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Uso de palabras malsonantes y vulgares. No leer si no es de tu agrado. Gracias.
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—Cada maldito segundo...

Y ahí mismo, en donde lo observo directo a los ojos con un inconmensurable afecto mientras acaricia cada parte de mi húmedo rostro, me acerco despacio y lo beso.

Me entrego de lleno a dejarme servir y embeber del exquisito néctar que son sus labios para mí placer, en tanto desliza con una parsimonia absoluta, sus cálidas manos que me adoran por encima de la ropa con cada centímetro que toca.

Expresando sin necesidad de palabras, cuanto significa todo esto que le pasa...

Y se me viene a la memoria el "creo que me gustas". Y sonrío como una demente sin darme cuenta en lo absoluto de cómo puede verse desde afuera de mi mente.

Entonces él, se me queda mirando al cortar nuestro intenso roce de labios y dientes como sin entender una mierda del por qué de mis espasmos musculares en este preciso momento.

—Cuenta el chiste, porque así no tiene gracia bebé —dice mi bello aliciente mientras arruga la frente.

—Nada, solo rememoraba tu "creo que me gustas", más bien yo diría que sería "me gustas" —le digo jocoso de verlo rozando lo rojo y con unas inmensas ganas de estrujar sus coloreados cachetes.

—Tú también me gustas —responde ante mi jugarreta. Tomándome desprevenido y quedando congelado como si las manecillas del reloj me dejaran estancado entre las diferentes líneas del tiempo.

Y justo en este momento, pasado y presente se juntan, y soy -nuevamente- aquel pequeño escuálido que tímido y arriesgado recibe la mejor noticia... El afecto correspondido aunque lleve diferencia de años, una declaración de la otra.

—Demuéstramelo... —le suelto arriesgado a lo que venga mientras retiro su camiseta de mi acalorado cuerpo, quedando solo en calzoncillos y como sinónimo de ofrenda.

Jungkook, ni lerdo ni perezoso, se lanza hacia mi búsqueda. Dejando solo la estela de lo que había sido su ruborizado momento para transformarse en llamarada ardiente de deseo cada que pasa su mano sobre mis diferentes mesetas.

!Y maldita sea! Que su puta boca chupando como recién nacido mis pezones me trastoca.

Y mi entre pierna, dura como piedra, no resiste ni un solo segundo más sin salir airoso de su cueva. Así que entre medio de sonoros quejidos y agarradas firmes de cabellos, me deshago de las telas que aprisionan mi condenada dureza.

—Toca mi verga... —sucio y pecaminoso como pocos, le doy una orden precisa de ejecutar a mi antojo.

Y él, vidriado sus ojos en placer, solo puede acatar las reglas a mi parecer.

—¿Con que así le gusta a mi bebé? —cuestiona a centímetros de mis labios y solo puedo desear por el puto momento donde su lengua me profane impúdico cada rincón de la cavidad de mi boca.

—¡Calla y fóllame la boca! —le suelto a medida que me aferro con firmeza a su cuello y lo envuelvo a lo koala con mis piernas.

Su calor, su intenso calor me traspasa... Y me siento listo para ser devorado como un venado de caza.

Y mientras me folla con su lengua en lo profundo de mi garganta, su mano -algo dudosa- se dirige hacia mi dura vena que quema como mil brasas del infierno, dispuesta a pecar y morir en el intento de exonerar cada una de sus penas.

!Y maldita puta vida! Que el intenso agarre de su mano hacia mi verga hace que por poco no se me salten los ojos.

Y aquel morocho que hace unos momentos me miraba con soñadores ojos, ahora se transforma en una bestia sangrienta y sedienta de cada terminación nerviosa de mi cuerpo.

—Me vuelves loco... —susurra jadeante a medida que bombea como si fuera a extraer leche condensada de mis malditos sesos.

—D-Dios m-mío Kook —jadeo sobre su pecho lamiendo los dedos de su mano libre cuando en el acto se separa de mis labios, dejándome huérfano de su tacto para luego usar su indecente boca y posarse sobre mi recia y humedecida polla.

¡Bendito momento donde me traga por completo casi succionando en seco todos mis malditos putos pensamientos!

Es que la fuerza que aplica a su labor es digna del grosor de su tomo... Y no puedo dejar de jadear como una maldita gata en celo ante semejante buena mamada mientras arqueo mi espalda y me le prendo a lo garrapata de sus negros cabellos.

—¡Dios! —grito a medida que se me arquean los ojos y recibo como paga la imposición de su gran mano sobre mi menesterosa boca.

Dedicándome completo a lamerla como si fueran sus bolas, o una deliciosa paleta con forma y sabor de su polla.

Escurre demasiada saliva por cada separación de sus dedos. Y me siento el ser más obsceno del planeta al deleitarme con mis ojos mientras me prohíbe gritar su puto nombre completo y mandarlo al maldito infierno por goloso.

Porque lo que guardan mis ojos al observarlo en pleno y pecaminoso acto, es sinónimo de averno. Y sólo puedo dejarme pecar con mi gozo que es su gozo en cuanto agarro su cabeza y elevo mi cadera tocando todo el puto fondo de su garganta con mi dura verga.

Sus vidriados ojos me condenan a un pasaje de ida y sin retorno... Y en cuanto lo suelto y tose para aliviar su transitorio atore, me suelta:

—Eres una pequeña mierda codiciosa, esa fue mi primera mamada y casi me traspasas la condenada garganta...

—¿Y quién te manda a mamarme como todo un guerrero? A mi me dieron ganas de desfogar en lo profundo de tu garganta, lo lamento —le suelto haciéndome el indiferente pero de inmediato lo atiendo como si fuera una maldita deidad pornográfica del sexo.

—Ven aquí y demuestra lo que puede hacer esa puta boquita que tanto quería comerse mi verga...

"¡Y a mi juego me llamaron!" Pienso mutando mi rostro de indiferente a completamente ansioso por su grueso falo que orgulloso se eleva robusto como diciendo "¡Abran paso que aquí se viene lo chido!".

Arrodillado y en cuatro, me le acerco agazapado mientras acaricia mis cabellos y toma sin un ápice de cuidado, los pómulos de mi sonrojado rostro.

¡Oh sí señoras y señores! Se ha dado comienzo oficial a los sin respetos bien irrespetuosos de este par de conejos😈

Gracias por leer, comentar y votar😍

Los amito mucho♥️