza– Por favor, Nolan... por fav... Jude, no encuentro a Jude. Nadie sabe dónde está, nadie lo vio. Tengo miedo, estoy aterrada... no se que hacer, estoy sola –habla de forma costosa y su estado no provoca nada en mi. Las palabras de Paul aparecen en mi mente "no dejes que el enojo te consuma" ... tarde.

–¿Y?

Me mira y sus ojos se llenan mas de lágrimas.

–Fui tan estúpida... –se tapa la boca con ambas manos– Se que fui una estupida. Creo que todos tenían razón... –niega con la cabeza, llorando, abrazándose a ella misma– Lo siento por todo, Nolan. Realmente lo siento... no me dejes sola ahora.

–Tú nos dejaste solos a todos.

–¡Lo se, no me lo recuerdes, dije que fui una estupida!

–Eso no arregla nada.

–¡También se que nada va a ser igual! Nada... –las lagrimas ahogan su voz– No me lo recuerdes, no ahora. Tengo miedo... por favor, escuchame. Necesito ayuda...

–¿Con qué?

Me encuentro relajado, como si nada me importara, y una parte de mi se enoja por eso.

–E... estoy embarazada –se tapa la boca llorando– Jude no aparece, no me atiende los llamados, nadie lo vio, nadie sabe nada de él. Me dejo sola y... –niega con la cabeza– Hoy me llegaron fotos mias desnudas –frunzo el ceño– Casi las ve mi papá, Nolan... –me pregunto de donde saca tantas lágrimas– ¡Las fotos dicen cosas horribles de mi! No se que hacer... estoy desesperada, asustada, me siento usada. Soy una estupida, confíe en él y... y... –me mira y me encuentro de brazos cruzados– Por favor, Nolan... te necesito. Tenias razon en todo, todos tenían razón... no se quien es Jude, no se por qué me hizo esto, o donde esta... me dejo sola. Estoy sola... –mira el suelo– Me merezco estar sola, pero tengo miedo... por favor.

–Ya no tienes cinco años ¿recuerdas? –me mira y me niega con la cabeza. Pidiendo que por favor pare. Estoy cabreado, enojado con ella ¡quiero abrazarla, ayudarla, pero mi maldito orgullo no me está dejando!– Todo este tiempo necesitamos de ti, y tu simplemente no estabas ¿por qué debería de estar para ti?

–Porque siempre fue así... –susurra– ¡Ya reconocí mi error, no me hagas esto!

–Tu te hiciste esto sola.

Los segundos en silencio duelen.

–¿Puedes hacerlo por mi?

Me rio.

–¡No uses lo que siento para manipularme!

–Por favor...

–¡No, Zoey. No. Arregla todo como la persona adulta que crees que eres!

–¡No soy una adulta, soy una niña estúpida, Nolan! Por favor... –no la miro a los ojos– Te necesito... fuiste el primero en quien pensé –sigo sin mirarla– Por favor... –llora y no la miro– ¡Bien, te detesto! –me rio negando con la cabeza– ¡Ya basta de reirte de mi, basta de mirarme así! Ahora todos se rien de mi... –se tapa el rostro con ambas manos, sale corriendo de la casa, y es ahí cuando noto que está con el auto de Hunter. Zoey no maneja ¿qué mierda?

–Zoey, detente –la persigo.

–¡Suéltame! –s safa de mi agarre y me mira con odio, tristeza.

–¡¿Qué haces con el auto de Hunter?! ¡Tu no manejas!

–¿Ahora te preocupas por mi? ¡Hace dos minutos no era así!

–No saldras de aqui...

–¡No me quedaré contigo mirándome así! ¡Suéltame, Nolan!

–¡No!

–¡Sueltame, y dejame enfrentar todo sola, como lo dijiste! –forcejea con mi agarre– ¡SUÉLTAME! –me golpea en el estómago, y me empuja. Caigo al suelo y Zoey aprovecha mi caída para correr hacia el auto. Para cuando me levanto, ya es demasiado tarde, Zoey salió disparada... a una velocidad extrema para un principiante.

¡Carajo, Nolan! ¿Qué mierda contigo? ¿Por qué no reaccionaste cuando la viste llorar? ¡De nada sirve que te lamentes haberla dejado ir así, haz algo!

Entro a la casa corriendo, buscando mi celular para llamar a Paul. Entre la desesperación y el miedo, se me hace mas dificil encontrarlo. La vida se te ríe en la cara en los momentos mas desesperantes.

Cuando finalmente lo encuentro, escucho una frenada afuera de la casa, para luego ver como todos entran de forma desesperada a la casa. Sus rostros aterrados, me aterran más aún.

–¿Zoey estuvo aquí? –me pregunta Hunter desesperado, y no le contesto– ¡Nolan, dime si estuvo aquí!

Chloe está llorando, Nathalie intenta calmarla, pero llora también. Los chicos están asustados, observándonos a todos. Y Paul es el último en entrar, tiene fotos en sus manos y cuando logró alcanzar a ver... mi mundo se viene abajo.

–Se llevo mi auto, Paul... –dice Hunter.

–Quiero a mi hija... –Chloe llora en los brazos de Nathalie– Solo quiero a Zoey...

Y yo solo quiero desaparecer. La deje ir en ese maldito estado, y no la ayude, no como me lo pidió.

–Chloe, cariño... –Hunter llora al ver a Chloe llorar. Hope también está llorando, y Dylan está asustado. Paul quiere mantenerse tranquilo para todos, pero se le hace imposible. Y yo... me encuentro en silencio, culpandome y maldiciendome en silencio.

–Nolan, dinos si estuvo aquí –me dice Paul– Zoey llamó de forma desesperada a Chloe, pero no nos pudimos comunicar con ella. Por eso vinimos y... encontramos esto –me muestra las fotos– ¿Sabes algo de esto? ¿Ella estuvo aquí? –no digo nada– ¡Nolan, necesitamos una respuesta! Si Jude está detrás de todo esto tendrá que...

El celular de Hunter comienza a sonar, e interrumpe a Paul.

–Diga... –atiende con miedo y voz quebrada.

–¿Es Zoey? –pregunta Chloe– Dime que es ella...

–¿Qué? –el rostro de Hunter se transforma– No, no... ¡no! –arroja su celular al suelo y le está costando respirar. Paul se acerca a él para ayudarlo– Hubo un accidente... –dice respirando de mala manera.

–¡No! –Chloe se cae al suelo, llorando y también le cuesta respirar. Nathalie quiere ayudarla, en su estado de lágrimas, se complica.

La habitación comienza a darme vueltas. Escucho voces desesperadas, llantos, noto el miedo, noto como Hunter y Chloe están respirando de forma costosa.

Me siento culpable, soy el culpable de que esto haya pasado.

Entre toda la culpa que siento, tristeza, y miedo, nos dirigimos al hospital en el que acaban de ingresar a Zoey. Escucho todo lo que pasa a mi alrededor, pero no participó de la escena, soy un personaje que observa todo desde afuera.

Llegamos al hospital y Hunter pide de forma desesperada ser atendido, por suerte es el lugar de trabajo de Paul, así que no nos toma mucho tiempo que nos respondan. Vamos al sector que nos indican, mi cuerpo se mueve por inercia.

Un médico se acerca a nosotros al vernos afuera de la sala en donde está Zoey.

–¿Son familiares de la paciente Orwell Zoey? –pregunta y cuando ve a Paul asiente con la cabeza en forma de saludo.

–Soy el padre –dice Hunter– ¿Cómo está mi hija?

El doctor suspira.

–La paciente está en un estado crítico. El golpe que recibió al chocar fue mi fuerte y le causó lesiones graves –lo escucho decir las lesiones de Zoey y muero por dentro cada vez que el doctor abre la boca para hablar– Estamos controlando las hemorragias, y asegurándonos de que no haya una interna –Hunter se agarra la cabeza con ambas manos, Chloe llora detrás de él y Paul abraza a Nathalie. Mientras que yo, en mi estado de silencio, calmo a los chicos– Hay que esperar a que despierte para confirmar que sus signos vitales están bien –cuando Hunter escucha esto, sus ojos se llenan de lágrimas. Se lo que está pensando– Los mantendré informados.

Dicho esto, el doctor se aleja y se vuelve a encerrar en la habitación donde se encuentra Zoey. Hunter nota que Chloe está a su lado llorando, y la abraza. Ambos lloran y se consuelan mutuamente.

Veo miedo, tristeza. Y me siento el doble de culpable, ella está aquí por mi culpa, yo la traje a esto al no ayudarla. Es mi jodida culpa.

Mi estúpido estado de enojo y orgullo está causando la mirada de terror de Hunter, después de lo que él vivió, esta aterrado. Chloe está igual de asustada, llorando, con miedo de lo que pase. Nathalie repite una y otra vez que quiere que Zoey está bien, Paul la calma, pero se siente terrible, lo noto. Los chicos lloran, están asustados porque ven a los adultos así, Dylan me pregunta por su hermana y yo me sigo ahogando en tristeza, culpa.