Tres meses atrás

»Solo quiero que estés cerca de mi...«

-Bueno chicos, eso sería todo por hoy.- el profesor Aisawa salió del salón cargando su saco amarillo para dormir.

Era el profesor mas extraño que había visto en mi vida.

Recogí mis cosas y estaba dispuesta a marcharme, de no ser por cierto rubio fosforescente.

-¿No irás hoy a jugar videojuegos?- sostenía mi manga de mi saco.

¡Se me olvidó la invitación! No le pregunté a mis padres.

-Ahm, s-se me olvidó preguntar...- Pensaran que no quiero ir con ellos...

-¡Oh! Pues pregúntale ahora.- saco su celular y me lo entregó, lo ví extrañada. -Se que nunca tienes crédito.- sonrió travieso

-Jaja gracias.- tome el celular nerviosa

¡Oh por dios! ¡Alguien me ofrece su celular para pedir permiso para salir con él! Es mi primera vez.
Está bien, creo que estoy exagerando un poco.

Marqué el número de mi madre, pero no contestó, quizá porque es número desconocido. Marqué otra vez pero igual.

-Perdón, pero no contesta, sera para la próxima.- dije apenada.

¡Genial Shione! Tus primeros amigos y te das el lujo de olvidar una invitación.

-¡Oh! Bueno...- Dijo algo de decepcionado Kaminari.

Sin mas que decir, hice una reverencia y salí de ahí rápidamente.

¡A este paso pensarán que no quiero estar con ellos!
¿Por qué soy tan inútil?

-¿Por qué soy tan tonta?- me digo mientras bajo las escaleras a paso veloz

Salgo al fin del edificio de la escuela, y veo a un pelirrojo apoyado en la entrada. Kirishima miraba su celular.

Intento pasar desapercibida a su lado. Por alguna razón no quiero decepcionarlo diciendo que no iré.

El pelirrojo me había contado que les había platicado a los chicos de mí, convenciendo los así de volver a invitarme.
¿Pero como le diría ahora que se me olvidó tan importante invitación?

Pasó a su lado entré otros estudiantes, y cuándo creó que ya la libre, aceleró el paso. Pero algo o más bien alguien me detiene, me toma de la mochila y me jala despacio hacía atrás, encontrándome con esos ojos rojo sangre.

-Ki-kirishima... H-hola.- intento sonreír pero parece mas una mueca.

-Kaminari me dijo ¿De verdad se te olvidó?- me mostró su celular que tenía una llamada del rubio registrada.

Asiento apenada.

-Bueno, eso se puede resolver.- me soltó y empezó a marcar algo en su celular

-¿Que vas a hacer?- me acercó a él, e intentó acechar su celular, que en seguida pone en su oído.

-¡Hola señora Yamada!- Dice energético, abro los ojos al darme cuenta que esta hablando con mi mamá. ¿Cómo obtuvo su número? -¿Como a estado?... Aja... Disculpe, estoy con Shion, y queríamos pedirle permiso para salir un rato, ahora después de la escuela... Si... Si con unos amigos... De acuerdo, muchas gracias.- colgó

-¿Y? ¿Q-qué dijo?- estoy nerviosa...

-¿Por qué tartamudeas? Ya estabas venciendo eso.- Puso su mano en mi cabello, acariciándome como si fuera un cachorro, un cachorro que solo se queda quieto para disfrutar de su tacto. -Ya no lo hagas más, ¿Vale?- me dedico una de esas sonrisas que parecen iluminar el día entero

Asentí un poco más segura.

-¿Entonces?

-Me dijo que si, pero que yo te regresé a casa.- Se acerca a mi oído y me susurra.- Creo que le agradó.- Comentó divertido codeandome

-Vale.- sonreí

No me extraña que mamá confíe en Kirishima, ya le había contado a mis padres sobre él varías veces, y se hicieron una buena impresión de él cuándo veía que siempre me acompaña a casa cada vez que salía con ellos.

-¿Vamos?- mueve su cabeza de lado.

-Si.-

-¡Hey Shione! ¿Quieres?- Kaminari me ofrece refresco.

-Gracias.- tomo el vaso en mis manos y él se sienta a mi lado

Vemos como Kirishima arrasa con una fila de monstruos con su espada mejorada al nivel 15.

A Jirō no le va tan mal.
Ahora también invitaron a las chicas, aunque solo la azabache y yo hemos jugado, Ashido y Hagakure se la pasaban haciendo comentarios divertidos.
Aunque Ashido no ha dejado de pláticar con Kirishima apenas ve la oportunidad.

Se ven bien juntos... Que genial, un amigo de confianza.
Yo a lado de la peli rosada, mi amistad con Kirishima no es nada...

-Ehm, ¿Shion? ¿Estás bien?- Habla el de ojos ámbar a mi lado.

Reacciono al escuchar que me hablo por mi nombre abreviado como lo hace Kirishima.

-¿Como me llamaste?- Pregunto algo curiosa.

-¿Te molesta que te diga Shion? Veía que Kirishima te decía Shion y pensé...

-¡N-no te preocupes!

-¿Porqué tartamudeas? Ya habías superado eso. [...] Ya no lo hagas ¿Vale?- me sonrió

-Puedes llamarme como quieras.- le ofrezco una sonrisa amigable -Shion está bien.- le confirmo

-Jaja... V-vale.- el rubio se rascó la nuca, algo nervioso

¿Por qué? Yo había visto esa reacción, y era en mi misma, cuando Kirishima... Cuándo Kirishima me sonreía, cuándo me daba confianza en mí...
Lo busco con la mirada, y se encuentra comiendo botanas junto a la de piel morena, platicando muy animados.

Kirishima...

¿Podre algún día hablar contigo así? ¿Sin que la conversación gire en torno de mi timidez?

-Kaminari...- llamó al rubio de mi lado, él me ve atento -Kirishima y Ashido son muy cercanos ¿verdad?- cuestiono sin apartar la vista de la pareja

-¿Ah? Ah si, desde la escuela media estan juntos ¿Por que?

¿Desde la escuela media? Eso explica muchas cosas.

-Nada más... Se les ve muy unidos ¿no crees?- me esfuerzo por sonreír, pero no puedo -Seria genial... Tener a alguien así para ti, con esa confianza como Kirishima te la da...- no podía detener las palabras

Al verlos así de unidos, quería tenerlo juntó a mi, solo para mí como lo ha estado estos casi dos meses. No pensé que fuera tan egoísta.

-Shion tu...- Se me olvidó que era Denki quién me oía.

-¡Chicos! Es hora de cenar.- La madre de Kirishima abre la puerta y deja entrar el olor a lo que parecen ser hot-dogs y abre mi apetito.

Todos nos paramos enseguida, dejamos todo tal cómo está y bajamos.
Algunos van al baño a lavarse las manos, y otros al fregadero de la cocina.

Yo entró al baño y detrás de mi Kirishima.

-¿Y? ¿Que te parece Kaminari?- me pregunta apenas ponemos un pie dentro de su baño

-¿Kaminari? ¿Nos viste?- abro la llave y meto mis manos bajo el chorro de agua fresca

Me sobresalto al ver que las manos de Kirishima se meten junto a las mías, rozando constantemente.
¡¿Por que haces esto?!

-Jaja... Todos los estaban viendo. ¿Que te parece?

Estábamos cerca, solo a una palma de distancia. Saqué mis manos del chorro de agua, y me puse jabón, él imita mi gesto.

-Es un buen chico... Muy sociable.

-¿Pero...?- lo miré sin comprender -Vamos, por tu tono se que hay un 'pero' ¿Invade mucho tu espacio personal?- Me ve preocupado

Solo río.

-Kirishima, estas goteando jabón en el piso.

El pelirrojo se había volteado completamente para verme, dejando sus manos enjabonadas goteando espuma.

-¡Ups! Perdón...- volvió a meter sus manos junto a las mías.

Y cuándo me dí cuenta, ya estábamos jugando con nuestras manos. Él intentaba apresar las y yo las deslizaba fácil por el jabón. Pero me volvía a atrapar, ya que sus manos eran grandes.

Era realmente agradable y divertido estar junto a él.

-¡Chicos! ¡A cenar!- nos grito su madre desde la cocina

Cerramos la llave y salimos de ahí, soltando risillas por nuestro juego infantil de hace un momento.

En la mesa, Ashido le había separado un lugar a Kirishima, y a lado de él, estaba Bakugō. Yo busqué un lugar, y había uno a lado de Kaminari que estaba junto a Jirō.

-Shion, aquí.- me dió lugar

Los demás ya estaban comiendo.  La cena paso entre risas, bromas y algunos manchados de capsup y mostaza. Sobre todo Kaminari, Sero, y Kirishima.

Bakugō casi los mata cuándo, al lanzarle una tira de cebolla a Kirishima, le dió en la mejilla al rubio malhumorado.

Al final de la cena, mi madre me llamo, diciendo que ya debía regresar a casa. Me despedí de la mamá de Kirishima, y ella me respondió con un: "Te espero pronto linda"
Hasta su madre es un amor de persona.

Estaba abriendo la puerta para salir. Kirishima había hecho una apuesta con Mina, haber quien bailaba mejor el "Just Dance", y no quería interrumpirlos.

Solo me despedí de los demás, y le deje un recado para él con su mamá.

-¡Shion espera!- oí una voz viniendo de las escaleras.

-¿Kiri...?- no terminé de pronunciar su nombre

Era Denki, con sus cosas en mano.

-Yo también me voy, te acompaño.- sonrió

-N-no te molestes...- niego con las manos

-¡Andando!- y cerró la puerta rodeando me con su brazo por mis hombros, haciendo así, que caminé a su pasó.

-¿No te quieres quedar un rato mas con ellos?- lo volteó a ver mientras él cerraba la reja negra.

-No te preocupes, a decir verdad... Me agradas, y por como te describe Kirishima siempre, pareces ser una persona genial.

¿Como puede sonreír diciendo eso? ¿Kirishima me describió así?

Ejirō... A tus ojos ¿Como seré realmente?

-¿Que les a dicho Kirishima?- Pregunto curiosa

-Nos contó la vez que intentas te sacar un polluelo de la alcantarilla, pero te fuiste de cabeza.- se carcajeaba

-¡¿L-les contó eso?!- caso grito avergonzada

¡¿Kirishima, que tanto dijiste?!

-Si... También la vez que intentaste pláticar normalmente con Todoroki, eso fue épico.- no dejaba de reírse

Ah si. Esa vez me dijo que era un reto. Mantener una conversación con el chico hielo de más de cinco frases, y que él participará.
Todoroki término suspirando cansado, y diciéndome que si no quería hablar con el que no me forzará.

-¿Quién dice que me están forzando?- pregunte con varías gotas de sudor callendo por mi cien, y con mi sonrisa forzada lamentable.

Sin una palabra, me apunto con la cabeza a Kirishima en la entrada del salón, nada discreto acechando a cada rato. Acercó su mano a mi cien, a lo que me puse aún más nerviosa.

Limpió con un pañuelo mi sudor, y luego me mostró el trozo de tela mojado.

Suspiré rendida.

-Si él me pregunta, le diré que fue entretenido ¿vale?- y me dedicó una sonrisa casi indetectable

-Gracias...- le sonreí de regreso

-¿Que mas les dijo?- seguí indagando ya apuntó de decirle que parará

Bueno, no lo culpó, casi todo lo que hago termina en desastre.

-Que tu propusiste la idea del karaoke después de que Ashido y yo reprobaramos inglés y matemáticas.- de repente se pudo serio

-¿Kirishima les contó...eso?

Se los contó... Aún después de que yo le dije que no quería que se enterarán de los preparativos que hice para animarlos. No quería que me tomarán como una tipa que cualquier excusa es buena para achocarseles.

Kirishima me dijo que exageraba, pero que no hablaría.

-Gracias por eso, eh.- Kaminari choco levemente nuestros brazos en forma juguetona

Sonreía amigable.
Y apesar de que tiene una sonrisa linda... Solo me recordaba a Kirishima.
Solo veía al tonto de Kirishima, contándome sus planes para mí.

En cada relató que Denki me contaba que Kirishima habló, notaba los toques del pelirrojo. Todo siempre a su estilo.

Al final, mi rubio nuevo amigo me dejó en mi casa, y se despidió muy animado, intenté corresponder su energía. Pero la verdad es que estaba distraída.

Al entrar a mi cuarto, me deje caer rendida en mi cama, viendo al techo, pensando en cierto pelirrojo de dientes afilados, y sonrisa hermosa.

Todo la bendita tarde solo lo había tenido en mi mente. Lo quería ver, quería tenerlo a mi lado, escuchando sus planes nuevos, oyendo su risa, animando me.

Solo lo quiero cerca de mí. ¿Que me esta pasando?