Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 10

Todos sabemos que, cuando una persona está realmente enojada, lo más común es hacer notar su enojo. Ya sea con gritos, ya sea con una mala actitud, o incluso indiferencia. Todo es aceptado mientras la persona exprese sus sentimientos y no se retenga nada.

En toda una semana no he recibido más que sólo sonrisas y buenos tratos por parte de Ray. ¿Sinceramente? Estoy aterrado.

Bob no ha querido atender mis llamadas, al parecer Vic ha estado realmente enfermo y ha hecho de Kellin su enfermero personal —claro que el flacucho no se niega en lo más mínimo—, y da la casualidad de que ahí culmina mi lista de amistades importantes a las cuales podría comentarles sobre esta situación. Incluso llegué a considerar a Matt, pero aun le tengo ese respeto como mi jefe que no me hace progresar en el ámbito amistoso.

Y como cosa rara del presente; todo terminaba en Frank.

Pero me hacía sentir incómodo el hecho de que gracias a él, Ray está como está, y sería un completo idiota con el querer utilizarlo sólo por desahogo. Nada me asegura que eso me hace un imbécil, pero no obstante, es lo que yo pienso que me hace.

Cuando llegué al apartamento luego de haber salido con Frank, Bob ya no estaba y Ray estaba preparando la cena. Desde entonces ha estado actuando sumamente extraño a mi pesar. No ha demostrado ningún indicio de enojo, no ha tenido una actitud indiferente, no ha demostrado el querer alejarse de mí, y lo más espeluznante: ni siquiera ha querido tocar el tema. Como si nada pasó, como si yo no hubiese olvidado nuestro casi aniversario ni lo hubiese dejado plantado en algún restaurante.

Sin embargo, le he mandado mi dirección a Frank. Eso no quita que no me aterre o no me vuelva loco, porque eso sí, estoy al borde de la locura.

Desde la barra de la cocina observo a Ray movilizarse con agilidad, casi da la impresión de que está en su propio apartamento. Ha llegado bastante temprano hoy, al parecer sólo exclusivamente para preparme el desayuno, y de antemano preparárselo a él también. Luce tan radiante como cualquier otro día, y si fuese cualquier otro día, con gusto lo admiraría deslizarse de aquí a allá. Cualquier otro día en el que no estuviese llevándome al jodido límite.

—Ray, ya basta —articulo con firmeza cuando ya no lo soporto más. Él detiene su labor para girar y verme con su ceja levantada.

— ¿Ya basta de qué?

—Ah, por favor —bufo con fastidio—. ¡De comportarte así! No te hagas el que no sabe, Raymond.

Sus brazos se cruzan sobre su pecho con la misma lentitud en la que su mirada desciende y sus muecas toman lugar. Suspira con resignación.

»Escucha, sé que estuvo mal, ¿de acuerdo? Sé que no debí. Sé que estuvo mal y que pude haber hecho algo por solventarlo pero al momento-

—Duraste una semana, Gerard.

— ¿Qué?

Suelta una risita por lo bajo, sacudiendo su cabeza.

—Duraste una semana en tomar en cuenta mi comportamiento. Pero está bien, todo está bien, Gee. En serio. Ya pasó, no hubo ningún problema. Fue un mal momento, es todo.

— ¿Mal momento? Ray, esperaste horas por mí en un restaurante por nuestro casi aniversario y no estuve ahí porque lo olvidé, ¿y no hubo ningún problema? ¿A qué juegas?

— ¿Y ahora te vienes a dar cuenta? —vuelve a reír—. ¿Una semana después? Yo no juego a nada, Gerard, la pregunta es: ¿a qué juegas tú?

Balbuceo ante su pregunta. Pienso un momento. No tengo una respuesta. Lo estoy lastimando. Jadea cuando de mis labios no sale más que aire, y sonríe, dándose la vuelta para seguir con lo que venía haciendo.

—Ray-

—Caíste con los kilos, Gee.

— ¡Yo sólo lo siento!

— ¡¿Y un lo siento va a "solventar" lo que hiciste?! Mira —pasa sus manos su cabeza—, no sé qué es lo que te está pasando. Desde el décimo aniversario de la muerte de Mikey estás así y yo... Gee, siento que no te conozco.

Mi pecho duele. Su tono se escucha dolido también, y sé que lo que me está diciendo es cierto. Pero ni yo mismo sé el porqué.

»Primero estás distante y luego esto, ¿qué me dejas para pensar? Gerard, si tienes algo que decirme, sólo dímelo. Yo estoy... intentando salvar... lo que sea que sea esto, pero no creas que puedo hacerlo si tú no pones de tu parte.

Soy un imbécil, no me hago sentir como uno, lo soy. Su mirada me lo dice todo, y entonces sólo sé que quiero abrazarlo. Pero no me muevo. Sólo lo miro expectante, viendo como saca todo lo que ha estado aguantando esta semana.

»Si es sobre Mikey... Podemos encontrar un psicólogo que te ayude. Diez años es mucho tiempo, Gee. Quisiera comprenderte, pero no lo hago. Bob lo dijo, y me lo volvió a repetir, nosotros sabíamos que esto iba a ser un desastre y aun así nos arriesgamos, porque nos amábamos.

— ¿Nos amábamos? —jadeo una risa por lo bajo—. Ray... ¿alguna vez esto fue realmente amor? ¿El uno por el otro? Me refugie en ti, como siempre lo hago, y hace dos años-

—Estabas vulnerable, te vi llorar y me dije que no eras tan feo como alguna vez creí.

—Y me besaste.

—Y te besé.

A este punto estamos riendo, y ya no sé qué es lo que ha pasado. Siento la necesidad de levantarme de mi puesto e ir hacia donde está él para encararlo, tenemos la ventaja de ser de la misma estatura, por lo cual mirarlo a los ojos no se me complica.

—Ray, ¿me amas?

— ¿Cómo...? —bufa otra de esas risas, pero no me ve—. Cómo... ¿Cómo me preguntas si te amo, Gerard? —me encojo de hombros.

— ¿Me amas?

—Por supuesto que te amo. ¿Cómo no voy a amarte?

— ¿Y me amas más como mejor amigo o como pareja?

Entonces calla. Y sé cuál es su respuesta, con el sólo verlo e incitarlo, sé cuál es su respuesta. Y yo río por lo bajo.

—Me amas. Te amo. Nos amamos. Pero no como debería ser —encojo un hombro—. Qué... ¿Qué tal si nos confundimos? ¿Qué si confundimos amor con afecto?

—Te veo cada mañana y te amo cada día más, de alguna manera lo hago —su voz sale en un hilo, y puede que en cualquier momento se suelte a llorar, pero no despegamos la mirada del otro—. Eres mi mejor amigo, eso es cierto, pero no titubeé cuando te pregunté si querías ser mi novio, Gee. Pero tú sí. Dudaste al responderme.

—... Yo sí... Te estoy lastimando. No quiero lastimarme.

—No me estás lastimando —sorbe por la nariz, tomando mi rostro entre sus palmas y ahora yo quiero llorar. Él no lo hace, así que lo retengo todo lo que puedo—. No te dije nada sobre lo de la semana pasada porque quería que tú me lo dijeras. Quería que tú te disculparas. Y no sé que nos hizo llegar a este punto, pero ha sonado como una ruptura y simplemente me rehúso.

— ¿Crees que vamos a poder con esto?

Esta vez su risa se prolonga, sus ojos se cierran y con pesar, sus manos caen hasta mi cintura, entonces me rodea hacia él, posando su frente contra la mía.

— ¿Tienes alguna idea de cuánto he estado pensando sobre esta situación?

— ¿En un momento quieres arreglar las cosas y ahora te ríes? No, no tengo ni la menor idea.

—Te lo pregunté de manera indirecta, e inconscientemente me diste tu respuesta. No estás seguro de esto, Gee. Jamás estuviste seguro de nosotros, y tenías tus sospechas, y sé que ha sido desde hace poco, porque has comenzado a reconsiderar tu vida. Estás más sonriente, estás más feliz, estás más radiante, y yo no formo parte de ese cuadro, ¿sabes?

— ¿No quieres seguir conmigo?

No sé por qué mi pregunta me ha dolido, pero estoy demasiado confundido con nuestra corriente conversación. No puedo comprenderlo por más que quisiera, y creo que con él pasa lo mismo. El sonido del tostador suena a nuestras espaldas, haciéndolo separar su frente de la mía.

—El desayuno está listo, pero yo voy tarde al trabajo —besa mi nariz, separándose por completo de mí—. ¿Te importará el prepararlo por ti mismo?

Balbuceo, pero niego con mi cabeza.

»Excelente —besa mi mejilla mientras se pone su chaqueta—. Hablamos luego, Gee.

Con rapidez toma todas sus cosas y con su sonrisa intacta sale por la puerta, dejándome a mí parado en medio de la cocina, con un desayuno recién hecho y la confusión al borde del abismo.

Jamás he querido saber tanto lo que Ray tiene en mente.



Nota: Corto porque es relleno y porque realmente estoy falta de inspiración:(. El siguiente será mejor xx.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro