N/A: les recomiendo poner la canción que he dejado arriba para una mejor lectura, la historia les indicará en qué momento ponerle play ^^
¡Disfruten!

Cuando hago un recuentro de todo lo que pase, las palabras no dan para describir cada momento especial que viví a su lado.  Cada instante, cada minuto, cada segundo, cada hermosa tarde en la que caminábamos juntos a casa charlando de cualquier cosa, cada vez que me dio un empujón o me dedico una mirada o una de sus características sonrisas para que avanzará fue único.

Él es alguien único. Y ahora, una vez más, la vida me demuestra que quizá este hombre es demasiado para mí. ¿Me lo merezco?

Kirishima se remueve nervioso en su lugar, se ve tenso agarrando el micrófono mientras toma aire intentando tranquilizarse. Sus ojos por fin hacen contacto con los míos y su rostro se tiñe de un rojo intenso que me cierra mi boca entre abierta al ver tal escena y me dibuja una tímida y dulce sonrisa mientras siento mis mejillas calentarse, ¿que cree que hace?

Las baquetas de Bakugō tocan entre si marcando tres tiempos, y entonces, empieza el a tocar suavemente el ritmo de la canción, dándole un indicativo a Jiro de que es momento de que empiece con la guitarra. Y enseguida reconozco la canción.

Sin que perdamos el contacto visual, el comienza la canción... La canción que yo le dedique, ahora él... ¿me la dedica a mi?

Cada palabra que canta en español con dificultad me llega al corazón. Yo sí me se la letra completa, yo se la cante pensando que él no me entendería, pero ahora él la canta, ¿desde cuándo sabe español? ¿desde cuándo sabe que me gusta? ¿cómo encontró la canción? No lo sé, y ahora eso no me importa más que ver a Kirishima cantar, en compañía de Jiro y Bakugō. ¿Así que esto planeaban?

—No tengo nada que hacer, no tengo porque vivir, no tengo nada de nada, si no te tengo a ti...— canta con dulzura. —Solo quiero que estés cerca de mí.

Siento lágrimas empezar a caer, alertando un poco al pelirojo que de repente se ve que quiere avanzar a mi, pero no quiero distraerlo, así que solo le sonrió y asiento indicando que estoy bien, a lo que él continúa un poco más relajado y entregado por completo a la canción mientras sus ojos me miran con un especial cariño.

¿Alguna vez los había visto brillar así? Sí, así me veía todos los días pero nunca creí que ese brillo fuera de manera especial.

Con cada palabra nueva que sale de su boca, veo que va soltandose un poco más y más. Incluso cierra sus ojos, poniéndole pasión y sentimiento a su canto que me sorprende cada vez más.

Doy un paso más cerca a donde está él. Abre sus ojos y nuevamente se encuentran enseguida con los míos, sale del "escenario" que es un tapete de color melón y se acerca a mí lentamente sosteniendo el micrófono.

—Si no me besas ni abrazas, ¿que será de mi sin ti? — sus voz tiembla un poco, pero intenta recomponerse —Si yo no te tengo a ti ¿para que quiero vivir? — pone su mano en mi mejilla tibia por la sangre que ha subido de golpe a mi rostro ante su cercanía

La acaricia con amor y pega su frente a la mía mientras nuestros ojos conectan.

Denki y Sero están viendo todo mientras graban, por un breve instante veo a Denki, que se ve con sus ojos cristalizados, pero al notar que lo veo, solo me sonríe y asiente.

—Adelante.— mueve sus labios

A su lado está Ashido con su mano tapando sus labios, como si no quisiera que veamos que los está mordiendo con fuerza. Mi sangre se hela al verla así, pero ella, imitando a Denki, solo me gesticula:

—Es tuyo.

¿Podía haber personas con un corazón tan grande como lo tenían estos chicos?

Siento el pulgar de Kirishima deslizarme por mi mejilla, como queriendo volver a tener mi atención en él, y eso hago. Sus ojos me convencen de que todo está bien, que esto está bien, y que a su lado estaré mejor.

—¿Para que todas esas lágrimas, que caen sobre un papel?

Recuerdo todas esas veces que llene las hojas de mi querido diario de anécdotas llenas de su esencia. Todas las hojas en las que quedaron impregnados mis sentimientos y pensamientos de él, mi sueños y ciertas fantasías que deseaba que se hicieran realidad a su lado, y que ahora, podía sentir que se realizarían, de hecho, una de ellas se estaba cumpliendo. Solo podía preguntarme: ¿Es real?

Me sigue cantando, hasta que llega el solo de la batería y guitarra. Bakugō y Jiro están concentrados en sus instrumentos, pero puedo ver una sonrisa de satisfacción en su rostro por la música que han ido formado de una manera suave y querida. Ese par... Si tiempo atrás me hubieran dicho que me llevaría con ellos, que ellos harían todo esto por mi no me lo creería. Pero ahora que los veo, se que los quiero a mi lado con sus actitudes tan diferentes y tan marcadas. 

"Gracias Jiro, gracias Bakugō. Gracias por todo chicos." Les doy un vistazo a cada uno de mis amigos que acompañan este momento único que recordaré toda mi vida.

—Si yo no te tengo a ti, ¿para que quiero vivir?... Si yo no te tengo a ti.

Se separa un poco de mi, toma mi mano, y me da una vuelta, a lo que se me escapa una risa tímida y alegre. Tooru y Sero nos están grabando con una enorme sonrisa en sus rostros. No puedo creer que esto me esté pasando a mí. La canción está por acabar y los últimos cantos en forma de gritos melódicos salen de su garganta con inspiración.

Por un breve momento veo que Kaminari ha desaparecido y a decir verdad, me preocupo un poco. Pero ahora debo estar centrada en Kirishima, el chico al que amo, el chico que me ha conquistado y ha llegado hasta lo más hondo de mi ser.

Yo, una chica que sin su ayuda me hubiera quedado en una vida conformista llena de soledad y aburrimiento. Pero llegó él, y derribo el muro que construí a mi alrededor.

Cada una de sus sonrisas me llega a la cabeza, desde la primera vez en que me ayudó en ese árbol, o la vez que me vio hecha un desastre con lodo, cada una de sus brillantes sonrisas fue para mí, quiero conservarlas y producirle más en su bello rostro para toda la vida si es posible.

La canción finaliza, le entrega el micrófono a Sero, y Kaminari aparece a un lado suyo... Con un ramito de tres hermosos girasoles.

—Gracias.— le agradece a su amigo que se las entrega y se da vuelta dedicándome una sonrisa, sonrisa que me expresa un sentimiento de despedida.

—Solo se feliz.— susurra y mi corazón se conmueve, a lo que le respondo asintiendo e imitando su sonrisa

—Shion, ¿sabes que significa el girasol en el lenguaje de las flores?— me pregunta de la nada y me toma por sorpresa

—¿Len-leguaje de flores?— pregunto algo confundida, y con algo de pena por no saber, niego lentamente con la cabeza

—"Te admiro". El amarillo significa "eres mi sol". "Solo tengo ojos para ti, y como el girasol, yo me giraré siempre hacia ti".

Mi corazón se detiene así como mi aliento. Dejo de respirar por unos diez segundos sin darme cuenta.

—¿Era cierto? ¿Lo de hace un rato?— su pregunta me saca de mi breve trance

—¿A qué te refieres?— él aprieta los tallos de las flores que están dentro de una bolsita de celofán con ramitos que la adornan

—¿De verdad me amas?— sus ojos brillantes ante las luces cálidas que nos rodean esperan mi respuesta

En otra ocasión, siendo la Shione anterior las palabras no me saldrían, es un momento único, pero también uno que me pondría sumamente nerviosa al estar frente a personas. Pero ahora eso me deja de importar al momento que Kirishima me plantea la pregunta.

—Sí, te amo. Es un sentimiento fuerte que me hace querer verte feliz de nuevo, verte sonreír.— aseguro alzando mi mano, queriendo tocar su roja mejilla, pero por un instante la retraigo algo nerviosa, pero él... Jaja... antes de que la aleje, la pega y siento que está caliente. Se apega a mi mano y cierra los ojos por unos segundos disfrutando mi tacto, y cuando los abre, suelta:

—Yo también me he enamorado de ti. Esa canción... No sabes lo que sentí cuando la encontré la tarde que te fuiste de mi casa, comprendí todo y me comprendí a mi mismo.  Desde ese momento, me esforcé casi todo el día y todas las noches por aprendermela para ti y ahora mi sueño se realizó. Por un momento creí que todo se arruinaría aquella tarde que Bakugō dijo que era novios.— bajo su mirada —Pero cuando tú te confesaste primero con esas bellas palabras mi corazón se detuvo, no supe responderte porque se supone que yo debía hacerlo primero. No es caballeroso dejar que una dama llegué a las lágrimas mientras se declara...— comentó avergonzado

—Entonces, ¿ya sabías tus sentimientos en ese momento?— pregunté confusa

Bakugō me había dicho, casi jurado que él no los conocía, y por eso debíamos estimularlos. ¿Qué estaba pasando?

—Pero claro que los sabía, no soy idiota Shion jaja, aunque aveces lo parezca.— se rasco la nuca tímido —Yo...— se detuvo por un momento viendo al pasto —Yo venía planeando esto desde esa tarde en la que mis sentimientos se aclararon. Por eso me asusto tanto perderte cuando te vi con Bakugō, porque yo te amo.

Me extendió el ramito y lo vi con los ojos vidriosos.

—Yamada Shione... Mi Shion. Mi tímida niña hermosa.— agrega con dulzura y a la vez nervioso, asiendo que mi corazón se aceleré —¿Se-serias... Serías mi novia?!— termina casi gritando, sorprendiendome

Sus ojos están fuertemente apretados y mientras me dedica una hermosa sonrisa mostrándome sus tiernos dientes puntiagudos, sus manos tiemblan levemente mientras el ramo de flores sigue frente a mi cara.

Puedo sentir los ojos de los chicos sobre nosotros. Algunos están nerviosos, como si temieran que fuera a rechazarlo, ¿en serio creen que lo haría?

Tomo los girasoles en mi mano de la suya temblorosa y puedo sentir como se sobresalta ante el tacto de mis dedos, bajo su brazo con suavidad, y justo cuando el está abriendo su ojos para verme... Le planto un dulce beso en los labios.

Se queda estático por un segundo, pero al siguiente, me responde moviendo sus dulces y gentiles labios sobre los míos.

Me siento en el cielo. Este beso no se siente prohibido como los primeros, no se siente pesado por las consecuencias que tendría, no, este beso es libre y puro.

Nos separamos y nos vemos fijamente, pegamos nuestras frentes y ambos cerramos los ojos, dejando escapar unas risillas parecidas a unas de triunfo y emoción. Los chicos se acercan alegres a felicitarnos, cenamos todos juntos unas carnes asadas que habían hecho sus papas, que precisamente, estaban ocultos viendo toda la escena, dijeron que no querían interrumpir el ambiente juvenil y fresco que había, por lo que estaban detrás de unas macetas viendo todo el espectáculo que dio su hijo.

Comimos fuera, a la luz de la luna y con la noche fresca.

—¿Te gustaron los pasadores?— pregunto mi pelirojo mientras feliz comía una brocheta

—¿Tú los compraste?— pregunté y él asintió —Me han encantado. Ya decía yo que Bakugō no los pudo haber elegido.

—¡Hey! ¡Yo tengo buen gusto!

—Si, claro.— respondió Kaminari con sarcasmo mientras tomaba su refresco

—¡Cállate rubio tonto!— le pego en la nuca, haciendo que kaminari escupiera su refresco y se atragantara

Todos reímos disfrutando el momento. La noche que pasó fue hermosa. Hasta que después de toda la cena y el show, empezamos a recoger las cosas y ayudar a limpiar, y los chicos se fueron llendo poco a poco. Quedamos los dos, sentados en un sillón de jardín colgante que nos permitía mecernos despacio.

Paso su brazo por mis hombros mientras contenplabamos la noche.

—¿Shion?— me llamó y le volteé a ver — Perdón si te asustamos hoy todo el día. Le encargue a Bakugō que te cuidara por mí solo hoy.

—No sabes cuan aterrada estaba. — recordé los nervios que tuve todo el día —Creí que salías con Ashido de repente y que ya no me querían con ustedes.— confesé cabizbaja

—¿Qué tanto te dijo Bakugō?

—Jajaja, muchas cosas, pero todas las malinterprete.— negué divertida con la cabeza —Fui un desastre de pensamientos hoy.

—¡Perdón! De verdad no quería asustarte, pero cuando les conté mi plan a los chicos se desesperaron por qué todo saliera perfecto. Por un malentendido, casi de cancela el plan jajaja.

—¿Cuál?— pregunto curiosa

—Daríamos un último ensayo después de clases, pero Tooru pensó que sería ya para ti, lo bueno es que Sero la detuvo. Estuvo cerca.

—Jaja, ya veo. Espera... ¿Desde cuándo llevan planeando esto?

—El día después de que descubrí la canción, por eso me confundió aún más el que Bakugō dijera que eras su novia, me sentí traicionado y los chicos también.

—Pero entonces, ¿por qué lo hizo? —Pregunte sin entender.

—Sabes la poca paciencia que tiene. Creo que se había desesperado por qué no actuaba.— se rasco apenado la nuca

—Ya no importa, al final... Lo hiciste.— comenté tímida bajando mi cabeza

—Sí, lo conseguí.— tomó mi mentón e hizo que lo viera —Y no sabes cuan feliz estoy.— me beso con delicadeza, disfrutando mis labios, y yo de los suyos —Te haré la chica más feliz del mundo.— se separó de mi lentamente y me sonrío mostrando sus lindos dientes

—Ya lo estás haciendo ahora.— le dejo un casto beso —Prometo cumplirte con mucho amor por un muy largo tiempo.

—¿Lo prometes?— alza su meñique

—Lo prometo.— lo entrelazó con el suyo

¡Taran! ¿Que les pareció? :')

Llegamos al final de está historia, casi un año me tomo subirla jaja... Pero, pero, pero... ¡Todavía falta el epílogo! Y otra pequeña sorpresita, jeje... Quédense hasta los agradecimientos, ya que hay algo muy importante por allí.

Pero bueno, cuénteme que les pareció este final, ¿les gustó? ¿Falto algo? ¿Fue muy cursi? Sean sinceros, les leeré, cada uno me ayuda a crecer ^^ :3 ❤️✨

Liianshi ¡Cambio y fuera!