Desaparecer juntos
Aquí una nueva actualización, espero les guste y siento que sea cortito.
Nos estamos viendo el próximo mes, bye!
Law no podía apartar sus ojos del menor, el que temblaba del frío entre sus brazos y rápidamente busco a aquel muchacho que había tomado sus cosas para llevarlo quién sabía dónde, y de su mochila colgaba el abrigo que antes había llevado puesto.
Lo tomó rápidamente y lo echó sobre el empapado y tembloroso cuerpo del menor.
—¿Porqué... porque estas así de mojado...? No me digas que nunca subiste a un taxi para ir a casa... fuiste a tu casa ¿verdad?
Sin embargo, el pequeño no soltaba palabra alguna. Estaba mas preocupado de evitar soltarlo, ya que, si lo hacía sabía que Law se iría.
—No te vayas... por favor... haré lo que me pidas, incluso regresaré a la escuela, pero no te vayas...—
Law alzó la mirada del pequeño hasta sus ojos y espero un segundo y una vez más Luffy le suplicaba que no se fuera.
En el segundo nivel, Sabo y Koala tomados de la mano, observaban a Luffy que no se separaba de Law, y cerca de la zona de abordaje, se hallaba los padres del futuro médico.
—¿A quien llamaste amor? — preguntaba la mujer a su marido cuando este guardaba el móvil en su bolsillo, mientras quitaba sus lágrimas de sus ojos, y el hombre con una radiante sonrisa explicaba lo sucedido.
—Realmente creí que se iría de la ciudad. Pensé que estaba decidido a iniciar su vida en otro lugar, pero desde que nos dijo de su situación con Luffy es que sospeche que algo así podría pasar. Nosotros mejor que nadie conocemos a Law. Si Luffy le pide que se quede, Law lo hará. No va a dejar escapar esta oportunidad. Ya han sufrido demasiado los dos como para que ahora que están claros sus sentimientos, tengan que separarse otra vez.
"Llamé a la universidad a la que se había transferido, cancelé el traslado, Law no subirá a ese avión. Ese muchacho no lo dejará, después de todo solo esta a un par de meses de terminar sus estudios, y pienso que no es conveniente para ninguno el separarse. No podrán concentrarse en sus deberes si están lejos el uno del otro. Supongo que así piensa Law. Creo que piensa que es hora de al fin poder ser feliz con la persona que él eligió, y que puede hacer su vida en el lugar en que esa persona este, y ese lugar es este.
—Luffy-san...— sonrió la pequeña, cuando los tres abandonaban el aeropuerto para regresar a casa.
Mientras tanto, Law y Luffy continuaban en su burbuja, sin prestar atención a su alrededor. Luffy, esta vez se aferraba a Law para no caer. Pues su pierna otra vez estaba doliendo. Law al notarlo tambalearse un poco, lo cargó y lo llevó con él a la banca más cercana.
—¿Estas bien? — dijo Law acariciando el rostro del menor y apartando el empapado cabello del joven de su rostro.
—Estoy bien, no es nada solo quería verte es todo, e impedir que te fueras... pero entiendo que quieras acabar tus estudios, y como dije antes, no voy a interferir en ellos...
—Pídemelo una vez más... pídeme una vez más que no me vaya y te juro que me quedó...—
—Quédate... por favor, quédate conmigo...— lloró el pelinegro tomando las manos del mayor y mirando aquellos grises ojos que no apartaban su atención de los suyos.
—Lo haré... me quedaré contigo Luffy—
Volvió a abrazarlo. Su corazón golpeaba con fuerza contra su pecho y Luffy podía notar como estos se intensificaban.
Puso su mano justo en el punto en que los latidos del corazón de Law, golpeaban.
Law por su parte fue acercando su boca a la del menor hasta que al fin la alcanzó. Aquella boca que besó en secreto aquella noche en el hotel, la besaba ahora sin temor alguno y con sus sentimientos por Luffy al fin claros. Fue como volver a la vida, como si la oscuridad en la que había vivido se desvaneciera y Luffy era la luz que iluminaba a hora su camino.
—Lo lamento... necesitaba besarte— dijo Law con su respiración agitada.
El móvil de Luffy sonando, interrumpió aquel momento.
—Voy a matar a quién sea que este llamando justo ahora—
Law sonrió, ese era Luffy.
—Ah... es Cora, ¿qué querrá? —
Law solo miraba a Luffy atender su móvil, mientras sonreía y tomaba con cariño la mano del menor.
—...bien se lo diré, pero no vuelvas a llamar, no voy a contestar ¿está claro? — y cortó refunfuñando y resoplando.
— ¿Y bien? ¿Qué quería? — preguntó como si nada hubiese pasado.
—Dice que hay un coche esperado por nosotros y que nos llevará al hotel—
—No quiero ir a ese hotel... quería llevarte otro lugar, uno en el que solía pasar mis vacaciones cuando era un niño ¿quieres venir conmigo? No te preocupes por tu pierna, no tendrás que caminar, estarás bien—
Sin dudar el menor contesto con una amplia y hermosa sonrisa.
—Si quiero, iré donde tus vayas—
—Vamos entonces...—
Se levantó de su lugar, pero Luffy lo detuvo jalando de su ropa.
—¿Mugiwara-ya? —
Cabizbajo y avergonzado susurró unas palabras.
—¿Me besarías otra vez? — Murmuró — Cora nos interrumpió y...
Sus palabras fueron silenciadas por otro beso, tan intenso como el primero.
—Ahora regreso, espera aquí por favor— dijo Law luego de apartarse del menor.
La respuesta a su pregunta de como sería sentir los besos de Law, al fin la sabía.
Se quedó algo perdido mientras que en sus labios aun sentía aquel contacto.
Vio que Law regresaba momentos después, con todas sus cosas y volvía a sentarse en la banca junto a Luffy, mientras que, por la ventana, ambos veían como el avión que se llevaría a Law a otra ciudad, se iba a su destino, pero sin el joven.
—Yo... lamento todo lo que ha ocurrido en todo este tiempo, te hice sufrir y eso no me lo perdonare jamás...—
—No. No es así, también soy culpable, quizás te presione cada vez que te decía cuanto te amaba incluso después de que me rechazaras, continúe insistiendo...
—Y ya vez. Todo tu esfuerzo valió la pena, lograste hacer que me diera cuenta que es a ti a quién quiero y con quién quiero pasar el resto de mi vida—
—Torao... vámonos de aquí, necesito digerir todo lo que ha ocurrido hasta ahora—
—Entonces vamos. Como veras de momento no puedo cargarte, puesto que llevo mis pertenecias.
—Puedo caminar, no te preocupes, solo quiero salir de aquí y que estemos solos los dos —
Ayudó a Luffy a levantarse y le indico que se apoyara en él para que no hiciera presión en su herida pierna.
Tardaron un poco en dejar el recinto, pero llegaron hasta el coche que los esperaba, y el chofer entregó las llaves a Law.
Este abrió la puerta y ayudó a Luffy a entrar al coche, para luego meter todas sus cosas en la cajuela y al fin poder irse de ese lugar.
—Cuando iba en el bus, pasó algo que me hizo entender del todo estos sentimientos que tengo por ti— empezó de pronto Law y Luffy se volvió a mirarlo.
—Había un joven que lloraba sin consuelo, y me pregunté que sería lo que le pasaba. Por un momento creí que podía ver en él, todo tu dolor cuando te rechazaba, pude imaginar cuán difícil debió ser para ti, y aun así siempre estabas ahí para mí.
El menor continuaba escuchando el relato de su acompañante sin interrumpirlo.
—Pero luego, un lujoso carro negro detuvo el bus, y un hombre alto, y rubio subió para impedir que el joven que iba allí se fuera. Por un momento, desee con todo mi corazón que me detuvieras y me pidieras que no me fuera, tal y como había hecho ese hombre, pero acepte la realidad y las consecuencias de mis actos y seguí firme en mi idea de irme. Sin embargo, aquel hombre, le suplico, le rogó que se quedaran juntos, y que lamentaba el haberlo herido... es hasta irónico. Hasta creí que veía nuestra situación reflejada en ellos. Al final, ese hombre le propuso matrimonio, y el muchacho aceptó la propuesta. Me pregunté si alguna vez nosotros llegaremos a dar ese paso también.
—¿Por qué me cuentas eso? — quiso saber Luffy.
—Porque al verlos, pude saber cómo pudiste sentirte realmente, cuando lo único que hice fue herirte. Incluso creí que no ibas a llegar a buscarme, lo deseaba tanto... deseaba tanto que me dijeras que me quedara contigo... — suspiró antes de continuar con su relato— luego de que aceptara la propuesta el muchacho dejó el bus y se fue con él. Al principio me costó reconocer aquel hombre, pero luego recordé que una vez alojamos en uno de los hoteles de las que ese hombre es dueño.
—¿De verdad... te gustaría dar ese paso tan importante? — dijo y se apoyó en el hombro de Law mientras rodeaba el brazo de este con cariño.
—Si es contigo, quiero tener todas mis "primera vez" — contestó pasando su brazo por sobre los hombros del menor.
—Torao...— dijo y oculto su sonrojado rostro en el brazo de Law.
El muchacho, levantó un poco su brazo para acariciar su cabeza sin lastimarlo.
—Tengo planeado secuestrarte por varios días, ¿estás de acuerdo en ser completamente mío? —
—Iré... donde tu vayas... Law—
Al fin el motor del coche se encendió y ambos ahora, desaparecerían de la vista de todo y de todos.
Por un par de días, nadie sabría de ellos. Ni donde estaban, o que hacían. No contestaron las llamadas que recibían y tampoco las devolvían. Lo habían decidido antes de partir. No estarían disponibles para nadie.
El viaje tomó varias horas, y Luffy se había dormido abrazado del brazo del mayor.
Llovía y ya era muy de noche, cuando Law miró su reloj buscó un lugar donde pasar la noche.
Se metió a una calleja junto a un enorme y lujoso edificio. En lo alto se podía ver el nombre del lugar. "Freedom wings" .
Era el hotel, o más bien, uno de los hoteles en los que había alojado hacía un tiempo atrás con su familia en una de sus vacaciones.
Tras estacionar el coche, cargó a Luffy en sus brazos, y este dormido se aferraba al mayor.
"Ya vendré luego por mi bolso" pensó al ver que no podría cargar tanto sus cosas como a Luffy a la vez.
Mientras subían por el ascensor, Luffy abrió sus hermosos orbes y se halló en los brazos de Law.
— ¿Te desperté? — preguntó Law.
El menor negó y sonrió.
—No necesitas cargarme, puedo caminar— dijo mientras se soltaba del agarre del menor para poder estar de pie.
—Bien— dijo dejándolo en el piso del ascensor — pero si te duele mucho, dímelo.
Las puertas del elevador se abrieron con suavidad, y ante ellos se hallaba un hermoso y elegante hall de entrada.
La gente iba y venía de un lado a otro. A pesar de su elegancia, había todo tipo de huéspedes.
El lugar lucía hermoso, todo estaba adornado con motivos navideños, puesto que navidad estaba ya, a solo un par de días.
Law tomó de la mano a su acompañante y lo guio hasta la recepción, donde pidieron una habitación para los dos.
Mientras Law se ocupada de registrar su estancia, la atención de Luffy fue a parar a una pareja que estaban tomados de las manos y juntaban sus frentes entre risas y llanto.
—Los he visto antes...— comentó el menor llamando esta vez la atención de Law — los vi esta tarde cuando iba a casa, estaban en un lujoso coche negro.
Tanto Law como el joven que los atendía miraron en aquella dirección tras las palabras de Luffy.
—El chico del bus... y...
—Él es dueño de este hotel— terminó la frase el recepcionista con una sonrisa, una joven de ojos azules y cabellera rubia, mientras les entregaba una llave.
Pronto dejaron de ponerles atención, y Law se volvió a Luffy.
—Toma el ascensor y espérame en el cuarto. Iré por mis cosas, estaremos aquí unos días. Toma una ducha y descansa, vuelvo en seguida— dijo y lo beso.
Luffy no quiso subir a la habitación y se sentó en los mullidos sillones que había cerca del mesón de recepción.
El joven que había visto horas antes, se mostraba preocupado mientras hablaba con la joven de la recepción.
A ellos se unió aquel hombre rubio y alto, y su semblante también lucía preocupado.
A pesar de ajetreo del lugar incluso a las tantas de la noche, alcanzó a oír la plática de los tres.
—... la competencia pagó a quienes iban a ofrecer sus servicios por las fiestas— informaba el moreno al mayor — les ofrecieron una cantidad de dinero ridículamente alto, y no pudimos hacer nada al respecto... —
— ¿Cuándo pasó esto? — preguntó el rubio llevando su mano hasta su cuello y masajeándolo.
—Llamó el representante de aquella banda hace unos minutos, informado de que ya no vendrían al hotel—
El muchacho de cabello negro, se llevó la mano al mentón pensando y de pronto metió su mano al bolsillo de su elegante traje negro y de él, saco un papelito que fue abriéndolo hasta alcanzar el tamaño de un poster promocional pequeño.
Luffy desde su posición, logró divisar su imágen versión femenina n todo el papel.
Sonrió al descubrir la fama que tenía. Se levantó cojeando y se acercó a los tres.
—... tenemos que solucionar este problema pero... —
—Disculpen...— interrumpió.
Pasado unos minutos Law llegó una vez más hasta el hall y encontró a Luffy estrechando la mano de aquellas personas
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro