Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Battle of wills.


Gustav le dio un beso leve en los labios a Georg y seguido de esto, se dirigió a Bill con los brazos abiertos. Se complació al notar el oufit con el que su amigo de años estaba complementando su atractivo natural. Bill podría ser predecible en cientos de cosas. Podría ser fanático de los patrones y seguir a raja tabla sus propias reglas- que claro violaban muchas de las normas convencionales- pero aquello jamás le quitaría el estilo único que lo caracterizaba desde los anales de su amistad. Wilhem Kaulitz había sido su modelo y también en muchas ocasiones quien le inspirara desde lo más hondo para crear algo nuevo. Bill le sonrió como si no lo hubiera visto en años. Pronto se decidió a presentarle a sus acompañantes antes de que éstos notaran que se habían olvidado de ellos al ser tan emocionales con su reencuentro.

-Shiro, él es Wilhem Kaulitz, doctor especializado en historia del arte y en literatura inglesa. Te recitaría su largo currículo pero al decir verdad a él le gusta alardear sobre ello y en cualquier otro momento saldrá a la luz en ésta reunión.- Bill lo miró con recelo y terminó por sonreír cordialmente.

-No te preocupes Gustav, sé quién es el caballero y también sé cuáles son sus especialidades y su trayectoria, como nuestro amigo ha dicho mi nombre es Shiro Gutzie. Y quién está a mi lado es mi representado y quien está interesado en que usted sea el gestor de su proyecto. Thomas Trümper.-

Gustav habría esperado una mirada de reconocimiento por parte de Bill. Sin embargo; éste se limitó a estrechar la mano del fotógrafo y a intercambiar los saludos correspondientes. Thomas le miró como si estuviese pensando lo mismo y creyó que quizá en realidad Bill no lo recordaba; realmente no habría mucho que recordar si era franco, y la idea de su amigo era algo descabellada. De hecho no sabía cómo es que Thomas había reconocido a Bill después de más de diez años. Tal vez Bill supiera de las obras de Tom, pero de eso a saber quién era...

-Gutzie, Trümper. Lamento decir que no he escuchado hablar de ustedes ya que el proyecto para el que me han sugerido no tenía... Contenido. Pero creo que podremos solucionarlo en esta comida.- Gustav vio a Georg encogerse en su sitio y podría jurar que estuvo a punto de azotar su cabeza en la mesa dispuesta. A estas alturas y tras las circunstancias en las que el encuentro se había dado, Gustav no podía esperar menos del curador. Y a pesar de que minutos antes advirtiera a sus acompañantes sombre el carácter de su amigo, éstos no dejaron de mostrar sorpresa en sus gestos. –

-Siento que por mi culpa tuviera que modificar su agenda el día de hoy. Sin embargo quería personalmente quería explicarle el proyecto que deseo realizar.-

Bill había mirado de pies a cabeza a Tom y Gustav supo que definitivamente no sólo estaba evaluándole la vestimenta, Bill estaba tan molesto que esa forma tan meticulosa de ver a la persona frente a él era un obvio reclamo que sólo Georg y él eran capaces de entender. El curador eligió sentarse a su costado antes de que Georg pudiera hacer algo, a su derecha se sentó Trümper y Georg y Shiro simplemente atinaron a sentarse en los lugares restantes. Gustav secretamente se sentía halagado al recibir esa atención. Sin embargo entendía que no era el único motivo. La situación no era lo mejor, él podía notar que su amigo se encontraba hastiado. Y ante eso no había mucho que hacer.

La primera entrada fue tranquila, el silencio y el ocasional ruido de los cubiertos empapaba la atmosfera de incomodidad. Así que con el fin de que cada uno de los minutos de esa comida fuesen aprovechados Bill se dirigió a Tom y a Gutzie con el fin de saber el motivo de su requerimiento en dicha reunión. Gustav simplemente se apoderó de su copa de vino, y prestó tanta atención como pudo. Secretamente estaba más atento a los movimientos de Georg al otro lado de la mesa que a alguien más en la mesa.

-Verá Wilhem, la exposición que Tom y yo tenemos en mente es un proyecto ambicioso. Tom, por supuesto nunca ha vendido su nombre o imagen y siempre sus trabajos son conocidos por sus iniciales. Así que doy por hecho que conoce el trabajo T.T.- Bill asintió con lo que parecía una mueca de interés y dejó el plato casi vació para prestar su total atención a lo que los hombres tenían que decirle.- Tom ha trabajado con otros seudónimos en distintos proyectos; y él cree que es tiempo de unificarse bajo un solo nombre.

-He estado interesado en la música desde hace mucho tiempo, pero nunca le dediqué el tiempo justo. Hasta ahora la fotografía y la producción de documentales han absorbido mi tiempo. Y justo como Shiro ha dicho, quiero unificar lo que he hecho hasta el momento. Hay una serie de cortometrajes musicales en los que he estado ocupado un par de años. La música, y el concepto parten de la fotografía misma. Sé que no es algo completamente innovador, sin embargo, contrariamente a sólo presentar los trabajos en una galería o museo, quiero que éstos sean expuestos en distintos lugares, y claro ser yo quien se permita conocer al público que quiera ser parte de ello.

-Entonces debo entender que la exposición que proponen sea mediada por los conceptos audiovisuales que usted maneja y que, paralelamente a ello, será usted quien se tomará el tiempo de dar algunas conferencias referentes a su trabajo. No es algo completamente nuevo, pero supongo que podría ser de provecho ya que el factor sorpresa será que se presente junto a sus obras y...

-No sólo es eso.- Interrumpió Tom, Gustav le dio una mirada significativa a Georg y éste sólo se encogió de hombros. Los otros hombres en la mesa estaban haciendo muchas de las cosas que Bill absolutamente no toleraba. Como le he mencionado, T.T. sólo es un sobrenombre que uso para firmar mis proyectos de fotografía. Tengo bastante tiempo trabajando con el medio artístico. Incluso tengo un single que salió hace poco. Obviamente quiero dejar de lado la dualidad que implica ser una persona distinta para un trabajo y otra para mi carrera. Eso quiere decir que el público no sólo será versado en arte. Habrá por supuesto algo que podríamos llamar mis fans.

-Eso es lo que representa el problema en gran parte, Tom ha decidido que sean eventos exclusivos. Tenemos pensado que con base a esto podría crear una línea de trabajo. Ya sabe, no sólo es presentarse en un lugar, dar un discurso, quedarse a una reunión y después subastar las obras.-

-Así que lo que buscan en realidad es que organice su evento no sólo en ésta galería, sino en otras. Que le de un toque museográfico y un discurso al evento, mientras Trümper revela que no sólo ha trabajado como fotógrafo sino también en el medio artístico.

-Sí, básicamente eso mismo.- Bill guardó silencio y sus cejas pobladas casi se unieron en una. Georg le dio una mirada rápida y negó en silencio. Gustav lo supo, desde ya, todo esto era una causa perdida.

-¿Qué tan exclusivo van a hacer el evento? Ustedes han mencionado que el señor Trümper tiene bastantes admiradores que no sólo vendrían por la parte que me concierne como curador, sino que llegarían aquí bastantes personas que sólo conocen su lado musical.

-Estamos pensando que a dichos eventos deberían darse cita como máximo un número de cien personas. Seguramente habrá muchas que queden fuera dado que queremos manejar este número total. El costo dependerá de la aprobación que nos den los lugares solicitados de antemano. Pretendemos que existan dos fechas en Norteamérica, y cinco más en las principales capitales europeas. Habrá paquetes V.I.P. claro, que incluyan determinados beneficios, pero en concreto la parte central de la idea la ha captado muy bien.

Bill se había quedado en silencio, sopesando la idea. Para sus dos amigos presentes, estaba clara la respuesta. Pero para los otros dos hombres sentados a la mesa, la respuesta sería totalmente inesperada.

Inesperada y contundente.

-No me parece que el proyecto que me plantean sea adecuado para alguien como yo. Me parece que lo que intenta hacer es un evento bastante snob que atrae a personas elitistas que no vienen por el arte, sino por el placer morboso de ver a un artista popular. Yo no soy un manager, ni un organizador de eventos de esa índole. Creía que al pedirme a mí como el curador a cargo de una exposición, sabrían qué tipo de eventos son los que yo coordino. No estoy dispuesto a contribuir en materia museográfica para dicho... Lo que sea que intentan hacer. Además con la profunda organización que el señor Gutzie plantea, me veo forzado a sentirme fuera de lugar. Sí, he llevado obras, exposiciones y autores a distintos lugares del mundo. Pero jamás con las condiciones que ustedes están manejando. Con sinceridad, no entiendo a qué han venido. Para ustedes ya todo está planeado y no encuentro ni placentero ni necesario involucrar mi nombre cuando está claro que lo que pretenden es venderse sobreponiendo el beneficio monetario al arte mismo.

-¿Está usted hablando en serio?.- La voz de Tom adquirió un tinte distinto a la calmada voz que intentaba explicarse momentos atrás.- ¿Está diciendo que rechaza el proyecto porque le parece una táctica snob?-

-Sí. Veo que usted también ha captado muy bien la idea. No estoy a favor de que un evento que pretende dar a conocer obras artísticas, sea llevado a cabo para un grupo tan reducido de gente, mucho menos que por ese grupo se estén excluyendo otros sectores. Esto va más allá de la concepción que los espacios como este pretenden dar al público en general. No estoy de acuerdo en que grandes sumas sean derrochadas por determinado sector dejando a otros fue...- Shiro había reído con estruendo. Bill lo miró de reojo y expulsó un suspiro inconforme.-

-Quizá debería mirarse a usted mismo Kauliz. Para alguien que no está a favor del consumo elitista está muy bien parado con ese par de finas botas francesas. ¿Cree usted que me trago el cuento de que se preocupa por la gente que llegue a quedar fuera de este proyecto cuando lo veo usar pantalones Versace y joyas exclusivas de una firma por demás cara? Usted viene a sentarse en la mesa con esos forzados movimientos que únicamente pudo haber adquirido tras largas horas de un entrenamiento clasicista a decirnos que no va a ser parte de la propuesta. Eso es una contradicción bastante curiosa. Se ve que a usted le gusta el lujo y no me malentienda, verse bien no es un pecado. Sobre todo si es alguien tan atractivo. Pero creo que es algo hipócrita quejarse de algo que claramente le dará más poder adquisitivo, y lo mejor, es que tendría un renombre aún mayor. Es con usted y no con cualquier otro con quien estoy dispuesto a salir de mi zona de confort para revelar al mundo que...

-¿Qué? ¿Qué le va a revelar al mundo? No necesitamos que el arte sea nuevamente usado como una forma de separar al mundo en clases. Bastante de eso hemos tenido por siglos. ¿Sabe cuántas personas aún creen que no pueden pisar un museo, una galería o algún espacio que se encargue de mostrar obras de cualquier índole? Claro, no debe saberlo porque lo que importa es de qué forma ustedes puedan llenar sus bolsillos.- Bill se había levantado de la mesa y la servilleta de tela fue dejada en la mesa con un golpe seco. Se alejó unos metros y como si fuese una pasarela caminó un par de pasos y dio un giro para después quedarse estático con una mirada fiera y una mano en la cintura. Justo como lo haría cualquier modelo de alguna cara firma.

Georg se levantó tan pronto como pudo y se quedó firme en su sitio, Gustav juntó sus manos en la mesa y miró con atención a Bill. Quería sonreír y batir palmas. Su amigo no había perdido ni un ápice del modelo que había sido tantos años atrás.

-Sí, usted tiene razón, estoy bastante cómodo en mis caros botines franceses, estoy seguro en mis pantalones italianos y por supuesto que las joyas resaltan mi atractivo, eso lo sé sin necesidad de que alguien más me lo diga. Verse bien no es un pecado, y puede que haya malentendido lo que mi apariencia refleja. Pero hay una clara diferencia entre usted y yo. Mi sentido ético es más conciso que sus argumentos vacíos. Usted trata de que yo falte a los valores que llevo en escritos en la piel a base de largos años de estudio y dedicación, con el argumento falaz de que me gusta el lujo. Sin embargo usted no es nadie para juzgarme cuando pretende lucrar con el gusto y el anhelo del mundo. Usted no entiende lo que el arte es. Y eso me pone muy por encima de lo que usted pretende hacer en el nombre de la belleza.

-Michelangelo creaba obras por comisión... ¿Qué diferencia puede haber entre lo que él hace y lo que yo pretendo hacer? No ha escuchado ni la mitad de lo que planeamos así que...- Bill rio esta vez, sus profundas carcajadas inundaron el pequeño privado donde estaban. No había gracia alguna en su tono, ni mucho menos felicidad. Y si alguien más hubiera visto la escena habría sentido la piel erizarse por la mirada llena de desprecio que le sucedió cuando se hubo calmado.-

-La diferencia Trümper es que Michelangelo era un artista completo. ¿Puede usted compararse con él? Claro que él trabajaba por comisión, claro que vendía su arte, él estuvo rodeado de personajes importantísimos, sus mecenas lo guiaron por ese camino. Y él lo siguió como la única salida que vio para continuar su arte. Es bastante burda la comparación que pretende hacer de usted mismo, al parecer su idea es tan retrógrada que no se da cuenta de que lo que dice es una estupidez. ¿Quiere trabajar por comisión? ¿Quiere que le paguen por hacer algo que usted debería amar por sobre todas las cosas? ¿Tiene por fuerza que ser tan petulante cuando no sabe siquiera si va a tener el éxito que desea? Si lo que busca es un respaldo monetario después de venderse, no me va a hacer partícipe de esto Trümper.

Tom se levantó y la silla calló con un estrepitoso ruido detrás de él. Pero no dijo nada, mantuvo la vista fija en el alto hombre que estaba frente a él. Lo miró con enfado y con los puños cerrados también sonrió.

-¿Venderme? ¿Olvida quién era el que corría de un lado a otro buscando quién comprara su imagen? No soy yo quien se está valiendo de su cuerpo o de su rostro, yo estoy poniendo en juego mi talento. Habla de sí mismo como si hubiera nacido con el don de saber lo que sí es arte y lo que no. Pero olvida que se prestaba a las frivolidades elitistas del brillo y el glamour. ¿Es acaso su rechazo una forma de expiar su pasado lleno de vanidad? Quizá no sólo le gustaba recorrer las pasarelas siendo admirado por sus pasos y su belleza al portar lujos. Tal vez ahora usted busca tener la última palabra en el mundo del arte como parte de su personalidad que ambiciona reconocimiento. Cosa que contrasta bastante con el papel que quiere representar.- Gustav apretó sus manos tratando de calmarse. ¿Qué mierda tenía Tom en la cabeza? Si antes no había logrado nada con Bill, ahora lo único que había ganado era el desprecio total del hombre en cuestión. Tom no sabía nada. Tom en su afán de ser aceptado y bien visto por Bill había logrado irrumpir en una puerta que ya había sido cerrada tiempo atrás.-

-Pude haber vendido mi imagen, pude haber desfilado en grandes pasarelas. Lo hice, no tengo remordimientos ni sentimientos de vergüenza por ello. En efecto, vendí mi cuerpo y mi rostro para que otros los utilizaran como lienzos. Pero no vendí mi alma por lujos. Era un trabajo como cualquier otro, a mi gusto, claro, pero era un trabajo. Puedo estar lleno de brillo, joyas, ropa zapatos, eso no debería importar en lo más mínimo, ni influir en mi trabajo. Ahora mismo, puede verme como un hipócrita, pero mi pensamiento no ha cambiado a través de todos los años que llevo haciéndome cargo de cosas que usted con su mente tan obtusa no comprendería, y que por supuesto no pretendo explicar. El arte debe ser algo que inspire, que represente a la humanidad y la haga reflexionar sobre sí misma. El arte debe ser algo que se impregne en el ser como algo más que pinturas, esculturas o términos académicos, debe ser un sentimiento que nazca no solo de lo bello, de lo exclusivo. Debe ser un discurso histórico paralelo al hombre. Porque le hombre es arte. Pero está claro que jamás va a entender algo como eso porque simplemente pretende llenarse los bolsillos con dinero mientras pinta su nombre con prestigio que no merece.

Bill se acercó nuevamente a la mesa y con una corta despedida hacía él, salió del gabinete seguido de Georg. Gustav simplemente se sacó los lentes y se frotó el puente de su nariz.

-Eso ha sido genial Tom, si lo que querías era provocar al demonio que se acaba de ir, lo has hecho de una forma espectacular. Creo, que en todos los años que tengo de conocer a Bill jamás lo había visto tan iracundo.

-¡Pero él inicio! ¿No escuchaste todo lo que dijo? ¡No dejó que llegáramos a la segunda parte del proyecto! ¡No nos dejó explicarle que lo que se recaudara en dichos eventos serían destinados al fondo de becas que él promueve! ¡Creyó que lo único que buscaba era venderme!.- Tom se levantó su silla y se dejó caer en ella.-

-Ustedes no lo plantearon de la mejor manera. Además no entiendo tu afán de hacerlo todo como una misión secreta. ¿Querías que se pusiera a tus pies al mencionar el dinero? Él no te iba a considerar nada menos que como un estúpido. Habrías ganado un par de puntos si hubieras mencionado que lo que ganaras sería llevado a los fondos de las distintas fundaciones de las que él forma parte. Si desde un inicio hubieras hablado directamente y sin darte la importancia que pretendiste esto no habría pasado. Pero con eso tampoco hubieras asegurado nada, Bill es un hombre que desde que fue capaz de llevar el arte a los sectores con menos posibilidades lo ha hecho sin temor a quedar en la calle.

-¡Lo sé Gustav! ¿Crees que no escuché todos sus planes cuando estábamos en sesión? ¡Él siempre iba de un lado a otro aturdiéndonos con sus ideas! Los escuché todos y me parecieron la cosa más ambiciosa que alguien pudiera llevar a cabo, me reí y me di cuenta de cuan parecidos éramos en aquel tiempo. Lugo simplemente desapareció de mi vida. Y sin embargo, después de años vuelvo a escuchar de él y me entero de que no sólo sus palabras se quedaron en sueños frustrados, o en anhelos de un joven estúpido. Él se volvió todo lo que siempre quiso. Y...

-¿Y creíste que podrías intentar algo con él después de tanto con un excusa como la gestión de tus proyectos? ¿O es que pensaste que siendo un donador a su causa él iba a saltar a tus brazos?

-...

-Mira Tom, él no es el epitome de hombre romántico que cree que puede en cualquier momento llegar a tener un final de novela cursi. Y yo tampoco puedo creer que después de años, sigas encandilado con él. ¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿Diez años?

-Nueve, han pasado nueve años Gus. Y yo no esperaba que al escuchar todo se enamorara de mí, mucho menos que se rindiera en mis brazos y todo esto tuviera un final feliz. Simplemente quería acercarme y tratar de pasar tiempo con él, y tal vez, solo tal vez lograr que él volteara a verme... Como a una obra de Van Gogh.

-Pues iniciaste mal, y lo único que lograste es meterte entre los primeros puestos de su lista negra. No acertaste con tus acciones ni con tus palabras.

- Lo arruiné. Simplemente lo arruiné ¿No?

-Sí.- Gustav no sabía de qué parte ponerse. No entendía a Tom, y a pesar de eso algo lo empujaba a querer ayudarlo. Quizá lo veía desde un punto romántico, probablemente ahora que él estaba enamorado entendía esa obsesión por buscar la aprobación de la persona que removía sentimientos en alguien.- Mira, si querías decirle que se veía atractivo, o que te pareció guapo, no debiste echarle en cara lo que traía puesto. ¿Pensaste acaso que recordándole los viejos tiempos en Londres él se doblegaría? Bill es vanidoso, pero no con su cuerpo o con su rostro. Para él fue un golpe bajo que trataras de poner su físico sobre su cerebro. Desde ahí el error solo creció más y más.

-Quiero buscarlo, Gustav...-

-No voy a ser la hada madrina, ni sueñes con que yo me meta como pacificador. Porque si tú estás pensando que te ayudaré, estás en un error. Los dos son amigos muy queridos por mi, pero no planeo perder a ninguno.

-Entonces, supongo que no vendrás a su oficina conmigo.-

-No, y si vas a ir, deja que Shiro se quede en el hotel. Contigo basta para que se ponga como una bestia.-

-...

- Y tendrás que venir después, si recuerdo su rutina tan bien como creo, él ahora mismo está camino a la universidad y no saldrá de ahí hasta las 6:00 de la tarde. Y después de eso, si interrumpes más el día de hoy, seguro mañana iré a identificar tu cadáver, claro si es que no decide hornearlo y comérselo en pies.

Tom se resignó a perder aquel día. Pero estaba seguro que lograría un poco de aceptación después si le mostraba algunas de sus armas ocultas.

Sólo esperaba que Gustav estuviese exagerando.


Notas finales:

https://es.wikipedia.org/wiki/Miguel_%C3%81ngel

https://es.wikipedia.org/wiki/Vincent_van_Gogh

http://www.cosmohispano.com/hombres/fotos/fotos-versace-hombre-h-m/fotos-pantalones-cuero___16388

https://www.farfetch.com/mx/shopping/men/saint-laurent/boots-2/items.aspx

Estos realmente ya se los hemos visto XD

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: