ALICE

Respiro de forma tan costosa que no sé si podré seguir haciéndolo mucho tiempo.

-Eres...tú...- digo mirándole, mi mente aún me ruega que no me ilusione.

Él me mira con asombro, como cuando ves a alguien que no te esperas para nada ver.

Alzo mi mano lentamente y me aproximo a él, rozo su rostro de forma leve y delicada, como si por el simple hecho de tocarlo fuera a desintegrarse, él se aparta y me sujeta la muñeca, indicándome que pare.

-¿Qué haces aquí?- me quedo boquiabierta, está vivo, me encuentro con él tras todo lo ocurrido ¿y lo primero que me dice es eso?

-Estás vivo.

-Es obvio, ¿no crees?

-Pero... ¿cómo?

-Eso no importa, lo que importa ahora es que te tienes que largar de aquí.

-¿Qué?

-QUE TE LARGUES.

-NO, NO ME VOY A NINGUNA PARTE SIN TI.- suelto.

-Pues yo sí que me voy a ir sin ti, así que suerte.

Mis ojos amenazan con salirse de mi cara y yo me quedo como una gilipollas al ver que se gira para largarse.

Le agarro por detrás.

-¿QUÉ COJONES CREES QUE HACES?- grito, él sin embargo, me observa con una mirada impasible, tranquila e indiferente, como si no le importara una mierda.- ¿SABES ACASO LO MUCHO QUE HE SUFRIDO? ¿SABES LO QUE HA SUFRIDO OWEN? HICIMOS UN FUNERAL, Y TÚ ESTÁS VIVO DANDO VUELTAS Y SIGUIENDO A GENTE EN UN PARQUE. HE VENIDO A AYUDARTE Y NO ME PIENSO IR SIN HACERLO.

-Me da igual.- dice, así sin más.- ¿Sabes cuál es tu problema?

-...

-Que te metes en los asuntos de los demás cuando nadie te pide que lo hagas, deja de intentar ayudar a gente que no te pide ayuda, no sé, búscate un hobby y deja de meterte donde no te llaman.

Y en ese momento mi corazón reventó, de haber sido posible incluso se habría oído un crujido desde dentro.

-¿Qué te pasa?

-Me acosas, eso me pasa.

-¿Qué?

-Sí, no pretendas venir aquí a decirme lo mucho que has llorado, por favor, si apenas nos conocemos.

-¿PERO QUÉ COJONES TE PASA?

Ahora sí que no entendía nada.

-¿Sabes qué? Me importa una mierda lo que te pase, he sido estúpida al pensar alguna vez que...- siento como las lágrimas vienen a mis ojos, ''MIERDA, ¡NO!'', pienso.- ¿Y Max qué?

-¿De qué narices hablas?- eso parece captar su atención.

-¿Qué quieren de Max? Los que te cogieron, ¿qué quieren de él? ¿Por qué le siguen?

-¿Los que me cogieron?- se ríe.- A mi nadie me ha obligado a hacer nada, me marché por que quise.

-¿Qué?

-Lo que oyes.

Me quedo en shock.

-No...

De repente reacciono, ¿dónde está Jake?

Empujo a Dylan a un lado y echo a correr al lugar en el que hace unos minutos Jake forcejeaba con aquellos desconocidos.

-No...- susurro.

Me giro de forma brusca, mis lágrimas ya se han propagado, junto a mi ira.

-¿A DÓNDE SE LO HAN LLEVADO?

-Eso no es de tu incumbencia.- sonríe con suficiencia y se gira.- No te preocupes, a Max no le pasará nada, me encargaré de que no.

Corro tras él y le empujo con todas mis fuerzas en la espalda.

-¡ESE NO ERA MAX!- grito desesperada, empiezo a golpearle y noto como levemente mi fuerza disminuye.

Dylan se gira y me agarra por los hombros.

-¿¿¡Qué!??

-Ese no era Max...

De repente Allen aparece corriendo.

-SUÉLTALA.- grita.

Dylan se gira, y cuando sus miradas se cruzan puedo ver en ellas la incredulidad.

-¿Dylan?

-Allen...

Miro, sin decir palabra.

Allen aparta la mirada rápidamente y me mira a mí.

-¿Dónde está Jake?

Las lágrimas caen de nuevo.

-Se...se lo han llevado.

-¿¿QUE HAN HECHO QUÉ??

-¿¿Has dicho Jake??- dice de repente Dylan.

-Sí, gilipollas, por tu culpa Jake ha desaparecido.

-¿Por su culpa?- pregunta Allen confuso.

-El señorito se largó por que quiso, nadie le fuerza a quedarse entre los muertos.

-Espera, ¿qué?- dice Allen.- ¿Sabes qué? Mejor no hables, ni te expliques, me la suda.

Allen aparta la mirada de Dylan y la centra en mí.

-Vámonos, puede que Nate les haya seguido.

Asiento y me marcho dedicándole una última mirada de desprecio a Dylan.

No me puedo creer que se haya comportado así, no me puedo creer que haya hecho lo que ha hecho sin sentir remordimiento alguno.

A partir de ahora, a partir de este mismo momento Dylan está muerto para mí.

NATHAN

-¡Vamos! Corre antes de que los perdamos.- digo al ver que Nate para en un semáforo en rojo.

-No puedo saltarme un semáforo.

-Tienen a Jake y lo que te preocupa es una multa, genial.

-Si nos acercamos mucho nos verán.

-Esta es la persecución más ortopédica que he presenciado nunca.

-Es verdad, lo siento, con todas las que debes haber presenciado es normal que la mía te parezca una mierda.

Evito tener en cuenta ese comentario, el semáforo se torna verde y Nate acelera.

Aún los veo, van a una distancia razonable de nosotros.

-Sigo sin ver muy claro todo esto de seguirles.- dice de repente.

-Es la única forma de encontrar a ese tal Dylan, o lo que quede de él.

-No sé que haremos al llegar, somos sólo dos, ellos son muchos más y van armados, tal vez llamar a la policía no es tan mala idea.

Le dedico una mirada de indiferencia y me centro en seguir con la mirada el coche.

(...)

De repente el coche se detiene frente a una casa de campo, a las afueras de la ciudad.

-Para ahí.- le indico un lugar oculto entre algunos árboles.

Me hace caso y de desvía hacia el lugar.

La casa de campo está bastante lejos, pero no podemos arriesgarnos a que nos vean, aún así podemos controlar quien entra y quien sale.

Nate saca el móvil y llama a Allen.

-Les hemos seguido.- dice de repente.- ¿QUÉ?

-¿Qué ocurre?- pregunto ansioso.- ¿Alice está bien?

-Sí, está bien, pero, Dylan, él, está vivo.

-Eso es bueno, ¿no?

-Él, no le han secuestrado, se fue por su cuenta.

-¿Qué? ¿Por qué iba a hacer eso?

-Ni idea.-dice seriamente.- Será mejor que nos larguemos ahora que podemos.- dice al ver que otro coche llega tras el anterior.

-¿Y Jake?

-No sé, pero si nos pillan no podremos ayudarle.

-Y si nos vamos tal vez sea demasiado tarde cuando decidamos volver.

-¿Acaso quieres que entremos ahí y les digamos, ''Oigan señores, nuestro amigo, por equivocación ha intentado hacerles creer que es otra persona para poder encontrar su escondite y sacar de ahí a otro amigo nuestro, pero resulta que nuestro otro amigo está a salvo, ¿nos lo devuelven, por favor?''?

-No es mala idea.- Nate golpea su cara contra el volante.- Pero tengo una mejor.

Me mira de reojo y tras cerrar los ojos y hacer una mueca de desacuerdo, suspira.

-Te escucho.

-Bien, antes salieron de casa para ir a por Max, ¿no?- Nate asiente.- ¿Y si les hacemos creer que tienen a Max?

-Espera... No te entiendo, ¿no va a hacer eso menos probable que lo suelten?

-Sí, pero ahí es donde entro yo.

-¿De qué estás hablando?

-¿Y si voy y les convenzo de que si sueltan a Max les llevaré con Hirch?

-Eso es una estupidez, no son gilipollas.

-Bueno... eso no lo sabemos.

-Bueno, suponiendo que se creen la historia de que el primo desaparecido de Max va a delatar a su tío a cambio de salvarle, ¿crees que os dejarán marchar tras decirles un lugar falso? Os obligarán a llevarles hasta él, y luego os matarán.

-Ves muchas películas.

-No hace falta ver películas para saber que eso es exactamente lo que va a pasar.

-No, porque ya lo tengo planeado también, les guiaré hacia un camino, un camino que hay a las afueras de la ciudad, allí pasé cuando me dirigía hacia aquí, hay una cabaña deshabitada, ahí les diré que está, y tú, estarás ahí, esperando, huiremos y subiremos a tu coche.

-Me parece una idea estúpida y nada sólida.

-Esas son las mejores.

-Creo que no te das cuenta de la gravedad de la situación.

-Lo que creo yo es que estás buscando todas las escusas posibles para evitar ayudar a Jake.

-¡No!

-Sois amigos, ¿no?- Nate asiente con un ápice de tristeza en su rostro.- Él se ha arriesgado sin pensarlo, ahora nos toca a nosotros.

Me bajo del coche.

-Ahora lárgate, y espera donde te he indicado.

Nate asiente y sale del escondite con el coche.

Al segundo unos hombres de aspecto poco amistoso, aparecen tras nosotros.

Nate me mira y le indico que acelere, pero es tarde, ellos aceleran también.

Corro con todas las fuerzas que me es posible, pero mis piernas no superan la velocidad de las llantas del coche de esos tíos.

Intento alcanzarles, pero no parecen haberse reparado en mi existencia.

Nate, el idiota decide dar marcha atrás y golpear el coche de los raptores con el suyo para después coger ventaja.

Nate acelera y como por arte de magia se comienza a alejar.

Sonrío, me río de forma eufórica, la adrenalina recorre mi cuerpo y me alivia saber que Nate está a salvo.

La presión baja y respiro hondo.

Pero...

Cuando menos lo esperábamos, cuando estábamos a punto de cantar victoria, algo cambia mi expresión facial, esta vez no uno, sino dos coches se acercan a Nate, uno alcanza su derecha en el carril y el otro se posa justo detrás.

¡PUM!

Un golpe por detrás hace que imagine a Nate saliendo disparado del coche.

Rezo por que se haya puesto el cinturón, esto no tiene pinta de ir a acabar bien.

Esta vez un golpe por la derecha, comienzo a hiperventilar, escalofríos gélidos se apropian de mí y mi estómago amenaza con expulsar todo lo que hay en él.

Nate conduce como puede, debe de estar asustado, noto como el miedo se apodera de él cuando comienza a desviarse del carril.

Otro golpe, este tan grande e intenso que casi vuelca el coche a un lado.

Por un segundo el coche se tambalea sobre dos ruedas.

Cierro los ojos con fuerza y los abro de inmediato al oír un golpe más.

Y así, con un golpe más, todo comenzó a girar.

Sentí como todo ocurría a cámara lenta, como el coche se desviaba hacia un lado del bosque, giraba y giraba, y aunque se topaba con todo tipo de obstáculos, no dejaba de girar, hasta que finalmente, se topa con un enorme árbol que lo detiene al mismo tiempo que lo destroza.

Quedo en trance, ¿cómo ha podido pasar esto en tan poco tiempo? 

No se si habría preferido ser yo el que estuviera en ese coche...

Me doy cuenta de que si me esfuerzo, aún puedo sacar a Jake de ahí, así que me giro y avanzo corriendo hacia la casa.

No puedo dejar que la muerte de Nate sea en vano.

ALICE

Allen y yo avanzamos en silencio hacia el coche.

Por más que intento detener las lágrimas, me es imposible dejar de pensar en lo ocurrido.

Jake esta en manos de vete tú a saber quién, y yo me siento impotente e inservible ya que nada de lo que haga podrá ayudarle.

-Todo va a salir bien.- dice Allen.

-Eso es lo que se dice cuando todo va a salir mal.

-Jake es inteligente, se las arreglará, además, Nathan y Nate están allí, encontrarán una forma de sacarlo de ahí.

Intento creerme lo que dice, para al menos así conseguir sacar fuerza de la esperanza para seguir adelante.

-Yo...- comienzo a hablar cuando de repente una voz me corta.

-ESPERAD.

Nos giramos.

Dylan viene hacia nosotros corriendo, más le vale largarse de aquí con la misma prisa que tiene por llegar, no me apetece perder el tiempo una vez más.

-¿Qué quieres?- suelta Allen con una seriedad y una firmeza que hasta a mí me intimidan.

-Ayudar.

-¡JÁ! LÁRGATE.- grito.

-Os ayudaré, de verdad, pero con una condición.

Cuando ya estaba cogiendo aire para escupirle un par de cosas bien dichas Allen salta y me corta.

-¿Qué condición?

-Que me ayudaréis a dar con el verdadero Max.

-Debes estar de broma...

-Va enserio.

-¿Por qué narices te interesa tanto Max? Déjalo en paz.- intento encararle, pero Allen me sujeta.

-¡Sólo quiero protegerle!

-Y una mierda. ¿Por qué ibas a protegerle?

-Porque...

-Ves, no tienes razones, sólo te quieres a ti mismo, no te importa nadie, eres un egoísta.

-Max es mi hermano.- suelta Dylan tan de repente que siento como si me hubieran pegado una hostia.

¿¿¡QUÉ!??

-Tú ya tienes un hermano y se llama Owen.

-MAX ES MI HERMANO, somos de la misma sangre, te guste o no, así que puedes ayudarme a salvarle al igual que tú quieres salvar al tuyo o puedes ir por tu cuenta y dejar que uno de los dos muera, y te aseguro, que a mi familia la protejo por encima de todo.

No sé que decir, miro a Allen boquiabierta, este parece estár tan sorprendido como yo.

Dylan está serio, y eso me da miedo, me da miedo la idea de que lo que acaba de decir sea verdad.